13

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

Los nervios de Agustín estaban a flor de piel, había tocado el timbre de aquella casa y esperaba con ansías que alguien abriera. Su pequeña se encontraba igual que él, ambos se mantenían atentos.

- ¿Agus qué haces aquí? - Agustín no sabía que hacer, tal vez podría golpear al chico por mentirle, aunque no estuviera seguro si realmente lo hacia.

- Estoy aquí por Caro - habló firme. Michael estaba por decirle que Caro no quería que el estuviera ahí cuando notó la mirada llena de esperanza de la pequeña, estaba seguro de que no quería arruinarle su ilusión.

- Pasa - se hizo a un lado para que ambos pudieran pasar, y así lo hicieron sosteniendo aún su equipaje en manos. Habían llegado hace poco de una hora y lo primero que habían hecho era tomar un taxi y darle la dirección de la casa de Mike, que Karol les había proporcionado antes de su partida. Agustín no quería perder ningún segundo de encontrar a Carolina.

- ¿Dónde la puedo encontrar? - Michael notó la desesperación que el chico tenía, le daba pena que supiera que Carolina había ya iniciado su vida con alguien más, así que debía de ser precavido con sus palabras.

- Wow que alterado amigo, ¿no quieres algo para tomar? - le había molestado que lo llamara amigo, Agustín aún no había olvidado el hecho de que él había querido algo con Carolina, le causaba celos, aún sabiendo que eso había sido años antes de que ellos se conocieran.

- Me gusta ser directo - su expresión había cambiado rápidamente, le había molestado el comentario. Sofía seguía ahí, no le diría hasta que la alejara, era de corazón noble y no soportaría la mirada de la pequeña; no la conocía mucho, pero por las pocas veces que la había visto se notaba que quería mucho a Carolina.

- ¿Puedo hablar contigo a solas? - Agustín no muy convencido del porque el mexicano quería hablar con él a solas asintió - Hey Sofi, ¿quieres ver la televisión mientras le explico a tu papá como llegar con Caro? - Sofía miró a su padre esperando una respuesta. Agustín asintió y volvió a mirar a Mike.

- Esta bien - Michael sonrió y después la llevó hasta la siguiente habitación donde tenía una televisión.

Mientras tanto Agustín observó los detalles de la casa y hubo uno de llamó su atención. Había un biberón sobre la barra de la cocina. Cuando Valentina había cuidado a Gastón, en un intento de pedir ayuda llamó a Mike, pues no quería interrumpir a Carolina; habían dado una vuelta en el auto de Mike para ver si lograban tranquilizar al pequeño y Valentina había olvidado aquel objeto.

Agustín lo tomó entre sus manos y lo examinó. Tenía una idea de quien podría ser, pero no quería imaginarlo y malpensar todo.

- Listo - habló Mike a sus espaldas.

- ¿Estuvo contigo? - Michael se lamentó el haberlo dejado solo.

- No, solo lo olvidó en mi auto. Lo cuide ayer - Agustín estaba tenso.

- ¿Qué querías decirme?.

- ¿Karol no te dijo que Carolina no quería ser encontrada?.

- Lo hizo, pero no lo creo.

- Esto será difícil, pero, bueno Caro comenzó a salir con alguien hace unas semanas - entonces era cierto. Sólo quería escucharlo del chico. Tenía una de sus manos en un puño, no quería creerlo.

- Quiero verlo con mis propios ojos.

(...)

Había pasado la noche anterior aclarando sus pensamientos, e incluso el sueño que había tenido no la había ayudado en mucho.

Ella estaba acostada al lado de Agustín, podía sentir como él trataba de hacerla despertar dando unos besos en su cuello. Sonrió, amaba sentirlo.

- Buen día - le contestó ella para después voltearse y quedar frente a frente.

- Te amo - le dijo él antes de besarla.

La puerta de la habitación se abrió y Sofía entró corriendo, quería asustar a ambos pero su risa la había delatado.

- Boo - dijo la pequeña mientras saltaba a la cama. Sus padres comenzaron a reír. Agustín la tomó y la abrazó para colocarla en medio de ellos dos - Mi hermano ya despertó - comentó la pequeña.

- Voy por él - Agustín se levantó de la cama para ir a la habitación en la que su pequeño dormía. Efectivamente, el pequeño estaba despierto - Vamos campeón - lo tomó entre sus brazos y se dirigió con el en brazos hasta la habitación.

Sofía junto con Carolina habían decidido esconderse de ambos, y a la hora de que Agustín entró en la habitación no las vio. Ambas estaban escondidas debajo de la cama, cubriendo con sus manos sus bocas para que sus risas no las delatara.

- ¿Dónde se habrán metido? - dijo en casi un susurro Agustín. Dejó a Gastón en el piso mientras él iba hacia el baño, por si estaban ahí escondidas.

El pequeño comenzó a gatear hasta la cama, había notado a su madre y su hermana ahí. El pequeño reía por los gestos que ambas hacían. Agustín había escuchado la risa del pequeño y salió para encontrarlo tratando de entrar debajo de la cama.

- Así que las encontraste - Agustín se agachó, encontrándose con ambas - Ese es mi hijo - le dijo Agustín dándole un beso en la cabeza de Gastón.

- Hey Caro - Lio justo había interrumpido el recuerdo del sueño - Creo que estas algo distraída - Carolina no entendía el porque se lo decía, hasta que el chico señaló un lugar en especifico. Carolina miró hacia donde había señalado; hace unos minutos había comenzado a darle de comer al pequeño una papilla, y ahora el pequeño se encontraba algo sucio.

- Demonios - comenzó a limpiar un poco a Gastón. Lio comenzó a reír y se acercó a ella.

- ¿Qué te tenía tan distraída? - le preguntó cuando ya estaba cerca de ella.

- Nada en particular - no le diría en sueño que había tenido, y aunque no fuera muy buena mintiendo, debía de intentarlo.

- ¿Segura? - Caro asintió - ¿puedo cargarlo? - volvió asentir y le pasó al pequeño.

- ¿Y Valentina? - era algo tarde ya y la rubia no había aparecido en toda la mañana, además Carolina estaba buscando algún pretexto para cambiar de tema.

- Seguramente con Mike - Lio comenzó a jugar con el pequeño. Haciendo caras graciosas para que este comenzara a reír. Esa escena conmovió a Carolina.

- Eres increíble - él desvío su atención del pequeño y se centro en las palabras de Carolina.

- Te quiero - le contestó y no dudó en lanzarse a los labios de ella. La campanilla de que alguien había entrado sonó, pero ambos continuaron con su beso.

Lo que menos quería creer estaba viéndolo justo en esos momentos. El corazón de Agustín se había roto en un segundo. Estaba viendo como Carolina se besaba con alguien más, pero aún con la esperanza de que no fuera ella se acercó un poco más.

- ¿Caro? - preguntó. La chica instantáneamente se separó para verlo.

- Agus - dijo ella totalmente sorprendida.

Se habían encontrado. Él no dejaba de mirarla, pero su vista fue hasta el pequeño, que el chico con el que Caro se estaba besando sostenía. Su hijo, estaba seguro de que ese bebé era Gastón.

(...)

Dejaré hasta aquí porque quiero hacer una dinámica.

Yo si fuera Agus...

Comenten en la frase de arriba que harían ustedes si fueran Agus en esta parte, yo ya lo que va a pasar, pero quiero saber que creen ustedes que hará Agus.

Nos leemos pronto, me tomé un tiempo para regresar y escribir el capítulo, ahora me regreso al cielo porque los besos "Gastina" me hacen morir.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro