Oda a la incondicionalidad.

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

- tema: pérdida animal -

Dicen que los animales son efímeros dados su biología que no permite una expectativa mayor, pero aún así, después de su partida siguen existiendo en nuestros corazones para toda la vida.

La muerte. Alguna vez leí acerca de ella en un libro de texto académico mientras me preparaba para mi comienzo educativo de grado. Decía algo como; "es un atributo intrínseco de la vida", en otras palabras, es propio de la vida.

En ese entonces lo sentí. Lo sentí muy dentro de mi porque sabía el desenlace de ese ser de unos 12 años que me había estado acompañando desde mis 6 años.

Mi amigo más sincero, el incondicional, mi compañero,

Mi primer perro.

Compartimos tantas cosas, juegos, mi infancia se vio marcada por su compañía. Él siempre estaba ahí. Dónde quiera que vaya en mi hogar, él siempre estaría ahí.

Nunca piensas en su ausencia, hasta que quizás ocurre. Un ejemplo de ello, me remite al día que se perdió por las tormentas que tanto le asustaban me sentí devastada, porque ya entrada en mi adolescencia, sentía mi corazón incompleto. No tener su presencia ahí, me hacía sentir un vacío.

Entonces, me prometí que lo disfrutaría tanto si llegaba a encontrarlo nuevamente, que así pasó.

Allí me volví consciente de algo: ¿Y cuando se vaya en realidad? ¿Qué haré?

Siquiera, ¿Podría volver a tener ese amor por un animal de esa manera?

Me volví más viciosa acerca de ese asunto. De hecho, le tenía miedo al futuro. No sabía que quería hacer de mi vida cuando el resto ya lo tenía decidido. Era aceptar que no existe la eternidad misma de las cosas.

Experimentar el dolor de perder a alguien había sido algo que me ocurrió años atrás. Quizás sería demasiado joven para recordarlo y sentirlo tan fuertemente como me ocurriría hoy en día.

Y llegó ese momento que marcó a mucha gente, el memorable 2020. Me incluyo, me marcó totalmente en cosas positivas, y otras muy negativas.

Habías enfermado, y yo no sabía que hacer de mi vida, cuando la edad para seguir adelante estaba a la vuelta de la esquina.

Me dolía verte. No por lo que te ocurriera, sino por la progresión de la misma, a pasos agigantados y sin detenimiento. Me dolía.

Dolía no saber que hacer. A quién llamar, a quién acudir, incluso, a quién debía rezarle para obtener una mano la cual alcanzar y tomar para salir de es pozo.

Entonces apareció esa luz que me dio un respiro de aire fresco. A quién solo haré mención aquí, pero que es el ser de tu misma especie, que me alegra mis días.

« Bonita »

Quizás sea irrelevante, ya que un clavo no saca a otro y por ende, un perro no arregla tus problemas. Claro que no, sin embargo, fue el punto de partida.

Ambos seres que le daban alegría a mi vida me envalentonaron entre las miradas desaprobatorias y los cuestionamientos porque el aire es gratis.

Tomé las riendas de mi futuro y me decidí que quería hacer; quizás no pude ayudarte, no pude identificar muchas cosas, y lo lamenté terriblemente ese 22 de marzo, cuando diste tu último suspiro frente a mis ojos. Incluso si fueron días grises, luego salió el Sol. Y ahora lo veo diferente. Es un aprendizaje, es un pasaje por la vida que ha tenido su propia voz y que ha dado información acerca de algo que quizás, le ocurra a alguien más.

Y en la Medicina Veterinaria, todo ha de ser un aprendizaje constante; el mundo avanza, las enfermedades cambian y la ciencia investiga siempre sobre ellas. Por ello me decidí en contribuir a qué muchos más como tú, tengan una mano extendida a hacer lo que quizás, no pudieron contigo.

Hoy, escribo sobre esto. Algo que nunca pude hacer. No tenía el valor. Tu pérdida me significó una frustración importante en mi vida que fue sanando con el correr de estos tres años que ya han pasado.

Te fuiste, llevándote contigo muchos recuerdos, pero en los míos sigues viviendo y en mi corazón siempre te tendré un lugar especial. No solo por haber sido mi compañía incondicional durante tu vida, sino por haber inspirado mi vocación.

El sueño que persigo y que me encamina al futuro.

☄️☄️☄️

Dedicatoria:

Bueno, luego de leerlo ya verán que quizás está claro a quien va dedicado. Por siempre en mi corazón, mi compañero perruno, Negrito.

Y me queda agradecerles si han llegado hasta aquí, porque este escrito, fuera de la nostalgia y melancolía, son los sentimientos que siempre tuve guardados entre tantos amor y desamores ʕ⁠´⁠•⁠ ⁠ᴥ⁠•̥⁠'⁠ʔ

Gracias por leer ❤️

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro