Capítulo 18:

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Capítulo 18: Por su parte, Fantasmano se encontraba caminando por las calles de la Aldea Humana, ya que allí había decidido ir para darse un paseo, hasta que se topó con Komachi siendo perseguida por la Jueza Shikieki, la cual estaba buscando venganza, esta vez no porque su Asistente se había dormido en el trabajo, todo lo contrario, esta vez era porque le había arruinado la Temporada 2 de la serie "Los Soprano" y también de "Escobar: El Patrón del Mal".


- ¡Esperen, agh, agh, Dios, que rápida que es la Jueza! Dijo Fantasmano, recuperando el aliento, para que luego cayera al suelo por la velocidad sobrenatural de la pelirroja.


- ¡Volvé para acá, yegua hija de mil puta, que te voy a matar y luego me haré una rica cena con tu alma! Le gritó la peli verde, mientras que su Asistente escapaba de su castigo.


- ¡Esperen, yo también estoy en la causa! Gritó Fantasmano, yendo hacia donde se estaba llevando a cabo la persecución.


Mientras tanto, en las Montañas Youkai, Suwako se levantaba temprano para ver a sus queridos sapos en las lagunas de la zona montañosa, pero cuando bajó, siempre protegida por Kanako y Sanae, sintieron que el ambiente estaba muy frío, como si hubiera caído una sorpresiva nevada, por lo cual las tres, luego se les unió Yoshika, vieron que las lagunas estaban totalmente congeladas y sabía muy bien la Diosa de la Montaña quien era la responsable de todo ese tremendo "atentado".


- ¡CIRNOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO! Gritó con todas sus fuerzas Suwako, mientras que en los Bosques de las Hadas, la peli azul junto a sus amigas se estaban matando de la risa por la broma que le habían hecho a la Diosa.


- ¡Jajaja, la volvimos loca a Suwako, jajajajaja! Río Cirno, mientras que continuaban disfrutando de su graciosa victoria.


Mientras tanto, Shikieki había perdido el rastro de Komachi a quien ansiaba darle una paliza por el spoiler a sus series que miraba, cansada, decidió darse un descanso, ya iría tras su Ayudante en los Tribunales.


- ¿Está bien, Su Señoría? Preguntó Fantasmano, quien le pasó una botella de agua.


- Aww, gracias, eres muy tierno -Toma la botella de agua- Gracias, estaba muerta de sed, no puedo creer que la haya perdido a la glotona de Komachi. Se sintió triste por no poder cumplir con su venganza.


- Ya se va a poder vengar, por ahora descanse, Su Señoría. Le aconsejó el muchacho, quien le tomó de las manos a la Magistrada, haciéndola sonrojar.


- ¿Sabes? Nunca nadie había sido tan amable conmigo, salvo mis amigos en la Mafia y Komachi, pero tú eres mucho más tierno, eres como ellos, pero en otro nivel. Dijo ella, tomándole de la mano a Fantasmano.


- ¿Enserio? Yo hace unos meses rompí con la chica que me gustaba, no éramos compatibles por desgracia, pero veo que usted es muy tierna, a pesar de ser temida en toda Gensokyo. Respondió el chico de cabellos blancos.


- Bueno, en Gensokyo no, porque aquí es territorio de la Miko Hakurei, mi deber es juzgar a las almas de los vivos y los muertos. Dio a conocer sus funciones como Jueza.


- Debe ser agotador. Dijo interesado Fantasmano.


- Sí, en especial si tu Asistente se la pasa durmiendo y se va a tragar toda la comida en el bar de Mystia, ayyy, Dios Mío. Exhaló Shikieki, cuando sintió que el extranjero la seguía abrazando.


- Dese un descanso, no merece una linda chica como usted tener que volverse loca por su trabajo. Dijo el peli blanco, sin soltarla de su abrazo.


- Tienes razón -Respondió ella- ¿Te gustaría venir a...dar una vuelta? Propuso la Jueza, sonrojada.


- Bueno, vamos, me gustaría. Aceptó Fantasmano, mientras que se iba a dar una vuelta con ella.


A su vez, Benson había decidido darse una vuelta solo por los alrededores de la Mansión Scarlet, por fin había podido dormir bien sin que nadie le hubiera molestado. 


- Siempre andas durmiendo, ayer no te reté pero dejaste que Marisa entrara a la Biblioteca y se llevara varios libros de Patchouli-Sama, ¡¿Qué pasa por tu cabeza, Meiling?! ¡Dios! Le retó Sakuya, Benson escuchó todo y luego de verla retirarse del sitio de guardia, se acercó a la Guardiana, la cual lloraba a más no poder.


- ¿Estás bien? Preguntó el Jefe de Mordecai y Rigby, pasándole un pañuelo.


- No, nunca puede salirme nada bien, Sakuya me retó por no haber detenido a Marisa, pero es que vi que Alice se la iba a llevar para castigarla, a veces pienso que soy una inútil para esto. Se lamentó, hasta que sintió el abrazo de Benson.


- No digas eso, no es tu culpa, son cosas que pasan. A mí también me pasa que tengo que estar retando y criticando a Mordecai y Rigby, porque sino me despiden, no es bueno eso, pero no te sientas mal, tú haces un buen trabajo, hasta deberían pagarte por custodiar esta mansión. Le dio ánimos a la pelirroja, quien dejó de llorar y lo abrazó.


- Gracias, eres muy amable, nunca había conocido a alguien  que fuera así de cariñoso conmigo, gracias. Le agradeció la chica y le dio un beso en los labios al Jefe de Mordecai y Rigby, dejándolo totalmente ruborizado.


A su vez, pero en la Mansión del Bosque del Bambú Perdido, Rigby seguía dando unos paseos con Eirin, junto a ellos se les unieron Mokou y Eddy, mientras que Thomas seguía durmiendo en la casa, ya que estaba bastante cansado por lo del otro día, cuando habían sido convertidos en Humanos.


- Espero que no se vayan a perder la Fiesta de la Luna de la Cosecha. Les invitó, en esos momentos, Marisa, quien por sorpresa de todos, había escapado de las garras de Alice.


- ¿Qué no te convirtieron en Muñeca? Preguntó Rigby curioso.


- Lo hicieron, ahora tengo una orden de restricción de no acercarme a la casa de Alice por nada en el Mundo, peroooooooooooo. Respondió la Bruja, quien se dirigió de vuelta hacia dicho domicilio, en donde trató de ingresar por una ventana abierta, hasta que se produjo una fuerte explosión. 


- ¿Y eso? Se preguntó Montana, ya que todos habían escuchado los cañonazos.


- Alice implementó un nuevo Sistema de Seguridad Anti-Brujas ladronas. Respondió Yuuka, quien le tapó los ojos a su novio y se lanzó como un misil hacia él, quebrando la mitad de sus huesos para disfrutar del placer en él.


- Bueno "Cof, Cof", no lo volveré a hacer. Prometió Marisa, llena de humo y polvo por las explosiones, para que se desplomara en el suelo del Bosque del Bambú Perdido.


- Esta Bruja, Dios, bueno, ella tiene razón,  la Fiesta de la Luna de la Cosecha será dentro de poco tiempo, la pasarán genial. Les animó Mokou a unirse a la diversión.


- Por supuesto que allí estaremos, jamás nos la perderíamos. Respondió Eileen, mientras que seguían con el paseo por los bosques.










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