Capítulo 7

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Evidentemente esa no fue la primera vez que Jungkook se acostaba con alguien. Pensando en todas sus experiencias del pasado al presente, ya sea un compañero de trabajo o un compañero fuera del trabajo, ¿quién no lo había elogiado? Nunca recibió quejas de su persona y habilidades, ni siquiera cuando comenzó tener relaciones sexuales.

Por eso, cuando Taehyung mostró una expresión de asco casi como si fuera a vomitar, naturalmente se había enojado, su orgullo como hombre estaba herido.

Sin embargo, esa ira se evaporó inmediatamente cuando lo escuchó pedir disculpas diciendo que era su primera vez con un hombre.

Jungkook había escuchado eso de muchas de las mujeres con las que se encontró. Sabía muy bien cuál era el subtexto de esa admisión. "Me gustas mucho, así que por favor trátame bien."

Tuvo que hacer todo lo posible para evitar que se levantaran las comisuras de su boca, manteniendo la cara como Buda. Fue realmente un movimiento audaz decir esas cosas en el set y eso hacía cambiar su percepción del rubio, otra vez. Miró fijamente hacia adelante, los hombres mayores que él, esos que rozaban los treinta eran ciertamente diferentes.

Estaba un poco avergonzado, pero quería escuchar un poco más. Lentamente giró la cabeza para mirarlo de soslayo, era agradable ver su rostro.

— Continúa. — Fue lo que dijo. Sin embargo, el hombre que acababa de confesar valientemente que era su primer hombre de repente se volvió tímido y se rió dos veces.

— De todos modos, lo siento por el inconveniente. ¿Tu pequeño no debería ser demasiado difícil para levantar, cierto?

Tan pronto como Taehyung terminó de hablar, pareció darse cuenta de que había dicho algo incorrecto e inmediatamente lo miró como un cachorro con los ojos húmedos. El corazón del pelinegro de forma súbita se sintió increíblemente cálido y esponjoso.

Pensó, qué debería decirle. Sinceramente era la primera vez con otro hombre para los dos. Intentó responder, pero cuando las palabras llegaron a sus labios, de alguna manera se equivocó creando una provocación.

— Espera un momento y lo descubrirás.

Eso salió totalmente mal. Estaba un poco molesto, pero al mismo tiempo, no tuvo la suerte de tener tiempo para pensar en ello. Por suerte, hizo su tarea por adelantado.

Dado a que nunca se había acostado con un hombre antes, el día anterior había buscado especialmente información en Internet sobre las zonas erógenas de un hombre y había entendido teóricamente la posición del famoso punto G masculino.

Miró a Taehyung cálidamente y sus labios se curvaron ligeramente hacia arriba, algo que le sucedía últimamente muy seguido. El rubio, que lo estaba mirando, solo sintió que su propio cuerpo se enfriaba. No podía predecir o imaginarse qué estaba pensando.

El director indicó que debían omitir las caricias y otros juegos previos para entrar directamente en la etapa de expansión e inserción. Los dos actores siguieron sus instrucciones para desnudarse frente a la cámara según el mandato y guión.

El rubio se sentó en el regazo de su compañero, incómodo, con las manos rígidamente envueltas alrededor del cuello del otro. Aunque su cuerpo no podía considerarse necesariamente como el de un hombre fuerte, no era pequeño ni delgado. Pedirle que se comportara de una manera tan suave llegando a parecer afeminado le hizo sentir que estaba renunciando a la mitad de su vida.

Sintiendo su nerviosismo, Jungkook tocó su cintura de una manera calmante y besó su mentón. La otra mano fuera del marco de la película estaba bastante ocupada agarrando de nuevo la botella de lubricante.

Taehyung se estremeció de repente. Podía sentir una gran masa de líquido frío justo por encima de su trasero. No tuvo tiempo de reaccionar, cuando de repente se frotó eróticamente el lugar donde se vertía el lubricante. Sintió que debía haber vuelto a mostrar una expresión desagradable, rápidamente lo evitó llevando su cara contra el cuello contrario para que no se notara.

Jungkook estaba completamente abrumado por el hombre que estaba actuando junto a él. Todavía estaba inexpresivo, pero sus líneas faciales se suavizaron. Siempre se había visto guapo, pero emanaba una sensación gélida que le hacía difícil acercarse. Ahora que este sentido de distancia había disminuido repentinamente, las personas que los rodeaban sentían que no podían abrir los ojos debido a su brillo.

El productor que vio el monitor hizo un gesto rápido al camarógrafo para que enfocara la cámara en él.

El pelinegro, que a menudo era amado y provocado solo por la cámara, esta vez no miró a la cámara. Se inclinó y besó los omóplatos de Taehyung, dejando una pequeña marca roja. Al mismo tiempo, tomó su dedo resbaladizo con lubricante y lo empujó suavemente entre las nalgas hasta que encontró la entrada.

Podía sentir que se estaba encogiendo debido al miedo por lo que suavemente acarició su espalda, abdomen y continuó rastreando hasta llegar a sus testículos. Los ojos de Taehyung se ensancharon mientras lo observaba.

Debido a sus posiciones, los cuerpos inferiores de ambos estaban muy cerca, acercados aún más por la presencia del pene medio erecto de Jungkook. A diferencia de él, los genitales del mayor estaban colgando flácidamente. El órgano rosado abatido parecía anormal porque no había vello corporal alguno, incluso podría denominarse como encantador.

El menor estuvo un poco sorprendido por el color allí pero no le disgustaba en lo más mínimo. Sus dedos no pudieron evitar trazarlo a lo largo hasta llegar a su glande, llenándose con el deseo de provocar a Taehyung.

— ¿Eres virgen?

— Tu madre lo es. — Taehyung devolvió esas palabras por reflejo, pero de inmediato se dio cuenta de que esta frase era ilógica y técnicamente problemática.

El contrario no prestó atención a esas palabras, solo lo acostó lentamente en la cama y se quedó mirando su mitad inferior durante un rato. Finalmente hizo un movimiento alrededor de un segundo antes de que el rubio estuviera a punto de lanzarle un puñetazo, llevándose su masculinidad a la boca.

— O-Oye... — El mayor encogió su cuerpo hacia atrás de una manera sensible antes de reaccionar, sorprendiéndose.

Inmediatamente quiso sentarse. Sin embargo, Jungkook estaba firmemente posado en sus piernas, inclinado sobre él, actuando como si estuviera lamiendo una paleta con la boca cubriendo en su totalidad su miembro, podía sentir esporádicamente la zona más profunda de su garganta y eso era demasiado acogedor.

Las habilidades bucales de Jungkook no eran muy buenas y sus dientes a menudo lo tocaban pero aún así se sentía bien para el mayor. Mantuvo sus ojos en Taehyung mientras lo estaba atendiendo, observando sus reacciones, estudiándolo.

Gracias a la estimulación de la boca del pelinegro una sensación de tensión comenzó en su estómago. Estaba claro que acababa de terminar de venirse poco antes, no obstante su entrepierna estaba repentinamente erecta una vez más.

Sintiendo que Taehyung estaba emocionado una vez más, lo miró fijamente y apretó sus labios. Movió su boca desde el fondo de los genitales hasta la parte superior, haciendo que gimiera ruidosamente. El rubio se avergonzó de sonrojarse así como por gemir y mientras estaba distraído con su vergüenza, la parte inferior del cuerpo se levantó. Instintivamente intentó cerrar sus piernas pero Jungkook las atrapó y abrió de inmediato.

El trabajo de depilación del rubio fue muy completo, no había ni un solo vello alrededor del ano. El pelinegro miró ese anillo de carne privado y no podía entender por qué incluso el hermoso color rosa estaba allí. Era como si lo hubiera teñido deliberadamente de esa manera. Era imposible no rozar la pequeña abertura con los dedos.

Taehyung se tensó, ¡eso era demasiado! Se avergonzó de tener marcas de besos en todo el cuerpo, pero su pene difirió de los pensamientos de su dueño y se puso de pie. El contrario levantó más su cuerpo, lamiendo su ingle e incluso dejando una marca roja viva en la tersa piel.

No pudo contener el ligero temblor de su cuerpo y sintió que toda su sangre estaba concentrada en la parte inferior de su cuerpo. Esta fue la primera vez que descubrió que tenía un deseo sexual tan fuerte. Se le imposibilitada centrarse en la cámara, por un momento ni siquiera se acordaba en el instante que extendió la mano para tocar su endurecido miembro que había comenzado a derramar fluidos corporales.

Cuando comenzó a acariciarse, algo frío y húmedo comisionó suavemente con el lugar más recóndito de su cuerpo. Sus movimientos se detuvieron al instante, sintiendo una ligera cantidad de lubricante en su cuerpo. Se asustó levantando cuerpo hasta la mitad de camino mirando hacia abajo.

Encontró que Jungkook había presionado el lubricante contra su entrada y estaba presionando su dedo abriéndose camino hacia adentro, hundiéndolo con parsimonia.

Para ser honesto, porque solo había medio dedo dentro, no había sensación de dolor, pero sí una fuerte incomodidad. Su cuerpo también pareció resistir tal violación de la naturaleza y se contrajo en un intento de expulsar el dedo intruso, mas la actitud del otro lado era bastante dura. Continuó avanzando hasta que estuvo dentro.

El miembro del rubio se ablandó instantáneamente y su cabeza se inclinó muy patéticamente ante esto. Jungkook acarició su escroto, mismo que había disminuido junto con su virilidad haciéndolo revivir gradualmente con su cuidadosa atención. Echó un vistazo a la reacción del rubio, doblando lentamente su dedo. Su otra mano permaneció en su perineo, amasándolo de manera circular.

— Mmm... — Un gemido gutural afloró en su garganta.

El cuerpo de Taehyung se estremeció como si hubiera recibido una descarga eléctrica. Oportunidad que aprovechó el menor para empujar un segundo dedo. En ese momento, la falta de voluntad del mayor para abrir su cuerpo no fue tan obvia como la última vez. Como empujaba el perineo, aunque el pene no estaba completamente erecto, una vez más, un líquido claro comenzó a gotear de su glande.

Jungkook no pudo evitar cambiar su posición, vulgarmente hablando, su polla lo estaba matando, terriblemente excitada, a pesar de que ni siquiera la había tocado. Insertó un tercer dedo, mantuvo sus dedos juntos y los bombeó lentamente, mientras su otra mano continuaba con el masaje externo.

Punto P de un hombre, esto era algo que el pelinegro solo veía en Internet. Aunque había escuchado un poco sobre eso antes, no tuvo interés de investigarlo. No esperaba realmente intentar encontrarlo mientras estaba en el trabajo.

Intentó aplicar presión a la búsqueda, moviendo sus dedos dentro de aquella tibia cavidad, profunda e intensamente, de un lado a otro. Finalmente, después de presionar sobre cierto punto, sintió como todo el cuerpo contrario temblaba violentamente

¿Era realmente tan extremo?

Todavía tenía algunas sospechas. Frotó los dedos contra esa protuberancia en su interior y no solo lo escuchó gemir, lo vio apretar abruptamente su abdomen. No se tocó el pene con la mano pero aún así observaba como fluían gruesos fluidos blancos desde la punta. Después de ver que a tan corta distancia como un hombre reaccionaba a él, ese hombre entre todos, no pudo dejar de tragar toda la saliva que llenaba su boca.

Pensó que había estado a la altura de las expectativas de proporcionarle la mejor primera experiencia a Taehyung. Ahora, era hora de que este le pagara.

Rápidamente se dio la vuelta, tomó un condón y abrió la envoltura con agilidad.

Frotó su ansioso miembro varias veces hasta que finalmente se puso el condón, presionando poco después la cúspide de su miembro contra la ya lubricada entrada. Se acomodó y descendió un poco su cuerpo para poder sentir al contrario mientras empujaba hacia adentro con parsimonia.

— Espera, espera, espera... — Junto con el comienzo de la penetración llegó el dolor y no pudo resistirse a intentar detenerlo. Sin embargo, el hombre que finalmente había entrado en modo de ataque completo no tenía razón para detenerse.

Todo estaba ocurriendo lento pero a su vez tan rápidamente que no podía procesar nada con claridad. Desde el comienzo, Jungkook se aventuró a buscar ese punto que ya sabía lo que podía infligir en el rubio. Quería darle placer y este inevitablemente cedió ante una ofensiva tan fuerte.

Con otra erección como resultado de los duros y constantes envites que se producían dentro de él, no pudo evitar entrar en un pánico mental. ¡No quería volverse gay! Pero le resultaba imposible no sentir placer y disfrutar con aquello. ¡Por Dios! Que alguien lo salvara de aquello.

Un beso, varias mordidas y penetraciones después, el semen blanco fluyó hasta cubrir su abdomen mientras gemía sin contención. ¿Eso lo convertía en un hombre homosexual?

+++

Taehyung estaba de pie bajo la ducha, dejando que el agua caliente fluyera sobre él, su estado de ánimo era muy complejo luego de lo ocurrido. Aunque su virilidad finalmente estaba colgando relajadamente, había sido lo suficientemente descortés como para correrse cuatro veces. Incluso en sus días más fogosos cuando de verdad deseaba tener sexo, nunca experimentó eso.

Se pellizcó su cosa desvergonzada dándole un regaño, pero todo lo que sintió fue un estallido de incomodidad en la parte inferior y posterior de su cuerpo. Creía profundamente que algunas partes de su cuerpo acababan de ser transformadas por la gigante longaniza que lo atacó.

Cuando recordó cómo el director los miró con los ojos llenos de elogios cuando finalmente gritó "corten", no pudo evitar sentirse vencido por el dolor y bochorno. Si había llegado al clímax debido a la inserción, ¿eso significaba que a partir de ahora eyacularía por jugar con su trasero? ¿Existía en el mundo algo más molesto para un hombre heterosexual que eso?

Comenzó a limpiar cuidadosamente su cuerpo. Cuando sus dedos tocaron su entrada trasera, tembló por reflejo. Ese lugar parecía hinchado e incluso el ligero roce de sus dedos dejó una sensación de incomodidad. Respiró hondo y con mucho cuidado, insertó un dedo en el nudillo, lo giró y luego lo sacó.

Había algo de sangre presente, pero antes de que pudiera tener una idea de cuánto, fue lavado por el agua. Él eligió no prestarle atención; después de todo, era solo un poco de piel rota. Con el tamaño y la tenacidad de Jungkook, era inevitable que incurriera en algún daño.

Él sólo quería irse ya a casa, dormir y olvidarse de todo lo ocurrido. Se limpió rápidamente el resto de su cuerpo, se secó, se volvió a poner la ropa y salió del baño.

El personal de afuera casi se había ido, solo quedaba el productor, revisando las puertas y ventanas. Cuando lo vio salir, sonrió.

— Hoy has trabajado duro.

— Tú también, ¿necesitas ayuda?

— No, me iré después de que todas las ventanas estén cerradas, nos veremos en unos días. — Fue la cordial respuesta del productor. Comparado con su actitud despreocupada, Taehyung estaba preocupado y reticente a la idea de regresar ahí.

Bajó pesadamente las escaleras, reflexionando sobre el hecho de que se avecinaba otra escena de cama y su corazón estaba infinitamente lleno de melancolía. Todavía sentía como si sus piernas estuvieran abiertas, apenas podía pararse. No sabía cuánto tiempo tomaría antes de que esa sensación finalmente desapareciera.

Abriendo la puerta, avanzó unos pasos y luego de repente miró hacia atrás. Bajo la tenue luz de la farola, Jungkook se había quedado de pie junto a la puerta, fumando y sus ojos lo miraban directamente. Si lo hubiera sabido, no habría mirado atrás . Se siente un poco avergonzado, no hacía mucho él y ese hombre habían estado íntimamente enredados en la cama.

Sin embargo, después de que se levantaron de la cama y se pusieron la ropa, los dos volvieron a ser extraños. Dos extraños que tuvieron relaciones sexuales entre sí. Si era posible, no quería ver al pelinegro fuera del trabajo. Este por otro lado, claramente no había entendido su confusión interna. Lo miró, arrojó su cigarrillo al suelo y se le acercó.

— Vamos.

No pudo evitar sentirse confundido y un sinfín de interrogantes salieron de su cabeza. Incluso miró hacia atrás y se aseguró de que no hubiera nadie más allí, pero en realidad sí le estaba hablando con él.

— ¿A dónde? — No, él debería haber preguntado si tenían planes juntos que no recordara pero por alguna razón su cerebro y lengua no estaban yendo de la mano.

— Te llevaré a casa.— Explicó el menor de manera casual. — ¿O quieres venir a mi casa?"

¿Qué era esta extraña vibra novio-novia que estaba recibiendo? Eran dos malditos hombres. ¿Ese tipo era idiota o qué? Solamente se le ocurrió que le mejor forma de terminar con aquella tontería era negarse cuanto antes para que saliera de esa tonta imaginación que tenía.

— No, puedo volver yo mismo, tú también deberías apresurarte a ir a casa.

Jungkook se sobresaltó pero no dijo nada a cambio y el rubio aprovechó la oportunidad para escapar apresuradamente. ¿Estaba siendo tímido? Una pequeña sonrisa apareció en su rostro al pensar en la inocencia percibida de su compañero.

Taehyung se subió a su bicicleta mirando al espejo para asegurarse de que no lo alcanzara. Aliviado de que su vista estaba vacía, salió a la carretera.

Tal vez el pelinegro siempre fue así de amable con sus colegas. Espera, ¿qué estaba pasando con ese auto detrás de él? Pensó que era su imaginación, por lo que siguió mirando por el espejo lateral e incluso redujo la velocidad. Su plan era dejar pasar el automóvil sospechoso, mas no creyó que el auto que venía detrás de él también se desacelerara.

¿Qué demonios? Frunció el ceño, puso su bicicleta a un lado de la carretera y se detuvo. Se bajó y caminó de regreso al auto que lo había estado siguiendo. Antes de que pudiera tocar la ventana, esta se abrió para revelar el rostro frío de Jungkook. Cuando vio que realmente era él, no pudo evitar enfrentarlo.

— Tú, ¿qué demonios quieres hacer?

— Llevarte a casa. — Respondió como si fuera natural.

Se quedó sin habla y ambas personas permanecieron en un enfrentamiento cara a cara por un tiempo, hasta que una bocina de coche sonó con impaciencia por detrás. Él eligió regresar de nuevo a su bicicleta

¿Llevarlo a casa? Lo haría parecer una niña y no estaba para nada contento con este pensamiento.

Continuó aumentando su velocidad, pedaleando con rapidez, esperando que el viento frío que azotaba de alguna manera pudiera enfriar el calor que se elevaba en sus orejas.

Tan pronto como se estacionó frente a su casa, se giró para ver a Jungkook caminando casualmente con una bolsa. Antes de que pudiera preguntar por sus razones para estar allí, este colocó la bolsa en sus manos.

— Parece que tienes un poco de sangrado allá atrás, hay un poco de ungüento ahí. — Su rostro permaneció impasible mientras hablaba. — Por la noche puede tener fiebre, si la temperatura sube por encima de los treinta y ocho grados, también hay pastillas para eso aquí.

— ¿Cómo sabes que tengo fiebre?— Estaba un poco apenado, además de estar conmocionado por su comportamiento profesional.

Era imposible para el pelinegro decirle que estaba al corriente con esas cosas porque había hecho su tarea en Internet, así que tuvo que fingir una expresión inescrutable.

— Dame tu número de teléfono".

— ¿Qué dijiste? — No lo escuchó claramente.

— Número de teléfono — Esta vez solo dijo tres palabras.

Taehyung fue tomado por sorpresa, ni siquiera él sabía lo que pasaba por su mente, pero inexplicablemente le entregó su teléfono celular. Jungkook puso su propio número en el teléfono y se llamó a sí mismo. Cuando vio aparecer el número desconocido en la pantalla de su teléfono, su estado de ánimo mejoró visiblemente y le devolvió el teléfono.

— Si no te sientes bien, llámame en cualquier momento. Le aconsejó. El mayor asintió rígidamente. — Sube.

¿Pero quién se creía para darle esas precisas y hablar en ese tono?

Entrecerró los ojos pero el pelinegro ni siquiera parecía pestañear. Suspiró vencido queriendo descansar e hizo justamente lo que el idiota dijo. Cuando miró hacia abajo desde la ventana de su habitación, pudo ver a Jungkook a un lado de su auto observándolo. No sabía qué hacer, así que se dio la vuelta.

Vació la bolsa en la mesilla de la habitación. Había ungüento, un termómetro y medicina para la fiebre, estaba todo dispuesto como una especie de paquete de atención posterior al servicio. Se quedó mirando los diversos regalos. Por un rato pensó en ello, los metió de nuevo en la bolsa, la ató con un nudo y la arrojó a la papelera que estaba a su lado.

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