Ya era de noche, en la cocina el servicio preparaba la cena, la señora Che los supervisaba con una sonrisa, TaeHyun estaba en la mesa, esperando que se hiciera la hora de servir los platos, tamborileando sus dedos.

En todo el día, no se acercó a Haneul o a BeomGyu, les dejó su espacio, y a pesar de que escuchaba las estridentes risas de la niña junto a BeomGyu, se mantenía alejado.

—Por aquí, princesa, ya va a ser hora de la cena —escuchó los pasos acercarse, BeomGyu entró al comedor a los segundos, sujetando la mano de Haneul que peinaba con su mano libre su cabello húmedo, había jugado en la piscina un buen rato, bajo la supervisión de BeomGyu.

Ambos hermanos habían compartido toda la tarde y ahora noche, se notaba a leguas lo mucho que se habían extrañado.

—Oh...—BeomGyu se frenó en seco mirando al vampiro en el comedor, Haneul siguió caminando, jalando a su hermano para tomar asiento.

La niña le dió una sonrisa a Kang que se le correspondió más corta.

—¿Qué comeremos, hyung? —preguntó la niña erguida en su silla, una postura impecable para una niña de su edad. BeomGyu le pellizcó una mejilla con una sonrisa.

—Ya verás —le dijo mirando a los segundos como el servicio entraba con los platos y todo lo necesario para la comida.

BeomGyu había pedido a la señora Che preparar pasta con salsa bechamel, pan de ajo y ensalada de vegetales, era lo favorito de la niña y sonrió satisfecho al verla emocionada por la humeante comida.

El personal siempre se encargaba de servir primero los platos, y luego las bebidas, después el postre, ya estaban acostumbrados.

Haneul no sabía eso, así que frunció el ceño mirando a su hermano que rió.

—Ya lo traerán, mi niña, calma —le dijo calmando a la niña, miró unos segundos al vampiro.

Esta vez no tenía un filete de carne jugoso como siempre, tenía la misma pasta que ellos.

Sus miradas se encontraron.

—Buen provecho —dijo el vampiro luego de unos segundos de silencio. BeomGyu murmuró en respuesta, Haneul contestó animada empezando a comer.

Qué cínico. Pensó el cazador empezando a comer, su porción era igual a la de Kang, aún así, sabría que no comería todo, siquiera tenía hambre, no tenía apetito.

—¡Está delicioso! —dijo la niña comiendo animada, BeomGyu esbozó una sonrisa masticando una pequeña porción.

Haneul comió con mucho ánimo, tomando ensalada y masticando, el vampiro comió igualmente, tomándose su tiempo para comer.

Mientras que BeomGyu solo jugaba con su porción.

—Come un poco más —dijo TaeHyun mirándolo fijamente, BeomGyu le devolvió la mirada— Estás muy delgado —mencionó.

BeomGyu sintió un escalofrío en todo su cuerpo, un cosquilleo en su vientre.

Estás tan delgado que puedes ver cuando entro en ti.

Soltó el tenedor en su mano, teniendo un rápido recuerdo de esa noche.

—Hyung, ¿Efta biem? —preguntó Haneul con la boca llena tomando el brazo de su hermano que asintió lentamente tomando un hondo respiro.

—S-si... Sigue comiendo, mi niña —le dijo alejando su propio plato, no comería más y mucho menos con el recuerdo que había llegado a su mente.

De esa noche, había empezado a recordar uno que otro momento, recuerdos cortos y precisos, que le erizaban la piel y lo asqueaban, sentía ganas de llorar y vomitar, lo había hecho un par de veces en la madrugada.

Tomó una honda respiración, mirando a su hermana comer, concentrándose en ella sin querer ver al vampiro.

—Viene el postre —indicó haciéndose a un lado para que retiraran los platos y pusieran el postre, brownies con algo de dulce de leche encima, también, el favorito de la niña.

Haneul miró los brownies, quería el dulce de leche en otro plato aparte, como lo hacían en la mansión Choi.

Por eso, alzó su mano derecha y chasqueó los dedos.

—Oye... ¡Oye! —llamó a la señora Che que volteó extrañada.

TaeHyun arqueó una ceja mirando a la niña.

—Haneul, el servicio no se llama así —regañó BeomGyu bajando la mano de la niña que lo observó.

—¡Mamá me dijo que si! —dijo algo confundida, BeomGyu negó con la cabeza con el ceño fruncido.

Haneul no llamaba al servicio así antes de que se fuera, ¿Qué tanto podría haber cambiado su crianza con su ausencia?

—Ella tiene su nombre, es la señora Che y si necesitas algo se lo pides amablemente —la reprendió dándole una mirada de disculpas a la señora Che que solo hizo un gesto de despreocupación— ¿Entiendes, Choi Haneul? —le preguntó a la niña que miró sus brownies, asintiendo.

Haneul hizo su petición a la mujer sin verla a los ojos, su hermano dándole otro pequeño regaño por no decir "por favor" o "gracias".

Los tres comieron de los postres en silencio, BeomGyu hablando aveces con su hermana o limpiando sus comisuras.

—Ya va a ser hora de que la lleve a la mansión, cuando termine recoja sus cosas, señorita Choi —ordenó el vampiro con voz amable. Haneul asintió rápidamente chupando sus dedos.

BeomGyu sonrió con cariño, pasando su mano por el cabello de la niña.

—Iré a guardar mis cosas, hyung —dijo besando la mejilla de su hermano que asintió quedándose ahí sentado, comiendo un pedazo pequeño del brownie.

Miró al vampiro relamer sus labios, quitando algunas migajas de brownie.

—Iré contigo —le dijo mirando al  vampiro que sonrió de medio lado.

—¿Ahora sí estás dispuesto? Jum, deberías quedarte, estás enfermo y hace algo de frío afuera —mencionó el vampiro manteniendo su vista fija en él.

A BeomGyu no le importaba, no le importaba estar enfermo, mucho menos que hiciera frío afuera, él debía asegurarse de que su hermana fuese entregada a salvo en casa.

TaeHyun relamió sus labios.

—Tus padres confiaron plenamente en mi, tú deberías hacer lo mismo —le dijo, aflojando un poco su corbata. BeomGyu chistó mirando la mesa.

—Es porque no han vivido lo que yo  —fue lo único que contestó. TaeHyun sonrió de medio lado, miró de reojo una llama, volteó a ver, una vela blanca, casi gastada, se veía descuidada.

Se levantó en silencio, bajo la atenta mirada de BeomGyu que se tensó en su lugar cuando miró al vampiro tomar la vela en manos.

—Haneul está aquí, Haneul e-está aquí, por favor... P-por favor, señor Kang —pidió desesperado levantándose de la silla, retrocedió mientras el vampiro se acercaba a él— S-se lo pido...

—Ya cállate —el vampiro siseó soplando la llama, la apagó. BeomGyu igualmente se mantuvo en alerta— Ponte algo abrigado, te espero en el auto con Haneul —BeomGyu desapareció casi de inmediato, con la respiración irregular, TaeHyun fue directamente a la cocina aún con la vela en mano.

Una de las reglas primordiales a la que el servicio se debía apegar era que las dichosas velas, fueran cambiadas de inmediato luego de que estuvieran más abajo de la mitad.

Y la vela, estaba muchísimo más allá de la mitad, muy pequeña.

Ubicó a la señora Che casi que de inmediato, la mujer se paró en frente de él sin problemas.

—Esta vela, mire como está —dijo el vampiro mostrando la misma a la señora que hizo una mueca.

—Lo sie-...

—Escuche, señora Che, no es la primera vez que encuentro un descuido suyo desde que está BeomGyu aquí —regañó el vampiro arrojando la vela al suelo, la cera que aún estaba húmeda salpicó y lo demás se rompió en varios pedazos pequeños, después de todo, no quedaba mucha— Le he dado demasiados privilegios, buenas atenciones y sobre todo, respeto a su persona —la mujer agachó la mirada escuchando el regaño del vampiro— No tengo porqué mencionar de nuevo todo lo que hice por usted, ¿Cierto?

—No, señor Kang.

—Entonces, cumpla sus obligaciones como es correcto, no me importa si quiere estar con mi esposo todas las horas posibles, primero termine sus deberes y luego puede ir con él —le dijo acomodando su saco. La mujer asintió con lentitud— Mucho antes de que el llegase, tenía una responsabilidad aquí.

—Me dejé llevar, señor Kang, pido una disculpa, me encargaré de esto y lo demás de inmediato —dijo avanzado para poner en marcha su trabajo, TaeHyun la tomó de los hombros.

Se inclinó hacia ella, hablando en voz baja, cerca de su oreja.

—Espero no confunda sus sentimientos con su trabajo, y tampoco que se le suelte la lengua con BeomGyu, o le juro, que le cortaré la lengua y las cuerdas vocales —dijo entre dientes. La mujer, sin inmutarse, asintió con la cabeza.

—No interferiré en sus planes, señor Kang, no se preocupe por mi —a pesar de su cuerpo tembló por la amenaza del vampiro no lo demostró y se mantuvo firme, caminando erguida y con la misma expresión de seriedad a hacer sus labores.

TaeHyun miró a la mujer irse, arqueó una ceja.

Había mantenido controlada a la señora Che por años, había sido facil, claro que sí.

Pero ahora con BeomGyu en la mansión, creando una cercanía con ella no sabía cuánto tiempo podría tenerla controlada.

Y si se salía de control, no le quedaría más que cortar el problema de raíz, es decir, matando a la mujer.

Porque tampoco la dejaría salir de la mansión.

La señora Che sabía demasiadas cosas, muchísima más información que hasta los propios guardias podría manejar.

¿Quién es en verdad la señora Che?

Una señora de servicio, una humana en la mansión Kang, la jefa del servicio entero.

¿Cómo había llegado allí? ¿Cuál era su trato con Kang?

—Vamos —dijo TaeHyun abriendo la puerta de la mansión para los dos hermanos, inhalando un poco cuando BeomGyu pasó.

BeomGyu subió al auto por si solo, mirando todo el camino. Suspiró volteando hacia atrás, Haneul cabeceó un poco por el movimiento del auto, solo pasaron minutos para que la niña se quedase dormida, en una mala posición, el cinturón incluso la lastimaba en el cuello.

El cazador debía acomodarla, era largo el camino y no la quería así de incómoda.

—Necesito acomodarla —murmuró sintiendo al vampiro bajar la velocidad, BeomGyu se alzó en su asiento, inclinádose hacia atrás, quitó el cinturón de la niña, la llamó un poco para hacerla acostarse a lo largo del asiento.

Sintió un brazo rodearlo de la cintura, la mano del vampiro rodeó su cintura, su mano quedó cómodamente puesta en su trasero.

—Señor Kang, por favor... —pidió tratando de devolverse a su lugar, pero el vampiro lo mantuvo en su lugar— ¿Puede... Esperar a que Haneul se vaya?

—¿Qué crees que haré? ¿Uhm? —preguntó el vampiro conduciendo con su mano sobrante, aumentando un poco la velocidad, BeomGyu quiso volver a su lugar a la fuerza, pero el vampiro lo sentó en su regazo.

Quedó sentado en sus muslos, con los pies en el asiento del copiloto y los dos brazos del vampiro apresándolo para conducir.

BeomGyu tragó grueso quedándose estático.

No quería que pasara nada, y mucho menos con Haneul presente, si llegaba a llorar o a gritar la despertaría y lo que menos quería era que lo viera en ese estado tan deplorable e indefenso.

Algo que tenía muy en claro era el cómo Haneul lo veía, lo veía como alguien al que admirar, cómo su mejor amigo, cómo uno de sus ejemplos a seguir, y no quería ni iba a arruinar esa imagen en la niña.

—No vuelva a hacer eso, por favor —habló apretando sus pantalones, seguía en el regazo ajeno, TaeHyun arqueó la ceja— No vuelva a traerla, no vuelva a acercarse a ella, por favor.

—Entonces, ¿Hice mal al traerla? —preguntó el vampiro mirando el retrovisor un par de veces.

—No quise decir eso... —murmuró mirando el camino, quería quitarse de su regazo pero no podía, lo tenía bien acorralado y lo que menos quería era un enfrentamiento en un auto con Haneul presente— Pero prefiero que Haneul esté alejada de todo esto... Le agradezco que la haya traído y dado la libertad de acceder a cualquier cosa, aún así, la prefiero alejada —finalizó tratando de volver a su lugar, pero el vampiro lo mantuvo ahí, mirando una y otra vez por el retrovisor.

Se desvió a la derecha, saliendo del camino normal.

—¿Sabes disparar, bizcochito? —preguntó a pesar de saber la respuesta. BeomGyu asintió lentamente, sin entender la pregunta del vampiro que señaló la guantera del auto, frente al copiloto— Hay una pistola con silenciador allí, tómala, y dispara a las ruedas del auto de al frente, tienen minutos siguiéndonos —indicó con calma aumentando la velocidad, desviándose a la derecha. BeomGyu miró hacia atrás, un auto rojo iba a la misma velocidad que ellos, siguiéndolos.

Se inclinó a la dichosa guantera y tomó el arma, instaló el silenciador sin problemas, miró unos minutos a Haneul.

—Arrodíllate —indicó el vampiro ladeando su cabeza hacia un lado para no perder la visión del camino, BeomGyu se arrodilló sobre él, bajó la ventana él mismo y sin esperar, sacó su cuerpo para apuntar, sintiendo el brazo izquierdo de Kang abrazarlo de la cintura para no caer.

Del auto rojo, también salió un hombre con un barbijo y el cabello cubriendo la visión a sus ojos, igual disparó hacia ellos. BeomGyu disparó en dirección a las ruedas del auto.

—¿Quiénes son? —preguntó volviendo a entrar, quedándose sobre Kang que chasqueó la lengua aumentando aún más la velocidad.

—Son lo subordinados de mi hermano.

¿Qué les pareció este capítulo? ¿Qué opinan de la señora Che?

Por cierto...

Hasta ahora, ¿Cuál es su personaje favorito?

The_Dark_Diamond