Nadia y Dylan iban en el carro de su hermano, claro... Cedric iba conduciendo al otro lado de la ciudad, el Estudio "Jazz Up" era el antiguo estudio donde veía  clases Catherine, al llegar miraron la fachada, se veía algo desgastada a pesar de ser un sitio que en un tiempo fue costoso, había perdido aparentemente su valor en el mercado.

- ¿Tienen entonces cámara en los baños? Son unos degenerados.— Dijo Cedric mientras se quitaba los lentes oscuros y miraba el cursi lugar.

- Lo hicieron por protección. Una profesora intentó ahogar a una niña y nadie la pudo ayudar, llego fue la directora por mera casualidad— respondió hundiéndose entre hombros.

- Pero con cámara hubo un caso de intento de violación y nadie dijo nada —dijo Dylan.

- La persona encargada de las cámaras nunca estaba — respondió Nadia mirando todo.

- Vamos— dijo Cedric rompiendo la atmósfera romántica entre su hermana y el muchacho.

Al entrar, miraron varias niñas saltando y calentando, Nadia se fijo en la chica que estaba en recepción, era casi de su edad, ella la miro sorprendida.

- Tu eres Nadia..— dijo emocionada..

- ¿Me conoces? Pregunto confusa arrugando la frente.

– Todos en este mundo te conocemos, bueno en un tiempo atrás era como la leyenda de la danza que desapareció y habían teorías de ti. Yo competí contra ti una vez. No se si me recuerdas—

Nadia la miro tratando de recordarla, pero en ese momento solo estaba pendiente de competir y ser la mejor en la competencia, ser amiga de alguien no estaba en su diccionario.

—la verdad no — respondió sonrojada.

– me lo imagino – dijo decepcionada — pero, ¿que haces aquí? ¿Vas a estudiar en nuestro grupo? Preguntó emocionada.

- Venimos por un asunto legal. Aquí tiene la orden del juez, queremos hablar con su directora. —Dijo Cedric sacando un documento de su maletín Ella lo miro confusa mientras arrugaba la nariz.

- Parece serio. Mmmmm— Tomó el teléfono y presiono un botón

– miss Olga, hay un abogado en recepción, ¿que hago? Tiene una orden de un juez. —ella asintió como respuesta — okey... ¿si? — miró a Cedric asustada —ya viene.—

- Vaya Nadia eres famosa.—Le dijo Dylan en voz baja.

- Me hubieras conocido cuando era niña y hubieras visto como pedían mis autógrafos —dijo sonriendo orgullosa.

- Presumida— Musito Cedric y Nadia lo fulminó con la mirada y Dylan sonrió por eso.

Bajando las escaleras, ellos vieron a una señora de unos 60 años, vestida de estampado floral y el cabello corto peinado hacia arriba de color rojo

- ¿Nadia Miller? ¿Que hace una bailarina retirada en mi despacho?, ¿nos honraras con tu regreso y lo piensas hacer en este estudio? Pregunto ella sonriendo

- No señora Olga, Venimos por temas legales — respondió Nadis sonriendo, Cedric le dio la carta y ella la leyó confundida.

- ¿Es otra demanda? Nosotros le hacemos un examen psicólogo ahora a los profesores, el incidente de María y la niña asustó a todos aquí. Pensé que ya había quedado libre de eso—respondió confundida.

- No es exactamente eso. Hace unos años trabajó el señor Mark aquí tengo entendido que duro poco tiempo, alrededor d dos meses. ¿Usted conoció el motivo de su partida? Pregunto cedric.

- ¿Mark? ¿El que está preso? Si. Se fue por la paga. ¿Por qué lo preguntan?.

- Necesitamos acceso a su biblioteca donde tiene los vídeos de las cámaras. Tengo entendido que debe tener las cintas guardadas por 10 años para ser desechadas. La orden del juez es que necesitamos encontrar un video durante esos dos meses de su estadía aquí —dijo cedric. La señora lo veía confundida.

- ¿Estoy en problemas legales,? Pregunto nerviosa.

- Si nos ayuda...No, solo necesitamos que nos permita buscar esos vídeos — dijo él. Ella mira a la chica de recepción y fue hacia donde ella estaba –¿ tienes la llave del depósito?

- la tiene es la señorita Dianna.— respondió ella.

– vamos- dijo la señora.

Ellos siguieron a la señora hacia una habitación al fondo. Al llegar alli, vieron el sitio lleno de paneles de televisión y delante estaba una señora mayor de unos 70 y algo tejiendo entretenida sin mirar las pantallas, los chicos se vieron confundidos.

- Ella es Diana mi hermana ella se encarga de vigilar. — la señora que estaba frente a las pantallas sonriendo por ver invitados, se detuvo de su tejido para saludarlos.

- Es una .. abuelita— dijo cedric atónito

— No es una abuelita, es hermana. Además, no voy a dejar a cargo de velar a mis niñas por un hombre. – se quejo la señora. Pero para Nadia tenia algo de razón, aunque no era la mejor vigilante —Veamos ustedes dicen que quieren los videos de la época que el señor Mark estuvo acá ¿cierto?. Esas cintas están guardadas al fondo vamos. —Dijo ella quitándole las llaves a la señora y siguiendo hacia el depósito.

Alli se encontraron con decenas de archivos, dossiers y restos de utilería.

— pueden revisar las fechas Dianna adora anotar las fechas en las cajas... por años. Si quieren busco una laptop.. —dijo la señora, tenia una actitud colaboradora a pesar que estaba mas nerviosa que todos los presentes.

- ¿ tienen una laptop en este lugar? Pregunto sorprendido Dylan.

- Es nueva, recién le instalamos el Windows 98.- dijo orgullosa

- Nadia... tienen una década de atraso- Dylan murmuró en voz baja

- No hace falta. Yo tengo acá todo. Dijo CCedric.

Al tomar las cajas se las dividieron al abrirlas quedaron sorprendidos por el contenido.

- Me olvidé decirles que necesitan un reproductor de video cassette, es lo ultimo en el mercado, — agregó la señora sonriendo y Nadia pudo ver a Cedric rechinar los dientes, este se recogió las mangas de la camisa y miró el rostro confundido de los muchachos por nunca haber utilizado un reproductor de cintas.

luego de 5 horas de ver horas de vídeos entre ellos tres encontraron el famoso video. Era tal como lo había descrito Katherine ante el juzgado, la chica de unos 15 años llorando en el fondo baño, se reconocían sus rizos rojizos y el profesor Mark entrando y acorralándola, Nadia se salió de la habitación a tomar aire, recordando los momentos que ella igual había pasado, era lo suficiente fuerte para ella enfrentar esa realidad

-¿estas bien? — pregunto Dylan mientras le ofrecía una bebida fria de la maquina de la sala de espera, Nadia negó con la cabeza.

- todo esta bien, ya estas a salvo... yo te cuidare- dijo abrazándola por detrás, ella acepto el abrazo y suspiro.

- gracias.. — balbuceo mientras se giraba para apoyar su cabeza del pecho del muchacho.

Luego de su hermano clasificar las cintas de seguridad, además de esa habían varias imágenes donde el aparecía dándole nalgadas a las alumnas y acariciando de forma indebida, Nadia había regresado con Dylan a buscar sus cosas y miro a su hermano guardando todo.

- Tenemos las pruebas— Dijo cedric. Mientras guardaba las cintas en una caja.

- ¿Con eso Sera suficiente? Pregunto Dylan.

- El fiscal es mi profesor de derecho penal, con estos vídeos y un poco de su argumentación lograrán convencer al juez.— dijo cedric convencido.

- Al mismo juez que va al club con mi padre y es miembro del mismo partido.... Además estuvieron en la misma logia de la universidad —Dijo Nadia sonriendo mas calmada.

- Ustedes me impresionan, usted pareciera más un abogado penalista como los de las peliculas que uno comercial — bromeó Dylan.

- Si es cierto, deberías dejar la empresa de papá y formar tu propio buffet podrías ser de ayuda para la comunidad más que en la empresa —

- No digo que no me desagrade pero tampoco es algo que me gusta. Hacerlo me hace sentir... comprometido contigo y a la vez culpable. Es algo que no puedo explicar con palabras. Es como una deuda contigo, por haberte descuidado todos esos años por mi mismo egoísmo—. Dijo besando la frente de Nadia y ella lo abrazo con fuerzas, entro La señora Olga con una taza de té en la mano, Nadia se dio cuenta de que estaba nerviosa..

- ¿Entonces cerrarán el estudio? Pregunto aterrada.

- No lo sé, debería usted ponerse en contacto con sus abogados. Pero al no ver las cintas de seguridad ya es algo grave si necesita ayuda legal, le puedo recomendar a alguien.- dijo Cedric, en verdad le daba lastima la señora, se notaba que era alguien que amaba lo que hacia y que por culpa de terceros tenía un peso encima que no le correspondía.

- ¡Demonios, demonios!. Ya superamos a la profesora chiflada y ahora esto.— Dijo ella caminando de lado a otro.

Al salir de allí Nadia sintió como a poco un peso se iba liberando, poco a poco veia una luz al final del túnel, y lo mejor de todo era que no estaba sola.

- Yo iré al juzgado.¿ Necesitan que los lleve? Pregunto cedric.

- Yo estoy bien. Tranquilo yo tomo el bus —Dijo Dylan.

- Yo me quedaré con él.— dijo rapidamente Nadia y Dylan de sonrojo.-

- te aviso cualquier cosa. ‐ luego de despedirse de Cedric Nadia miro avergonzada a Dylan por aquel momento de crisis, pero como esperaba Dylan no se quejo ni la molesto.

Mientras caminaban Dylan la miro y supo que era momento de preguntar ya que la veía calmada.

–¿ estas bien?

- Algo así. Todo ha pasado demasiado rápido. No me imaginaba esto cuando comenzó el año.— respondió nerviosa.

Su mano chocaba con la de ella, sin pensarlo Nadia sostuvo su mano, entrelazando sus dedos.

- Yo.. —

- oye. Tengo que contarte algo. — le interrumpió Nadia — Yo... Me iré luego que termine el juicio —

Él se detuvo y la miro sorprendido.

– Pero..¿ y yo? Digo.. nosotros tus amigos... Kurt y yo... te apoyaremos si es porque tienes miedo de estar sola. Yo.. - dijo nervioso tartamudeando Nadia se coloco frente a él y lo miro sonriendo.

- Agradezco todo lo que han hecho por mi... En especial tu— dijo acariciando su rostro.— Pero.. ¿sabes cuál fue mi sueño? Bailar en una gran compañía. En estos momentos se que no estoy en mi mejor forma y.. no te dije a mi solo me faltaba un año para graduarme unos meses. Este año lo haría, estudiar todo el año en casa me adelantaba mucho. Pero mi mamá para molestarme decidió inscribirme un año atrás. Pero si no hubiera sido por eso, no te hubiera conocido—.

- ¿Le tengo que agradecer entonces? —. Bromeó Dylan.

- Yo.. quiero volver a bailar. Gracias a ti, principalmente quien me motivó a seguir mis sueños fuiste tú. Aquí... no hay lugar para mi, quiero irme. Yo.. —dijo tratando de ser fuerte al ver el rostro de Dylan cambiar y tratando de mantener la sonrisa.

- Te apoyaré—. Respondió sonriendo de forma forzada para evitar mostrar el dolor que sentía por ver que Nadia se iría.

- Supe que me entenderías, aún kurt no lo sabe. Pero, te prometo que siempre estaré escribiéndote... escribiéndoles— se corrigió sonrojada, Dylan acaricio con cariño el rostro de Nadia, como si fuera a romperse, tan delgada perfecta ... para el era la chica mas perfecta que había conocido

– se feliz.. si eres feliz, yo lo soy. ¿A donde irás? Pregunto curioso-

— Al mejor lugar para aprender Ballet, Iré a Rusia, me internare en un campamento. Pero primero tengo que ver ciertos niveles con las más pequeñas de allí espero elevarme a los grados superiores pronto y ser solista... te confieso estoy oxidada, antes entrenaba más de 12 horas. Bailaba sosteniéndome en puntas, girando. Ahora parezco una morsa—. Confesó.

- Eres la morsa más hermosa que he visto entonces. Recuerda despedirte de mis hermanas... ellas te ama— dijo sonriendo y ella asintió, en ocasiones iba a su casa mas que todo por sus hermanas, nunca estaban completamente solos, era este momento uno de los pocos que podían compartir solos en un sitió, siguiendo tomados de las manos.

Para Nadia, Era una difícil decisión dejar esa especie de ¿relación? ¿Flirteo?. Pero era por su salud, sabía que no podía corresponderle como él imaginaría. Ya traía secuelas psicológicas, sabía que antes de estar con Dylan... así sea en una relación más que de una amistad tenía que estar curada, aunque no solo tenía que ser con él, aplicaba Con cualquier persona.

La primera persona que debía amar era a ella misma, ser feliz por su cuenta y aceptarse tal como era, sentía que lo merecía.

El juicio había comenzado, allí estaban esperando los testigos y las victimas que eran solo unas chicas, la menor era una chica del sur de unos 18 que había sido acosada el año pasado, luego seguía Nadia. Se habían sumado 3 chicas más, en un total de 7 contra uno. Primero pasó a declarar Catherine relatando la historia que vivió en esos baños donde fue arrastrada hacia un cubículo, luego las otras chicas y por último Nadia.

Siempre era la misma pregunta por parte de la defensa. 《¿Si eras "acosada" por que no lo dijiste antes? 》

Nadia se sentía furiosa cada vez que repetía la misma frase llena de sarcasmo e ironía a cada una de las chicas, en su turno armada de valor le respondió.

- No lo dije por vergüenza. No es una guerra de poder, no me desperté un día y dije " hoy voy a amenazar a un hombre con una falsa historia " todo esto me pasó, nos paso. A nosotras a cada una de las que estamos aquí que decidimos hablar, no callar... podemos ser sus hijas o sus nietas, yo tuve miedo al igual que ellas. Todas tenemos que perder. No es por que yo tenga dinero o ellas no. No es por que yo crea que soy más que ella. Por qué todas en esta silla fuimos iiguales.‐ Nadia vio en el público a su madre limpiarse las lágrimas, incluida las madres de las otras chicas.

- La defensa descansa.‐ dijo molesto el abogado de Mark.

(...)

- Entonces, usted señor tomas Jhones ¿Conoce a la señorita Miller desde el incidente? Pregunto la defensa.

- Si.—

- Si era así... ¿Por que no denuncio? La supuesta "agresión". Ya que usted era mayor que la chica. ¿O fue usted que lo hizo? ‐ Insinuó la defensa.

- ¿Enserio dice eso? Incluido por las pruebas del video de seguridad que está de evidencia ¿usted defiende ese señor? ¿ cuanto dinero recibe por esta basura? Yo tenía 14 , estaba asustado cualquiera que me hubiera visto en ese entonces hubiera dicho que fui yo, yo le pregunté, le dije que debía hacerlo, pero era su opinión y tenia miedo por sus padres. La apoyé como pude, No podía ayudarla más.— respondió

- Entonces usted fue el culpable y quiere inculpar a mi cliente.

- ¿Que? ¿Usted habla enserio?—

- Esta acusación no tiene validez señor juez.— Dijo el fiscal.

- Señor Bean, a lugar con sus acusaciones. —

- Ya puede sentarse. Si no hay más preguntas por parte del fiscal — Dijo el defensor mirando al fiscal que estaba rojo de la rabia.

- Ya las declaraciones están claras y tenemos el vídeo de seguridad, todos los argumentos que los testigos, no veo porque tenemos que alargar esta pantomima.— respondió el fiscal mirando al jurado.

- Nos daremos un receso de unos 15 minutos, para escuchar el acusado y luego dictar sentencia- concluyo el juez. 

(...)

Todos se levantaron nerviosos, unos mas que otros Cedric se acercó a Nadia darle ánimos tomándola del brazo.

– ya el juicio esta de nuestro lado. Tan solo míralo esta asqueado, Ganaremos el caso te lo prometo. — aseguró.

- ¿Estas seguro? –

- te lo aseguro. —

(...)

Al regresar, al estrado llamaron a el señor Mark a dar su declaración.

- ¿Juras decir la verdad?—

- Si.— respondió mirando con picardía a las mujeres.

- Veamos, ya todas las pruebas están en la mesa, todos saben la verdad. ¿Como te declaras? preguntó el fiscal.

- Claro que inocente.- respondió sonriendo. Nadia sintió su mirada posarse sobre ella y esbozar una sonrisa de triunfo.

Luego de varias preguntas rutinarias y el asco en la habitación el juez se levantó y miro a la defensa.

- Con esto, mañana dictaremos sentencia a las 10 a.m..—dijo el juez de mala gana

Todos salieron ansiosos esperando el resultado.

- Ya sabemos cuál será el resultado, no te preocupes— dijo cedric y Nadia observo a la pelirroja acercarse a ella.

- Gracias por lo que has hecho. Sin ti, todo esto no hubiera sido posible. Sea como sea el resultado. Gracias.—Dijo ella abrazándola, Cedric carraspeo la garganta sorprendido al ver que su hermana se abrazaba con una chica que casi no conocía, en verdad la terapia la ayudaba.

- Despidiéndose de varias chicas se dirigieron hacia la salida, Kurt la intercedió curioso, por fin podían hablar "tranquilos"

—¿ te vas a ir mañana? Pregunto kurt y ella sonrió.

- No, el fin de semana, tengo que terminar de arreglar el equipaje.— respondió.

—Yo te voy a extrañar. Todos sabemos que el resultado de este juicio es a tu favor. No lo dudo ni nadie aquí lo hace— Nadia conmovida lo abrazó sonriendo

- Gracias por todo. Yo te extrañe, te extrañaré... lo siento— dijo llorando y Kurt sonrió secándole las lagrimas. Dylan fue a abrazarla y sonrieron, mas que haber sido su pasado y su presente, no estaba sola... sea cual sea el resultado sentía el apoyo de todos. Nunca antes había sentido tanto apoyo desde que decidió abrirse al mundo.