Una semana después — departamento de Valentina

—Kara Carvajal ¿Cuántas veces tengo que decirte que tengas cuidado a la salida del ascensor? – Valentina regañaba a su hija mientras la niña esperaba a que su madre abriera la puerta del departamento.

— Si mamá – contestaba Kara con su ya típica carita triste que solía traer últimamente de la salida del colegio.

Cuando madre e hija entran a su hogar, se encuentran en el living a Lauren, Camila, Derek, Mariana, Sam y Shane acomodados en los sillones alrededor de una mesa pequeña y toda la mesa llena de sobres, papeles, cintas, Una Notebook, en fin. ERA UN LIO.

— ¿PERDON? ¿HAN ARMADO UNA FIESTA EN MI CASA Y NO ME HAN AVISADO? – pregunta Valentina a sus amigos. Tengo que quitarle la llave de mi casa a Lauren pensaba la rubia.

— No Valen, hemos citado a todos nuestros amigos para que nos ayuden a armar y mandar las invitaciones de nuestro casamiento y no queremos hacerlo en casa porque Tlacoyo no se tiene que enterar que no invitamos a sus familiares ¿cierto Lolo? – Era Camila la que le aclaraba a la otra rubia la razón de porque están haciendo eso es su casa.

— Cierto Camzi Camz– Dice la latina y besa a su chica – así que deja de protestar rubia hueca y siéntate a ayudarnos y tu Grey deja de mirar la televisión y ayuda.

— Un momento SATANAS que enseguida sale a hablar la nueva jugadora del Liberty y dicen que es impresionante. Esta temporada tenemos que ganar – Dijo Derek sin sacar sus ojos de la tele.

— No creo que ganen nada, el año pasado apestaron de lo malo que era su equipo – Se metió Sam en la conversación.

— TU TE CALLAS KENN que tu equipo tampoco logró nada – Lauren defiende al Liberty. Era sabido ya la rivalidad que causaba el deporte entre estos tres, mientras Lauren y Derek eran fanáticos de las Liberty, Sam tenía preferencia por San Antonio.

— ¡Kara! PONTE A HACER TU TAREA – Valentina había subido a su habitación a dejar su abrigo y al volver al living le recordaba a su hija sus deberes.

— Si mamá – contestó la niña desde su habitación

— ¿Han mejorado las cosas en el colegio amiga? Esta vez era Shane es la que preguntaba.

— Pffff – suspira Valentina, no lo sé, no lo sé Shane, realmente está todo igual, ya no sé qué hacer, es como si estuviera bloqueada o algo así– Valentina cansada del tema agarra un sobre y se dispone a ayudar a sus amigos.

En ese momento se escucha en la televisión.

"SEÑORES, SEÑORES, HAGAMOS SILENCIO ASI DAMOS INICIO A LA CONFERENCIA DE PRENSA "–anunciaba el locutor a los periodistas que se encontraban en la sala.

— KARA ¿ESTAS HACIENDO LA TAREA DE MAÑANA? – le preguntó Valentina a su hija.

— SHHHHHHHH VALENTINA déjanos escuchar – la reta la latina.

— OYE TE RECUERDO QUE ESTA ES MI CASA – agarra el control remoto y apaga el televisor.

— ¿Qué HACES? – gritan Derek y Lauren a la vez, pero es la ojiverde la que le quita el control de la mano a la rubia y vuelve a encenderlo – SHHHHHH – de paso los hace callar a todos.

"Con ustedes recibimos a la entrenadora Robbins del New York Liberty, A la capitana del equipo, Miranda Torres y a la nueva adquisición, la jugadora estrella de la liga Europea Juliana Valdés" – se escuchaban aplausos en el salón y se veían todas las manos de los periodistas levantadas, ansiosos por hacer preguntas

—¿QUEEEEE? ES ELLA ¡POR DIOS V MIRA, MIRA! ¡ES ELLA! ¡LA SUPERCHICA! ¡EL BOMBON! – Lauren codeaba a su amiga que rápidamente miraba la pantalla y se quedaba sorprendida de lo que estaba viendo.

— ¿JULIANA VALDES? ¿JUGADORA ESTRELLA? ¿Cómo PUEDE SER? ¿COMO? SI, SI... – Valentina no lo podía creer

— SHHHHHH dejen escuchar — ordenaba Derek

" Juliana, Juliana por aquí— decía un periodista – Juliana lo miraba y hacia un gesto con la cabeza autorizando a que preguntara. La morena no se sentía nada cómoda en estas situaciones. —Antes que nada, quería darte la bienvenida a New York nuevamente – le dijo el periodista antes de preguntar"

Juliana hace una sonrisa nerviosa y agradece.

"Y segundo preguntarte ¿Por qué te decidiste a volver a esta ciudad teniendo en cuenta tu pasado y que esperas del equipo?

— De mi pasado no voy a hablar, lo único que puedo decirte es que jugar en este equipo era algo que vengo deseando desde niña. Es un sueño cumplido. Y consideré que era un buen momento y oportunidad para volver a esta ciudad. En cuanto al equipo. Hemos estado entrenando muy duro y espero lo mejor de todas mis compañeras y estoy segura que vamos a lograr buenos resultados"

Otro periodista autorizado pregunta

– Teniendo en cuenta que este equipo quedó en las últimas posiciones el año anterior, ¿Qué puedes hacer para cambiar eso?

— Bueno, yo creo que este deporte es un deporte de equipo y que yo sólo vengo a colaborar con mis compañeras para tratar de mejorar y porque no tratar de aspirar al campeonato – contestaba Juliana diplomáticamente

— "Por aquí Juliana – decía otro periodista llamando la atención de la jugadora – ¿Qué dices de la fama de mujeriega y fiestera que te persigue, crees que vas a poder comprometerte con este equipo si sigues frecuentando tantos bares de noche? – esta pregunta armo un murmullo en el salón.

— Esa pregunta esta fuera de lugar – fue la entrenadora la que contestó – las jugadoras tienen días libres para disfrutar saben muy bien cuáles son sus permisos y cuáles no. Y Juliana no es una excepción a esto. La entrenadora había notado lo tensa que se puso Juliana con esta pregunta y quiso evitar cualquier tipo de inconvenientes.

"Juliana que crees que opinarían tus padres si te vieran en este momento – pregunto un periodista sin permiso.

Esta pregunta fue la gota que la morena no aguanto, se puso de pie y se retiró del salón. No sin antes dedicarle una mirada de odio al periodista.

Ante esta situación el locutor fue el que volvió a hablar.

"DAMAS Y CABALLEROS DAMOS POR TERMINADA LA CONFERENCIA LAS JUGADORAS TIENEN QUE VOLVER AL ENTRENAMIENTO" – murmullo de protestas se escuchaban en el salón.

— VALDÉS, VALDÉS, VAAL—DEES. ¿De Dónde lo tengo? — repetía Lauren que se había quedado pensando en el apellido de la chica que le sonaba muy familiar.

— ¿Qué pasa con eso? — preguntó Valentina aun sorprendida

— VALDÉS. ¡SIIII YA SE! Ya sé de donde me sonaba familiar ese apellido. Macario Valdés, su padre, es quien hizo estas genialidades – dijo la latina agarrándose sus pechos.

—¿QUEEEEEE? – preguntaron todos al mismo momento.

— Uy dios que amigos más tontos tengo. Tengo que empezar a juntarme con gente más inteligente – bromeaba la latina – Macario Valdés fue el cirujano plástico que me hizo aumentar estas preciosidades— en ese momento Camila aprovecho para murmurarle algo al oído que hizo sonrojar a la latina.

— ¿Fue? ¿Cómo fue? – Indagaba la fotógrafa— ¿qué quieres decir?

— Bueno según me contó mi padre, el y su mujer, Guadalupe Valdés, tu sabes la gran actriz de Broadway, tuvieron un accidente de tránsito volviendo de una fiesta y fallecieron. Esto paso unos pocos meses después de mi cirugía. Así que, V, déjame decirte, pero tu Superchica es jodidamente millonaria. Porque el padre era uno de los cirujanos más prestigiosos del país y bueno su madre era la jodida estrella de Broadway y ahora ella es una estrella de la WNBA así que...

— ¿Millonaria? ¿Millonaria dices? Ah no, a mí no me van a ver la cara de tonta, ya mismo me va a escuchar – Valentina se paró agarró sus cosas y salió rumbo al estadio, no sin antes gritarle a sus amigos – ¡CUIDEN A KARA!

Minutos más tarde en el estadio

— Jodido periodista. ¿Quién se cree que es para hablar de mis padres? ¿Por qué no pueden preguntar sobre básquet o sobre el equipo? No, pero claro si lo mejor es saber con quién se acuesta Juliana Valdés o a cuantas cervezas se toma Juliana Valdés o sobre los padres de Juliana Valdés –Después de la conferencia la morena se había quedado tan embroncada que lo único que la podía calmar era agarrar el balón e ir la cancha a hacer lanzamientos. Y era eso justamente lo que estaba haciendo antes de...

— TUUUUU. ¿COMO TE ATREVES? — voló un pelotazo hacia Juliana – otra vez esa voz pensó al tiempo que recibía el balón sobre su espalda.

— AUCHHHH ESO DOLIO. — Se dio vuelta para encontrarse a una rubia sexy que la apuntaba con otra pelota y tenía una cara como si se estuviese enfrentando a los jodidos zombis de Resident Evil.— BAJA EL ARMA, DIGO EL BALON YA MISMO – no fue suficiente porque tuvo que esforzarse para esquivar un nuevo pelotazo. — ¿ESTAS LOCA O BORRACHA O DROGADA O ALGO? – preguntaba Juliana mientras seguía esquivando balones, hasta llegar finalmente hasta la rubia y sacarle la última pelota que le quedaba para tirarle.

— VALENTINA, PARA, PARA. ¿ME QUIERES DECIR QUE HACES AQUÍ?

—QUIERO QUE ME EXPLIQUES, NO MEJOR DICHO EXIGO QUE ME DES UNA EXPLIACIÓN DE PORQUE CARAJO TE HICISTE PASAR POR POBRE CUANDO ES LO MENOS QUE ERES. ABUSASTE DE MI CONFIANZA, DE MI DINERO. ¿SABES QUE? QUIERO MIS 100 DOLARES DE VUELTA –le mostraba la palma de su mano.

Juliana no podía evitar encontrar esta Valentina enojada totalmente excitante, a pesar de estar un poco asustada por la locura que traía la rubia claro.

— Primero que nada, te calmas ¿sí? Y segundo que yo nunca dije que fuera pobre. Muy por el contrario, USTED su majestad es MUY PERO MUY prejuiciosa y asumió que yo lo era sólo porque no ando vestida como las Kardashians. Por lo tanto, no es mi problema lo que tu hayas creído o no – sujeto el balón que le había quitado a Valentina y siguió tirando al aro sin prestarle atención a su visita.

"Ah no, ignorarme a mí NO" – pensó Valentina – "Valentina Carvajal NUNCA PERO NUNCA es ignorada."

— ¡DEJAS ESO Y ME ESCUCHAS! – le ordenó Valentina, quien se atrevió de un impulso a sacarle el balón de las manos nada más y nada menos que a Juliana Valdés.

"No te la puedo creer" – esta vez eran los pensamientos de Juliana— " Juliana Valdés NUNCA PERO NUNCA pierde un balón."

— DAME ESO – protestó Juliana que ya se estaba cansando de la rubia

Juliana fue a sacarle la pelota, pero la rubia fue más rápida y se la puso en la espalda.

— EPAA ¿Qué paso? ¿No eras la jugadora estrella? – se burlaba Valentina – yuhuuu mira lo que tengo — le mostraba la pelota provocativamente — ¿qué acaso tu no eras la jugadora del momento? – le sacaba la lengua.

— muy madura de su parte su majestad,¡ UYYYY CUIDADO! — gritaba la jugadora señalando a un punto en la cancha

Valentina que estaba de espalda se dio vuelta rápidamente y en ese momento Juliana aprovechó y le sacó el balón – y ahora quien se ríe ¿ehh? Que miedosa eres. Yuhuuuu. Te voy a enseñar una regla muy importante "nunca pero nunca le des la espalda a tu defensora" – le dijo en forma provocativa.

— ERES, ERES, ERES...— la rubia se ponía de los pelos al ver la sonrisa pícara de la morena — ¿SABES LO QUE ERES? UNA LADRONA ESO ERES.

Esto era lo último que Juliana pensaba escuchar y rápidamente giro para enfrentar a la rubia, esto sí que no lo iba a dejar pasar. – ¿LADRONA YO? NO ME HAGAS REIR QUIERES, EN TODO CASO LA LADRONA ERES TU, QUE NUNCA ME DEVOLVISTE MI PLAYERA.

— ¿TU PLAYERA? APUESTO A QUE ESA COSA MUGROSA NO DEBE VALER NADA NI ME ACUERDO DONDE LA PUSE – mentía Valentina ya que esa playera se había convertido en su prenda preferida a la hora de dormir.

— VALGA LO QUE VALGA DE TODAS FORMAS ERA MIA Y NO LA VEO AQUÍ O ¿ACASO LA TRAJISTE CONTIGO? – la discusión se ponía acalorada y cada vez había menos espacio entre ellas.

— TU ME DEBES 100 DOLARES – Valentina dio un paso hacia adelante

— YO NUNCA TE LOS PEDI – Esta vez Juliana se adelanto

—LO INSINUASTE— otro paso

—PREJUICIOSA— otro

— ENGREIDA— uno más y ya casi no quedaba espacio

— TON.. – fue interrumpida

— VALDEEES – ¿Qué demonios estás haciendo acá todavía y quién es esa Barbie que entra al estadio sin autorización? – nuevamente salvadas por la campana.

— Disculpe Coach yo solo quería despejarme, después de la conferencia y – empezó a explicar Juliana

— Y nada Valdés. Ya mismo te vas al vestuario. Te duchas y te vas a descansar a tu casa. Tienes libre hasta el lunes y no voy aceptar otra protesta. Te necesito descansada para la próxima semana.

— Bueno, pero antes tengo que terminar una cosita— dio media vuelta para seguir discutiendo con la fotógrafa, pero esta ya se había ido aprovechando que la morena estaba distraída con su entrenadora.

—¡Me tengo que ir! – anunció Juliana, agarro su bolso y salió corriendo dejando a la entrenadora confusa.

—Esto no se va a quedar así – pensó Juliana mientras salía corriendo a perseguir a Valentina

Ya en el departamento de Valentina

Valentina abría la puerta por segunda vez en el día y se encontraba de golpe con Lauren.

— ¿ME PUEDES DECIR DONDE DIABLOS TE HABIAS METIDO? Estuve llamándote mil veces y no contestabas. Estábamos todos preocupados por ti IDIOTA — la latina abrazaba a su amiga.

— Estaba en.... no importa donde estaba, ¿Dónde está mi hija? ¿Y Camz? ¿Y los demás? — Valentina empezó a cuestionar a su amiga con la intención que se olvidará de indagarla.

— Kara está en su pieza esperando a que llegues para prepararle la cena ya que no quiso que yo lo hiciera y Camzi fue a comprar la comida del jodido gato ese, que juro que si no fuera porque maúlla me lo confundiría con una vaca de lo obeso que esta. Los demás ya se fueron – explicaba mientras sacaba el celular para hacerle saber a sus amigos que la rubia ya estaba en casa — Y ni creas que me voy a olvidar de que te desapareciste, ya mismo, pero ya mismo me cuentas que hiciste – exigía Lauren.

— Ahora no Lauren voy a prepararle la cena a mi niña, ¡KARA BAJA A CENAR! — Valentina cambiaba de tema y se movía hacia la cocina.

—Voy mami – Decía Kara mientras bajaba corriendo las escaleras. En ese momento suena el timbre del departamento.

— Después nada valentina nada me cuentas ahora mismo – volvía a insistir Lauren tratando de llamar la atención de su amiga e ignorando el timbre.

— Ya déjalo Lauren. En otro momento te cuento ¿quién era en la puerta?

— ¿Qué puerta? Si yo no abrí. Pensé que ibas abrir tu – la ojiverde se encogía de hombros

— ¿Cómo que tu no abriste entonces quién? Oh dios mío ¡Kara! Cuantas veces te he dicho que tu no debes abrir la puerta... — se frenó al llegar a la puerta y encontrarse una imagen que le derritió el alma.

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Esta historia no me pertenece, es una adaptación, todos los créditos pertenecen a su autora Alllove

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