Es una noche fría y ventosa en Sevilla ideal para comer platos calientes.
María revuelve y prueba una cazuela de mariscos cuyo olor se expande por toda la cocina.
Las comidas a base de frutos del mar tienen un significado especial para ella porque la remiten a un pasado donde el amor le puso fin al dolor.
Juan se acerca a la cocina atraído por el
aroma al Mediterráneo que despertó su apetito.
Sorprende a su mujer tomándola de la cintura y dándole unos besos cortos y tiernos en el cuello.
Después toma una cuchara y prueba un poco de la cazuela.
-Exquisito.
¿En qué estás pensando?
-En el día en que te conocí y todo lo que pasó antes y después de eso.
-Para no recordar ese día con la comida que estás haciendo.
Cuéntame lo que piensas. Quiero conocer todos los detalles.
Pero antes déjame crear un ambiente romántico para acompañar el tema.
Juan se dirige al comedor y pone un mantel rojo con servilletas del mismo color, dos candelabros de plata con velas blancas reemplazan a la luz de la lámpara cuando esta se apaga y la música instrumental termina completando la escena.
María lleva la comida, se sientan a la mesa para saborearla,y comienza su relato.
-Cuando llegamos al restaurante El Pulpo Andaluz, buscamos una mesa para cuatro, en la cuarta silla colocamos las carteras, ya sabes que es difícil que una mujer salga sin ella.
Estábamos hambrientos , desde que salimos no habíamos comido nada ,cuando el mozo del restaurante se acercó a nosotros para preguntar que deseábamos comer, pedimos una entrada de tortillitas de camarones luego pedimos como plato principal,cazón en adobo, y para beber pedimos manzanilla.
No tuvimos que esperar las tortillitas por mucho tiempo,por fortuna .
La presentación y sabor de los platos era excelente.
Estaba lleno de gente a esa hora,si llegábamos a tardar un poco más, no conseguíamos lugar.
Manolo nos dijo que es el mejor restaurante de la zona, por eso siempre se llena de gente y es el preferido de sus padres ,y de muchos.
También es muy lindo, tiene cuadros de la ciudad, y de la comida que allí se hace, también hay cuadros de pulpos, en referencia al nombre del restaurante. El servilletero me encantó,me hubiese gustado llevarlo de recuerdo, es una caracola color rosa pálido con el nombre del restaurante en negro y al lado de este tiene un pequeño pulpo. Los manteles de color crema, igual que las servilletas también tienen el nombre del lugar y el pulpito. Nos trajeron la manzanilla en una jarra negra con la forma del molusco que le da nombre al restaurante, hasta los vasos y platos, vienen con el dibujo del octópodo .Quedé encantada con todo eso, nunca había visto algo de tan buen gusto, ya esos detalles daban cuenta de que no es un lugar cualquiera.Los padres de Manolo, sabían elegir donde pasar un momento agradable mientras se disfruta, de una buena comida. Un lugar muy distinguido sin lugar a dudas.
Nunca había estado en un lugar así.
- María conozco el lugar no te olvides que ahí te vi por primera vez. Mi familia suele reunirse ahí los sábados por la noche.
- Lo sé pero quería contarte mi experiencia, en que consistió el almuerzo y lo que vivimos y charlamos ese día, nunca te hablé de ello. Eso no lo sabes.
- Tienes razón, continúa.
- Mientras comíamos, Hermesinda comentó, que el primer aniversario de casados, Manolo la llevó a cenar ahí, me dijo que de noche se ve muy romántico, ya que tienen una iluminación tenue ,y en las mesas colocan dos candelabros, para dos velas cada uno, y música instrumental.
-La cena a la luz de la velas es algo clásico entre la gente romántica.Por eso las agregué a nuestra mesa.
-Sí,son un hermoso detalle. Te sigo contando.
Cuando terminamos de comer la entrada y mientras esperábamos el plato principal , apareciste tú.
Hermesinda fue la primera en verte, y en
decirme que Juan Peña Domínguez ingresó al restaurante,sus ojos brillaban de alegría,daba la impresión de que estaba esperando ese instante.Lo primero que me preguntó fue si me gustabas.
Miro hacia atrás y te veo hablando con uno de los mozos. Vi que decías todo con una sonrisa y que la persona a la que te dirigías, también sonreía, por lo cual deduje que tenían una conversación muy agradable.
¡Por Dios! Apenas te vi me sentí atraída por ti.
Mi primera impresión fue la de un hombre muy masculino,muy varonil.Siempre me gustaron los morenos , de estatura alta,
parecía que alguien te hubiese creado para mí.Cuando Hermesinda me hablaba de ti , yo te imaginaba de otra forma, bajito, gordo,con anteojos, nunca tan apuesto.
Pero nunca me creí mujer como para un hombre como tú , pensaba que un hombre
con tantas mujeres no podía fijarse en mí.
Cuando les comentaba esto a mis amigos , Manolo me salía al cruce diciendo que tendría muchas mujeres pero ninguna como yo, que debía valorarme más.
En un momento miré hacia el mostrador,y ahí estabas tú, hablando en forma amigable con el dueño y mientras mis ojos recorrían en cámara lenta tu espectacular anatomía tú volviste tu mirada hacia mí ,le dijiste algo a ese hombre y me volviste a mirar.Me ruboricé al pensar que habías notado que te observaba y mis mejillas se encendieron ante tu penetrante mirada que desnudaba mi alma.
- Cuando te vi me gustaste mucho, por eso le pregunté si te conocía y si ibas con frecuencia,me dijo que era la primera vez que te veía. Le pregunté si ya les habían llevado el pedido y me dijo que faltaban unos minutos entonces le encargué que cuando lo hagan te entreguen una nota  que escribí en ese momento en un papel que me dio José.
- ¡Sí! ¡Qué lindo detalle tuviste!Apenas se retiró el mozo. Hermesinda y Manolo,ya querían saber de que se trataba.
Estaban más ansiosos que yo por saber que decía el mensaje,hasta hubo un intento por parte de Hermesinda de sacármelo de la mano,pero no pudo .
Mi boca y mis ojos se abrieron ante la sorpresa de ver tu nombre y tu número de teléfono escrito en ese papel.
Por un momento me invadió la duda acerca de como debía proceder pero se disipó al recordar los consejos que mi madre me decía con respecto a esas situaciones.
La decisión que había tomado en ese momento era que no debía  llamarte porque aún no te conocía y no quería que tengas una mala imagen de mí,más si estabas acostumbrado a salir con tantas mujeres como decían.
Ellos insistían en que debía llamarte, sobre todo Manolo, que me aconsejaba que no pierda la oportunidad porque se notaba que te sentías atraído por mí.Y fue él quien en medio de la conversación me dijo que no me sacabas la mirada de encima.
Fue entonces cuando  volví a mirar hacia tu dirección y tú alzaste el vaso que tenías en la mano. Y entonces te sonreí.
La abuela de Manolo vivía en Cádiz. ¿Tú la conocías?
-No.La farmacia tiene muchos clientes,
puede ser que la tenga vista.
-¿Hermesinda y Manolo no habrán armado todo esto para qué te conozca?
-No creo ,si lo han hecho yo nunca supe nada.¿Por qué lo preguntas?
-Porque Hermesinda lo que quería era que me case.
-Ni Manolo,ni Hermesinda tienen que ver con todo esto.Es obra del destino.
-Te creo, ahora déjame continuar.
-Adelante.
-Tú te retiraste, pero nosotros continuamos ahí por una hora más.
Después de eso ,fuimos directo a la casa , decididos a dormir la siesta. Ya es una costumbre nuestra y a a esa hora sentíamos el cansancio, nos habíamos levantado muy temprano.
Al despertar salimos a tomar café a un bar y de ahí nos fuimos al mercado de abastos, para hacer unas compras porque no teníamos nada para comer . Dejamos todo lo que compramos en el coche ,y fuimos a caminar por la plaza.
Había mucha gente paseando, nos acercamos a uno de los tantos puestos de flores y compramos algunas para decorar el interior de la casa.
Después de haber visto todo, nos volvimos, y guardamos todo lo que compramos,
distribuimos las flores en varios jarrones y los colocamos en diferentes sectores de la casa.
Me insistieron para que te llame pero yo no lo consideraba adecuado, si bien te veía como un hombre atractivo ,con fama de buena persona, me parecía inapropiado ese proceder de mi parte. Si algo tenía que pasar entre nosotros, así sería.
Son terribles querían que vaya a la farmacia a comprar algo, pero me negué.
No soy esa clase de mujeres que tienen facilidad para tratar con los hombres que le gustan, más bien, cuando un hombre me atrae trato de que no lo note, prefiero tenerlo como amigo y después Dios dirá.
Y tú no tenías por que ser la excepción a esa regla.
Por otro lado, Cádiz está a más de una hora de Sevilla, si viajamos en auto, demasiado lejos para alguien como yo que no sabe manejar y no le gusta viajar en transporte público.
Por eso pensé que lo mejor era mantener la distancia con respecto a ti. Confiaba en que Dios pondría otro hombre en mi camino, y que solo tenía que esperar un poco más.
Estaban insoportables ese día, yo parecía la hija y ellos los padres obsesionados por casar a su descendiente con el mejor hombre que conozcan.
Hasta altas horas de la noche estuvieron hablando de ti, comentando todo lo que sabían a través de terceros, ya que al ser dueño de una farmacia con tantas sucursales no son pocos los que te conocen.
Creí que cuando mis ojos cierren y Morfeo me bese en la frente iba a soñar contigo pero no fue así.
La noche estaba hermosa ese día y fuimos a caminar por la playa, el mar estaba tranquilo y en ese momento me hubiese gustado tener un marido, para pasear de la mano,como lo hacían Hermesinda y Manolo. Siempre me gustó la pareja que hacen , unidos, cariñosos, cómplices,con una buena comunicación,no todos los matrimonios pueden tener una relación tan buena , en mi opinión ellos son admirables, un matrimonio modelo.
Mi hermana de alma, no hacía más que decir fantasías acerca de un encuentro entre tú y yo, lo que motivó que su esposo y yo comencemos a reír.
Cuando llegamos a la casa eran las tres de la madrugada, tomamos una limonada , y cada uno se fue a su habitación, había llegado la hora de dormir.
Pero yo no podía dormir. En la soledad de mi dormitorio,los recuerdos se hicieron presente. Me vi en el pasado junto a mi hermano y junto a nuestros amigos, vino a mi mente el  día en que Manolo nos invitó a visitarlo en la casa de su abuela,la casa donde estábamos en ese momento. Recuerdo que Leo estaba celoso porque Hermesinda estaba encantada con Manolo,en la mirada de ella ya se notaba que el amor había hecho nido en su corazón, se la veía risueña y feliz, era la primera vez que parecía enamorada. Y eso a Leopoldo le molestaba muchísimo porque mi hermano estaba enamorado de ella, pero Hermesinda lo quería solo como a un hermano, y si tenía que buscar a un hombre para casarse no sería Leopoldo.
Salí de mi dormitorio, al pasar por la habitación de ellos noté que estaban despiertos porque unas voces provenían de ahí y caminé despacio hasta la cocina para que no me oigan.
Miré hacia el lugar donde se había sentado Leopoldo en esa oportunidad y recordé como nos habíamos ubicado ese día en la mesa. Luís y Federico estaban sentados uno al lado del otro, a la derecha de Luís se encontraba Hermesinda,a su lado Manolo, ella había apoyado su brazo sobre el hombro de él quien la miraba sonriente y como con ganas de llenarla de besos.
Al lado de Manolo estaba yo ,y a mi lado, Leopoldo. Él los miraba serio, con el ceño fruncido, se notaba lo mal que le caía esa situación porque siempre tuvo la ilusión de casarse con ella y ahora tenía a su amada  frente a él haciéndole caritas a un hombre que había conocido unos días atrás en la playa. Estaba que hervía de celos y no lo podía disimular.
Cuantos recuerdos, que linda época.
Dicen que el pasado es mejor,no sé si será siempre así, pero en este caso sí.
Era mejor cuando estábamos todos y había un sueño por el cual luchar .
Desde que Leo se fue, solo vivía cada día, no tenía sueños, no tenía proyectos, no pensaba en el futuro, solo existía el presente para mí.
Si estaba bien o mal no lo sé.Era mi forma de vivir.Una forma simple en la que transcurría mi existencia, mientras esperaba el momento de la partida.
Fui hacia la heladera, saqué la leche, la calenté y llené una taza , la bebí y volví a mí habitación.
Como lo extraño, siento su ausencia cada minuto de mi vida.
Ni un día dejé de pensar en él. Ni una noche me dormí sin derramar una lágrima por él.
¿Qué estará haciendo ahora?¿Con quién estará?¿Cómo estará?¿Qué habrá comido?
¿Lo tratarán bien?¿Pensará en mí?¿Y en sus amigos? Cuando todo termine¿Lo volveré a ver? Me preguntaba yo. Recuerdo cuando desde el barco nos gritaba  "volveré ,tengan fe, volveré" .
Me preguntaba si él tendría algún sueño y si lo tenía porque lo aplazó por una realidad tan deprimente y violenta como la guerra.
¿Por qué eligió el camino hacia la muerte,en lugar de elegir el camino hacia sus metas?
¿Estaría despierto cómo yo?
Eran las cinco de la madrugada y no podía dormir.La casa se encontraba en silencio,las voces en la habitación de Manolo y Hermesinda,habían callado hacía bastante, todos dormían , menos yo .La habitación que me tocó a mí, tenía una ventana que daba a la calle , y se escuchaban los sonidos que producían los coches al pasar , así como las voces de los transeúntes que madrugaron ya sea por placer o porque debían ir a sus trabajos.
Quería ponerle alas a mi alma y volar hasta el más allá, pasar entre las espesas nubes e ingresar al cielo.Ver el rostro de mis padres, de Dios y de los santos de los que soy devota, y desde esa altura mirar hacia la tierra para seguir cada segundo de la vida de mi hermano. Convertirme en su ángel guardián ,protegerlo cada vez que se encuentre en peligro, convertirme en su voz interior para avisarle cuando algo malo se acerca y que de esa manera pueda tomar las medidas necesarias para evitarlo. Siendo yo invisible e inmortal podría estar a su lado siempre aunque él no me vea y ni siquiera pueda imaginar mi presencia en el lugar.
Perdón pero no puedo evitar llorar, a veces creía que vine al mundo para sufrir, quería que se dé vuelta la moneda de la vida y me muestre su otra cara, la que no duele, la que no golpea,la cara risueña e ilusa, la que no produce lágrimas al menos que sean de emoción. ¿Por qué hay qué sufrir tanto?¿Será para purificación del alma, para prepararla para ese otro mundo,para esa otra vida, qué nos espera a todos al morir ?
María Milagros es mi nombre, pero creo que el que mejor me va es María de las Tristezas,o María de las Angustias, porque en los últimos tiempos solo pensaba cosas tristes, cosas que me hacían llorar y que me amargaban el día.
Esa madrugada no podía cesar de llorar busqué un pañuelo para secarme las lágrimas pero no lo encontré creía que tenía uno en el cajón de la mesa de luz, pero no fue así . Me dirigí al armario para buscar mi maleta y sacar de allí un pañuelo, y ahí estaba ese juego de pañuelos de color rojo con mariposas bordadas en amarillo que me había comprado Leopoldo para salir del apuro una tarde de invierno que salimos en busca de comestibles, y yo que estaba resfriada,había olvidado el pañuelo en casa.
Por Dios, todo me recordaba a él, es que son tantas las cosas que vivimos juntos.
Vi los dos libros que cargué para que me acompañen en los días que estuviéramos en Cádiz. Y después de secarme las lágrimas tomé uno de ellos y comencé a leer.
"Acuérdate de una cosa de tu decisión depende la felicidad de tu vida" dice Tolstoi en La guerra y la paz.
¿Será así cómo dice Tolstoi? Y aunque tomes esa decisión de ser feliz¿Cómo se puede lograr en medio de la tormenta? ¿Cómo ser feliz cuando la realidad te muestra la ausencia de aquellos con quiénes pasaste los mejores años de tu vida y los recuerdos te persiguen trayéndolos al presente?
Tendría que preguntarle a las personas que pasan hambre, a las que tienen familiares con enfermedades terminales, a las que perdieron todo si son felices y si me dicen que sí que me digan también como lo han logrado.Porque uno puede decidir y desear ser feliz .¿Pero qué pasa cuando las circunstancias se ponen en el medio entre tú, tus deseos y tus decisiones ?
También dice " no hay más que una manera de ser feliz, vivir para los demás"no estoy segura que esto sea así.¿Qué va a pasar entonces si ellos ya no están?
De lo que sí estoy segura es que solo cuando logré superar la partida de mis seres queridos, recién ahí pude volver a recuperar la felicidad porque no pude ser feliz en medio del dolor. Para mí el camino de la felicidad es aceptación y superación. Cuando se logra esto es porque la herida ya cicatrizó .
Guardé el libro . Busqué ropa ,y me fui a bañar, lo necesitaba para relajarme.
Manolo y Hermesinda seguían durmiendo y no quería despertarlos.
Cuando salí del baño fui a la cocina a prepararme un café con leche y unas
tostadas , las cubrí con mermelada de zanahoria que hizo el querido Manolo. Estaba espectacular, me tiene que dar la receta, nunca antes había probado algo así.
Ya se sentía el cantar de las aves que recibían el nuevo día. La primavera y el verano son las estaciones que más me gustan.Una ,porque vuelven a renacer las flores, cuyos colores aportan alegría y vida donde quiera que se encuentren y cuyos perfume resulta tan placentero al olfato.
La otra, porque el sol que sale para todos es más fuerte y por tanto da más calor.
Y lo más hermoso de la vida es eso, volver a florecer y mantenerse en ese estado, aún en
medio de las inclemencias de la vida.
Y mantener el calor del alma como la llama del fuego en el hogar evitando el frío que quiere helar nuestro espíritu.
Primavera -verano , renacimiento y calidez interior, es justo lo que en esa etapa de mi vida sentía que por momentos me faltaba y lo que más ansiaba tener a cada instante.
El desayuno estaba riquísimo y mis amigos aún no habían despertado, no tenía sueño y el aburrimiento se apoderaba de mí , para combatirlo fui a caminar por la playa, y de esa manera podía bajar también todas las calorías que acababan de ingresar a mi cuerpo.
-Hay muchas maneras de bajar las calorías, yo conozco una muy efectiva y natural.
-Juan, ya sé en que estás pensando, yo te estoy hablando de lo que viví, de lo que sentía poco antes de estar juntos y tú me sales con esto.
-El clima romántico despierta en mí otro tipo de apetito.
Dime ,¿sigues creyendo qué viniste a sufrir?
-No ,desde que estoy contigo.Por eso dije creía.Tú eres el reverso de la moneda ,la cara dulce, y linda de la vida.
Ahora sé que todos venimos al mundo para ser felices y tú formas parte de esa felicidad.
Contigo aprendí que los sueños y los proyectos son renovables,que el pasado no es mejor ni peor que el presente,que éste último es un suspiro que va a formar parte de un largo pasado,donde se intercala lo malo y lo bueno y que depende de nosotros si nos aferramos a él o si lo dejamos para continuar.
-¿Y tú qué decidiste?
Decidí continuar , y hoy no te quedas con hambre.
Y después de calmar nuestro apetito,te sigo contando.
-¿Nuestro?
-Sí, nuestro,soy tan débil ante la carne como tú.