Lincoln Incógnito cayó al suelo, al igual que Tarkus, el resto observo el panorama muy incrédulo, porque algo que parecía imposible al fin sucedió Tarkus pereció, Lincoln Incógnito tenía unos cuantos segundos de vida, observo como el resto se acercaron alrededor de él; al mismo tiempo que podía escuchar las voces de sus padres y sus hermanas, pronto se encontrara con ellos, como un último gesto a sus camaradas decidió despedirse de ellos regándole una gran sonrisa en su rostro y expiro. 

 –Estabas dispuesto a salvar este mundo incluso sacrificando tu propia vida – dijo Lilycoln ente lágrimas. 

 –Desaparece para siempre Tarkus – dijo Lucenda. 

 La adolescente de cabello negro estaba viva, Haiku logro socorrerla antes de que ella fuera impactada al suelo, aunque claro cómo es inmortal no representaría ningún peligro para ella, pero ahora que Tarkus está muerto su poder de inmortalidad se está desvaneciéndose, lanza un último hechizo para convertir el polvo el cuerpo de Tarkus y lo logra, el monstruo se vuelven energía pura que retornara al espacio y la grieta que se formó en el cielo desaparece. 

 –Lo lograste Lucenda, derrotaste a Tarkus – dijo Haiku. 

 –No lo hice yo sola, si no fuera por el sacrifico de Lincoln Incógnito, la muerte de Tarkus no hubiera sido posible– aclaro Lucenda – por favor podía acercarme a él.

 –Por supuesto – respondió Haiku. 

 Una vez que el espíritu la coloco cerca del peliblanco fallecido, noto que ella estaba desapareciendo para siempre. 

 –Llego el momento de partir– dijo Haiku – mi misión esta completada con la muerte de Tarkus. 

 –Gracias por todo Haiku – dijo Lucenda. 

 –No, yo soy la que debería agradecerte a ti por todo – aclaro Haiku – gracias por salvar el universo.

 Y Haiku desapareció, su alma al fin descansa en paz; ahora el resto estaré prestando toda su atención a Lucenda, Lanacoln se acerca a ella y le toma su pulso, y estaba muy bajo su muerte era inminente, Lupa se acerca a su hermana y le toma su mano. 

 –Se que esto debe sonar muy raro para ti, pero es la primera vez que siento dolor y me hace muy feliz, porque por fin puedo experimentar esa sensación que siempre tuve curiosidad– aclaro Lucenda. 

 –Descuida hermanita, te comprendo. 

 Lucenda acerca su vista a Lincoln incógnito y observa que murió con una gran sonrisa en su rostro, y por eso ella también decide sonreír.

 –Gracias Lincoln, salvaste mi universo. 

 –No hay nada que podamos hacer por ella – expuso Lupa muy desconcertada. 

 –Lupa no tiene ninguna herida, su cuerpo esta desgastada pro la batalla que tuvo con Tarkus – aclaro Lanacoln – no hay nada que podamos hacer.

 –Tranquilízate Lupa – dijo Lucenda – a decir verdad, yo también estaba dispuesta a dar mi vida por esta batalla. No siento arrepentimiento alguno, porque al final al monstruo que acabo con toda la humanidad. 

 –No, no, no, tú tienes que vivir, quería que me acompañaras a mi universo, yo siempre te cuidaría porque serías mi hermana menor – dijo Lupa entre lágrimas. 

 –Yo pertenezco aquí, no era el final que esperaba, pero al menos fui feliz en mis últimos días, al conocer y convivir con todos mis hermanos, pude experimentar lo que era vivir en una familia numerosa – gira su mirada para observar a Lincoln Incognito por última vez

 – Gracias por todo, espero que te encuentres en un mejor. 

 –Jamás te olvidaré Lucenda– dijo Lupa. 

 –Ni yo a todos ustedes – dijo muy débilmente Lucenda – si existe la posibilidad de reencarnar, me gustaría que fuera a lado de mis padres y a tu lado Lupa.

 Lucenda expiro con una gran sonrisa en su rostro, todos los demás, lamentaron la muerte de la adolescente de cabello negro, pero de pronto la recién fallecida es despertada por el sonido de una alarma, abre los ojos y de da cuenta que está en su cama, y Lupa estaba a su lado.

 –Hasta que por fin despiertas dormilona – dijo la chica albina – ese despertador lleva rato sonando, estaba dispuesta a destrozarlo y despertarte con agua fría.

 –Lo siento – dijo Lucenda muy soñolienta – he tenido un extraño sueño.

 –Así ¿De qué trataba? –preguntó Lupa. 

 –A decir verdad, no lo recuerdo bien, pero lo poco que puedo decirte es que tu estabas presente en mi sueño, y creo que también  había un monstruo. 

 –Si que suena extraño tu sueño. Bueno levántate de una vez, es aniversario de nuestros padres y tenemos que comprarle un regalo. 

 –Mamá y papá están en casa. 

 –No salieron temprano. 

 Lucenda se asea rápidamente, y baja a la cocina para desayunar mientras que Lupa trata de levantar a su hermana mayor Loth para que las lleven en el automóvil al mall para comprar el obsequio a sus padres. 

 –Vamos Loth, tienes que levantarte, tenemos que comprar el regalo a nuestros padres antes que ellos regresen – dijo Lupa mientras trataba de levantar a su hermana del sofá. 

 –Déjame descansar un poco más, dame 5 minutos y las llevare al mall – dijo Loth. 

 –Cuando cumpla 16 sacare mi licencia de conducir porque eres una inútil – dijo muy frustrada Lupa. 

 Pero justo en ese momento llegan Lincoln y Lucy. Loth al fin se levantan y las tres hermanas abrazan a sus padres por su vigésimo aniversario. 

 –Chicas les tengo una buena noticia – dijo Lincoln muy emocionado – al fin la encontré una editorial para publicar mi libro. 

 –¡Qué bien papá! – dijo Lucenda muy entusiasmada.

 –Estuve leyendo el libro de su padre un poco y es muy interesante su historia – dijo Lucy.

 –¿y de qué trata? – preguntó Lupa. 

 –Es uan novela de ciencia ficción trata de viajes a otros universos – agrego Lincoln – lo titulé "Choque de universos". 

 –Parece una historia interesante, papá – dijo Loth. 

 –Gracias hija – respondió Lincoln. 

 –Puedo leerlo – dijo Lucenda. 

 –Claro que sí. 

 Lincoln le entrega el libro a la menor de sus tres hijas, y ella se lleva a su habitación para leerla.

Continuará...