Empujó la puerta con su cuerpo y entró al gimnasio, no tardó en visualizar a las dos chicas que jugaban básquetbol y alejado de ellas, en una banca estaba Lucas, sonriendo y animando a su novia (o eso se veía).

—Yuqi. —Lisa se acercó a ambas y sonrió cuando la miraron—. Quiero hablar contigo.

—¿Conmigo? Que honor —dijo entre respiros debido al cansancio, luego con una pequeña toalla que Lucas le había arrojado comenzó a limpiar el sudor de su frente y cuello—. ¿Qué necesitas? —se acercó a la mayor junto a SoYeon.

—Sólo quiero saber cómo se conocieron tú y Lucas —la China hizo una expresión de confusión—. Últimamente me estoy interesando mucho en las parejas de la universidad para... Hacer, no lo sé, ¿Competencias? —formó un pequeño gesto con los hombros no tan convencida por lo que había dicho, pero aún así sonrió.

—¿Competencias? —Lisa confirmó—. Me gusta, tienes buenas ideas. —le guiñó el ojo—. Bien, él y yo nos conocimos en secundaria, a finales, pero entrando aquí nos hicimos novios. Él entró a mitad de curso y me pareció muy lindo, tardamos en hablar semanas hasta que finalmente me atreví, no podía dejarlo ir. —una pequeña risa escapó de sus labios.

—Entiendo... —sonrió forzadamente, antes de mirar a la otra chica y suspirar—. SoYeon, ¿Tú no tienes a nadie especial? ¿Algun chico que te interese? Puedo ayudarlos, soy buena en eso. —le pegó de forma suave y ligera con su codo.

—¿Yo? —SoYeon se señaló a si misma y sonrió—. Oye, por supuesto que no, voy en dirección contraria. —le guiñó un ojo a la pelinegra.

Se sorprendió, aunque no lo demostró, simplemente comenzó a reírse junto a ambas para disimular.

SoYeon era lesbiana, ¿SoYeon era lesbiana? Se lo cuestionó un par de veces mientras caminaba por los pasillo dando vueltas por los mismos.

Jennie le tenía miedo a SoYeon en su línea, eso lo había escuchado por parte de JiSoo una vez, ¿Por qué?

—Lisa.

Escuchó a Rosé llamarla, así que alzó su vista a la rubia, quien tomaba la mano de Jennie.

—Estaba con Yuqi... —sonrió—. Y SoYeon. —no hubo expresión o reacción por parte de ambas, así que frunció disimuladamente su ceño—. Les mencioné algo pero no importa.

—¿SoYeon no te dijo o hizo nada? —de repente dijo Rosé—. Cuando llegaste parecía muerta por ti, me sorprende que ahora que estás sin JooHyun a tu lado no se haya aprovechado de eso. —suavemente apretó la mano de su novia cuando sintió la mirada de ésta.

—¿SoYeon? —inhaló profundamente, intentando guardar cualquier comentario o pregunta—. No, no me dijo nada. Quizás ya se resignó. —hizo un ademán con los hombros y sonrió.

Lisa caminó detrás de la castaña y de la rubia cuando éstas se dirigieron al aula. Buscaba respuestas, pero sólo conseguía tener más dudas.

Cuando iba a dar vuelta en un pasillo alguien sujetó su brazo y tapó su boca antes de ser jalada a un salón vacío, tras eso fue empujada a la pizarra y al mismo acorralada con los brazos.

—¿JiSoo? —se sorprendió al verla, aunque también se sintió intimidada y un poco molesta—. ¿Qué te sucede?

No iba a mentir, la cercanía que tenían le gustaba, podía sentir la cálida respiración de JiSoo golpear en sus labios a pesar de que sus rostros estaban un poco alejados.

—Yo pregunto eso, ¿Qué te sucede a ti? —su tono de voz indicaba una clara molestia—. Escucha, soporto tenerte en las mismas clases y en el mismo club, pero no voy a soportar que amenaces a YoungJae, ¿Entendiste? —la jaló otra vez para empujarla a la pared de nueva cuenta, provocando que Lisa perdiera la paciencia.

—¿Por qué me atacas a mí? —tomó las manos ajenas y las apretó intentando apartarla, ya que las ya mencionadas estaban sujetando su camisa—. ¿Al menos te dijo con que lo amenacé? —frunció su ceño—. Primero ve con tu novio y dile que te explique todo, ¿De acuerdo? —finalmente se zafó del agarre y se alejó de la mayor—. Comprueba por ti misma que sólo buscaba protegerte, si vas detrás del gimnasio a la hora de los club sabrás que digo la verdad.

Se dio la vuelta para salir de ahí, si era honesta, sentía que se sofocaba ahí dentro, no sabía de lo que JiSoo era capaz y tampoco quería saberlo, suficiente tenía con verla enojada.

Sin embargo, lo que más le extrañó y confundió fue su propia actitud, lo había arruinado. Ni siquiera sabía qué palabras habían salido de su boca. Continuó caminando y entró al aula, pidiendo una pequeña disculpa por el retraso para que le permitieran pasar, detrás de el entró JiSoo, empujándola un poco, lo cual decidió ignorar, simplemente fue a sentarse.

—¿Qué sucedió? —susurró Jennie a la menor.

—Celos, supongo. —respondió con una sonrisa, se encogió de hombros después.

La clase prosiguió, Lisa podía sentir la mirada de JiSoo sobre ella en cada momento, cosa que le incomodaba, en la otra línea solía ser más discreta, pero ahí parecía que la mayor quería dejar en claro su problema.

También se sentía culpable, JiSoo era una chica grandiosa y no merecía lo de YoungJae, pero tampoco merecía que ella (Lisa) la tratará así sin ninguna "razón" aparente, teniendo en cuenta que JiSoo no sabía lo que ocurría. Sin embargo, ella no tenía derecho de meterse así en su vida, Lisa no era así.

Buscó una manera de volverse a acercar a JiSoo pero la mayor hacía lo posible para evitarla, y hablar con YoungJae no parecía buena idea después de lo que había sucedido en la biblioteca. En la última clase no dejaba de mirar a la pelinegra, ésta parecía impaciente y algo distraída.

Suspiró.

La clase terminó, sin embargo no lo pudo siquiera mirar ya que JiSoo salió lo más rápido que pudo.

—Mierda... —tomó sus cosas y se levantó, pero Jennie sujetó su brazo deteniéndola.

—¿Qué sucede? —la soltó lentamente.

—Un pequeño problema —le sonrió forzosamente—. Nos vemos después, tengo que irme.

Corrió fuera del salón y después corrió por los pasillos en dirección al gimnasio, pero no pudo alcanzar a JiSoo ya que Nicha la jaló del brazo.

—¿Nicha? ¿Qué haces? —frunció su ceño al verla.

—Tenemos que irnos ya. —dijo susurrando y mirando a su alrededor cuidadosamente.

—¿Por qué? Sólo dame unos minutos más, por favor —suavemente se libró del agarre—. Tengo que hacer algo urgente, ¿Si?

Se apartó de la Tailandesa menor para retomar su camino, pero al dar vuelta en el pasillo pudo ver a MiYeon, JooHyun y a si misma, por lo que rápidamente tomó a su mejor amiga de la mano y se escondió en un pequeño armario de limpieza.

Sí, era ella misma, ahí, ahora quizás todos la descubrirían.

***

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