3AM...

Ciertamente era una hora ideal para aquellos que querían trabajar o recrearse en paz. Eso aplicaba en todos los ámbitos, inclusive el de los villanos.

A esa hora en particular, donde casi la totalidad de patrullas de héroes hacían su relevo..., las calles no eran tan seguras como de costumbre. Y mas en este tiempo, en donde All Might había abandonado su manto como héroe, y las sucias alimañas del bajo mundo emergieron de las sombras.

Y exactamente en esta hora, un hombre trabajador, divorciado y con un hijo a su cargo, corría desesperado por los callejones.

Lo estaban persiguiendo. Era absurdo decir esto, pero parecía que quien le perseguía era una gacela. Se movía tan rápido que aquel hombre ni utilizando su Don podía alargar el camino entre ambos.

Shigaraki tomó una pequeña botella de vidrio de un contenedor, y la lanzó con fuerza contra su presa, derribándolo con un fuerte impacto en la cabeza que le dejó en el suelo.

―... ―Tomura por fin se detuvo. Ese hombre cayó muerto, o inconsciente. No importaba.

Sin perder el tiempo, comenzó a buscar entre la ropa de aquel hombre. Tenia un celular. Lo había visto antes de que comenzara esta estúpida persecución...

¿A caso lo había arrojado en el camino y él no se dio cuenta?

Si era el caso... ya entendía por que sentía comezón de nuevo. Quería matarlo.

Tal vez podría darse ese gusto antes de que...

El teléfono comenzó a sonar. Shigaraki vio que estaba a pocos pasos de él. Parece que cayó de sus manos cuando recibió el impacto.

Al dejar al hombre allí sangrando, tomó el teléfono. Quien le estaba llamando estaba agentado como "hijo".

Sin perder el tiempo, cortó aquella llamada y prosiguió a hacer la suya. Los números eran...

―¿Tomura Shigaraki?

―Soy yo.

Del otro lado, Chizaki suspiró con notable cansancio. ―Supongo que no te importa en la hora que estas llamando. ¿Ya reconsideraste mi oferta?

―... ―Shigaraki dirigió una clara mirada asesina a la nada―. Así es. Una alianza nos beneficiaria a ambos, pero tengo a un tipo muerto en mis espaldas y este medio no es seguro. ¿Cuándo nos veremos las caras, joven líder?

―... ―Chizaki suspiró con notable cansancio―. No se por que pensé que llamarías por un medio mas seguro...

Tras hablar por menos de 2 minutos sobre como harían para reunirse, Shigaraki se dispuso a no perder mas tiempo. ―Muy bien. Espero encontrar a uno de sus agentes allá ―sonrió―. Nos vemos mañana, joven líder...

―Asegúrate que no te atrapen ―fue lo ultimo que se escuchó antes de que el mismo Tomura corte.

Con eso arreglado, Shigaraki se dispuso a acabar con las pruebas al degradar aquel teléfono. Sin embargo, nuevamente comenzó a sonar.

Tomura lo observó. "Hijo" estaba llamando de nuevo. Es mas, tenia varias llamadas en apenas estos 3 minutos que pasaron.

―... ―Tomura observó a aquel hombre inconsciente. Ahora que lo pensaba, muy seguramente la policía obtendrían una pista sobre él cuando aquel hombre les cuente vagamente sobre su apariencia y habilidades...

Debería de asesinarlo... pero si lo hace, dejaría una serie de manchas que simplemente no podía limpiar o degradar y por las que las autoridades podrían saber con mas certeza que era Tomura Shigaraki, y ese remedio seria peor que la enfermedad.

Debía hacer algo que Tomura Shigaraki no solía hacer. Algo que le haga ganar mas tiempo...

Con una clara idea en mente, Tomura marcó el 119, el cual era el numero de emergencias en Japón. Al ser atendido, no tardó un solo segundo en decir en que calle cercana estaba ―la cual había observado antes de comenzar la persecución― con un tono de voz mucho mas agudo que el de costumbre. Mencionó sobre el callejón y la lesión de aquel hombre, y sin proporcionar mas detalle, se acercó a un contenedor de basura y comenzó a degradar el teléfono, cortando la llamada.

No pudo evitar sonreír al imaginar a las autoridades frente a esta situación. Buscaban desesperados a Tomura Shigaraki, pero él nunca se robaría un celular y llamaría a emergencias para que atiendan al asaltado. Es mas, Shigaraki nunca dañaría a alguien con algo que no fuera su Degradado...

Sin perder el tiempo, Shigaraki desapareció del lugar ante la mirada del hombre que no estaba tan inconsciente como el villano pensaba...

[...]

Shigaraki sabia lo importante que era cuidar su cuerpo, por lo que durmió en el tejado de un edificio lejano a la zona del crimen. Extrañamente no tenia hambre, y necesitó de poca agua para estar en plena forma.

El invierno aun no era cruel, por lo que no la pasó tan mal.

En lo que si la paso mal es en la base Yakuza. Estuvo casi 30 minutos caminando en un laberinto mientras era guiado por uno de esos Yakuzas.

Cuando finalmente entró por una puerta y observó a aquel pobre diablo, Overhaul, no pudo evitar soltar una queja nada mas empezar. ―Que triste oficina tienes aquí.

―Las configuraciones desordenadas no son realmente mi gusto ―se excusó. Y anticipando la segunda y mas obvia queja, continuó―. Comprende que no sabemos quien esta mirando, ni sabemos que están pensando nuestros invitados, por lo que hay muchas rutas que han sido conectadas bajo tierra. Esta recepción sirve también como un refugio bajo tierra. Por este tipo de medidas es que los 8 preceptos han sobrevivido hasta hoy.

Shigaraki se vio fastidiado ¿Ahora anticipaba sus comentarios?

Mientras avanzaba hacia el aparentemente cómodo asiento, rascaba su cuello con notable molestia.

―¡Entonces! ¿Vas enserio? Dependiendo de las condiciones, ¿Te aliaras con nosotros?

Acostándose de manera despreocupada, Tomura dejó de rascarse el cuello. ―Esa es una manera mas bien auto servicial de ponerlo, pero si. Sin embargo, tengo que darles a conocer un detalle fuera del ojo de los héroes o el de otros villanos...

Overhaul se vio interesado. ―¿Que detalle?

―La Liga de Villanos esta disuelta ―colocó sus pies sobre la mesa―. Soy su único integrante que queda.

―...

―...

Tomura sintió una pistola en su cabeza. Aquel Yakuza parecía bastante enfadado por aquella revelación. ―¡¿Hablas enserio?! ¡¿Aun sabiendo eso tienes la cara para engañarnos y intentar concretar una alianza con nosotros, los 8 preceptos?! ¡No te pongas engreído!

―¿Engreído? ―Shigaraki observó de reojo a Overhaul―. Ustedes son los que quieren agarrarse del nombre de la Liga. Pero yo estoy buscando maneras de expandir nuestra influencia. Nuestros motivos parecen estar alineados. Además, fue por su culpa que esto sucedió. ¿De verdad piensan que no afectaría a la moral de mis aliados que nuestro Magne fuera asesinado? Nadie saldrá beneficiado si ustedes ni siquiera pueden hacer un pequeño compromiso...

―Chrono, déjalo ir ―ordenó Overhaul―. Él vino todo este camino a considerar el futuro con nosotros. Oigamos lo que quiere decir, aunque ya no cuente con poder ninguno.

―Como decía... ―continuo Shigaraki cuando el cañón de la pistola dejó de apuntar a su cabeza―, la Liga de Villanos se disolvió, pero nadie esta enterado de esto. Para los ojos de héroes, villanos, la sociedad en general... aun estamos en operaciones. ¿No es eso lo que buscaban? ¿Qué le prestemos nuestro nombre para conseguir benefactores?

Tomura no era estúpido. Overhaul se enteraría tarde o temprano de todo esto, y eso si que no pintaría bonito. Ser honesto desde el principio era importante. De igual modo, podía asesinar a todos en esta habitación si las cosas se salían de control.

―... ―Overhaul se tomó la cabeza―. Supongo que servirá. Tenemos a la cabeza de la ex-Liga de Villanos aquí, por lo que podría funcionar. Ahora..., tienes el rostro de alguien que tiene bastantes condiciones para la situación en la que esta.

―Solo es una condición natural, joven líder. Comprende que nuestro nombre aun tiene valor, y no puedo prestártelo para cualquier clase de esquemas. Es una carta de un solo uso. Ese "plan" del que hablabas... dime mas acerca de eso ―Tomura buscó en su traje, alertando a los dos guardias de Overhaul―. Tenia... algo por aquí que tenia que ver con eso... ―tras unos segundos logró encontrarlo, mostrando una pequeña bala―. Tiene que ver con esto, ¿No es así? Inmediatamente luego de que le dispararan esto... ese traidor ya no era capaz de usar su Don. ¿Qué es? ¿Qué planeas hacer con él? Dime.

―... ―Overhaul se colocó de pie. Tomura estaba bajo su control ahora que no poseía prácticamente poder. Debía hacer todo lo que podía para no solo hacerlo su aliado... si no reclutarlo. Absorber por completo el nombre de La Liga de Villanos―. Acompáñame, Shigaraki.

Mimic se vio dudoso. ―¿Esta seguro, señor?

―Él supo lo que le convenía y fue honesto desde el principio. Si terminaremos por concretar esta alianza, tarde o temprano terminará descubriéndolo ―lo observó de reojo―, ¿O no?

Shigaraki se puso de pie. ―Exactamente. Entre aliados no hay secretos.

Todos en esta habitación sabían que ambos fingían inútilmente. Los secretos son una ventaja importante a la hora de intentar lograr cualquier cosa, por lo que no deberían de ser la primera carta en ser mostrada.

Overhaul hablaría con Shigaraki. Intentaría ayudarle, intentaría persuadirle, y le mostraría que le conviene formalizar una unión en vez de solo una alianza. Hasta que eso suceda... solo le mostraría lo mínimo y indispensable.

Todos abandonaron la sala. Overhaul estaba delante, seguido por Shigaraki. Detrás de Tomura le escoltaban Mimic y Chrono, quienes vigilaban donde miraba su invitado.

―Déjame explicarte cual es nuestro objetivo. Al menos así el camino será mas llevadero ―Overhaul miró delante―. Voy a destruir la justicia ―comentó con decisión y sin rodeos, impresionando levemente a Shigaraki―. He oído que All For One controlaba a otros al tomar sus Dones. Yo presionaría ese acercamiento un poco mas. Como seguramente ya te hallas dado cuenta, nuestras raíces ya se han propagado a través de la ciudad...

Tomura oscureció su mirada. ―A si que no son los únicos con esta clase de bala, ¿No es asi?

―Asi es. Vendimos algunas unidades de nuestro producto a las organizaciones vecinas para darles una pequeña probada de lo que vendrá. De lo que ofreceremos ―Overhaul le miró de reojo―. Drogas que potencian los Dones. Balas que se deshacen de ellos. Una droga capaz de revertir los efectos de nuestras balas. Esos son nuestros productos, los productos por los cuales necesitamos financiación para producir en masa.

Shigaraki rio levemente. ―Veo que tienes planeado todo un monopolio... pero basta de tonterías ―le observó―. No me importa que piensas hacer con tu producto. Lo único que me importa es... ¿Cómo es que los produces? ¿Cuál es tu misión final con todo esto?

―Poco a Poco... todas las preparaciones esta procediendo de acuerdo al plan ―Overhaul nuevamente miró delante―. Los productos que producimos no son mas que un pequeño juego de química ―comentó sin darle importancia―. Descubrimos ciertos químicos que atacan directamente al factor Don, dañándolo. El prototipo deja al sujeto de pruebas con la posibilidad de recuperarse tras tomar una siesta... pero el producto definitivo busca destruir el factor Don permanentemente.

Shigaraki no se dio cuenta de aquella mentira de Overhaul. Un "juego de química" sonaba algo lógico. Después de todo, no conocía el contenido de la bala como para saber si le era honesto... aunque estaba claro que no se tragaría el cuento así como así.

―Y cual es nuestro objetivo final, preguntas... ―Overhaul miró al techo levemente, tal y como un soñador lo haría―. Hacer resurgir a la Yakuza. Devolverle el lugar que tenia antes de que los asquerosos Dones aparecieran. Venderemos las balas y los potenciadores a los villanos.... y la cura a los héroes. Crearemos un monopolio, haremos crecer nuestra influencia por todo Japón... y luego simplemente cortaremos el suministro de la droga potenciadora y la cura. Dejaremos que todos se destruyan entre sí, y gobernaremos sobre un Japón libre de esa enfermedad que llaman Dones.

―... ―Shigaraki solo miró a un lado. Tal y como pensaba..., sus objetivos no eran el mismo. Era imposible reclutarlos. Sin embargo, esa idea de destruir a los héroes arrebatándoles sus Dones no sonaba tan mal.

Sin duda las balas borradores eran un recurso inmensamente especial. Tal vez ese recurso que necesitaba para recuperarse totalmente de la traición de esos estúpidos villanos.

Cruzaron varias habitaciones. Tomura hecho una vista rápida en las que tenían la puerta abierta...

«¿Una niña...? ¿Qué hace en medio de Yakuzas? ―se preguntó»

Overhaul se dio cuenta de la presencia de Eri. Solamente dirigiéndole la mirada, ella se asustó y volvió a meterse en la habitación.

Chrono paso por al lado de Shigaraki. Se acercó a la puerta de aquella habitación y la cerró. ―Tu mirada divaga mucho...

Shigaraki no se vio intimidado por aquello. ―¿Que hacen unos Yakuza haciendo de niñeros?

―Es mi hija, descuida.

―¿Hija...?

―Es una niña problemática. Hace unos días se escapó y tuve que ir tras ella. Un par de héroes la encontraron antes que yo... pero la devolvieron sin oponer mayor resistencia ―le restó importancia Overhaul―. Continuemos. Quiero mostrarte ciertos documentos que pueden interesarte ―comentó mientras reanudaba su caminata.

Tomura le siguió. «¿Tu hija? ―se preguntó. Aquella niña no tenia el rostro de un niño al ver a su padre. Era mas como cuando observas a tu torturador. No llegó a verla muy bien... pero no tenia pintas de ser bien tratada...»

Tampoco es que le importara. No era de su incumbencia. Aun así, era extraño...

[...]

Shigaraki estaba pensativo. De verdad parecía que Overhaul era completamente honesto con él. Le había mostrado ciertas cosas que le habían dejado pensando, tales como toda una red conceptual de los fabricantes, vendedores y distribuidores de materiales ilícitos en esta ciudad. Eran mas de 43 organizaciones, y solo 1 estaba enlazada con los 8 preceptos de la muerte, por lo que, si esta información caía en las manos de los héroes, se les seria difícil visualizar a los preceptos como una prioridad.

Ahora estaba siendo guiado a la salida. No tenia nada mas que hacer aquí, y los arreglos habían sido cerrados. En una o dos semanas tendría que presentarse ante algunos jefes y allí prestar el nombre de la Liga. No le gustaba la idea, pero ahora estaba atado de pies y manos.

No tenia otra alternativa.

―Estas muy silencioso, Shigaraki Tomura... ―observo Chrono―. ¿No estarás concentrado en aprenderte todo el recorrido para poder infiltrarte, no es así?

Shigaraki se vio molesto. ―No hay nada que me importe menos, peón.

Chrono miró delante. ―Agradece que nuestro jefe halla sido tan hospitalario y receptivo contigo. Incluso te consiguió un alojamiento.

―Eso era parte del trato que arreglamos allá. No le debo nada a nadie... ―Shigaraki rascó levemente su cuello. Tenia ganas de matarlo―. Dime, ¿Ahora que sigue?

―Solo trata de pensar en tu futuro. Podrías intentar reformar tu "Liga de Villanos", si..., pero hay tras opciones, ¿Sabes?

Tomura solo rio. Sabia que ellos tratarían de traerlo a su lado para convertirlo en un peón de Overhaul. Eso no pasaría.

Tras girar a la derecha y encontrar unos escalones en subida, ambos finalmente comenzaron a ascender.

Habían varias cosas raras en todo este asunto. Después de ver algo de la elaboración de esas drogas... la escusa de "un juego de química" ya no funcionaba para él. El factor Don era algo que trascendía la química. Erasedhead, por ejemplo, solo necesitaba de su propio Don para desactivar un Don ajeno, y eso que podía hacerlo a distancia.

Pensando en ese molesto héroe, estaba la posibilidad de que las balas borradoras de Dones, la cura para restablecerlos y las drogas potenciadoras de Dones... tal vez procedían de uno o varios Dones. Aunque no sabia mucho de química ni nada parecido, por lo que tal vez se estaba carcomiendo la cabeza.

Finalmente salieron del lugar. ―Procura no hacer ninguna locura, Shigaraki Tomura. Ambas organizaciones dependen de la otra para lograr sus objetivos ―advirtió Chrono mientras se marchaba nuevamente al bunker.

―Si si. Procuren no molestarme ―tras decir eso, Shigaraki se marchó del lugar. Tenia la dirección de su departamento en un papel, a si que tendría que arreglárselas para encontrarla.

Solo esperaba que no se le haga complicado. Necesitaba un lugar tranquilo para pensar con claridad su siguiente paso. Por que, seamos honestos, Tomura no se quedaría con los Yakuza aunque le traten como de la mejor de las maneras.

Su ambición era ser el próximo Símbolo del Mal, y no le cedería ese puesto a nadie.

Pero ahora... ¿Cuándo convendría deshacerse de los Yakuza? Ciertamente ahora estaba en una buena posición, y debía ganarse su confianza para poder desvelar algunas de las mentiras que le contaron.

Sin embargo, si se tarda mucho... puede que el poder de aquella organización le supere, y no podía permitirse eso.

También si consiguiese tan solo un ejemplar de cualquiera de esas drogas podría llamar la atención del "Doctor", lo que le ahorraría muchos problemas. Aunque no estaba muy seguro si aquel hombre estaba interesado en él, o si siquiera seguía fiel a su maestro...

Nuevamente cayó en lo mismo. Estaba en la mierda. Lo único que podía hacer era pensar en depender de otros, y eso le asqueaba. Iba en contra de todo lo que su maestro le enseñó.

Se suponía que debería generar miedo. Debía de controlar a sus subordinados por medio del temor y el respeto hacia él. Y... bueno, esos traidores terminaron por abandonarlo mientras se reían de él, como si fuesen superiores o algo parecido...

Y ahora negociaba de igual a igual con esos patéticos Yakuza, y pensaba en tácticas que no iban para nada con él para lograr avanzar. Era... patético. Simplemente patético.

Como si fuera un fumador alcanzando un pico de estrés, Shigaraki levantó la mirada y miró a sus alrededores. Necesitaba utilizar a "Padre". Necesitaba poner esa mano sobre su rostro.

Eso o desahogarse con alguien. Pero esa no era una opción. No por ahora...

―... ―se detuvo de repente.

«Esto... esto debe de ser una broma ―pensó, sin poder creer lo que veía. Delante suya, a casi una manzana de distancia, cierto chico se había detenido para refrescarse. Ese chico... lo conocía muy bien...»

Nadie mas que Midoriya podía reconocerlo sin su mascara, por lo que debería de estar bien...

¿Acaso estaban en épocas de pasantías? Eso parecía. Midoriya ya estaba ejerciendo su licencia provisional de héroe...

Comenzó a acercarse con notable rapidez. No podía evitarlo. Necesitaba hacer lo que hizo aquella vez. Una "charla amigable" con aquel pequeño héroe asqueroso.

Había dicho que la próxima vez que lo vería lo asesinaría, y eso mismo planeaba hacer luego de sacarse ciertas cosas de la cabeza.

Sonrió. Asesinarlo. Podría asesinarlo y que se piense que fue una clase de ataque sorpresa. Después de todo en esta ciudad hay muchas organizaciones criminales. ¡El destino se lo había puesto en bandeja!

«Disfruta de ese pequeño jugo de manzana, Midoriya Izuku... ―se arrojó hacia él, tomándolo por completa sorpresa―. ¡Sera el ultimo!»

Izuku, tal vez dado por su experiencia, llegó a voltearse para ver lo que sucedía. Observar la amplia y psicópata sonrisa de Shigaraki Tomura abalanzarse sobre él... le hizo encender todas las alarmas en su cabeza.

Esquivo el primer intento de agarre y contraataco. Tomura rápidamente esquivó aquel golpe que iba directo a su estomago, y intentó tocar a Izuku con sus 5 dedos.

La mano de Shigaraki rozo el rostro de Izuku, quien lo había esquivado por poco. Arrojándose al suelo, Izuku pudo atinar una patada en el rostro a Tomura, quien se alejó levemente.

Aprovechando el mínimo descanso, Izuku apretó los puños y intentó activar el Full Cowl. Oliéndose esto, Shigaraki tomó el cesto de basura que estaba al lado de la maquina de refrescos y se lo arrojó, arruinando por completo su concentración.

Cuando Izuku intentó tomar distancia para activar su Don, Shigaraki tomó una de las latas en el suelo y la arrojó con fuerza, dando al peliverde directamente en la frente.

Sujetó una de sus manos y utilizo 4 de sus dedos en el cuello.

Izuku... había perdido.

―Tomura... ―Izuku sintió el fuerte agarre en su cuello, casi ahogándolo― Shigaraki...

―Ahora, mas que nunca... pienso que esto debe de ser el destino, o mas que una coincidencia ―le sonrió―. ¿Tienes tiempo? Conversemos un poco... Midoriya Izuku.

―Lo sabia... ―Izuku apretó sus puños levemente―. Sentía una presencia siniestra... y aun así...

―¿De verdad? Ya veo ―Shigaraki se acomodó―. Veo que ambos mejoramos en todo este tiempo en el que no nos vimos. Desde que All Might derribó a mi maestro y tú rescataste a Bakugo Katsuki ―Shigaraki comenzó a caminar, guiando a Izuku. Este no era un buen lugar para conversar con tranquilidad―. Supongo que ahora sabes controlar mejor que nunca tu Don. Pero yo también mejoré, ¿Sabes? Solo necesito 3 segundos para reducirte a polvo completamente...

Shigaraki se escondió detrás de unos grandes arbustos que decoraban la entrada de una casa, llevándose a Izuku consigo. Parecían dos enamorados.

Izuku no lograba ordenar sus pensamientos. ¿Qué hacia Shigaraki aquí? ¿Por que volvió a encontrárselo? ¿Qué quería de él? ―¿Que... que haces a-? ―Izuku bajó la mirada al darse cuenta de algo. Ahora que lo pensaba...

Esa pequeña niña de hace unos días, la que esta en el poder de los 8 preceptos de la muerte que investigaba Sir Nighteye...

Shigaraki... ¿Por que caminaba tan a sus anchas por una ciudad con tanto movimiento de otras organizaciones villanas? ¿A caso tenia algo que ver con ellos...?

―Veo que tienes algo que decir ―mencionó Tomura al observar aquella reacción de Izuku―. ¿Compartirás esa información con un viejo amigo, Midoriya?

El chico apretó los dientes. Esta era una gran oportunidad para ayudar. ―Q... Que... ¿Qué relación tienes con los 8 preceptos de la muerte?

Shigaraki se vio enormemente sorprendido. Midoriya había aumentado sus habilidades deductivas en todo este tiempo, cosa que le hizo sonreír de lado. ―¿Por que crees que tengo algo que ver con esos Yakuza desesperados?

―All For One esta en la cárcel ―comenzó, disgustándole desde el inicio―, la Liga no debe de contar con recursos desde que la bodega con Nomus fue tomada... por lo que no tendría sentido que estés paseando casi sin recursos y sólo. Por eso... puede que hallan hecho una clase de tregua o una alianza...

Dio en el maldito clavo. ¿Dónde estaba ese niño que se encontró en el centro comercial? ―Suficiente de mi. ¿Qué tal tú, Midoriya? Estamos en épocas de pasantías, ¿Eh? ¿Alguna cosa que quieras contarme?

Izuku lo observó de reojo. No lo negó. No negó nada de lo que dijo. Eso significa que... si en verdad esta relacionado con los 8 preceptos... ―Como... ―Izuku miró delante―. ¿Cómo esta esa niña...?

Tomura levantó una ceja. ¿Midoriya sabia sobre ella...?

―Es problemática. Hace unos días se escapó y tuve que ir tras ella. Un par de héroes la encontraron antes que yo... pero la devolvieron sin oponer mayor resistencia.

―A si que tú fuiste ese "héroe" ¿Eh? ―Shigaraki apretó un poco su agarre, ahorcando levemente a Izuku―. Dime, Midoriya. ¿Qué esconde esa niña? ¿Algo que quieras decirme?

Izuku apretó los dientes. ―N-No se nada...

―Vamos. Puedes esforzarte mas que eso...

―T-Tu sabes sobre ella. Debes tener mas información que yo... ―Izuku le observó de reojo―. ¿Por que aquí? ¿Por que yo...?

―Como te dije. Esto debe ser mas que una bonita casualidad, Midoriya. Justo daba el caso que quería hablar con alguien...

Izuku tragó saliva. Esta vez no llegará Uraraka para asustarlo y forzarle a marcharse. Mirio no regresaría en varios minutos...

Debía intentar hacer tiempo. Mirio de seguro podría derrotar a Shigaraki logrando daños mínimos...

―Estuviste allí, ¿No? Tu viste a mi maestro... ―antes aquellas palabras, Izuku comenzó a temblar. All For One...―. A juzgar por tu lenguaje corporal diría que no sentiste algo agradable, ¿No? Era un villano mas allá del que te habías enfrentado antes, ¿No? Antes que mí. Antes que Nomu. Antes que Stain. Antes que Muscular...

―...

―A lo que quiero llegar. ¿Crees que era alguien que merecía respeto? ¿Cómo crees que llegó a donde estaba? Un hombre capaz de ganarse un apodo tal como el "Símbolo del Mal"...

―¿Q-Que quieres que diga sobre él? ―Izuku se vio enormemente incomodo y disgustado―. Él... representa todo lo que un héroe debe enfrentar. Un hombre que manipula en base del miedo y la fuerza a las personas que confían en él...

―... ―Tomura miró delante―. Ciertamente no es el mejor hombre, pero hizo lo que ningún héroe hizo por mi... Midoriya. Busco ser como él, y ahora mismo estoy perdido. All Might me lo sacó aun cuando no estaba preparado... y ahora me pregunto que haría él en mi lugar ―lo observó―. ¿Qué crees? ¿Tomaría lo que quiere por la fuerza? ¿Manipularía a quien se interponga? ¿Conversaría las cosas? ¿Simplemente los asesinaría a todos?

Izuku lo observó de reojo. ¿Por que le preguntaba esa clase de cosas a él...? ¿Por que Shigaraki sonaba tan insistente por conseguir una respuesta?

―All For One... es una pésima influencia, Shigaraki ―contestó Izuku con honestidad. Shigaraki sonaba como... alguien perdido, y no podía ignorarlo―. Por que allá hecho algo por ti no significa que merezca tu admiración. Por que... ¿Por que intentar acercarte a él? ¿Por que no intentar hacer algo por ti mismo? ¿Qué harías tú...?

La mirada de Shigaraki quedo estancada en los ojos de Izuku. Esto le produjo una inmensa y casi indescriptible sensación de inseguridad en el peliverde. ¿Qué hacia aconsejando aun villano? ¿Qué hacia hablando mal de su figura a seguir, mas aun cuando su vida cuelga de un hilo...?

Fue un estúpido. Si ahora llega a morir... se lo buscó por intentar ayudar a un asesino...

―Que haría yo... ―replanteo Shigaraki, sorprendiendo a Izuku―. Ciertamente el maestro no es una excelente figura a seguir. ¿Cómo es posible que alguien que carga con el titulo de "Símbolo del Mal", un hombre que por tanto tiempo manipulo este país a su antojo... halla caído por la fuerza de UN solo hombre...? Eso no tiene sentido. Yo... no quiero ser como él...

Izuku lo observó aterrado.

Como si Tomura Shigaraki tuviese una clase de revelación, sonrió enormemente. ―Yo... quiero ser mejor que él. Entonces... ¿Qué debería de hacer para lograrlo...?

Lo primero y lo principal... era leer a las personas. Leer entre líneas. No dejarse engañar.

―Esa niña... es mas de lo que aparenta. ¿No es así, Midoriya?

―... ―Izuku bajó la mirada. Parecía ser el caso...

«Pero no puedo hacer nada así como así. No cuento con el poder para hacerlo. Entonces...» ―Tomura amplio aun mas su sonrisa. Por fin... un plan―. Midoriya. Quiero que me escuches con atención.

Izuku abrió sus ojos lo mas que pudo, enormemente impactado. Shigaraki no solo había aflojado su agarré en su cuello, si no que... le estaba facilitando información sobre los 8 preceptos de la muerte. La ubicación de su base. Los productos que estaban fabricando. La red de distribución que estaban utilizando. Sus planes. Todo...

Todo esto... debía de ser una mentira, ¿No? Esto...

―¡E-Espera! ―gritó Izuku, sorprendiéndole―. ¡¿Por que estas haciendo esto?! ¡¿Quieres llevarnos a una trampa?! ¡¿Quieres distraernos mientras tus aliados escapan?!

―...

―... ―Izuku observó fijamente a Shigaraki.

Este solo sonrió con confianza. ―Lo hago por que odio a los Yakuza, y lo ultimo que quiero es que logren esos planes que tienen. ¿No quieres ayudarme a desbaratarlos, Midoriya? ¿No quieres salvar a esa pequeña luego de habérsela entregado a ese sucio villano?

Izuku miró abajo y apretó los dientes con fuerza.

―Esa pequeña lucia tan asustada, Midoriya... ―le susurraba―. Sus brazos estaban vendados y con algo de sangre fresca. Overhaul supuestamente es su padre, pero ella lo mira como un torturador. ¿Estas bien con eso... "héroe"?

―... ―Izuku asintió―. Lo... lo entiendo. Déjame grabar todo lo que dices. Déjame llevarle toda esa información a Sir Nighteye... ―apretó los labios―, p-por favor...

Shigaraki sonrió con notable satisfacción. Seguramente Midoriya no pudo dormir muy bien desde que eso pasó. Pesadillas, tal vez. Y ahora sonaba tan desesperado...

Así es como debe de sentirse su maestro. Se sentía bien manipular a alguien, mas aun siendo tu enemigo...

―Adelante ―le permitió―. Lo repetiré una vez mas.

Con un leve temblor, Izuku metió su mano libre en el bolsillo donde estaba su celular.

La aplicación de héroes siempre estaba preparada para emergencias como está. Podría lanzar una alerta como lo hizo con Stain, pero...

Si llevaba a hacer eso, y esta información era verdadera... perdería mucho.

Se lo debía a esa niña. Debía confiar...

Sacó el celular y abrió la grabadora de voz. ―A-Adelante.

[...]

Unas pocas horas habían pasado desde aquello. Shigaraki al fin estaba recostado encima de una cama, escuchando por la TV el alboroto que había ya que Shigaraki Tomura se había encontrado con un héroe. Claro que Shigaraki le especifico a Izuku de que no se de a conocer el dato sobre su "regalo"...

Las fichas estaban sobre la mesa. Con toda aquella información, los héroes planearían una redada en poco tiempo. Muy seguramente la ejecutarían dentro de una semana.

Y entre todo el caos... entre la batalla de Héroes y Yakuzas, tomaría todo lo que pudiera. Balas, drogas, dinero. Cualquier cosa serviría.

Cuando la policía confisque todo... las mafias y villanos del lugar seguramente matarían por los limitadísimos productos que estaban bajo el resguardo de Shigaraki Tomura, y allí es donde se recompondría medianamente.

Una semana. Solo debía salir desapercibido una semana.

Apagó la TV y sonrió enormemente. Realmente estaba emocionado.

«Fin del Capitulo»

Ciertamente me sorprende que halla logrado mantener el ritmo XD esto tiene buena pinta.

En el próximo capitulo toca guerra y batalla ;]

Próximo Capitulo:
Capitulo 2: Secuestro.