Un baile especial

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-  Hola chicos. Cuanto tiempo sin verlos, pensaba que ya se habían olvidado de nosotros. Bueno, como imaginarán han sucedido muchas cosas en estos años. Nuestras hermanas mayores se han ido marchando, unas a vivir por su cuenta, otras de gira por el mundo con su grupo o a un internado donde están estudiado los cómicos más prestigiosos.

- Lynn... ¿No se te pudo enganchar alguna otra costumbre de nuestro hermano?... Suspiro...

- !Lucy¡ ¿Cuantas veces he de decirte que no entres en mi cuarto?

- ...Solo venia a avisarte... el desayuno ya esta listo y todos estamos abajo. Solo faltas tu...

- Bien, ahora bajo.

Tras la interrupción, Lucy sale de la antigua habitación de Lori y Leni. La cual ahora esta ocupada por Lynn. Ante la partida de tantos miembros de la familia, ahora cada uno tiene su propio cuarto, excepto por las gemelas que se rehusaron a estar en distintas habitaciones. La mayor de la casa se vistió deprisa y bajó a desayunar con el resto de la familia.

- ¡Buenos dias Lynn!

- Ya era hora cabeza de pelota. Tenemos hambre.

- ... Lincoln nos ha hecho tortitas... me pido el sirope de sangre...

- Jajaja. No es sangre, Lucy. Es fresa.

- ...Lo se Lily... pero tiene el mismo color...

En unos momentos el albino empezó a repartir las tortitas entre las presentes de forma alegre y cuidadosa. Cada una esperaba con impaciencia su turno, pues cuando Lincoln hacia sus tortitas, estas tenian un sabor mejor aun que las de papá.

- Bueno, tercer dia sin nuestros padres y de momento la casa no se ha venido abajo. Podemos estar orgullosos.

- Eso lo diras por ti Lincoln. Yo ya he tenido que desatascar el baño 2 veces y hoy solo nos hemos despertado.

- Vamosh Lana. Yo te preshto mi ayuda para lash reparacionesh.

- !Eso es peor¡

La fontanera de la familia se encontraba algo molesta, no por el hecho de ser la encargada de reparar las cosas en la casa sino porque los ronquidos de su gemela no la han dejado dormir mucho.

- ¡¡EEHHH!! No es justo. ¿Por que a Lynn le pones dos mas que al resto?

- Lynn es la mayor y tiene su ultimo partido de la temporada, debe alimentarse bien... ¡AUCH!

Un puñetazo en su brazo consiguió que dejase de hablar, la responsable de la casa le habia dado uno de sus toques amistosos.

- Gracias apestoso. En una semana terminaremos las clases y aun estaremos un par de semanas sin papá y mamá. Han ahorrado mucho para ese viaje al rededor del mundo y debemos demostrarles que podemos cuidarnos solas.

Tras desayunar, cada uno se dirigió a sus correspondientes centros de estudio. A nuestra querida deportista, el dia se le presentaba como cualquier otro al principio. Las primeras clases pasaron sin mucho que contar y a la hora del almuerzo se reunió con sus amigas para comer.

- Hola chicas. ¿De que hablan?

- ¡Hola Lynn! Hablabamos del baile. ¿Tu ya tienes tu vestido Polly?

- Si. El mio va a juego con el de mi pareja. Son de la tienda de su padre. ¿Y tu?

- Yo aun no he pensado en ello - la mirada de Lynn parecia algo triste y se desviaba a la mesa donde Francisco se sentaba - Aun no me lo ha pedido nadie...

- Hola pateticas apestosas, ¿a caso estan hablando del baile? - Un achica de cabellera morena y traje de animadora se acercó a la mesa. Tenia los mismos aires de grandeza de Lola, pero su caracter era mucho peor.

- Aaaahhh... Amanda... Dejanos tranquilas.

- Si, Margo tiene razón. Largate con tus pompones a otra parte.

- ¿¿A CASO UN PAR DE MARIMACHAS ME DICEN LO QUE DEBO HACER?? JAJAJAJA. No se quien se habrá atrevido a invitarlas al baile, pero seguro que hacen juego con su nariz de patata o con esa cabeza estirada... y no olvidemos a la... - no pudo terminar la frase pues fue interrumpida por un chico que se acercó a la mesa.

- !Oye Lynn¡ Si tienes un momento... ¿podriamos charlar fuera?

Las palabras de discusión de las chicas se evaporaron en el aire al ver que el que habia hablado era Francisco, el mas popular del club de football masculino. Nuestra deportista favorita se ruborizó levemente mientras se levantaba con las piernas que parecia que habia corrido una maratón de 8 horas.

- S-Si, c-claro. Va- vamos.

Al salir la condujo a un lateral del edificio principal donde no había nadie. Nuestra joven deportista se encontraba temblando de emoción, aquel lugar era conocido por haber sido el lugar de incontables confesiones.

- Bueno... Me han dicho que aún no tienes pareja para el baile. - el joven se rascaba la nuca mientras se sentaba en el suelo.

- N-No, aún nadie me lo ha pedido.

Lynn se acomodó también en el suelo aunque no muy pegada a él. Se sentía nerviosa y notaba como su voz se quebraba ante la expectación. Su rostro se cubría poco a poco de un tono carmín.

- Yo... Creo que te gusto, ¿Verdad?

- Bu-Bueno, s-si. Tu me... Tu...

La explosión de rojo en su cara la estaba dejando sin habla, pero él la interrumpió en aquel momento.

- ¿Has besado alguna vez a alguien?

- ¡N-NO! Bueno... Y-yo... Nunca he tenido pareja y... A la familia no cuen...

- ¿Te gustaría besarme? - interrumpiendo sus balbuceos nuevamente.

Con aquélla pregunta la cabeza de Lynn dejó de pensar. Sí, lo quería, pero la vergüenza estaba luchando en su contra y ambos allí en el suelo sentados, uno al lado de otro, a solas. El chico que le gustaba le estaba proponiendo que se besasen.

- Bu-Bueno, s-si. Pero no creo que lo hiciese bien.

- Tranquila, yo te enseño. Sólo cierra los ojos y pon los labios así. Un poco abiertos, como si fueses a beber agua.

La emoción hacia que el corazón de la chica latiese a toda velocidad. Ni en los entrenamientos más intensos había notado jamás el que su corazón latiese así. Apoyó sus manos en el suelo acercándose levemente al chico y cerró sus ojos. Su boca lista para sentir por primera vez el sabor de los labios de Francisco.

- Bien, así. Un momentito...

Aquel momento de espera se le hacía eterno a la deportista, pero lo que terminó con la espera no fue el tacto de los labios de su acompañante sino un fogonazo de luz de un lado. Esto hizo que Lynn abriese los ojos de golpe solo para encontrarse con el miembro erecto del chico acercándose a sus labios. Su reacción fue instantánea, se apartó de golpe.

- ¡JAJAJA! Te dije que la grasienta apestosa caería de cuatro patas.

- Aaaaahhh... Amanda, te has precipitado. Aún no había llegado a besarmela. Jajaja.

- ¿A-Amanda? ¿Fe-Fernando? ¿Que significa todo esto?

- Menuda patética perdedora estás hecha Loud, ¿de verdad creías que alguien como mi novio se interesaría por una pestilente como tú?

- Ha sido genial cariño, ¿has visto la cara que ha puesto? Tenías razón, es completamente patética.

Mientras ambos se unían en un profundo beso, Lynn no pudo hacer más que correr intentando contener las lágrimas de sus ojos. La siguiente hora de clase se la pasaria en el baño llorando por la crueldad de esas personas, pero todo aquello aún no habia acabado. Pues al regresar para su ultima clase, no pudo evitar darse cuenta como todos la miraban y reian por lo bajo, Margo en su clase la mriaba con cara de lastima y se levantaba para ir con ella cuando una voz se alzó aprovechando que el profesor aun no habia llegado.

- !Miren, es la apestosa grasienta¡ Aunque ahora ya sabemos que a esa marimacho le gusta una buena zanahoria.

La clase se llenó de carcajadas con el comentario de Amanda. Lynn quedó palida al observar por encima del hombro de un compañero como una foto donde salia ella a punto de besar un miembro viril se habia compartido por los celulares de todos. Las risas que mas fuerte sonaban eran las de Francisco y Amanda. Margo se apresuró a llegar a su lado para intentar consolarla, pero era tarde.

En el interior de la deportista algo reventó, como el labio de Amanda a los pocos segundos. Esta respondió con una patada, pero solo logró que Lynn le agarrase del pelo y de un fuerte tirón le arrancase un buen mechón de pelo llevandose uno de los aretes que tenia con ella. La ira se habia apoderado de ella y no tardó en saltar encima de Francisco propinandole fuertes golpes, tan obcecada estaba que cuando una mano la tocó por la espalda solo reaccionó lanzando su puño y golpeando la entrepierna de su profesor.

********

La puerta de la casa Loud se abría dejando pasar a una desanimada deportista. El director finalmente solo la habia expulsado tres dias al comprobar que la fotografia habia sido compartida desde el telefono de Amanda, la cual fue expulsada del centro en el acto. Pero al no salir ninguna parte "reconocible" de Francisco en la foto, este se libró. Aunque a Lynn le cayeron los dias de expulsión al lesionarle el brazo y la cara en su ataque de ira. La expulsión tambien hacia que no pudiese participar en el ultimo partido de la temporada.

La casa estaba silenciosa, siempre que regresaba sus hermanas pequeñas ya habian regresado de sus clubs y estaban haciendo jaleo, peor ahora que llegaba antes aquel silencio la incomodaba.

Subió las escaleras, aun podia apoyarse en su hermano. Nunca se habia unido a ningún club y seguro que estaria arriba leyendo alguno de sus comics o jugando un videojuego. El hablar o pelearse con el siempre la ponia de buen humor, pero al llegar a la puerta del chico se quedó parada al escuchar unas voces que salian de su interior.

- ¿Seguro que esto esta bien Linky?

- Tranquila Lily, tu solo haz lo que yo te digo. Mira, pon la boca así como si fueras a beber...

¿Lily? ¿Lincoln? ¿Aquellas palabras? La ira volvia a apoderarse de Lynn la cual abrió la puerta de golpe con una de sus patadas mas fuertes. ¿Que creia Lincoln que estaba haciendo con la menor de sus hermanas? Pensaba darle tal paliza que lo dejaria tieso.

- ... y ves soltando el aire poco a poco y a la ve... ¡¡AAAAHHH!!!

- ¿!¿QUE SE SUPONE QUE HACEN?¡?

- *fiiiiiuuuu* ...¡¡AAAAHHH!! Lynn ¿Que ocurre?

Al entrar en el cuarto del albino, el chico estaba sentado en la cama mientras que la pequeña Lily se encontraba sentada en la silla del escritorio, ambos la miraban sobresaltados sin entender que pasaba.

- Lincoln me estaba enseñado a silvar.

- ¿Tu no tenias tu ultimo partido?

La deportista se sonrojó en el acto. ¿Como podia haber pensado aquello del buenazo de su hermano?

- Eeehhh... Bueno, mejor. Yo... *aish* me han expulsado por pelearme y no puedo jugar el ultimo partido. Perdonen.

El peliblanco, viendo los restos de haber llorado en el rostro de su hermana se levantó de la cama para acercarse a su hermanita pequeña y susurrarle al oido.

- Ves a ver la televisión mientras hablo con Lynn, luego seguimos practicando.

- Vale, gracias Lincoln.

Tras marcharse la pequeña, el albino tomó por los hombros a su hermana mayor y la hizo sentarse en la cama, el se sentó a su lado despues de cerrar nuevamente la puerta, aunque Lana tendria que volver a repararla.

- ¿Que es lo que ha pasado Lynn? Cuentame porque te has peleado.

- Perdona, yo... os escuché a traves de la puerta y... no se que se me pasó por la cabeza.

- Bueno, por lo menos ha sido la puerta la que ha pagado tu enfado y no yo. Jejeje.

La deportista le contó a su confidente todo lo ocurrido en el instituto, la garganta se le volvia a cerrar y las lagrimas brotaban de sus ojos nuevamente. El albino la abrazó con fuerza, su hermana volvia a ser victima del bulling tal y como pasó en su primer año, solo que esta vez habian ido demasiado lejos. No encontraba palabras para consolarla, simplemente la abrazaba y dejada que la chica descargase sus lagrimas contra su pecho.

Cuando el resto de hermanas llegaron, como es habitual, la curiosidad pudo con ellas y querian saber que le pasaba a la mayor de la casa, pues aunque habia dejado de llorar, no habia tenido tiempo de asearse y su cara mostraba las marcas de haber llorado durante mucho tiempo.

- Tranquilas, no es nada grave. Emmm... a Lynn... ah... A Lynn la han rechazado para ir al baile y a la pobre le ha sentado muy mal.

Lynn miró brevemente a su hermano, pero comprendió rapido que era mejor que las pequeñas pensasen eso en vez de saber lo que habia pasado en verdad. Despues de todo, no era mentira, solo una pequeña parte de la verdad.

- Bueno, hoy me toca cocinar. Os haré un banquete digno de una princesa, pero necesitaré la ayuda de mi fiel mayordomo Linkington.

- Si, claro. Como si alguna vez cocinases tu. Seguro le haras cocinar todo a Lincoln.

- ¡Calla Lana! Para eso estan los mayordomos. Mpffff.

La cena fue bastante tranquila, salvo por un comentario de Lucy.

- ... Lynn... he pensado, que siempre puedes ir al baile con Lincoln... 

- Pffffff... *coff* *coff* ¿Estas loca? ¿Sabes que dirian de mi si me ven que voy al baile con mi hermano?

- Pues yo creo que es buena idea. Despues de todo solo Polly Pain me conoce, para el resto seria un desconocido. Pero claro, la decisión es tuya.

- ¿¿HABLAS EN SERIO??

- Vamosh unidad fraternal, no te hagash la sorprendida. Todas shabemos que de pequeños, Lincoln y tu jugabais a besharos.

-!!LISA¡¡
-¡¡LISA!! - Ambos hermanos reaccionaron a la vez con sus rotros algo sonrojados.

- ¿Entonces a parte de a silvar, Lincoln tambien puede enseñarme como se dan los besos? - la mas pequeña mostraba unos ojos brillantes mientra hacia esa pregunta.

- !!JAMAS¡¡ - en esta ocasión fue la voz de todos al unisono lo que resonó en el comedor mientras todos miraban indignados a Lily, la cual se enfurruñó al instante.

- Jo, nunca dejan que me divierta.

Tras la cena, Lana y Lucy se pusieron a fregar los platos mientras el resto sacaba la basura o recogia la mesa. Tras ver un rato la televisión y lavarse los dientes, cada uno se fue a dormir a su cuarto. Pero la mayor de todas no podia dormir, el dia que habia tenido habia sido horrible y aunque Lincoln habia conseguido que se relajase aun no podia dejar de sentir una punzada en su corazón.

*TOC* * TOC*

Extrañamente alguien llamó a su puerta. Al abrirla encontró al peliblanco al otro lado con mirada preocupada.

- ¿Link? ¿Te encuentras bien?

- ¿Yo? Si eres tu la que no ha dejado de lanzar la pelota contra mi pared desde hace 2 horas.

En ese momento la deportista se dio cuenta de la pelota de baseball que tenia en la mano. Ni se habia dado cuenta de que uno de sus viejos habitos habia regresado. El chico se frotó su codo con preocupación.

- Sigues pensando en ese par de cretinos, ¿verdad?

- Bueno, de todo un poco en verdad.

- ¿Quieres que hablemos un poco mas?

- Gracias Lincoln, pero necesito mas un hombro sobre el que llorar. - comentaba la deportista con una triste sonrisa en su rostro.

Ambos entraron en el cuarto de la deportista y pasaron un buen rato hablando. Al cabo de unas horas Lynn se despertó con los ojos enrojecidos, habia vuelto a romper en llanto, pero algo era diferente, la almohada era mas pequeña y dura que otras veces. Seguramente la habia vuelto a tirar a sus pies y estaba de nuevo durmiendo encima del bate.

Bajó su mano para tomar la esquiva almohada, pero esta dió con lo que le pareció en estrecho mango de su bate, esto le extrañó. ¿Como podia estar el mango tan abajo si tenia la baeza apoyada en él? Entonces se dió  cuenta que lo que habia agarrado empezaba a hincharse y hacerse mas grande.

- Mmmngggg... zzzz... 

Aquel sonido sobresaltó a la deportista, no estaba durmiendo sobre su bate, sino sobre el brazo de Lincoln que habia emitido un sonido cuando ella habia tomado cierta parte de su cuerpo que reaccionó con vida propia. La chica soltó de inmediato lo que tenia en la mano y se ruborizó al instante al darse cuenta de lo que habia hecho, por suerte Lincoln no parecia haberse despertado.

Tras charlar y llorar y volver a charlar, parece que finalmente se quedó dormida sobre el brazo del chico y este para no despertarla se puso a dormir a su lado. Entonces empezó a pensar en lo que su hermana Lucy habia dicho durante la cena, sobre llevarlo a él al baile y sobre las cosas que hacian de pequeños.

- Tu siempre has estado ahi para apoyarme, siempre que puedes nos proteges y me has ayudado muchas veces tanto a entrenar como a probar cosas nuevas... ¿Por que no debes haber aceptado el salir con las chicas que te lo han pedido? Como esa Jordan o su amiga Cookie... ¿A caso esperas a alguien especial Lincoln? ¿Quien es esa persona?

- Zzz... Si... Lynn... Zzzzz.... Mgnmgn... Vale...

Sabia muy bien que eso solo habia sido un reflejo del chico al hablar ella en voz alta, pero algo en su interión pareció encontrar un remanso de paz que habia necesitado durante todo el dia. Algo vergonzosa, se acercó al rostro de su hermano y deposito en sus labios un pequeño beso, como los que se daban debajo de la mesa de la cocina cuando tenia 12 años y el 10. Tras esto se acomodó de nuevo en el brazo del albino y se durmió nuevamente, pero esta vez con una sonrisa.

********

La semana fue pasando sin muchos problemas, durante el tiempo que Lynn se encontraba expulsada aprovechó el estar sola para revisar en las cajas de recuerdos viejos del atico. Tambien encontró alguna caja con la antigua ropa de Leni y Luna, le dio por provarse algunas prendas.

- Menuda suerte la mia... Los de Leni, me quedan grandes por delante ¿Como puede caminar por ahi con ese par de sacos de carne colgando?

Probo otra serie de prendas de su otra hermana.

- Los de Luna no son mejores, estos aprietan mucho. Jejeje. La proxima vez le puedo decir que la gané en otra cosa mas. En fin, el estilo rockero tamppoco es lo mio.

La chica s emiró al gran espejo qe habia en el atico y se quedó pensativa con una cara un tanto triste.

- Tampoco es como si buscase algo para ir a ese tonto baile. Si de verdad quisiese ir, le tendria que pedir consejo a Lola y seguro que se querra cobrar el favor. - una idea se le pasó por la cabeza al mencionar a sus hermanas - Mmmm... ¿y si le tomo uno prestado a Lucy?

La joven deprotista bajó y accedió al lugubre cuarto de su gotica hermanita. Casi todos sus vestidos eran negros o muy oscuros, pero habia uno que le llamó la atención. Uno de tono rojizo oscuro casi morado, este venia con un cinturón negro con una calavera. 

- Que, que ¿¿¿¿QUEEEEEE???? ¿Como puede ser que el vestido de Lucy tambien me quede grande por delante? Si tiene 5 años menos que yo... *aish* esto es patetico... - se mira al espejo - YO soy patetica... Mirame, aqui, probandome un vestido para un baile al que jamas asistiré, viendo como mi hermana pequeña me ha adelantado con sus atributos y con un cinturón de calavera que parece que me dice "muerte".

- ...suspiro... Si, ese cinturón no te queda bien... deja que mire si Lola tiene un cinturon-faja rojo...

- ¡¡¡AAAAHHHH!!! ¿Lu-Lucy? ¿Cuanto llevas ahi?

- ... Desde que empezaste a probate el vestido de Haiku... nos intercambiamos vestidos al despedirnos cuando se mudó de Royal Woods... Mmmm... Si, aqui esta... 

La chica gotica entró de nuevo a su cuarto y le tendió la prenda que habia tomado del cuarto de las gemelas. La avergonzada deportista que habia sido descubierta no podia ahora rechazar el ofrecimiento de su hermanita. Cambió el cinturón y ambas reconocieron que asi se veia mucho mejor, incluso abriendo un poco más el escote, conseguia que no se notase que de aquella zona le venia algo amplio.

- Vaya, pues asi no me veo nada mal, ¿verdad?

- ...Mmmm... aun pienso que falta algo... ¿Quieres probar con un colgante de murcielagos?

- Dejate de murcielagos hermanita, yo se lo que necesita. Brincos, quitaselo.

Ante la sorpresa de sus dos hermanas, Lana habia entrado y su fiel mascota, siguiendo las instrucciones de la plomera de la casa, lanzó su lengua y en un rapido movimiento se deshizo de la goma que aguantaba la cola de caballo de la deportista. Tras acomodar un poco el pelo, Lynn se encontraba muy a gusto con aquella pinta que tenia.

No tardó en unirse Lola, la cual le aplicó un suave toque de maquillaje y unos pendientes que conjuntaba. Lisa al llegar permaneciá impasiva como siempre, solo sacó su cuaderno y anotó varias cosas en el. La mayoria ya sabian que la joven cientifica no se sentiria impresionada por aquellos cambios en la deportista, a la pequeña genio no le interesaba lo mas minimo aquel ritual. Pero la cara de todos cambió cuando tras unos minutos esta regresó de su habitación con algo entre las manos.

- Unidad fraternal reshponsable de la casa, creo que he realizado los calculosh correctos y he hecho que mi maquina fabricase esto. 

- ¡¡YO QUIERO PROBARMELOS!!

Con una velocidad sorprendente, Lola arrebató de las manos de la joven genio un par de preciosos zapatos de tacón bajo de color rojo oscuro. Pero al poner el pie en el primero, esta sacudió su pierna hasta desprenderse del calzado. Lynn entonces tomó los zapatos que habia traido su hermanita.

- !!UGH¡¡ Lisa, creo que a esos zapatos les pasa algo...

- Ciertamente, para ti es ashi. He diseñado eshtosh zapatos segun el gusto del calzado de nuestra unidad fraternal Lynn. Su interior es acolchado y provisto de unidad de absorción de olores como la smejores deportivas del mercado, pero el exterior son unos zapatos cuyo diseño ha sido estudiado para que queden a juego con sus ropajes actuales.

- Muchas gracias a todas chicas. - decia la deportist acon una lagrimita de felicidad saliendo de sus ojos - Pero... ¿Que hacen todas aqui? ¿No tenian sus clubes?

- Si, pero como Lincoln se fue con Lily al centro comercial a buscar un traje para el baile, quedamso en volver todas directamente aqui para arreglarte.

- (impactada)... Espera Lana, ¿dijiste que Lincoln ha ido a buscar un traje para el baile escolar de mi curso?

- Emmm... Si. ¿Que pasa?

La deportista no pudo evitar que su rostro se volviese una copia casi identica al de su gotica hermanita. Todas se soprendieron al ver el deprimido rostro de su hermana mayor.

- Pues... que yo aun estaba pensandome en si pedirselo... por lo que si esta buscando un traje, es que alguna de mis compañeras le ha pedido ir... supongo que será Paula. Siempre me pregunta en los entrenos si el guapo peliblanco vendria hoy a vernos entrenar...

Una a una se rascaban la nuca con culpabilidad y ponian alguna excusa para irse del cuarto, finalmente solo quedaron Lucy y Lynn y la chica gotica ya estaba en su cuarto, por lo que Lynn se dirigió al suyo.

En su cuarto solo podia seguir fantaseando con el baile, aunque ahora se encontraba casi tan deprimida como un vampiro melancolico, según decia Lucy. Lincoln asistiria al baile con alguna de sus compañeras, por algún motivo sentia que ese pensamiento le hacia mas daño que el volver a ver a Francisco. Aunque con la ayuda que l ehabian dado todas sus hermanitas, aun era reticente a quitarse el vestido que llevaba. Esperaria en su cuarto y cuando Lincoln se marchase a buscar a su pareja les diria a las chicas si querrian seguir probando vestidos... Por hacerlo una vez en la vida no habia nada de malo, ¿no?

Ya bien entrada la tarde algo sobresaltó a la deportista.

*TOC* *TOC* *TOC*

- ¿Lynn?... Es la hora del baile.

La pecosa castaña escuchó la voz de su hermano a traves de la puerta y sintió una punzada en su pecho. No queria verlo, no sabia bien porque pero algo la dañaba en su interior. El era quien l ahabia ocnsolado y con quien siempre podia contar, debia alegrarse de que aceptase tener una cita con alguna de sus compañeras, pero no era así. Inspiró profundamente para intentar hablar de forma calmada.

- Muy bien, que te diviertas. No olvides pasar a buscar a tu pareja, que a veces eres muy despistado. Yo cuidaré a las chicas.

- Emm... ¿Lynn? Creia que eso es lo que estaba haciendo... - comentaba confuso el albino.

El corazón de la deportista dió un vuelco en aquel momento. ¿A que se referia?

- ¿Q-Que quieres decir?...

La voz del muchacho sonó algo incomoda y avergonzada cuando respondió.

- La otra noche cuando llorabas me pediste que fuese tu pareja...  o al menos eso creia... estaba medio dormido... puede que solo lo soñase... perdona, mejor me voy a mi cuarto.

- !NO¡ Es-Espera un momento, dile a Lola que venga, estoy casi lista.

La aprendiz de princesa salió del cuarto de su hermana Lisa con una sonrisa triunffante, con ella llevaba su fiel kit de maquillaje. El albino miró extrañado la puerta del cuarto de la cientifica por donde asomaban las cabezas del resto de sus hermanas, que al ser descubiertas se metieron dentro nuevamente.

Las lagrimas habian corrido nuevamente por el rostro de la deportista, pero en esta ocasión no eran de dolor o enfado. Lola no tardó en secarle la cara y corregir el rimel corrido que tenia esparcido. El no quitarse aquel vestido habia jugado a su favor parecia. Tras unos minutos, la puerta se abrió y una sonrojada Lynn se mostraba ante el chico peliblanco el cual habia alquilado un esmoquin para la ocasión. Aunque el rojo de su cara no hacia juego con el resto.

- Gu... !Guau¡ Te-Te ves... preciosa...

- Jejeje. Gracias Linky... Tu tambien te ves muy bien.

Algo nerviosos ambos se dirigieron a bajar al piso inferior, no sabian si debian darse la mano, caminar solamente el uno al lado del otro o que debian hacer, ambos oslo sabian que se sentian felices de asistir juntos a aquel baile. Entonce suna voz interrumpió sus pensamientos antes de empezar a bajar las escaleras.

- ESHPERO QUE A NADIE SHE LE OLVIDE EL RITUAL DE DAR A SHU PAREJA EL REGALO INDICADO ANTESH DE IRSEEEEEE

En aquel momento el albino recordó la cajita que llevaba en su mano, con una sonrisa se la entregó a su pareja. Esta la abrió encantada para ver como en su interior habia un pequeño ramillete de flores para la muñeca, le conmovió ver que el ramillete estaba hecho simulando un balón de soccer con el numero 1 en rojo en medio. La felicidad hizo que su cabeza se moviese sola y besase los labios del muchacho, el cual tomó un tono mucho más rojo. Cuando ella se separaba avergonzada al darse cuenta de lo que habia hecho, él la tomó de los hombros con una tierna sonrisa. Abandonaron la casa con una feliz sonrisa y la chica caminaba con su cabeza apoyada en el hombro del peliblanco.

********

En el instituo, el baile estaba siendo de lo mas animado. Muchos compañeros se habian quedado embobados mirando el nuevo look de aquella chica que en su primer dia en el instituto terminó encerrada en el cuarto de calderas. Por su parte, muchas chicas miraban sorprendidas al chico con el que habia asistido haciendo que su envidia se encendiese al compararlo con las parejas que algunas habian tenido que escoger.

- ¡¡Hola Lynn!! Ya creia que no aparecerias. ¿Quien es tu pareja? Se ve bien apuesto.

- Hola Margo... Pues... Te presento a...

- !!LINCOLN¡¡

Un grito y una embestida cortó al momento la ocnversación, antes de darse cuenta, Polly habia embestido al peliblanco y ahora lo hacia girar sobre su cabeza. Lynn quedó blanca por unos momentos, esperaba no encontrarse con Polly, pues era la unica que reconoceria a Lincoln, peor esta parece que saltó sobre él nada mas verlo... Si les decia al resto que en verdad era su hermano, todos volverian a señalarla y a reirse de ella, la patetica que no encontró pareja y que llevó a su hermanito pequeño al baile.

- !Lo sabia¡ Sabia que en verdad tu querias que fuese tu novio y no el mio. Jejeje. Cuando me pediste salir con el hace unos años me parecia extraño pero parece que al final arreglaron las cosas.

- ¿¿Eeehh??... Bueno... yo...

El albino medio mareado por la bienvenida de Polly intentó sacar del apuro a su hermana.

- Si, aquel dia me junté sin querer con 4 citas a la vez y a demas me escondia de Lynn porque no me apetecia verla, jejeje. Era muy niño.

- Es cierto, lastima que finalmente te encontrase cuando tiraste toda la comida de las mesas, jejeje.

- ¿Le preparaste una cita con Polly y lo seguiste?

- Esto... yo...

Lynn se encontraba en un buen apuro, no entendia nada de lo que estaba pasando ni mucho menos de lo que hablaban Polly y Lincoln, est aintentó excusarse pero el albino empezó de nuevo a hablar.

- En verdad, como ya has oido, por algún motivo termine quedando para ir al baile con cuatro chicas a la vez, Polly era una de ellas. Cuando Lynn se enteró vino muy enfadada, porque le habia ocstado trabajo que Polly aceptase tener una cita conmigo.

- Menudo don Juan estas hecho - decia Margo con el ceño fruncido. Aquel chico empezaba a caerle mal. Habia quedado con cuatro chicas diferentes a la vez y lo comentaba asi como si fuese una cosa normal. ¿Como podia Lynn estar con un chico asi?

- Se ve que casi cada una de las hermanas de Lynn habian querido ayudar y le prepararon a este cabezanieve una cita a ciegas. Yo, por suerte terminé conociendo a mi pareja actual. Jejeje. Bueno, y creo que ustedes terminaron en la sala de juegos solitos, ¿no?

- Cierto. Habalando de eso, ¿Donde esta Rusty?

- !UPS¡... Creo que lo dejé esperando en el guardarropa. Estaba buscando a nuestro profesor por los cupones que debia darnos. Nos vemos chicos, pasadlo bien - Con la misma velocidad con que habia aparecido, Polly se perdió entre la gente.

Margo, habiendose quedado mas tranquila despues de la explicación, tambien se despidió y se fue con su pareja dejando a lso hermanos solos de nuevo. La deportista aun estaba nerviosa con todo lo que habia pasado, pero su hermano la tomó de la cintura cariñosamente y la instó a que empezasen a bailar junto a los que estaban en medio de la pista.

- No lo entiendo Lincoln. ¿Has hablado con Polly? ¿Ha sido eso parte de alguno de tus desastrosos planes?

- En verdad, debo admitir que si hablé con Polly con un plan en mente, pero tu misma lo has visto. Parece que no recuerda bien lo que pasó entonces y que confundió a Ronnie Anne contigo. Solamente decidí que era mejor seguirle el juego y no decirle la verdad.

- Pero... entonces ¿Quien cree que eres? No parecia recordar que somos...

- Novios. Jejeje. Ella piensa que somos novios desde hace tiempo y que en aquel entonces tuvimos una pelea o algo, parece que de lo que si se acuerda bien es que cuando le pediste para que tuviese la cita conmigo, te veias muy desinflada y hasta algo triste.

La deportista se sonrojó un poco, pero infló sus mofletes e hizo como que estaba enfadada.

- Mpfh. Solo era por lo mal que te habia tratado esa taquito...

- Jejeje. Sabes, aun he de devolverte una cosa.

- ¿? ¿El que?

En aquel momento Lincoln aprovechó para darle un suave beso en los labios que logró que los mofletes de la deportista parecieran dos manzanas dignas de blancanieves.

- Esto es por lo de las escaleras, jejeje.

- Entonces... ¿estamos empatados?

- Si, ahora si.

- Pues no me gusta, sabes que yo siempre juego a ganar.

En aquel momento la castaña unió sus labios a los de el de forma apasionada. El chico al principio sorprendido, terminó correspondiendo y su beso se alargo varios minutos mientras seguian bailando rodeados de otras parejas. Lo adorables que se veian era visto con malos ojos por uno de los presentes, no tardó en salir de aquel baile y mandar un mensaje de texto con su unico brazo util.

" Amand, la patetika esta aki. ¿Kierez benganza? Kedemoz en el callegon obscuro"

********

La joven pareja salia del baile, ambos encantados de haber asistido juntos. Finalmente nadie los reconoció como hermanos y pudieron disfrutar de una noche de novios, aunque en la mente de la deportista, esta sentia que era una lastima que todo aquello solo fuese por una unica vez.

- ¿Te gustaria que mañana fuesemos al cine a ver una pelicula? - preguntaba despreocupadamente el muchacho.

Tras mirar los alrededores que no hubiese nadie, la deportista habló algo apenada.

- Lincoln... Me encantaria, pero ambos sabemos que esto no está bien... Creo que deberiamos dejarlo como "una noche especial" y ya esta... No esta bien hacer esto entre hermanos.

- Lo... Lo siento Lynn... No habia pensado en eso... Perdona... Tienes... Tienes razón. 

Lynn notó que el animo del chico habia decaido mucho, el de ella tambien pero esperaba que no se le notase tanto como a él. Con cariño, esta cerró los ojos y se acomodó en el hombro de su hermano haciendo que aminorasen el paso.

- ...pero como solo va a ser esta vez, no tenemos porque apresurarnos en volver. Caminemos poco a poco.

Una pequeña sonrisa apareció en el rostro del muchaco, el cual pasó su brazo por la espalda de l achica abrazandola y pengandola aun mas a él. 

Ambos caminaban placidamente amparados por la estrellada noche que hacia, intentando aprovechar los pocos minutos que aquello duraria, pero al girar una de las esquinas, un veloz movimiento llamó la atención del muchacho. Sus reflejos actuaron rapido y lanzó hacia atras a su hermana que tropezó y terminó en el suelo.

- !AU¡ Link, ¿Que demonios te pasa?

Al alzar la vista, vió al peliblanco de pie con una chica que parecia apoyada en su pecho. ¿A caso era alguna de las amigas de Lincoln? ¿Otra de sus pretendientas? Bajó la mirada, si era así, ella no tenia ningún derecho a entrometerse. Puede que l achica le estuviese confesando sus sentimientos o algo... En aquel momento vió como algo goteaba, algo rojizo caia salpicando gota a gota. Lynn se alarmó y volvió a alzar la vista solo para ver como aquella chica se separava del muchacho y dejaba ver su rostro.

- ¿¡Amanda?!

No solo vio quien era, sino que vio como en su mano tenia una navaja cubierta de sangre, el peliblanco caia arrodillado en el suelo sujetandose el estomago. No legó a levantarse del suelo que sintió un fuerte golpe en su espalda que la hizo caernuevamente, al girarse pudo ver como Francisco se encontraba detras de ella con un brazo escayolado y un bate en la otra mano.

- Has tenido suerte patetica apestosa. No se que habra visto en ti este chico, pero no va a cambiar nada. Me has desfigurado una de mis perfectas orejas y me las vas a pagar.

- Y por tu culpa no he podido jugar el partido mas importante de todos, aquel al que venian los ojeadores mas importantes. Maldita zorra estupida.

Los nervios se apoderaban de la castaña Loud. Se encontraba en el suelo y Francisco y amanda se acercaban ambos armados y dispuestos a atacarla. Su preciado novio estaba en el suelo con una puñalada en su estomago y ademas las calles estaban desiertas tan tarde. Nadie a quien pedir ayuda.

La vida de su hermano dependia de ella, el huir de allí no era ninguna opción. Se lanzó por sorpresa contra el chico lesionado, aun y con el nuevo golpe de bate que se llevó, esta logró tirarlo al suelo, logrando que se desprendiera del arma. Tenia la intención de empezar a molerlo a golpes, pero debia dejar a su presa si no queria ser tambien apuñalada por Amanda que se le lanzaba encima como un tigre furioso.

La castaña se concentró en la mano con el cuchillo de su agresora para evitar salir herida de gravedad, pero las uñas largas de amanda se le clavaban en la cara queriendo arrancarle la piel a tiras. Tras vario sintercambios de golpes, la agresora se retiró un poco y Lynn pudo incorporarse. Solo para notar como su pierna recibía una fuerte patada que la volvia a poner de rodillas en el suelo. Esa patada de Francisco realmente habia dolido, pero no tanto como el rodillazo que le propinó Amanda a continuación. 

Su labio sangraba y su cuerpo estaba muy magullado. El vestido que sus hermanas tanto se esforzaron en conjuntar, ahora estaba destrozado. Pudo arrastrarse y llegar cerca del cuerpo de Lincoln, sus dos agresores frente a ella parecian no haber tenido suficiente.

- Mira a la grasienta marimacho. Siempre dandoselas de numero uno y ahora esta ahi arrodillada. ¿No podrias haber aguantado la broma y ya esta? ¿No? Claro que no, eres tan tonta e idiota que tenias que provocar una pelea.

- ¿A eso os atreveis a llamar broma? !Casi me mete su pene en la boca¡ Y encima enviasteis la foto a todos los del curso. Deberia haberos denunciado, malnacidos. - Mientras hablaba la deportista se ponia en posición de combate para estar preparada

- Adelante, hazlo perdedora. Nadie te va a creer, la unica prueba que tienes es la foto que sacó Amanda y se aseguró bien de que yo no saliese. Podrias haber estado besandole la poya a cualquiera, puta asquerosa.

- Je... je... jejeje... je... je...

Ante aquella amenaza, los tres s evieron sorprendidos por una risa inesperada. Todos se extrañaron de aquel hecho y miraron en dirección al peliblanco que lentamente se incorporaba con una sonrisa en su rostro. Este solo seguia riendose cansinamente mientras alzaba su mano con el celular y lo mostraba desafiante.

- Saludad a internet "criminales". Je... Je... Jeje...

La cara de Lynn se iluminó en aquel momento, su hermmano, el hombre del plan, habia buscado una manera de girar las tornas. El chico se puso depie aun con una gran mancha de sangre en un lado de su estomago, pero miraba desafiante a la pareja de agresores.

- N-No... No me engañaras... Cuando te apuñalé caiste al suelo y no te has movido desde entonces.

- ¿Crees que con un cortecito como este ya os habias deshecho de mi? Je... Je... Je... Ahora que la gente de internet sabe todo lo que pasó, ya podemos ser dos contra dos. - La mirada desafiante del albino aun y con aquella herida hizo temblar a Francisco. ¿A caso aquel tipo era tan fuerte?

- S-Si... Amanda tiene razón... Es solo un truco...

- No es ningún truco, estais en directo en el canal de humor de mi hermana... Seguro me recriminará por esto... pero tiene mas de 100.000 subscriptores y seguro vuestra confesión hará que llamen a la pocilica. - giró el celular y saludó a la camara - ¿Verdad que si chicos? Estamos en la calle...

Ante el miedo a ser detenidos la pareja de bullys salió corriendo. Lynn se levantó del suelo y se situó al lado de su hermano, ambos mirando como aquellos delincuentes huian despavoridos. 

- Gracias Lincoln.

- ....

- ¿Era mentira lo de que estabas emitiendo en directo?

- Sip...

- Entonces, ¿solo los engañaste para que huyeran?

- Nop...

- Espera... ¿Quieres decir que lo grabaste?

- Sip...

- ¿Para que? ¿A caso fue para protegerme de ellos?

- Sip...

- Eres el mejor Linky.

Ambos seguian alli de pie, mirando en dirección por donde habian huido los agresores. Habian pasado y aun par de minutos desde que habian desaparecido de su vista, pero ninguno se movia del sitio. Lynn se encontraba toda desaliñada y su vestido y maquillaje estaban arruinados, pero una feliz sonrisa iluminaba su rostro.

- Te duele tanto que no puedes moverte, ¿verdad?

- Sip...

- ¿Estas aguantando las lagrimas?

- *sniff* Sip... 

- Jajaja. Ven, deja que te lleve a casa, a ver si Lisa puede curarte. Si no, avisaré a Lana para que nos lleve al hospital en ese auto trucado que esconde hasta tener carnet.

La deportista le dió al peliblanco un apasionado beso en los lavios antes de pasarse uno de sus brazos por encima de los hombros y ayudarlo a caminar de regreso a la residencia familiar. Una vez llegaron, con dificultad, se dirigieron al cuarto de la joven genio. Por suerte para ellos, la niña aún se encontraba despierta trabajando en alguno de sus experimentos.

- Lisa, tienes qeu ayudarnos a Lincoln...

La joven cientrifica se ajustó sus lentes y miró a la pareja. Suspiró sonoramente cortando lo que decia su hermana mayor.

- Si... Era una de lash poshibilidades... Ya me imagino lo que ha pashado.

- ¿A caso lo sabias? - la castaña estaba tan sorprendida y enfadada a la vez que no sabia que hacer - Si lo sospechabas, ¿Por que no dijiste nada?

- Unidad fraternal con zona encefalica llena de aire... Con eshe veshtido esh normal que un chico no pueda reshistirse, lo que no entiendo esh porque la mano de Lincoln aun shigue en tu escote despuesh de haberlo dejado inconsciente.

Los colores acudieron rapidamente a la cara de la pecosa castaña, que vio en efecto, como el brazo colgante que habia pasado por detras de su cuello, se encontraba con la mano metida dentro del escote de esta. Reaccionó sin pensarlo y soltó a su hermano que terminó cayendo de bruces al suelo. Tras una breve explicación de lo sucedido, Lisa se enfadó por no haberle comunicado con más urgencia el estado de su hermano.

*********

Una hora despues, Lincoln se despertaba en su cama. Lynn se encontraba sentada a su lado, esperando que este recuperase la consciencia. Se habia cambiado y lavado mientras su hermanita curaba al unico varón de la casa. Ahora ella se encontraba con su camisa playera que utilizaba para dormir y acariciaba tiernamente el pelo del muchacho.

- ¿Ya has despertado? ¿Como te sientes?

- ¿Lynn? Gracias, me siento mejor. A penas me duele. ¿Lisa ha podido curarme?

- Si, por suerte ella te extirpó el apéndice cuando tenías 11, si no te lo hubiesen perforado. Ha podido coser la herida y te ha dado un invento suyo para que a penas mitades dolor. Solo ha de curarse sola la herida.

- Lamento el no haberte podido ayudar con esos tipos. Te dejé sola peleando contra ellos...

- Sssshhhh. Ni se te ocurra disculparte.

La pecosa junto sus labios nuevamente con los del chico y sus lenguas jugaron en la boca del otro durante un rato. Cuando se separaron, ambos estaban sonrojados y miraban al otro con una feliz sonrisa.

- Tu me protegiste, me apartaste y esa desgraciada te apuñaló a ti en vez de a mi. No sólo eso, al final fuiste tú quien los hizo huir.

- Pero te estuvieron pegando y yo...

- Ssshhh. A ti te han clavado un cuchillo y te han hecho sangrar por protegerme... Y sabes que no me gusta quedar detrás en nada...

- ¿A que te refieres? - decía confundido el muchacho.

- Pues que... Creo que es tu turno de clavarme algo y hacerme sangrar.

- ¿¡ ¿QUEEEE?!? ¿Te has vuelto loca? ¿Quieres que te apuñale yo para estar los dos igual?

Lynn se puso a mirar al suelo avergonzada, no creía que estuviese diciendo aquello y no podía mirar a su hermano a la cara, pero era lo que quería y no sé echaria atrás. Se acercó al chico.

- *susurro* *susurro* *susurro*

La cara del albino estalló al momento en rojo y los nervios se apoderaron de el.

- Pe-Pero... No debemos... Tu misma lo has dicho... Somos hermanos... Solo ha sido cosa de una noche... Por el baile...

Lynn se encontraba también tan colorada como él. Pero había decidido que nadie más se merecía su primera vez que no fuese aquél que siempre la ha apoyado y se ha preocupado por ella.

- Eso mismo habíamos quedado. Solo por esta noche... Y la noche aún no ha terminado... Por lo que seguimos siendo novios y debemos hacer las cosas que hacen los novios...

Ambos se acercaron vergonzosos el uno al otro hasta fundir nuevamente sus bocas. Ya no necesitaban más palabras, las caricias y los sentimientos que se transmitían sus bocas eran suficientes. No tardaron en dejar de lado sus ropas y...

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- ¿Mamá?

- ¿Emm? Creo que me he dejado llevar, perdona Lacy.

- Entonces así fue la primera cita con papá. Jejeje. Mami, te has sonrojado mientras me lo explicabas.

- Si. Fue una noche con muchas emociones. Ahora a dormir mi campeona, mañana ya no vas a la guardería, será tu primer día de clase.

- Espero que no hayan matones como esa Ananda o el tonto de Franquicio.

- Tranquila, si alguien te molesta, solo recuerda lo que te he enseñado. Lo tomas del cuello con esta llave y aprietas hasta que se quede inconsciente.

- Vale mamá. Si alguien se mete conmigo verá como Lacybastadora aplica las llaves de Lynnlunatica.

- Esa es mi niña. Buenas noches cielo... Creo que iré a practicar un poco de lucha libre con papá antes de irnos a dormir. Jejeje.

- Buenas noches mami.

Bueno queridos lectores. Este ha sido un one Shot basado en el primer fic que leí en esta plataforma. Su autor me dio los derechos para rehacerla a mi manera y aunque debido a las normas de Wattpad no contiene lemon, espero que les gustase.

También agradezco a Electric_Loud que es el creador original. Aunque tras varios problemas y un montón de cuentas cerradas ahora su cuenta es AndriwPhoenix es el sobrino de un ruso que lo obliga a bailar en tanga para abuelas del IMSERSO, así que denle cariño y dejenle un dólar en la goma del tanga. Jejeje.

Un fuerte abrazo a todos queridos lectores, espero que este One Shot les guste y me dejen algún comentario. ^_^

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