Y posa Dante su tormento
sobre su Virgilio alado;
en ojos de obsidiana negra,
que velan llanto póstumo
en silencio.
Pues es Beatriz de Troya,
rumbo al Mar de Hoces
y Judas en su sombra
en treinta y tres cantos
sempiternos.
Es Alighieri
del vástago del alba
mártir y verdugo,
y de los tristes azotes
de la ciudad de la cólera,
el muerto poeta
en su infierno.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro