Dos

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Jimin.

Me va a dar algo, tenerlo cerca es peligroso para mi salud, él no se me ha insinuado, de hecho es de los pocos en la oficina que no anda tras de mi, con sus "detalles".

Sin embargo, es demasiado, su aroma masculino, la manera en que dirige al equipo, ese maldito septum en su nariz, no existe nadie mas varonil en este edificio, en mi vida he visto muchos alfas, pero jamás, jamás a nadie como él.

Como es de saberse, investigue, pues no podía estarme del todo quieto, era lógico que es un hibrido de toro, por eso es tan grande, también se que no tiene pareja, al menos nadie que se conozca por la oficina, es activo de manera social en el trabajo pero no de manera amigable, simplemente cumple su función sin hacer pesado el ambiente laboral.

Pensé en coquetearle de manera descarada, pero la verdad es raro que un alfa de una especie tan grande se fije en una mas pequeña, además de que mi carácter no es tan amigable como mi apariencia, como jefe del departamento de imagen tengo a todos trabajando demasiado, mas cuando las campañas que tenían estaban tan mal hechas, los clientes perdían dinero y la empresa recursos, para eso me habia contratado en primer lugar, mi habilidad era muy conocida, dejando de lado lo "bonito" que decían que me veía.

—Los modelos que pedí para esta campaña no tienen nada que ver con lo que me estas mostrando —arroje el portfolio al escritorio frotando mi sien, me dolían los dedos por la manera en que sostenía el teléfono y la persona del otro lado estaba titubeando y odio que titubeen —si tu no puedo hacer tu trabajo, consigue alguien que lo haga, tienen menos de veinticuatro horas para hacer lo que les pedí.

Colgué y me senté en el suelo, para después recostarme, habia cerrado dos campañas con la taza de éxito que se esperaba, pero ahora me costaba un poco esta, mercadotecnia es un desastre y edición tiene que hacer milagros, sigo sin entender como esta empresa sigue en pie con esto.

—¿Cómodo?

Sabia quien era, pero no quería ni abrir los ojos, estaba irritado y no deseaba descargar mi ira con él.

—¿Sucede algo?

—Termine con lo del comercial para lo de los cosméticos, quería que lo vieras.

—Bien —me levante y mire la hora —ya es tarde, eres de los pocos que se quedan.

—Soy el responsable, no puedo irme solo así —puso la laptop en el escritorio y me acerque —intente con los sets que preparaste, además de la música.

Estaba concentrado en el comercial, era exactamente lo que pedí, sonreí de manera inmediata, me encanta cuando todo sale conforme a lo planeado, me acerque un poco mas a la pantalla, quedando muy cerca de Namjoon.

—Me encanta, no sabes lo feliz que me haces, todo el dia fue terrible hasta este momento, me sentía un tanto estresado...

Se me habia quedado mirando, yo deje de hablar en el momento.

—Lo siento.

Después de eso me beso... 

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