Coramora, 31 de Octubre del 2009

Axel no durmió durante toda la noche, mucho menos en la madrugada, por esa razón cuando T.J, Gino y Griffin llegaron al día siguiente en la mañana para irse, él se encontraba con unas ojeras más grandes que el muro de Berlín. Sus tres amigos se lo quedaron mirando, estaba hecho un asco; seguía con la misma ropa, andaba despeinado y tenía una mancha de alguna salsa en la camisa.

Ese no era el Axel que conocían, y eso les preocupaba.

—Le quité las partes que hice en la canción y le agregué estrofas nuevas para hacerla más realista—mencionó Axel, le entregó a Griffin la hoja en donde había escrito las estrofas.

— Me culpo tantas veces, sé que todo fue mi error—leyó—. Alejarme de todo, montarme en ese avión—Griffin bufó y miró a Axel—. Esto no es tu culpa, ella fue quien deseó terminar con todo.

—Pero yo fui quién se marchó primero—respondió, T.J se acercó a Griffin para poder leer un poco la estrofa.

— Entonces corrí a buscarla, apenas llegué a la ciudad, pero ella no estaba, no supe donde hallarla—leyó—. Me dejó solo y sin saber, que había sido, no entendía por qué ella había huido—asintió—. Esto es demasiado personal, ¿seguro que quieres que todo el mundo escuche esto?

Axel asintió.

—Si el mundo escucha mis palabras, ella podrá lograr hacerlo también—dijo—. No puede huir si nosotros estamos en la radio. Y si no quiere verme, entonces que escuche cómo me siento.

— ¿Cómo sabría que es para ella? —preguntó Gino, T.J lo miró y alzó una ceja.

—Menso, uno siempre sabe cuándo le escriben una canción. Más cuando es tan explícita como la de Axel.

—Como la nuestra—corrigió—. Es nuestra canción, yo sólo la cantaré.

—Muy lindo y todo, pero necesito que te bañes—pidió Griffin—. No puedes volver a Leosville así, faltan horas para que empieces a oler feíto—se llevó una mano a la nariz e hizo una mueca de asco, Axel rió y le dio un pequeño empujón en el hombro.

Caminó hacia su ropero y buscó la ropa que iba a colocarse. Escogió una camisa roja y unos pantalones de jeans, tomó sus medias y su ropa interior y corrió hacia el baño para asearse un poco. T.J y Gino se encargaron de recoger el desastre que Axel tenía en su habitación mientras que Griffin acomodaba la cama y el escritorio.

Para no haber dormido, tenía la cama hecha un desastre.

— ¿Piensan que esto de Jane es algo pasajero? ¿Qué se le pasará con el tiempo? —preguntó Gino, Griffin suspiró.

—No lo sé, Gino—dijo—. Axel estaba muy enamorado de Jane, imagino que eso con el tiempo se supera, pero creo que mientras él la siga buscando y ella no dé la cara, las cosas pasarán lento.

—Eso es lo que temo—comentó T.J con preocupación, no quería que Axel sufriera.

Axel era un chico sensible, por mucho que él lo negara, le dolían las pequeñas cosas y se sentía culpable a pesar de que él no tuviese la culpa. Ellos sabían que lo que estaba sucediendo, seguiría sucediendo hasta que Jane no apareciera y le dijera lo contrario a Axel, que no fue su culpa, que ella sólo debía marcharse.

Pero, ¿cómo hacer para que eso sucediese? Ver a Jane era casi imposible, no sabían en donde se encontraba y nadie de su familia cooperaría para eso. Lo entendían, pero necesitaban las respuestas.

Axel las necesitaba.

—Wow, pero ese sí es un cantante estrella—silbó Griffin al ver a Axel salir—. Acabo de quedar deslumbrado con tanta belleza—Axel negó riendo.

—Gracias por ayudarme a acomodar esto—les dijo observando el lugar.

—Para eso estamos los amigos, para limpiar tus desastres; de forma literal—respondió Griffin, T.J rio y caminó hacia la puerta.

—Ya debemos irnos al aeropuerto, tenemos una canción que grabar.

— ¿Listo Axel? —preguntó Gino, éste asintió y los cuatro caminaron hasta salir de la casa e ir directo al aeropuerto.

~•~

—Fue ahí en donde vi a Jane por última vez—señaló Axel desde lejos—. No creí que sería la última vez, me hubiese quedado más tiempo. Aprovechado más estar a su lado.

Griffin lo tomó del brazo y lo llevó hasta una de las puertas de embarque. Ahí se encontraba el capitán del jet que T.J había pedido y caminaron detrás de él para subir. Axel se sentó en el primer asiento que encontró, sacó de su mochila una libreta y comenzó a escribir.

Se le había ocurrido una idea para una canción. Quizás no para un single pero funcionaba para desahogarse con él mismo.

«Te crees muy linda rompiendo corazones, sé que me debo cuidar ahora eres de las que se acercan, te gusta recibir pero no dar, creí que de ti podía esperar más»

Debía superarla, debía saber que no podía hacer nada para que ella regresase. Aceptar sus acciones sonaba fácil pero hacerlo era lo complicado, ¿cómo podía hacerlo? ¿Cómo lograría dejar de pensar en ella?

Volteó a ver a T.J quién se encontraba mirando por la ventana, se levantó del asiento y caminó hacia él. Le colocó el libro en las piernas llamando su atención.

— ¿Y esto?

—Quiero escribir una canción—le dijo—. Creo que tú puedes ayudarme.

—Pensé que Griffin era quién podía ayudarte más.

—Tú entiendes el sentimiento que quiero expresar—respondió. T.J tomó la libreta y leyó lo que tenía escrito.

Anotó unas ideas en la hoja y a partir de ahí sacó el ritmo de lo que sería la batería, no tenían instrumentos en ese momento pero se imaginaba cómo podía sonar la canción. Una canción de despecho, algo que te hiciera sentir la rabia de Axel sentía al saber que Jane huyó.

Los consejos de él para el mundo.

Lo que no deberían hacer con una persona si no quieren salir lastimado.

«Cuando te guste una chica,

Amigo, ven y escucha lo que te diré,

No te confíes, no huyas pero no esperes,

Al final ellas siempre te dejan»

Durante el viaje Gino durmió, Griffin hablaba con la aeromoza y T.J y Axel se enfocaron en escribir una canción, al menos el inicio de ella. Sin instrumentos no podían hacer mucho, pero podían imaginar y tararear lo que podrían crear.

«Se creen muy lindas rompiendo corazones,

Cuídate de ellas, son las que más se acercarán,

Son las que les gusta recibir pero no dar,

De esas chicas nunca esperes de más»

—Cuando tenía doce me gustaba mucho una chica que era mayor que yo—confesó T.J, Axel lo miró curioso y deseó saber más—. Nunca salí con ella, no me prestaba el mínimo de atención, pero lograba ilusionarme sin hacer nada. Sólo con una mirada, creo que ella es la clase de chica que deber huir, así como lo es Jane ahora.

—Alejarse de Jane—volteó a ver a la ventana—. ¿Qué sucede si no quiero? ¿Si tengo miedo de dejarla ir porque ella ya me dejó a mí primero?

T.J lo miró y bajó un poco la cabeza, él no sabía que responder. Tampoco quería responder, Axel parecía estar tranquilo pero él sabía que se estaba aguantando las ganas de lanzar todo a la basura. El tiempo que llevaba conociéndolo le había hecho entender muchas cosas respecto a él.

Era un chico sensible.

Demasiado sensible.

Y con los chicos sensibles se tenía que tener cuidado al hablar, podía salir algo mal si no se dijese con el tono o en el modo que debía.

Tampoco podía hablar mal de Jane, ella no lo merecía por muy mal que se hubiese portado. Si no fuese por ella posiblemente Axel no estaría en el grupo, o bueno, si no fuese por ella, no habría grupo.

—Creo que cada uno se toma el tiempo que necesita para sanar—contestó sin responder realmente su pregunta—.Y cada uno sana de diferentes maneras, puede que la de ella era alejarse de todo.

— ¿Sanar de qué?

—De todo. De la vida, de los problemas, de nosotros o de ella misma; no sabría decirte, yo no la conocía como tú.

—Ese es el problema, ¿sabes? Que a pesar de que la conocía más que nadie, no logro entender por qué quiso alejarse. Creo que es algo que no puedo superar tan fácil, ella no es de las que uno olvida. ¿Comprendes?

T.J asintió.

Aunque en realidad, no podía entender lo que Axel sentía. Nadie excepto él entendía lo que era estar con alguien un día en donde todo parecía estar de maravilla y que al siguiente, te cortara por teléfono.

Nadie lo entendía y deseaba que nadie más lo pudiese entender.

Era una realidad trágica.

Pero era su realidad ahora.

Sin Jane.

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A poco capítulos del final #DíadeKloss

Aquí un meme para que me amen xd