Lo sé, el nombre del capítulo suena chistoso pero tiene su significado, googléalo.

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Narra Sinec

(19:34 PM)

Sinec:¿Adónde vamos Malbon?

Malbon:A casa de Eduardo, ya te lo dije antes.

Sinec:Oh, cierto, lo olvidé.

Efectivamente me lo había dicho antes y como lo dije, lo olvidé.

Me dijo porque me llevaba a casa de mi maestro, él tenía algo que hacer, algo muy importante con su hermano, al principio no quería contármelo pero tras preguntárselo por solo unos segundos, decidió decírmelo y la verdad no era algo tan malo.

Malbon:Ya llegamos amor.

El tramo fue como de costumbre, un poco largo.
Estacionó su auto, salimos de este y caminos hasta la entrada de la casa para tocar la puerta para luego esperar a que Kenny o Eduardo vinieran a abrirnos la puerta.

Malbon:Qué bien que ya se lo dije a Eduardo por teléfono.

Sinec:¿Desconfió?

Malbon:Sí al inicio pero logré convencerlo, me dijo que quizá pasaría algo como la anterior vez.

Y justo en ese instante, la puerta se abrió, hicieron falta segundos para saber quién la abría y resultó ser el dueño de la casa, Eduardo.

Eduardo:Hola a ambos, creí que llegarían antes.

Al parecer... Eduardo no estaba tan feliz de vernos, en especial a Malbon, tal vez aún no confiaba del todo en él por lo que pasó hace dos meses.

Malbon:Sí... ¿Puedo pasar?

Eduardo no dijo nada, solo se hizo a un lado para dejarnos entrar y se fue a su sala, como Malbon fue el último en entrar cerró la puerta y me siguió hasta donde yo fui, a la sala donde se encontraba Eduardo pero no mi hermano.

Sinec:¿Y Kenny?

Eduardo:Está en mi cuarto hablando con Tyson por una llamada pero no te preocupes, ya se lo dije.

Malbon:Gracias por el favor Eduardo, te lo agradezco.

Qué incómodo, Eduardo actuaba algo distante con Malbon.

Eduardo:Espero que esta vez no robes nada.

Malbon:No, jamás, eso nunca, ya te dije que haré, confía en mí.

Eduardo:De acuerdo Malbon, solo no hagas nada malo.

Malbon me abrazó para luego despedirse de mí.

Malbon:Hasta mañana Sinec, vendré a recogerlos, te lo prometo.

Luego de eso, se marchó hacia la puerta para abrirla e irse a... a hacer algo temerario pero según a lo que me dijo no lo hará solo, estará con su hermano, no se exactamente quien sea pero... no lo sé.

Eduardo:Bueno, puedes dormir en mi cuarto, yo lo hare aquí, junto a Kenny.

No pude decirle nada porque justo después de que me dijera eso se fue a su cuarto, bueno, no exactamente a su cuarto, solo salió de la habitación dejándome totalmente solo con mis dudas de porque actuaba así.
Sin nada que hacer o algo en que pensar, me senté en el sillón para estar cómodo, al menos estaría solo aburrido y no parado.

Kenny:Así que tu novio salió, ¿A quién va robarle esta vez?

No pasó ni un minuto para que dejara de estar solo, Kenny vino y se sentó a mi lado.

Sinec:A nadie, solo ayudará a su hermano a huir de la ciudad.

Kenny:¿A su hermano que tanto odia? Es difícil creer que lo ayudará en algo como eso si dice que lo aborrece.

Sinec:¿Quieres cambiar de tema?

Hablar de algo así no me gustaba, ni siquiera era entretenido, ya no había nada que hablar con respecto a ese tema.

Kenny:¿Por qué?

Sinec:Porque ha pasado demasiado desde que te fuiste, no hablamos tan seguido y no quiero que esto sea de lo que hablemos.

Kenny:No hablaré sobre eso, ¿De que quieres hablar pequeño pokefílico pervertido?

A pesar de que odiaba que me diga así, en el fondo se sentía como él mismo, quizá extrañaba que me dijera eso aunque fuera molesto.

Sinec:Jajaja, no soy nada de eso.

Kenny:Olvidas a Malbon pequeño pervertido.

Sinec:En serio, no soy pervertido.

Después de ese pequeño momento no dijimos nada más, tal vez se nos acabaron los temas de conversación pero oportunamente recordé algo para hablar.

Sinec:¿Te digo algo? Hasta ahora no he abierto la nota que Tyson me dió.

Kenny:Qué mentiroso eres, qué dice.

No haría eso, además no ganaría nada al hacerlo.

Sinec:De verdad, está en mi casa.

Kenny:¿Y por qué no se la das a Rey?

Sinec:¿Crees que no lo intenté? Una vez fui al bar en el que trabaja junto con Malbon porque no iría solo, pero no encontramos a Rey, nos dijeron que ya no trabajaba ahí.

Sinceramente no esperaba que Rey abandonaría su trabajo, voy a extrañarlo.

Kenny:¿Ahora cómo vas a encontrarlo?

Sinec:No lo sé pero estoy seguro de que lo haré... creo.

Seguimos hablando sobre algunas cosas que se nos ocurrían a medida que conversábamos, como el tema de mi futura graduación que ya se acercaba, no sería este año sino el próximo y me aconsejaba empezar a pensar a qué me dedicaría y que carrera universitaria escogería...

(21:28 PM)

No era precisamente la hora de dormir pero Kenny y yo ya sentíamos algo de sueño, así que decidimos que dormiríamos, él lo haría en el lugar en el que hablamos, en la sala, Eduardo también según lo que me dijo y yo en su cuarto.
Me dirigía al la habitación de Eduardo, no había salido desde que vine, eso me llamó la atención y fue otra razón para que fuera además de tener sueño pero cuando estuve a punto de abrirla, Eduardo lo hizo al mismo tiempo.

Eduardo:Sinec, vas a dormir, ¿Verdad?

Sinec:Sí, pero puedo dormir en la sala y tú en tu cuarto.

Su seriedad me daba algo de miedo, estaba más serio de lo normal.

Eduardo:Ven, entra, necesito hablar contigo.

Como hace poco, no pude decir nada porque entró a su cuarto una vez más, así que tuve que hacer lo que me dijo.

Sinec:De que quieres hablar, Eduardo.

Su seriedad se esfumó para ser reemplazada por otro sentimiento, creo, por tristeza y también estaba algo decaído.

Eduardo:Sobre algo que siempre me pregunté desde hace años.

Esperé a que dijera algo, se tomaba su tiempo para hacerlo, quizá para pensar en cómo lo diría.

Eduardo:¿Cómo crees que sea feliz?

Pero la pregunta no era para nada una que esperaría, creí que sería otra cosa pero me equivoqué.
Lo que me pedía era difícil de saber para mí, intentaría responder lo mejor que se me ocurriría aunque no sería la mejor respuesta o tal vez no la que quería oír él.

Sinec:Ah... no lo sé... tal vez si... lo siento Eduardo, no sé qué decirte.

Fue lo único que pude decir, al menos intenté decir algo pero no pude pensar en otra cosa que se oyera mejor.

Eduardo:¿Puedo pedirte un favor Sinec?

Sinceramente, me sentía obligado a aceptar porque si diría que no, Eduardo podría sentirse mal y eso era lo que menos quería que pasara.

Sinec:Sí, claro.

Como antes, Eduardo se quedó sin decir nada por unos momentos y mientras los segundos pasaban, la tensión se hacía cada vez más fuerte y quizá insoportable pero no tenía más opción que hacer lo mismo que él, nada.
Eso hasta que decidió decir algo que...

Eduardo:¿Puedo besarte?

Qué... petición más inesperada...

Sinec:Ah... qué...

Eduardo:No importa si no quieres, solo dilo.

Definitivamente... me sentía incapaz de decir una sola cosa que sonara como un sonido audible o verbalmente entendible.

Sinec:...

Eduardo:No intentaré nada, te lo prometo.

Eso se oía más... tranquilizante, creo.

Sinec:No lo sé, es que... no creo que sea lo correcto.

El poco, muy poco tiempo que pasó desde que me lo preguntó, podría decirse que ayudó a que lo pensara mejor.

Un beso, no estoy seguro, es algo repentino que me lo haya pedido.

Sinec:Pero... por qué.

Eduardo:Solo quiero estar seguro sobre algo.

Qué hago, qué hago, qué hago...
Creo que...

Sinec:Pero no se lo digas a Malbon, por favor.

Eduardo:No arruinaría tu relación con Malbon, puedes confiar en mí.

No se por qué acepté, bueno, no hay marcha atrás.

Era obvio decir que me sentía tan nervioso que temblaba, aquello era visible a simple vista, Eduardo lo notaba pero lo ignoraba, creo, no estaba seguro de eso pero de lo que estaba seguro era de que la situación era cada vez más incómoda, y más aún con Eduardo acercándose hacia mí con las intenciones obvias provocándome aún más nerviosismo pero a pesar de eso, no me alejaba, permanecia firme lo mejor que podía.
Ya faltaba poco, estaba muy cerca mío, el se veía sereno pero yo no, para nada, más bien todo lo contrario, la cara me ardía como si estuviera incendiándose pero no tenía más opción que quedarme quieto y esperar a que... pasara...

.
.
.

Y pasó, pero al contrario de lo que creí, no se sentía mal, tampoco lo hacía de manera intensa, ni siquiera sabía bien con qué intención lo hacía y me limité a quedarme inmóvil, tampoco me había dado cuenta de que él tenía su mano/pata sosteniendo mi mejilla a modo de caricia, no lo hacía para profundizar más en lo que hacía.
Pero todo lo que pasaba no duraría tanto como creía, tampoco esperaba que durara mucho, Eduardo decidió terminar con lo que inició separándose de mí muy lentamente sin dejar de posar su vista en mis ojos, la situación dejó se ser tan íncomoda como antes pero tampoco dejó de serlo, solo un poco.

Eduardo:Lo siento.

No entendí por qué se disculpaba, él quizá sentía que debía hacerlo.

Desgraciadamente, hubo otro incómodo y más que todo largo silencio entre ambos, no nos veíamos, él miraba al frente y yo a un lado, después de hacer lo que hicimos me era vergonzoso ver su rostro.

Eduardo:Vaya... creí que pasaría otra cosa.

Eso quería decir que esperaba algo... pero qué.

Sinec:No... e-entiendo.

Pero tuve que hacer contacto visual para hablar de mejor manera.

Eduardo:Si te soy sincero, creo que besarte no fue la mejor opción que tomé, lo imaginé de mejor forma pero tenía espectativas demasiado altas.

Seguía sin entender de qué hablaba pero no sé lo preguntaría, solo dejaría que continúe hablando.

Eduardo:Empiezo a creer que... me siento afortunado de tener a un amigo cómo tú Sinec.

Justo después de decir eso, Eduardo me abrazó, no me dijo que lo haría pero tampoco era algo que me molestaba y aunque no entendía mucho de lo que pasaba, tal vez Eduardo solo necesitaba acercarse a mí... o algo así, creo.
Pero correspondía a su abrazo, no pude evitar hacerlo.

No entiendo por qué Eduardo hizo lo que hizo, dijo que quería estar seguro sobre algo, qué es ese algo.
Pero ignorando eso, parece mejor que antes y eso es lo importante.
Bueno, fue algo así como un sacrificio... técnicamente...

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Habrá algo interesante al final del siguiente capítulo...

Espero que esto funcione.