— Cuando nuestro hijo nos dio la noticia de su boda me tomó por sorpresa, hasta inclusive pensé que se había apresurado pero viéndolos hoy definitivamente puedo ver que están destinados.

— Nosotros nos casamos incluso sin conocernos debido a nuestras familias y mira cuanto nos hemos amados, no pude haber encontrado una mejor madre para nuestro Jungkook. Siempre quise ver el día de su boda y gracias a todo lo que existe estoy vivo para presenciar ese momento. Solamente me entristece una cosa...

— Ya sé que te entristece cariño, creo que es lo mismo que a mí, saber que no nos pueden dar nietos, ¿no es así? — Su marido asintió — A mí también me hubiera gustado tener un nieto de nuestro hijo menor pero eso no importa ya, esa es la decisión que tomó y mientras sea feliz nosotros lo apoyaremos. No le menciones ese tema, no quiero que en algún momento le vaya a pesar o a incomodar el asunto.

— Yo sé que él lo pensó antes de tomar ese pasa, incluso me pidió disculpa por no darme un heredero aunque me preguntó si yo querría a un nieto que no llevara mi sangre.

— ¿Crees que tengan pensado adoptar en un futuro? — La noticia le agradaba mucho.

— No lo sé, puede ser una posibilidad. Se siente muy bien que me digan abuelo, sería igual de gratificante poder escuchar que llamen papá a nuestro hijo.

— Bueno, ya no pensemos en eso, sea cual sea la decisión que ellos tomen la tendremos que aceptar así que no te me emociones viejo.

A pesar de su ligera tristeza, nada podía opacar la felicidad de ver a su hijo casado y feliz, que haya tenido la oportunidad de casarse con quien quizo y por amor era lo más importante para ellos. Rieron juntos antes de ir a la cama observando las fotos que hicieron en sus teléfonos del tan memorable día, la señora Jeon volvió a llorar de felicidad para luego quedarse dormida junto a su esposo.

En otra de las habitaciones del hotel, los nuevos cónyuges también habían acabado la parte más seria de su plática, ahora solamente se miraban fijamente con una sonrisa en sus rostros que poco podría opacarla.

Bajo el aroma de las velas que amenizaban con su tenue luz el lugar, las canastas con rosas que adornaban ahora la habitación, un conejo blanco con una rosa y los típicos pétalos esparcidos en la cama por los empleados del hotel quienes fueron instruidos sobre preparar una habitación para recién casados y habían hecho la típica preparación de películas y revistas que conocían.

Aún así a los chicos les había encantado, más a Tae que era un secreto amante de las rosas, aunque no tan secreto para su esposo que lo había descifrado desde antes del comienzo de su relación sabiendo que entre las rosas que tanto amaba, las blancas eran sus preferidas. Por eso desde que le pidió ser pareja siempre le regalaba una rosa blanca el primer día de cada mes e incluso adornó el Penthouse con muchas de ellas, esos recuerdos junto al día en que le pidió que fueran pareja brincaban en su mente como niño con juguete nuevo.

No tenía quejas de su actual esposo, lo amaba desde antes de que él mismo lo supiera o admitiera, agradeció que ninguna de sus relaciones anteriores a esa hubieran funcionado y que le permitieran conocer a un hombre como él, estaba feliz y no podía contener la sonrisa que brotaba de su rostro, llevando sus manos al cuello de su novio para luego besarlo y observarlo una y otra vez.

Las manos de Kook se posaron en la cintura de su esposo, por alguna razón le parecía más hermoso ahora que era suyo con todo y ley. No pudo evitar sonreír ante tal pensamiento, verlo aún con su traje delante de él el anillo que acababa de besar, esa cara llena de amor y ternura que lo miraban enamorado, todo era simplemente perfecto y maravilloso.

—Es maravilloso haber tenido una boda y luna de miel el mismo día pero, hay otra cosa que quiero, solamente quiero una cosa más...

— ¿Qué más desea mi flamante esposo? — Respondió Kook jugando con la camisa de su cónyuge.

— Quiero mi regalo de bodas... — Sonrió Tae yendo hacia el sofá de la habitación

— ¿Aún tienes deseos de regalos? Eres insaciable, has recibido infinidades de regalos de boda hoy.

— Recibí de todos menos de mi esposo... Quiero mi regalo. — Hizo un puchero mientras finalmente se sentaba. — Baila para mí, quiero verte desnudarte para mí.

— Creo que debería ser al revés, yo tuve que trabajar arduamente para nuestra boda, es hora de que me consientas un poco, ¿no crees? — Sonrió Kook acercándose a él.

— Eso es jugar sucio mi amor. — Cruzó sus manos algo derrotado ante su esposo...

— Hagamos un trato... Si tú cantas para mí, yo bailo para ti. — Se sentó en su regazo y lo besó. — ¿Qué te parece, aceptas?

—Con gusto...

Las notas musicales entonadas por Tae y el baile sensual interpretado por su pareja quien se iba despojando de sus prendas poco a poco era algo digno de ver. Ninguno podía contener la risa pero aún así disfrutaban el momento.

— Quiero ver bien esas piernas amado mío... — Gritó Tae con un chiflido haciendo que su esposo se sonrojara.

Era gracioso como a pesar de tener tanto tiempo de conocerse y casi un año de estar juntos como pareja aún se ponían nerviosos en ocasiones frente al otro. Jungkook que siempre mostraba una soltura, sensualidad y agilidad que conquistaba tantos ojos y corazones frente a su pareja estaba siendo torpe. Se reía al bailar, mordiéndose los labios, tratando de volver a entrar en el papel de un sexy, serio y atrevido hombre que bailaba para satisfacer el libido de su esposo.

Sus ojos se centraron en el cuerpo de Taehyung quien había comenzado de desvestirse lentamente, sin apartar du mirada de su marido. Más allá del deseo y la lujuria que aquel acto podía despertar ambos sonreían llenos de amor y expectativas ante el otro. Sus cuerpos en total desnudez se encontraron y fundieron en un amoroso beso.

Tae, se alejó lentamente de su esposo y de una de las cestas que estaban llenas de rosas rojas tomó una para caricias todo su cuerpo.

La suave textura de la rosa, acompañada de los besos de Taehyung por todo su cuerpo tenían su piel erizada y sensible, solamente con esas caricias sus pensamientos se perdieron.

— Vamos a la cama que quiero hacer algo para recordar este momento... — Tae lo condujo suavemente a la cama y fue por su cámara fotográfica.

— ¿En qué estás pensando? — Preguntó Jungkook intentando levantarse antes de ser frenado por su esposo.

— No te muevas, voy a capturar este preciado momento con mi marido en nuestra primera noche e intimidad de casados. Regálame una sonrisa. — Sacó sus dientes apretándolos fuertes y cerrando sus ojos logrando que quien lo mira no pudiera aguantar su sonrisa.

Un flash después el momento estaba siendo admirado por Tae con una sonrisa. Había quedado plasmado en su cámara pero más importante que eso quedó plasmado en sus mentes y corazones, era algo que jamás podría ser sacado de sus corazones.

(Perdonen la mala calidad del edit pero es para que tengan una idea)

Dejando de lado su cámara, admirando a su esposo esta vez en directo y no a través del lente de una cámara Tae recorrió cada rincón de su cuerpo con su mirada, era perfecto también físicamente, no había una sola cosa negativa de él.

— ¿Hasta cuando me vas a observar de esa forma?

— Hasta que tú dejes de hacerlo conmigo... — Replicó Tae.

— Entonces eso quiere decir que nunca pararás con eso porque yo no me cansaré de admirarte jamás. — Sonrió Kook atrayéndolo hacia si.

— Exactamente Señor JeonKim. — Bromeó mordiendo su oreja.

Sus miradas se cruzaron y por algunos segundos solamente se perdieron en sus pupilas, sosteniendo sus rostros con sonrisas esporádicas que llegaban y se iban a cada segundo.

— Te amo con todo mi corazón Kim Taehyung, creo que no podría vivir ya en una vida donde no estés tú. Gracias por aceptar ser mi novio, por aceptar comprometerte y por aceptar casarte conmigo.

— Soy yo el que debería agradecerte mi amor por todas y cada una de esas cosas que has hecho por mí, por nosotros. No existe nadie mejor para compartir mi vida así que no pienso irme de la tuya tampoco, aunque me eches. Te amo.

Entre abrazos y besos sus cuerpos nuevamente se hicieron uno físicamente porque en realidad, hacía mucho que esas dos almas eran una sola.

— Hoy quiero que me hagas el amor despacio, hoy quiero que nos tomemos de a poco, con calma y con mucha suavidad. — Musitó Tae en su oído.

Los besos de Kook, quien ahora se encontraba arriba comenzaron a recorrer todo su cuerpo, descendiendo hasta sus pies donde besó cada uno de sus dedos sin dejar de mirar la amplia sonrisa que adornaba su rostro y sus ruborizadas mejillas. Ascendió nuevamente, besando los lugares que fueron olvidados en su camino de ida.

— Eres hermoso. Tu olor... ¡Mmm! — Exclamó. — Es delicioso, creo que tendré que mandar a crear un perfume con tu aroma.

Acarició todo su torso con su lengua y le brindó besos extras a sus pezones haciendo que un leve gemido abandonara su boca. No podía abrir sus ojos, todo lo que quería era sentir más de Kook, solamente podía limitarse a llevar sus manos a sus cabellos, espaldas y brazos para acariciarlo. 

Kook tomó sus manos, cogiendo su propia corbata que aún estaba regada en la cama le amarró sus manos dejándolas encima de su cabeza.

— Si quieres ir despacio no podrás apresurarme a tu antojo. — Mordió su cuello. — Hay que mantener a estas intranquilas manos quietas. — Tae se limitó a sonreír. Estaba expectante y las continuas mordidas que daba a sus labios eran una prueba de esto.

Los labios de Jungkook comenzaron a rozar el interior de sus muslos, dejando salir a propósito su respiración para inadvertidamente morderlos en varias ocasiones, repitió las mismas acciones según iba subiendo por su perineo, dídimos y miembro. Las piernas de Tae se movía agitadamente al igual que su respiración.

— Si no controlas tus piernas tendré que atarlas también. — Le advirtió besándolo y cerciorándose de que sus manos siguieran igual de atadas. Como un niño pequeño se limitó a asentir.

Quien llevaba el control en ese momento volvió a descender para retomar donde lo había dejado segundos antes pero esta vez sin preámbulos introdujo toda la extensión sobresaliente del cuerpo de su esposo en su boca. En pocos segundos pasó de estar semi a estar completamente endurecido y soltando gemidos. Su caderas comenzaron a moverse y Jungkook se retiró.

— ¿En qué quedamos amor? Nada de querer llevar el ritmo... — Tae hizo un puchero y asintió, so estaba seguro de poder mantener ese ritmo tan suave que él mismo propuso.

Las suaves succiones y lamidas se reanudaron, varios segundos después llevó sus manos hasta la boca de Tae quien los lubricó en su totalidad, deseando en esos momentos que esos dedos fueran el miembro de su esposo pero cuando sintió esos dedos entrar en él no pudo contener sus movimientos y sus piernas abrazaron a su esposo mientras que su cuerpo anhelaba más. Su decepción llegó al sentirse vacío de repente.

— Te lo advertí. — Jungkook se levantó para alcanzar la corbata de su esposo que estaba en el suelo con la que le amarró los pies.

— Mi amor perdona...

— ¡Shhh! Ya no hay más condescendencia, no hables más.

Se volteó dejando su trasero a la altura del rostro de Tae y acariciando su cabello lo atrajo más a él sintiendo como su intrépida lengua se abría paso hasta llegar a su profundo botón. La suavidad de aquella lengua era deliciosa, no miraba hacia atrás pero sabía con exactitud que tenía sus ojos cerrados degustándolo.

Su diestra comenzó a acariciarlo lentamente y varios minutos después se inclinó completamente quedando ambos en un perfecto sesenta y nueve en el que ambos se daban placer continuo aunque de vez en cuando uno se detuviera para sentir con más intensidad las actividades del otro. Su cuerpos ya habían escalado de nivel, el vapor que ambos sentían era inigualable y aunque no lo dijeran sentían la necesidad de más.

Junkook se dirigió a la boca de su pareja para calmar levemente su cuerpo antes de hacer lo que tenía en mente. Su beso fue calmado pero jadeante, sus lenguas trataban de mantener la calma pero en ocasiones se precipitaban aunque ellos las volvieran a calmar.

Una vez que le pusieron fin a ese apasionado beso Kook colocó ambas piernas al lado del cuerpo de su esposo, descendiendo lentamente hasta dejar a su miembro en su propia entrada al cual introdujo lentamente bajo la vista de asombro de Tae, era la primera vez que lo hacía el mismo sin dejarlo hacer nada y a decir verdad se veía demasiado sexy haciéndolo, sus expresiones eran jodidamente excitantes.

Apoyándose en el pecho de Tae sus caderas comenzaron a moverse cuando ya se había acostumbrado a la presencia de ese visitante en su lugar. La estrecha cavidad de Kook, las lamidas que sus pezones estaban recibiendo y esos lentos movimiento que lo estaban torturando sin poder moverse lo tenían al borde del colapso.

— ¡Mmm! Tae... — Gimió Kook cerrando sus ojos y arqueando su espalda, acariciándose sus pezones con su propio lubricante que se habían estancado en la barriga de su pareja.

— Ven aquí... Abrázame, quiero besarte... — Aún con sus manos atadas rodeó el cuello de su espeso con los brazos, sus desesperación lo habían hecho liberarse del espaldar de su cama. Sus besos, mordidas en sus cuellos y hombros, sus movimientos, todo era demasiado para ambos y estaban a punto de venirse. — Para mi amor, detente ahora...

A regañadientes Kook detuvo sus movimientos, varios segundos después abandonó el miembro de Tae, al que le dio la vuelta sin perder un segundo. Sus manos abrieron suavemente sus nalgas y tras un dulce beso comenzó a remeter contra su entrada, con leves mordidas y una lengua hiperactiva que no dejaba de moverse.

— Es- Ya estoy listo... — Informó con voz ronca Tae, quería dejarle saber a su pareja que estaba preparado para lo que se avecinaba.

Su esposo acomodó las almohadas bajo él y una vez que sus nalgas quedaron a su altura comenzó a penetrarlo despacito. El ritmo era lento pero sofocante, el roce de sus pieles y el interrumpido orgasmo de unos minutos atrás hicieron que estos chicos estuvieran a punto de llegar al clímax con unos pocos movimientos.

Taehyung no necesitaba siquiera rozar su falo para llegar, con las embestidas que a cada invasión estimulaban su punto g, los besos de su esposo en su espalda y cuello, sus deseos, todos lo estaban haciendo llegar a un orgasmo.

— ¡Amor! — Exclamó con un sollozo.

— Ya... Ya lo sé, también yo. — Agilizó sus embestidas y unos segundos después ambos gritaban sus nombres llenando la habitación con todas sus emociones.

— ¡Te amo!

— ¡Yo también te amo mi conejito! — Tae sonrió ante ese apodo, lo encontraba muy infantil pero a la vez le encantaba escucharlo de Jungkook, solamente él.

— ¿Estás muy cansado? — Le preguntó con un beso.

— ¿Quieres seguir? — Enarcó sus cejas con una fingida cara de asombro.

— Sí, pero esta vez desátame, además, seré yo quien guiaré el momento esta vez.

...

La mañana llegó con cierto alboroto, los recién casados que no durmieron más que dos horas fueron los primero en ser despertados por Hoseok.

— Chicos realmente lamento interrumpirlos pero han surgido varios inconvenientes y la agencia demanda que regresemos cuanto antes por lo que no podremos quedarnos aquí un días más...

— ¿Pero qué fue lo que ocurrió? — Preguntó Tae adormilado mientras Kook se incorporaba.

— No sé con exactitud pero son varias cosas, ya se dio a conocer el final de la relación entre Namjoon y Stephanie, salió el capítulo de tu programa donde Kook te sorprendió y ya sabes, sus abnegadas fanáticas comenzaron a decir que la reacción de Tae al ver a Kook parecía la de un novio cogido en el brinco, de ahí mostraron fotos como "pruebas" de ambos con un mismo anillo y luego Taehyung sin uno. Así como se filtró que viajaron ambos solos, para rematar podemos añadir que alguno de los presentes en la fiesta de Yoongi sacó un video sin audio de Jimin pegándole a Suga y Jungkook a Kai en el suelo y todos los están victimizando a ellos mientras que a nosotros de abusivos no nos bajan.

¡Mierda! — Exclamaron los tórtolos al unísono.

— Por ende nos quieren en Corea ya para organizar las declaraciones que vamos a dar. Todos estamos implicados de una forma u otra en esto así que después de desayunar todos nos marchamos a Lisboa, tendremos que coger un vuelo en la tarde y ya son casi las ocho de la mañana. Yo iré a informarle a los demás.

Los chicos se quejaron pero sabía que bastante les había durado la tranquilidad y felicidad, compartieron un largo beso y se dirigieron a ducharse. Ya había llegado la hora de empacar sus cosas y juntarse con los demás para desayunar y partir.

— Bueno ya sabes lo sucedido. — Le afirmó Hoseok a Jimin tras explicarle el por qué debía regresar con urgencia. — ¿Por casualidad sabes dónde está Namjoon? Lo fui a buscar pero no lo vi.

— Se fue... — Soltó sin más, tras su charla la noche anterior lo había vuelto a buscar pero cuando llegó a su habitación este se estaba marchando con una maleta, a penas le dijo adiós y se desapareció de su vista. — En la madrugada se marchó así que llegará a Corea antes que nosotros, no te preocupes.

— ¿Es por eso que tienes los ojos así de hinchados? Estuviste llorando toda la noche por lo que veo. Ayer los vi alejarse juntos, pensé que se habían arreglado pero veo que me equivoqué.

— Así es... Ya puedes salir, me cambiaré y los alcanzo. — Finalizó Jimin conteniendo su rabia y deseos de llorar.

...

A su llegada en el aeropuerto de Incheon media prensa se encontraba reunida como les habían informado una vez que aterrizaron por lo que enviaron los mayores delante sabiendo que estarían concentrados esperándolos y después salieron todos juntos. Los flashes de las cámaras junto a todos los periodistas preguntando por toda la ola de noticias que se había desatado era agobiante para todos, lo último que querían tras quince horas de viajes pero ese era su precio a pagar.

Gracias a la seguridad que los cubría los cuatro miembros del grupo Fire fueron escoltados rápidamente y sin problemas hasta la furgoneta que los llevó inmediatamente a la agencia.

¡Hola a todos! Aquí les dejo un nuevo capítulo, quisiera disculparme debido a que ayer no pude publicar porque no me encontraba en casa, aunque algo tarde aquí les dejo este capítulo que espero que disfruten.

Pd: Recordarle que los capítulos aún no están editados así que perdonen si encuentran errores por ahí.... 🙈😘

Pd - 1: No sé si hayan lectores que les interese leer otra de mis novela (homoerótica) aunque no sea un Fanfic pero, si los hay, me gustaría invitarlos a leerla "Un amor musical y prohibido" espero que también les guste 😘😘😘

Pd - 2: Me gustaría agradecerle a una personita que me ha brindado mucho apoyo y cariño Lu_RoAs  😍 Gracias por todo tesoro...

Pd-2: Quería agradecerle también a mis más fieles lectoras que capítulo a capítulo me acompañan y me han dado la fuerza de seguir escribiendo aún en esos días donde estoy cansada y no tengo ganas de nada... Cada una de ellas se han ganado mi corazoncito ❤️ iiuvixx ❤️ ParkYahi95  ❤️ denanaid1805  ❤️ ninamalcria  ❤️ @zeyruck ❤️ @linaz62 ❤️ @lynnjomas ❤️ @liznam456 & 😍@koojit