CAPITULO II: SENTIMIENTOS

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

Estaba cansado.

Ya no quería seguir.

Le dolía tanto.

Su lobo está desgarrando su interior con una desesperación inimaginable.

Ya no soportaba la sensación de pérdida.

Su lobo estaba tan deprimido por haber perdido a su destinado.

Sus lágrimas no dejaban de recorrer sus mejillas, dejando rastro por donde pasaban. Solo podía pensar en lo desdichada que era su vida.

¿Qué había hecho mal?

Omega inútil...

No sirves...

Eres tan desagradable...

Las palabras de Taehyung siempre pasaban por su mente.

¿Por eso busco un amante?

Era su culpa.

Él no era suficiente para aquel alfa.

Por su culpa ahora estaba pasando por eso.

Todo era su culpa.

Su corazón dolía más al pensar en eso.

El amo a Taehyung con todo su corazón, hizo todo por ese alfa, trato de dar lo mejor de sí para que su relación funcionara.

Él fue tan feliz a su lado, Taehyung era su mayor felicidad por eso dio todo de él para no arruinar nada, y termino provocando todo lo contrario.

Hoseok ya no quería sentir eso, su lobo se lo recordaba con tanta insistencia.

Le dolía tanto.

La marca cada vez dolía más y su cuerpo estaba cada vez más cansado y pesado. Se mareaba constantemente, comía cada vez menos, no quería salir a ningún lado pero su trabajo se lo exigía, estaba cada vez más apagado, él esperaba que el futuro que aquel doctor le había asegurado llegara pronto. Ya no podía soportar a su lobo deprimido, sin ningún ánimo para vivir.

Sabía que pronto su lobo perdería todas las fuera y una vez que eso pase su lobo moriría y arrastraría a Hoseok con él, ninguna persona podía vivir sin su lobo, su parte humana no soportaría estar sin su otra mitad, y su parte lobuno tampoco. Si uno de los dos moría, arrastraría al otro al mismo destino, porque eran uno y no podían existir sin el otro.

Hoseok estaba frustrado de que su lobo se echara a morir, entendía que Taehyung era su destinado, pero merecía sufrir tanto sus últimos días, pensaba que no era justo.

Se observó en el espejo del baño, una vez frente a este pudo visualizar su marca. Estaba horrible, podría decir que incluso daba asco, tenía colores grisáceos por toda la marca y se estaba extendiendo hacia su hombro, no se veía para nada saludable, se notaba que su lazo estaba roto. Cualquier persona que la viera se burlaría de él, por haber sido abandonado por un alfa y sobre todo por su destinado. Paso sus dedos suavemente por la zona afectada y un dolor descomunal se instaló en todo su cuerpo, su lobo chillo y empezó a rasguñar con más fuerza.

No iba a soportar mucho.

Salió del baño y rápidamente se recostó en su cama, sus lágrimas caían por sus mejillas de manera descontrolada, el dolor que sentía era mucho y desgarrador, esperaba que pasara pronto.

Tú marca está rota, y es lo que causa dolor a tu lobo, cualquier contacto a ella por más mínimo que sea hará a tu lobo sufrir, nadie que no sea tu anterior alfa podrá renovarla, morirías en un instante— el doctor lo miro con lastima por su situación, era más común de lo que imaginaban tener casos de omegas con sus lazos rotos.

Maldecía tanto a Taehyung por haberlo marcado, por ser su destinado, por darle ese sufrimiento. Sentía tanto rencor hacia él de la misma manera como su lobo lo añoraba y amaba.

Con ese pensamiento y su corazón deseando morir se quedó dormido.

Sabía que Taehyung era el amor de su vida.

Desde el día que lo vio por primera vez lo sabía, o mejor dicho, su lobo lo supo.

Cuando iba de caminando por los pasillos de la universidad, lo suficientemente nervioso por ser su primer día, no presto atención a las personas que lo rodeaban hasta que se tropezó con un hombre alto y bastante musculoso, el chico debordaba masculinidad por dónde lo vieras y debía suponer que tenía mil omegas detrás.

«Es muy guapo» fue lo primero que pasó por su cabeza, antes de que su lobo se volviera loco por la persona que tenía de frente.

Confiaba en que su lobo tenía la razón y que el destino nunca se equivoca. Por eso, no dudo en aceptar una cita con Taehyung por primera vez, por eso acepto cuando él propuso formalizar la relación, por eso, tambien acepto cuando le propuso matrimonio, y fue por la misma razon que acepto la marca.

Su corazón nunca se acelero al ver a Taehyung, pero se sentía feliz de poder formar una familia con un excelente alfa como era este. Sintió orgullo de si mismo por ser capaz de tener la vida que todos deseaban.

Solamente él sabía lo que su corazón sentía y tanto se negaba.

Hoseok no estaba enamorado de Taehyung. Pero la naturaleza se encargó de hacer de este su destinado y Hoseok se dejo llevar por su lobo, confiado de que era lo mejor para su vida.

Quizás se negaba tanto a aceptar la realidad, que su corazón termino creyendo lo que su mente se negaba a aceptar.

La vida de Hoseok era perfecta pero había pequeñas grietas que él mismo se encargó de ignorar.

Sabía lo que estaba haciendo, la respuesta era un rotundo no.

Cuando su querido amigo Jimin lo despertó de su amada siesta y lo obligó a salir de su cama —y de su casa—, no penso que estaria en una cafeteria junto a su mejor amigo y el cartero de sus padres. Era una situación realmente incomoda.

El pobre muchacho fue casi secuestrado por Jimin, diciendo que no podía negar una salida y que los dos necesitaban un poco de diversión.

Aunque claramente Hoseok hubiera preferido dormir un rato más.

—Me gusta mucho esta cafeteria— empezó a decir Jimin— es muy bonita y bastante cómoda.

—No hay tanta gente— los dos miraron al alfa— eso lo hace más agradable, ya que no hay tanto ruido.

—Me agrada bastante— dijo Jimin para mirar el menú.

En el camino no sabían a dónde dirigirse para pasar el rato y conversar tranquilamente, Yoongi siendo amante del silencio y los lugares poco concurridos les había llevado a su cafeteria favorita.

—Si, es bastante bonito— se animó a decir Hoseok.

—No solamente es bonito— hablo Yoongi— el pastel de chocolate es el mejor, deberían probarlo— dijo con una enorme sonrisa.

Hoseok volvió a quedar hipnotizado con esa bella sonrisa, no podía creer que alguien pudiera sonreír de esa manera tan hermosa.

Sin poder evitarlo, una pequeña sonrisa apareció en sus labios.

—Entonces lo haremos— dijo mirando a Jimin que asintió.

Poco a poco el ambiente dejo de ser tan incómodo y los tres empezaron a hablar de temas triviales mientras probaban cada postre del menú que se les antojaba.

—En realidad, mi trabajo no es tan pesado como creen— el alfa hablaba con más confianza— hay días pesados por supuesto, pero la mayoría del tiempo es tranquilo, y tengo bastante tiempo libre.

—¿Que haces cuando no trabajas?— pregunto Hoseok un bastante tímido incluso sintió sus mejillas arder.

—Mayormente dormir— los tres chicos rieron al escuchar aquello— pero me gusta mucho componer en mis tiempos libres.

—¡En serio! ¡Eso es genial!— dijo Jimin bastante entusiasmado.

Siguieron conversando por unas horas más y Jimin no pudo pasar por alto lo relajado que veía a su amigo, de vez en cuando unas pequeñas sonrisas aparecian en sus labios y prqueñas risas, bastante timidas, no se acercaban ni un poco a aquellas carcajadas que Hoseok acostumbraba a sacar cuando no podia contenerse.

Tampoco podía ignorar la manera tan atenta en la que Hoseok miraba a Yoongi, su amigo siempre mantenía la cabeza gacha y no podía mantener su mirada fija en alguien más de diez segundos porque se intimidaba, ver cómo ahora está mirando con tanta atención y admiración a alguien era una avance del que Jimin se sentía tan orgulloso.

Jimin sabía que Hoseok se sentía deslumbrado por Yoongi, su mirada lo delataba y no pudo evitar que su corazón se llenará de esperanza, el solo pensar que Hoseok logrará ser feliz y quizás tener una vida más larga era algo con lo que el omega soñaba constantemente. También se dió cuenta perfectamente que Yoongi estaba igual de deslumbrado por su amigo.

—Chicos— hablo levantándose de su asiento— me tengo que despedir, quedé en encontrarme con Jungkook— abrazo a sus dos amigos— por favor Yoongi, acompaña a Hobu a su casa por mi, no quiero dejarlo solo.

—Tranquilo Jimin, lo haré.

—Muchas gracias— dijo abrazando a el alfa.

—No te preocupes por mi Minnie— dijo Hoseok despidiendo a su amigo.

—Me llamas cuando llegues.

Jimin se fue y los dos chicos decidieron hacer lo mismo y partir hacia el hogar del dulce y bonito omega.

El camino fue silencioso, Hoseok se sentía muy nervioso de tener al alfa a su lado, mientras que Yoongi no podía parar de pensar en lo hermo y tierno que era el omega a su lado. Su alfa está encantado con tener al omega tan cerca y poder sentir su exquisito olor a vainilla.

Una vez llegaron a el hogar del Omega este abrió la puerta y antes de entrar se dirigió al alfa.

—Muchas gracias, Yoongi— dijo bastante nervioso.

—Fue un placer poder acompañarte Hoseok— dijo casi embobado por el omega frente a él.

Hoseok quería salir de ese lugar, su corazón estaba latiendo tan rápido como ni era normal en él, no entendía porque reaccionaba así con el alfa frente a él, pero no podía evitar sentir esa calidez en su pecho cada vez que el chico le sonreía.

Hoseok se dió media vuelta para irse pero Yoongi lo detuvo tomando su muñeca.

No podía perder esta oportunidad.

—¿Quieres otro día volver a tomar algo conmigo Hoseok?

Sé que deje la historia abandonada por meses, para darles más confianza a que voy a seguir actualizando la historia, pondré metas de votos.

Sé también que la historia no es la mas popular en Wattpad, por esa razón, a lo que este capitulo llegué a "5 votos" subire el siguiente capítulo.

Eso es todo por hoy.

¡Espero les haya gustado!

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro