Nuestro castaño favorito -a menos que tengas otro castaño favorito pero bueh, este es un bebo ¿cómo no amarlo?- se encontraba en la habitación en donde estaban empezando a dormir el y su novio Golden.

Tenía un balde de agua helada en sus manos y a un rubio durmiendo plácidamente en la cama.

Adivinen qué va a hacer.

—Bueno...solo tendrás una oportunidad—habló el ojiazul—Golden despierta.—lo llamo en voz baja, tenía tantas ganas de tirarle ese balde lleno de agua fría para ver su expresión, se aprovechaba de que su novio nunca se enojaba con el.

Pero despertó.

—¡Buenos días!—se levanto de la cama y vio a su pareja con el balde, ahora mismo temía por su vida, no le gustaba el agua fría tras dos segundos de levantarse.—¿y eso?

—Kien io?—se señaló, el contrario negó con la cabeza y señaló con disgusto al balde—Ah, eso...—río el castaño.—pfff, no es nada, ya sabes...no es como si quisiera tirarte esa agua para que te levantaras, no, para nada—sonrío.

—Esta bien...

...

—¿Y ese es tu novio?—señaló la castaña con la mirada al castaño, el rubio asintió divertido con la cabeza.—Son muy lindos juntos.

—Seh, yo soy el de arriba por cierto.—la chica río. Conversación súper normal de una clienta y el trabajador. De hecho la chica no se sentía incómoda por los comentarios tontos del rubio, le causaba risa y hasta los shipeaba.

—Quiero pizzaaaa—exclamó la castaña golpeando levemente la mesa con sus puños. El de ojos grisáceos se había olvidado de su trabajo, le gustaba hablar con los clientes.

Mientras tanto el de ojos vacíos veía con rabia como su pareja hablaba tan divertido con la chica castaña. Si no fuera porque están en una zona pública, estaría ahora mismo como un perro rabioso ladrándole a la chica. Pero solo se limitaba a lavar los platos mientras veía como hablaban.

Después de unos minutos, Golden volvió hacia su pareja para pedirle la pizza que la chica ordenó.

—Fred.—lo llamó y este lo miro con cierto enojo.—¿Ehhh? ¿Sucede algo?

—¿Te gusta esa chica?

—Ke—vio cómo el castaño señalaba a la linda chica con la que había hablado antes y luego volvió a mirar a su pareja—Noooooo, no es asiiiii porque piensas asiiiii

—Te gusta.

—Estas celoso.

—Si no lo decías, ni enterado.

—Fred...

—Terminamos.

—¡Fred nOOO! ¿Estás bien? ¿Estás en tus días?

—Búscate otra pasiva bai

—nOOOooOoO—grito el rubio fingiendo llanto—tú eres mi pasivito, mi ukesito, mi osito nigga

—Deja de ser tan marica...—gruñó Fred, pero al ver como el rubio empezaba a entristecerse de verdad no dudó en tomar sus mejillas y plantarle un beso en los labios—Yayaya, lo siento.

—No te disculpes...

—No me gusta que hables con chicas feas, porque yo soy la más linda aquí ¿Okay?

Golden río un poco.

—Okay.—y lo besó.

...

—Hey niña, ya vamos a cerrar—le recordó el de ojos vacíos a una niña pequeña de ojos azules y cabello rubio, le hacía recordar a su amiga Joy. Ya era de noche y ella era la única persona en la pizzería aparte de Golden y Freddy.

—E-estoy perdida...mis padres no están...—eso conmovió al de ojos vacíos quien se acercó a abrazarla y consolarla, ya que la pequeña con tan solo mencionar su problema había empezado a llorar desesperadamente.

—ke ezta pazando aki?—llegó gOLden encontrando a su pareja abrazando a la pequeña—...¡pEdofilo de mierda!

Agarro una escoba y le pego con el objeto a Fred.

—¡Ouch! La niña está perdida y está llorando. K no bes conchatumadre puto ciego de mierda, me dolió, recuérdame porque estoy contigo

—Ah pobrecita.—levanto a la menor ignorando las lisuras que soltaba su novio—¡¿Y si la adoptamos?!—miro emocionado a su pareja.

—¡¿Estás loco?! La niña ya tiene padres.

—Si, ¡nosotros!

—¡Papis!—con toda la ternura del mundo abrazo al rubio.

Ambos miraron a Fred con ojitos de perrito haciendo que este muriera de adorabilidad.

—Esta bien...—suspiró rendido el castaño.

—¡Verónica!—la voz de una mujer mayor se hizo presente en la pizzería. La niña sonrío a más no poder y se dirigió a los brazos de la señoORA quien al parecer es su madre.

—Bueno, fuimos padres por dos segundos.

—Ni creas que lo seremos.

—Mucho hablas.

...

¿No les ha pasado que empiezas a stalkear a una persona cualquiera hasta enamorarse de sus dibujos y darse cuenta que te seguía? Es como puta madre, deja de seguirme y vuelve a seguirme para celebrarlo o tal vez es como perdoNAME POR NO FANGIRLEAR CUANDO ME SEGUISTE.

Y eso.