Capítulo 2:Haciendo de Cupido

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

Ya llevábamos una semana en la escuela.Parecerá poco tiempo pero en ese infierno de cuatro paredes llenas de estudio, exámenes, notas, apuntes y regaños de los profesores cada segundo que pasaba parecían años.

—¡No aguanto más!— saltó Alexia a mi lado

Ok, si Alexia tenía quejas acerca de algo malo entonces eso definitivamente era horrible.

—Dímelo a mí, no puedo más con el estrés— dijo Trianna con una expresión dramática.

Melodía y yo giramos los ojos.

—¡Solo es cuestión de poner atención!— dijimos a coro Mel y yo llevándonos un montón de miradas al segundo y luego girando a ver nuestras caras para estallar en risas

—Puntualitas— soltaron nuestras amigas bufando

Yo les saqué la lengua y seguí caminando alejada de la conversación que ellas mantenían.

—¡Y luego me dijo que soy hermosa, que mi pelo le encanta, y que le parezco tan adorable que le dan ganas de apretarme como si fuera un unicornio de peluche!— gritaba Trianna emocionada contándonos sobre su cita con... alto.

¿Con quién dijo que había salido?Andaba en mi mundo así que básicamente no las escuché.Eso solía pasarme seguido.

—Fresita— soltó Alexia sin más y yo sonreí

—¡Ufff no soy fresita, dejen de decirme así!— dio un brinquito enojada y nos quedamos mirándola.

Iba vestida completamente de rosa, con una coleta y un enorme lazo también rosado.Parecía una niña pequeña.

Las chicas y yo nos miramos y alzamos una ceja en su dirección

—¡Está bien!— giró los ojos— Oigan les conté que mi gato ayer...

—¡Nooooo!— gritó Mel— ¡Otra historia del gato y juro que me suicido!— se llevó la mano al pecho con drama

Todas explotamos en risas.

—¡Chicas, debo irme!— dijo Tri alarmada

—¿Qué pasa?— pregunté y todas se miraron

—Tengo una cita.¿Acaso no te acuerdas que lo dije hace rato?

—¡Ah claro, lo siento!— disimulé

—Bueno, me voy, Yeray me espera.

—Adiós— articulé con entusiasmo hasta que..

Esperen un momento.¿Yeray?De verdad necesito actualizar mi sistema de atención.Estaba tan distraída que no noté en qué momento Alexia también se fue dejándome sola con Mel.

—Oye, tengo que confesarte algo— me dijo en voz casi inaudible

—De hecho iba a preguntarte por eso, ayer dijiste que querías hablar conmigo algo importante y no me contaste.¿Qué sucede?

—E, yo..., me di cuenta de que estoy un poquito demasiado enamorada de tu primo Derek— escupió con rapidez y yo abrí la boca de par en par y luego fingí una sorpresa.

—¿En serio?¡No lo puedo creer Mel!— solté con sarcasmo

—¿Q-qué?Se supone que no sabías eso

—Sinceramente eres muy obvia, pareces cachorrito colado por un hueso cuando te pasa cerca o lo ves.Como ahora— me fijé en mi mejor amiga la cual parecía a punto de babearse con una vista detrás de mí

Ella me dio una mirada algo apenada, no entendía esta faceta vergonzosa de Melodía, sinceramente ella debía ser la loca, se supone que la dramática y borde era yo, osea Mel tenía el cabello pintado de verde gente.¡De verde!Si eso no era locura no podía imaginar qué era la verdad.

—¡Ahhhh!— me quejé— Luego me deberás un viaje a Francia por lo que voy a hacer

La sujeté del brazo y la arrastré con rapidez hacia donde estaba mi primo Derek hablando con...¡rayos, ese chico Egan!

Ya ni modo, tenía que ayudar a Mel así que él sería mi cómplice inconsciente en este plan.

Llegamos con los chicos y estos pararon de hablar al vernos.

—¿Eider?— me miró mi primo extrañado

—¿Podemos hablar?— dije coqueta mirando a Egan mientras lo tomaba sutilmente (o quizás no tanto) del brazo.

—¿De qué rayos tienen que hablar?—saltó Derek mirando a Egan algo enojado

Síp, ahí estaba mi primo, celoso y sobreprotector conmigo de toda una vida.Recuerdo en las fiestas de cumpleaños cuando teníamos 12, iba conmigo y se me pegaba como moco al vello de la nariz para que los chicos no me mirasen.Literalmente di mi primer beso con él espiándome, y mi casi novio me dejó por eso.

Mejor no preguntar, 15 años, mucha inocencia, primo controlador, manitas en un parque, helado de chocolate y llanto, mucho llanto, un cliché ejemplar.

—No tengo idea— dijo Egan encojiéndose de hombros— al parecer es importante

Mel nos miraba callada

—¿De qué quieres hablarme Eider?— me preguntó él con una sonrisa amable.

Falso, no te aguanto

—Es algo que no quiero que oigan— batí mis pestañas arriba y abajo exageradamente

—¡Eider!— me regañó Derek

—¡Me gusta Egan maldita sea!— grité y todos los chicos en el patio me miraron como si tuviese una nariz roja incluída Melodía

La cara de Egan era un poema por Dios.Tenía la boca abierta y era una sorpresa ¿también fingida?

¿Quién se creía este tonto?

Qué decir de Derek, osea, estaba en completo shock.Mel comenzó a pasar su muñeca frente a él y ni pestañeaba.Literal creí que le había dado algo, hasta que saqué mi pomo de agua y le lancé un poquito en la cara.

—¿Despertaste del coma?— alcé una ceja

—¿Cómo rayos te gusta mi mejor amigo?¿Cuando, cómo, en qué momento?— decía Derek confundido

Giré los ojos ante el inminente drama de mi primo y agarré a Egan de la mano llevándomelo de ahí con rapidez ante las miradas de todos y él se dejó arrastrar como una ramita por el río.

—¡Mel!¿Me harías el favor de quedarte con Derek?Creo que morirá si se queda así— le guiñé un ojo y ella me miró con adoración

Espero que sepas moverte zorra

Ahora tengo una pequeña situación incómoda aquí

Cuando Egan y yo nos alejamos lo suficiente a donde Derek ya no nos veía lo miré un poco apenada y me mordí el labio.No sabía ni cómo arreglar lo que había hecho.

Abrí la boca para decir algo pero me callé cuando lo vi sonreír con suficiencia

—Sinceramente creí que tardarían más— rió sarcástico

—¿D-disculpa?—le dije un poco incrédula

—Adelante, confiésalo, pero lo siento por ti ¿Cómo es tu nombre?¡Ah sí, Eiria!No me gustan las relaciones— rió y me alborotó el pelo— aunque si podemos ser amigos, y no de los comunes, no sé si me entiendes— se me acercó y susurró en mi oído con voz ronca.

Ok, en otra situación me habría derretido pero esto me enojó.

—¡Eres un engreído!— le grité— ¡Y mi nombre es Eider no Eiria!

—Mala mía pues
, es que se parecen esos nombres ridículos— se encogió de hombros

—¿Estás diciendo que mi nombre es ridículo?— alcé una ceja enojada

—¿Tienes algún problema auricular o es que eres lenta de cerebro?— preguntó con ironía— Aunque creo que es la segunda

—¡En serio eres un imbécil!— grité más para mí que para él

—Pero te gusto— saltó

Ahora fue mi turno de echarme a reír a carcajadas.¡Pobrecito!¿Que él me gustaba?Si supiera.

—¿Y ahora de qué te ríes Eiria?

Ahora sí me enojé.

—¡Me vuelves a decir Eiria y lo que te haré traumatizará a tus bisnietos!—le grité y él sonrió con picardía

—¿Qué es eso que me harás?Tengo curiosidad— me acarició la mejilla y yo lo aparté de un manotazo

—Escucha Egan— me obligué a sonreír— sé que empezamos con mal pie pero odio llevarme mal con la gente así que por favor si te hice algo lo siento pero intentemos tolerarnos ¿Sí?— le di una sonrisa de boca cerrada

—¿Por qué deberia tolerarte?Yo te gusto, tú a mí no.

Ok, aunque él tampoco me gustaba eso me dolió, hirió mi pobre orgullo.

—¡De acuerdo fuera máscara!¡Mira pedazo de...— dudé, no era muy buena con los insultos si me preguntan—  lo que seas, tú no me gustas, solo dije eso para zafarme de Derek y por molestarlo así que deja de montarte películas en tu cabeza y no seas tan fanfarrón!— dije casi sin respirar

Estoy segura de que si ahora mismo Trianna viera mi cara roja de enojo se burlaría diciendo:"¿Ahora quién es la fresita?"

—¿Entonces de qué querías hablar conmigo?— soltó insinuante

¡Mierda!No podía decir la verdad sin joder a Melodía.

Regla #1 de mejores amigas:Nunca lo digas cuando a tu amiga le gusta alguien cercano a ti

—Y-yo-genial, diarrea verbal cuando menos la necesitaba— Me gusta el color azul—¿En serio Eider?Eres una campeona

Egan me miró extrañado y luego volvió a sonreír con petulancia

—Pareces borde, pero nunca ninguna chica me había dicho de una manera tan inusual que le gustan mis ojos—— volvió a acariciarme la cara y le volví a dar un golpe

—¡No me toques y no dije eso!— me sonrojé en el acto

—Como quieras, nos veremos por ahí Eiria

—¡Es Eider!¡Idiota!— grité mientras lo veía alejarse saludándome con la mano.

Este imbécil se había vuelto un problema de los incómodos.Me di cuenta de que tener a Egan cerca sería como un grano en el culo pero yo me había metido en esto solita por estar haciendo de Cupido.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro