|| Día 24 ||

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—¿Por qué no contestaste ayer?—pregunto molesto el pelirrojo cruzado de brazos.

Estaba...—la mirada del rubio fue hacia su osito Freddy quien lo miraba atento—ocupado.

Lo último hizo sonrojar tiernamente al pequeño uke.

Con tal solo recordar lo que pasó ayer se le hacía mierda el estómago lleno de mariposas qleras.

O tal vez tenía hambre.

—¿Haciendo que...?—Foxy lo miró pícaro haciendo sonrojar al rubio. Ahora hay dos ositos sonrojados en la habitación.

Hasta ahora no había pensado en hacer "eso" con el castaño.

Y no podría hacerlo, la vergüenza le ganaba.
Además, ni siquiera le pidió ser su enamorado.

Rápidamente quito todas esas ideas "absurdas" de su cabeza y se concentró en responderle al mayor en altura de la sala.

Se encontraban en el sillón café, bien cómodos sentados y conversando mientras que el castaño se encontraba en la cocina, cerca de la ubicación del pelirrojo y el rubio.

Cosas.—aclaró el rubio con firmeza, disimulando que no había pasado nada.

El contrario frunció el ceño y observó el reloj que había alado de el en la mesa.

Ya es tarde, me voy.—se levantó el pelirrojo—¡Hasta siempre chicos!

Dicho esto se fue dejando al castaño y al rubio solos nuevamente.

—Y-yo me voy a dormir...—Freddy le sonrió y se fue hacia su habitación demasiado incómodo.

Aún le daba vergüenza ver los ojos grises de Golden, pues ayer los había visto muy de cerca.

Golden imito la acción del menor yéndose a su propia habitación.
Se alistó para dormir y finalmente se recostó en su cama.

Estaba apunto de cerrar los ojos y dormir, pero un ruido impidió hacerlo.

Pensó que sería Freddy, levantándose para ir al baño o a la cocina. Pero a la vez sentía que no era así.

Se levanto de su cama y en silencio salió de su habitación.

—¡Hey!—se sorprendió el rubio al ver una persona totalmente desconocido para el, y estaba mirando un cuadro en donde se encontraban Freddy y Golden sonriendo. Una foto se había sido tomada hace días.

La falta de luz no dejaba ver con claridad al tipo que al escuchar al rubio emprendió su huída.

El cantante intento atraparlo persiguiéndolo hasta la puerta principal, pero ya era demasiado tarde.
Había escapado.

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