La noche se cernía sobre el bosque, y el resplandor de la luna llena iluminaba el camino de Jimin y Jungkook. La reciente alianza con los clanes había traído consigo una renovada esperanza, pero también la certeza de que el conflicto estaba lejos de terminar. El aire nocturno estaba cargado de tensión mientras avanzaban hacia el campamento que el líder del clan les había sugerido como su próximo destino.

El campamento, una serie de tiendas y construcciones hechas de materiales naturales, estaba situado en una colina que ofrecía una vista panorámica del entorno. Jimin y Jungkook llegaron al atardecer, siendo recibidos con una mezcla de respeto y curiosidad por los habitantes del campamento. Sabían que esta reunión era crucial para comprender mejor la amenaza que enfrentaban.

El líder del campamento, un alfa de presencia autoritaria llamado Han, los invitó a su tienda principal. Su mirada era penetrante, y sus gestos precisos revelaban la experiencia acumulada a lo largo de los años. Jimin y Jungkook se sentaron frente a él, ansiosos por obtener información que pudiera cambiar el rumbo de su situación.

—Hemos escuchado sobre su situación —dijo Han con voz grave—. Los hombres que los atacaron son parte de una organización secreta conocida como la “Sombra del Lobo”. Su objetivo principal es recolectar omegas con habilidades especiales y usarlos para sus propios fines.

El nombre “Sombra del Lobo” resonó en la mente de Jungkook como un eco ominoso. No era algo que hubiera escuchado antes, pero la descripción encajaba con la brutalidad que había experimentado. Se volvió hacia Jimin, quien mantenía una expresión seria, claramente procesando la nueva información.

—¿Qué tipo de habilidades buscan en los omegas? —preguntó Jimin, su voz firme.

Han se inclinó hacia adelante, sus ojos reflejando una intensidad preocupante.

—Los omegas como tú, Jungkook, son especialmente valiosos. Tienen la habilidad de potenciar la fuerza y los poderes de los alfas a través de su vínculo. La Sombra del Lobo quiere controlar estos poderes para sus propios fines, y para eso necesitan a omegas como tú. Además, hay rumores de que buscan algo más, algo que podría cambiar el equilibrio de poder en nuestra región.

Jungkook sintió una ola de ansiedad recorrer su cuerpo. La idea de ser un medio para un fin tan oscuro era desalentadora, y su corazón latía con fuerza al imaginar lo que podía haber en juego. Jimin notó la inquietud de Jungkook y le dio una ligera presión en el hombro, ofreciéndole apoyo.

—¿Cómo podemos detenerlos? —preguntó Jimin con determinación—. ¿Hay alguna forma de acabar con su influencia y proteger a los omegas?

Han asintió, reconociendo la seriedad de la pregunta.

—La clave para detenerlos es encontrar su base de operaciones. La Sombra del Lobo tiene varios escondites, pero el principal está ubicado en una fortaleza oculta en las montañas del norte. Es un lugar bien protegido, pero si podemos infiltrarnos y desmantelar su estructura, podremos debilitar su influencia y proteger a los omegas.

Jungkook y Jimin intercambiaron miradas, entendiendo la magnitud de la tarea que tenían por delante. La fortaleza en las montañas del norte era una fortaleza formidable, y la idea de infiltrarse en ella parecía una misión casi imposible. Sin embargo, sabían que no podían rendirse. La seguridad de todos los omegas estaba en juego.

—Nos prepararemos para la misión —dijo Jimin, su voz llena de resolución—. ¿Tienes algún consejo o información adicional sobre la fortaleza?

Han asintió, poniéndose de pie y acercándose a una mesa donde había un mapa extendido. Señaló la ubicación de la fortaleza en el mapa, destacando las áreas de mayor seguridad.

—La fortaleza está protegida por varias capas de defensas mágicas y físicas. Tendrán que ser cautelosos. Los guardianes de la fortaleza son muy poderosos y están entrenados para detectar intrusos. También deben tener en cuenta las trampas y los hechizos que protegen el perímetro.

Jungkook examinó el mapa con atención, sus dedos tocando las áreas marcadas. Sabía que la misión sería peligrosa, pero la determinación de proteger a los demás lo mantenía enfocado. Jimin se acercó a él, su presencia tranquilizadora a pesar de la gravedad de la situación.

—Estaremos preparados —dijo Jimin—. Agradecemos la información y el apoyo que nos brindas.

Han asintió y les ofreció un equipo básico para la misión: pociones, hechizos protectores y herramientas necesarias para enfrentar las trampas.

—Buena suerte en su misión. La región entera depende de su éxito. Manténganse alertas y regresen con vida.

Con una nueva determinación, Jimin y Jungkook se despidieron de Han y se prepararon para su viaje hacia la fortaleza. Mientras caminaban de regreso al campamento, Jungkook sintió una mezcla de ansiedad y esperanza. La misión era arriesgada, pero también era una oportunidad para cambiar el destino.

El viaje hacia las montañas fue agotador, pero la necesidad de enfrentar la amenaza les daba fuerzas. A medida que se acercaban a la fortaleza, la vegetación se hacía más escasa y el terreno más accidentado. La fortaleza se alzaba majestuosamente en la cima de una colina, su estructura imponente y fortificada.

Jimin y Jungkook se ocultaron en las sombras, observando la fortaleza desde una distancia segura. La vista era impresionante y aterradora al mismo tiempo. Sabían que infiltrarse en un lugar tan bien protegido sería un desafío monumental, pero estaban listos para enfrentarlo.

—Recuerda lo que hemos aprendido —dijo Jimin en voz baja—. Debemos mantenernos tranquilos y seguir el plan.

Jungkook asintió, su mente enfocada en la tarea que tenían por delante. La noche estaba silenciosa, y la luna llena iluminaba su camino mientras se acercaban a la fortaleza. Cada paso que daban era un paso hacia lo desconocido, y la tensión era palpable.

Con cuidado, comenzaron a moverse hacia la fortaleza, utilizando los hechizos protectores y las herramientas que habían recibido. Las defensas mágicas eran evidentes, y tuvieron que emplear sus habilidades para sortear las trampas que encontraban en el camino. La infiltración era complicada, pero la determinación y el vínculo entre ellos los mantenían avanzando.

Finalmente, llegaron a una de las entradas de la fortaleza, oculta tras una serie de hechizos de invisibilidad y barreras mágicas. Jimin utilizó un hechizo especial para desactivar las barreras y permitió que ambos entraran en el interior. La fortaleza estaba oscura y silenciosa, pero la sensación de peligro era inminente.

A medida que avanzaban, encontraron varias salas y corredores, cada uno más imponente que el anterior. Sabían que debían encontrar el corazón de la fortaleza, el lugar donde se orquestaba la operación de la Sombra del Lobo. Mientras se adentraban más, escucharon murmullos y risas lejanas, lo que indicaba la presencia de los guardianes.

Jungkook y Jimin se movían con cautela, evitando ser detectados. La tensión aumentaba con cada paso, pero la seguridad de los omegas y el futuro que esperaban les daba el valor necesario para continuar. La misión estaba lejos de terminar, pero estaban más decididos que nunca a completar su tarea.

La noche avanzaba, y la fortaleza parecía un laberinto interminable. Sin embargo, Jimin y Jungkook estaban dispuestos a enfrentar cualquier desafío que se les presentara. La verdadera batalla estaba a punto de comenzar, y su vínculo y determinación serían la clave para superar los obstáculos que les aguardaban.

Con una última mirada hacia el futuro incierto, Jimin y Jungkook se adentraron en el corazón de la fortaleza, listos para enfrentar la verdadera prueba de su coraje y su destino.