Capítulo 28

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

_ ¿Te gustaría salir conmigo luego de clases?

Esas fueron las palabras que Jason le dijo a Lana, cosa que hizo que esta estuviera en un trance. Ella era consciente de que Jason llegaría a sentir algo por ella y por ende evitaría que eso sucediera, cosa que no funcionó al final.

Lana no sabía que decir ante esto, por un lado le quería decir que no estaba interesada en él y que ya tiene en mente otro chico. Aunque por el contrario no quería lastimar a Jason de manera emocional, ha escuchado casos de gente que se han quitado la vida luego de un rechazo, y no quería que por su culpa Jason termine quitándose la vida.

Estaba en un dilema, no sabía que escoger, si aceptar o no. Tenía un debate en su mente al punto que en cualquier momento le saldría humo por los oídos. Fue así que tomó una decisión sin pensarlo bien.

_ Claro.

_ Genial, entonces luego de clases nos reuniremos para así ir a divertirnos.— dijo Jason a la rubia.

Con eso el pelirrojo fue a su asiento para así esperar a que empiece las clases. Lana por su lado se reprendió a ella misma por haberle dicho eso a Jason, ahora deberá de salir con él pero que no parezca una cita de pareja, sino una de amigos.

_ Vaya Liliana, no pensé que Jason fuera tu enamorado. Me sorprende.— dijo Denisse a su amiga.

Lana por su lado no dijo nada, quería hablar con su amiga en privado y aclararle de que no hay nada en torno a ella y Jason. Para Lana solo hay un chico que tiene bien merecido su corazón. En el recreo Lana se reunió con Denisse para hablar con ella.

_ Antes que todo debo dejar algo en claro. Jason no es la persona del cual estoy interesada, es otro chico que si lo quiero, Jason aunque sea un buen chico no es a él quien quiero como pareja.— le dijo Lana a Denisse.

_ ¿Y entonces por qué aceptarte salir luego de clase?— preguntó la pelinegra.

_ Ni yo lo sé, no pude decirle no. Estaba tan sorprendida que no supe que responder. No quiero que le pase algo por mi culpa.— respondía Lana a Denisse.

_ Pues si Jason no es tu chico estás metida en un gran embrollo. Tendrás que decirle que no quieres salir con él y también quieres ser su novia.— aconsejó Denisse a la rubia.

_ Lo mejor que puedo hacer es salir con él y dejarle claro que no estoy interesada de él y que ya tengo a alguien mas.— dijo la rubia.

_ Si harás eso hazlo con mucha amabilidad, ya que lo último que faltaría es que Jason actúe de dos formas. Rogar para que seas su novia, o se pondrá molesto debido a que no aceptaste.— dijo Denisse a Lana.

_ Eso mismo había pensado, seré suave y hablaré con mucha honestidad y le dejaré claro que solo lo veo como un amigo nada más.— respondía Lana.

Más tarde luego de clases vemos a Lana salir y al lado de ella estaba Jason, quien este último tenía pensado en llevar a Lana a varios lugares.

_ ¿Y a donde iremos Jason?— preguntaba Lana.

_ Es una sorpresa, yo te llevaré a los lugares para eso me dejas usar tu bicicleta y así llegar mas pronto.— respondía el pelirrojo.

_ Bueno en ese caso toma el control de la bici y yo me iré atrás.— decía la rubia.

Lana dejó que Jason usara su bicicleta para así los dos ir al lugar en donde empezaría esta salida. La rubia se subió atrás y Jason era quien manejaba, Lana se preguntaba a dónde la llevaría, solo esperaba que no fuera un lugar típico que frecuenta las parejas.

Minutos después habían llegado y lo que no quería Lana pasó. Fueron a un restaurante no fino, pero que se podía ver afuera un letrero que decía "promoción para parejas" Lana quería salir de ahí con su bicicleta, pero no podía.

_ Vamos entremos, dicen que la comida de aquí es un manjar.— decía Jason a la rubia.

Lana estaba nerviosa, no quería que todos allí adentro piensen que está en una cita con Jason. Por más que quería salir huyendo sabe que las cosas se pondrían peor. Entraron al local y de ahí fueron a una mesa en donde esperaron a ser atendidos.

_ ¿No te parece genial este lugar?— preguntaba Jason.

_ S-si lo es....... es muy lindo.— respondía nerviosa Lana.

_ ¿Te sientes bien? Te noto algo sudorosa, ¿Tienes fiebre?— preguntaba Jason a la rubia.

_ E-estoy bien, solo que nunca había venido a este sitio.
— respondía la mecánica.

En eso el mesero llegó y pidió las órdenes a los chicos, quienes ordenaron lo mismo. Mientras esperaban Lana seguía pensando en que hacer para dejarle claro a Jason que no estaba interesada en él.

Tras una rica comida era momento de Irse, pero antes el mesero fue a dejarle la cuenta a los chicos.

_ Aquí tiene su cuenta joven. ¿Piensa pagar en efectivo o con tarjeta?— preguntó el mesero.

_ Con tarjeta con la promoción para parejas el día de hoy.— respondía Jason.

La ex Loud al oír eso quiso decir algo para dejarle claro al mesero no son novios y que esto no era una cita.

_ ¡Excelente! Y que bueno que aprovecharon ya que solo es por hoy hay un descuento para las parejas.— contaba el mesero.

Luego de pagar salieron del restaurante para seguir lo que queda de esta salida. Lana estaba más nerviosa y a la vez avergonzada. Ya que ese mesero creyó que ella y Jason son pareja, tal parece que el pelirrojo planeó esto y lo que estaban por hacer.

El siguiente lugar era el cine. Lana vio las películas a estrenar y todas eran básicamente las mismas en cuanto a trama, comedia romántica. No había una que fuera distinta, ni siquiera un documental, todas eran comedia romántica.

_ Compremos nuestros boletos para ver alguna de estas películas. ¿Cuál quieres ver?— preguntaba Jason.

_ La que tú quieras, no soy buena escogiendo películas.— respondía la rubia mintiendo.

Jason compró dos boletos de las tantas películas a estrenarse, compraron palomitas y refrescos para acompañar. Lana nuevamente estaba paralizada, ya que no encontraba el valor suficiente para decirle a Jason que no tiene intenciones de ser su novia y que solo lo ve como un amigo y compañero de escuela.

Durante la película la pareja protagonista se besaban cada dos por tres, esto incomodó a Lana, ya que sabe que Jason le gusta las películas de terror y ver una película como la que estaban viendo desencaja mucho con sus gustos.

Más tarde salieron de la sala y siguieron con la salida, Lana estaba más nerviosa por el hecho de que Jason haya escogido ver esa película con el afán de que ella se sienta identificada con la chica de la peli.

_ No estaba mal esa película, la disfruté mucho. ¿Que opinas Liliana?— preguntaba Jason.

_ M-muy buena estaba, por cierto espérame que ya regreso, voy al baño.— dijo Lana a Jason.

La rubia mecánica fue al baño y ahí se lavó la cara para quitarse el nerviosismo que sentía. Se vio al espejo y luego dice.

_ ¿Que estás haciendo? Entre más caigas en su juego él lo verá como una forma de que estamos aceptando ser su novia. Al siguiente le diré definitivamente que no quiero ser su novia.— dijo la rubia a sí misma.

Luego de lavarse la cara regresó con Jason para continuar con esta salida y así Lana pueda decirle que no está interesada en ser su novia. Dejaron el cine para ir a su siguiente destino, algo que no sabían los dos jóvenes es que alguien los vio a lo lejos por lo que decide en seguirlos sin ser visto.

Regresando con la "pareja" estos dejaron el cine para ir a la siguiente ubicación. Lana veía hacia donde la llevaba Jason, se le hizo conocido el camino, luego de unos segundos se dio cuenta hacia donde la llevaba, se trataba de la feria.

_ Hemos llegado, vamos a subirnos y a divertirnos en todos los juegos mecánicos.— dijo el pelirrojo a Lana.

_ Bueno no puedo negarme a esto, vayamos a divertirnos.— respondía la rubia.

Aunque por fuera se viera interesada por dentro Lana sabe que si no hace nada Jason podría declararse, y eso era lo último que ella quiere. Durante varios largos minutos los dos adolescentes se la pasaron de lo mejor subiéndose a los juegos mecánicos.

Lana disfrutó solo por esta vez de estar con Jason y sabe que lo que está por hacer cambiará todo. Tras subirse a las atracciones Jason se dirige a Lana.

_ Oye Liliana, hay otra atracción que quisiera subirnos. Pero antes quiero tapar tus ojos para que no lo veas, es una sorpresa.— dijo Jason a Lana.

_ ¿Una sorpresa? ¿Que clase de sorpresa es?— preguntaba con dudas Lana.

_ Ya lo verás, solo déjame cubrir tus ojos con mis manos, yo te guío hacia donde es.— respondía Jason.

Lana tenía sus dudas de lo que haría Jason, por lo que le siguió el juego para así terminar con esto y decirle que no quiere ser su novia. Se dejó tapar sus ojos para así no ver nada y no ver la sorpresa que le tiene el pelirrojo, este último guió a la mecánica esquivando a varias personas que estaban ahí.

_ Y..... aquí es, ¡taran!— exclamó Jason.

Lana vio la dichosa sorpresa de Jason y lo que veía la dejó con cara de impresión pero no de alegría, sino todo lo contrario. De todos los lugares de esta feria tuvo que traerla a esta.

_ ¿E-e-el túnel del a-amor?— preguntaba Lana asustada.

_ Así es, subamos a la barca y demos un paseo, será divertido.— respondía Jason.

No esperó respuesta de Lana ya que la tomó de la mano y se la llevó casi a rasta. Subieron a una de las barcas y dieron un paseo, dentro se podía ver los decorados para los enamorados. Lana no quería esto, solo una persona puede estar con ella en esa barca y dar un paseo romántico, y ese alguien es Lincoln.

Al terminar el paseo los dos jóvenes bajaron de la barca y fueron a unas bancas a descansar luego de la diversión que tuvieron.

_ Que divertido, ya extrañaba poder salir junto con alguien, es aburrido estar en casa sin nada que hacer.-— decía Jason.

_ S-si, no hay nada mejor que salir y relajar el cuerpo y distraer tu mente. Es simplemente único.— respondía Lana.

_ Liliana hay algo que quisiera contarte y aprovechando que estamos aquí los dos es un buen momento.— decía Jason.

Esto a Lana no era nada bueno, más por el como Jason se lo estaba diciendo, era claro que le quería hacerle la "pregunta"

_ Sé que llevamos poco tiempo conociéndonos, aparte somos compañeros de escuela y quiero decirte que los momentos que pasamos estudiando los disfruté como no tienes idea. Nunca pensé que fueras alguien increíble y que tuvieras buenos amigos.

_ "¡No por favor detente, tengo que actuar rápido antes de que lo diga!"

_ En ese tiempo que pasamos comencé a sentir algo que jamás lo había sentido. Pensé que estaba enfermo, pero luego de hablar con un primo mío supe a que se debía, y por eso es que te pedí salir conmigo luego de clases, para preguntarte algo importante.

_ "¿Que estoy haciendo? Tengo que decirle algo pero mi cuerpo me está traicionando"

_ Sé que esto es muy apresurado y sé que lleva más tiempo, pero no pienso esperar más y lo diré aquí y ahora.

_ "¡Tengo que hacerlo ya!"

Lana abrió su boca para decir algo, pero ninguna palabra salía, en eso Jason aprovecha en decir.

_ Liliana, ¿Quieres ser mi novia?

Lo dijo, lo que ella menos quería escuchar lo había dicho. Ya para este punto era crítico, es aquí en donde ella debe de dar su respuesta, no estaba preparada para esto, ya que pensó que Jason se lo diría después puesto que para Lana esta salida no es mas que una cita camuflada con la palabra salida, pero no había de otra, debía de ser fuerte para darle la respuesta a Jason.

_ Jason.... no me esperaba esto, quiero decir...... si me sorprende, aunque fue muy inesperado el pedirme a ser tu novia, es mucho para pensar que siento que me voy a desmayar.— decía Lana a Jason.

_ A lo que quiero llegar es que...... yo no siento lo mismo que tú...... Solo te veo como un gran amigo, no quisiera que nuestra amistad se rompa, no me siento preparada para estar en una relación en estos momentos, espero lo entiendas.

Jason por su lado se quedó quieto en su lugar, estático sin decir ninguna palabra, había escuchado todo lo que Lana le había dicho. Pasaron unos segundos en los cuales Lana esperaba la respuesta que daría Jason o como este se lo tomaría.

_ ¿Que? ¿Piensas que no soy suficiente hombre para ti? ¿Que fue muy poco lo que hice en esta salida para ti? Dime la verdad.— pedía respuesta Jason.

_ Ya lo dije, no me siento preparada para una relación. Es un tema complicado y del cual quisiera esperar un tiempo más hasta que sienta que es el momento.— respondía la rubia.

La realidad es que Lana no quería decirle a Jason que el verdadero motivo es que ella ya tiene a alguien en su mente y corazón, y no quería ver como se lo tomaría el pelirrojo al enterarse de que está enamorada de alguien que no es él.

Otros segundos pasaron en donde Jason cerró sus ojos y frunció el rostro, respiró profundo y luego de eso se levantó de la banca y se fue de ahí sin decir nada. Lana solo veía como Jason se iba, se sentía un poco mal el rechazarlo pese a que fue sincero con sus sentimientos.

_ "Lo siento Jason, pero mi corazón ya tiene un dueño, espero que puedas perdonarme y entiendas que no soy tu correspondida"— pensó Lana.

La rubia también se levantó de la banca para irse de ahí y volver a su casa, por su lado la persona que estaba viendo todo solo vio como ambos adolescentes tomaron rumbos distintos hasta salir de la feria.

Unos días después.

Ya pasaron unos días desde que Lana rechazó a Jason luego de que este se le confesara a Lana y pedirle que fuera su novia. Desde ese entonces Lana no ha visto a Jason, no ha ido a la escuela, le preocupa que Jason tome una decisión drástica y acabar con su vida.

Viendo a Lana esta estaba en la cafetería con su comida, Denisse estaba con ella y veía como su mejor amiga estaba muy pensativa, apenas ha tocado su comida, fue entonces que se dirige a ella para preguntarle si estaba bien.

_ ¿Pasa algo Liliana? Te veo que estás muy distraída.— preguntaba la pelinegra.

_ No es nada, es sólo que desde hace días que Jason no ha venido a la escuela.— respondía Lana.

_ Y hablando de Jason, ¿Que le dijiste al final?— volvió a preguntar Denisse.

_ Le dije que no quería nada con él y que solo quiero ser su amiga. Aunque no le dije el verdadero motivo del porqué lo rechacé.— respondía la mecánica.

_ ¿Y como se lo tomó él? ¿Se enojó o te suplicó para que fueras su novia?— decía Denisse.

_ Simplemente no dijo nada, se levantó de donde estábamos sentados y luego se fue. Eso fue lo que pasó.— contestaba la rubia.

_ Ya veo, quizás solo sea algo temporal y ya se le pasará. Por ahora no debes de preocuparte mucho por él.— decía Denisse a su amiga.

Lana hizo caso a lo que dijo Denisse y no seguir preocuparse por él, todo estaría bien luego de esto. Más tarde Lana sale de la escuela para ir a su trabajo, durante las siguientes horas la rubia ya no sentía preocupación por el pelirrojo, y que este posiblemente esté en su casa viendo alguna película de terror.

Ya en la noche Lana seguía trabajando, puesto que su jefe le pidió quedarse un poco más de tiempo para terminar unos trabajos, de los cuales le pagará a ella.

_ Es un poco tarde y yo aún no he cenado, será mejor que vaya a comprar algo de comer.— decía a si misma Lana.

Dejó lo que estaba haciendo para ir a comprar algo para comer y luego seguir con el trabajo. Fue por su bicicleta que estaba en la parte trasera del taller, cuando estaba por quitarle la cadena a su bici fue que sintió unos brazos que la tomaban de forma brusca.

_ ¡¿Pero que de.....?! ¡Ayud!

La ex Loud intentó gritar por ayuda pero esa persona le tapó su boca con un pañuelo. Lana intentó gritar nuevamente pese a tener la boca cubierta, pero al hacerlo sus ojos se cerraron lentamente hasta caer desmayada, esto facilitó a esa persona en llevarse a Lana sin que nadie se diera cuenta.

.

.

.

.

.

Lana poco a poco comenzaba a recuperar la consciencia, veía todo borroso, no sabía que pasaba o que día es o si es de noche. Cuando su vista se aclaró pudo notar que estaba en un lugar muy oscuro, apenas podía ver más allá de su nariz.

Intentó levantarse pero no podía, miró a sus piernas y brazos y pudo ver que estaban encadenados con unas esposas, al ver esto Lana entró en pánico, ya que esto claramente es una evidencia de que fue víctima de secuestro.

_ ¡No esto no puede estar pasando yo nunca he hecho algo malo a alguien! ¡Ayuda que alguien me salve!

Lana gritó lo mas que pudo para que así alguien viniera por su rescate, pero nada. Intentó librarse de sus cadenas pero era inútil, esas esposas son gruesas y nuevas. No sabía que pasaba, ella no ha hecho algo para tener enemigos, se ha llevado bien con todos sus conocidos y es imposible que alguien le hiciera algo como esto.

Pasado unos minutos fue que Lana escuchó un ruido el cual era de una puerta siendo abierta. Vio como una luz entraba a esa habitación en la que estaba, vio una silueta de un hombre que bajaba por las escaleras que había ahí, lo que indicaba que ella estaba en un sótano.

Ese tipo se acercó a donde había un interruptor y encendió la luz, Lana quedó cegada por unos segundos hasta que se adaptó a la luz. Vio quien había entrado y su rostro lo decía todo.

_ Al fin despiertas, creí que no ibas a despertar luego de un rato.

_ ¿J-Jason?

Así es, quien entró a la habitación fue nada menos que Jason. El chico de cabello rojo tenía una mirada para nada parecía a la que siempre suele tener, su rostro en este momento era de alguien como si de un soldado regresando de la guerra se tratase.

_ Que bueno que llegas Jason, no sé qué está pasando, pero no hay tiempo para preguntar. Debes de liberarme antes que alguien venga.— decía Lana a Jason.

_ No.— respondió Jason.

_ ¿Cómo qué no? ¡Debes de liberarme o sino esas personas te harán algo a ti!— exclamó Lana desesperada.

_ Dije que no y punto, no pienso liberarte.— volvió a responder Jason.

_ ¿Ah?

_ ¿Acaso eres tonta o te haces? Es más que claro lo que pasa aquí y si aun no lo sabes te lo diré. Yo fui quien te trajo hasta aquí y te esposé de pies y manos.— respondía Jason.

Lana estaba en shock por lo que acaba de escuchar, ¿Jason es el responsable de secuestrarla y traerla a ese lugar? Debía de ser un grave error, debía de hablar con él y convencerlo de dejarla libre.

_ Mira, si es porque no acepté ser tu novia podemos llegar a un acuerdo. Si me liberas quizás tú y yo podamos tener.....— fue interrumpida Lana.

_ ¡Ya cállate! ¡Ya me cansé de jugar contigo! Todo esto ya me tiene podrido, por una vez pensé que tener una novia podría cambiar mi vida y tal parece que estoy destinado a ser lo que soy.— exclamó molesto Jason.

_ ¿De qué estás hablando? Explícame qué está pasando.— pedía Lana una explicación.

_ Todo esto de ser un chico bueno, ya me tiene cansado. Yo jamás fui un chico bueno, toda mi vida fui un chico que se la pasaba peleando, con mis compañeros de escuela, mis amigos particulares, incluso con mis padres me peleaba.

_ Fingi ser un chico bueno para así poder ser lo que realmente quiero ser. Un asesino serial así como lo fue mi tío.

Esto claro asustó a Lana de lo que dijo Jason, de que él nunca fue un chico bueno y que él quiere ser como si tío, un asesino serial.

_ ¿A-asesino serial?

_ Así es, ¿Acaso no conoces a mi tío? Por si no lo conoces te diré quien es. Mi tío se llama Lawrence Bittaker, él fue uno de los mayores asesinos seriales de todo Estados Unidos. El número de víctimas es todo un misterio, dicen que fueron 30 víctimas, otros dicen que fueron más de 50, aunque ni yo no sé cuántas fueron.

_ Cuando supe que mi tío era un asesino serial no sabía que decir, estaba asombrado, ya que él no aparentaba ser un asesino, era alguien normal como todos. El día que se destapó la verdad fue algo que toda mi familia quedó aterrada.

_ Y si te preguntas que pasó con él, un día una de las víctimas que secuestró logró escapar y llamó a la policía, fueron a su casa en donde él intentó huir, pero fue alcanzado y recibió un disparo en su espalda que le provocó su muerte.

_ Como te conté hace unos minutos mi vida no fue normal, siempre me peleaba con todo mundo, y cuando supe que mi tío era un asesino serial sabía que debía de hacer. Y eso era seguir con su legado, me convertiría en un asesino como él y capaz ser mejor que una vez lo fue.

Si antes Lana estaba aterrada ahora lo estaba todavía aún peor, quien diría que Jason tendría un familiar que fuera un asesino buscado por la policía y que haya acabado con la vida de muchas personas, y que el propio Jason quiera ser como su tío en ser un asesino.

_ ¡Jason recapacita! No tienes que hacer eso, sé que la vida no es fácil, yo pasé por algo similar, pero en querer ser un asesino no te llevará a nada, por favor no cometas una locura.— decía Lana a su compañero.

_ Demasiado tarde, ese rechazo tuyo fue la gota que rebalsó el vaso. Mi idea inicial era atraer una chica y hacerla mi novia para así acabar con ella, una idea un tanto arriesgada pero así fue como empezó mi tío. Pero cuando te conocí por un momento pensé en querer cambiar de verdad, realmente me gustabas, pero ahora solo tengo una cosa en mente, y eso es acabar con tu miserable vida.

_ ¡Estás completamente loco! Solo espera a que tus padres sepan que estás haciendo y estos no durarán en llamar a la policía.— comentó la rubia.

_ Ja, mis padres están muertos. Por si te lo preguntas, no los maté, ellos murieron en un accidente hace dos años, desde ese entonces estoy bajo cuidado de una tía que ni me quiere, también me mantengo gracias a un seguro de vida de casi medio millón de dólares de mis padres. Aunque suelo trabajar en un depósito de chatarra.

_ La cosa es que nadie vendrá por ti, estarás aquí hasta que te mate y me deshaga de tu cuerpo y así nadie sospechará de mí.— decía Jason a la rubia.

La cosa no pintaba bien para Lana, estaba secuestrada y esposada de pies y manos, los padres de Jason murieron y era imposible que alguien aparte del pelirrojo sepa en donde está. Estaba asustada de lo que Jason le haría para acabar con su vida.

_ Antes de acabar con tu miserable vida quiero divertirme contigo. Sin duda tienes un cuerpo jugoso, tus pechos y ese trasero. Solo espera a lo que tengo planeado.

Luego de decir eso Jason salió del sótano dejando sola a Lana. La rubia intentó nuevamente soltarse de las esposas que la tienen prisionera pero era inútil, Jason se aseguró en ponerle unas buenas esposas.

_ ¡Por favor que alguien venga por mí! ¡Auxilio que alguien me ayude!

Lana gritaba todo lo que sea para así alguien la escuche y vaya por su rescate de ese tipo loco.

Mientras tanto.

Dejando a Lana vayamos por unos momentos a su casa, más precisamente con sus padres. Los señores Winchester estaban en el comedor listos para desayunar, pero algo no andaba bien, ya que faltaba alguien ahí para comer con ellos, y ese alguien era su hija.

_ ¿Sabes si Liliana se ha despertado?— preguntaba la señora Winchester.

_ De hecho no Silvia, aparte de eso ella no ha llegado a casa desde ayer. Recuerdo que me llamó y me dijo que llegaría tarde a casa debido al trabajo.— respondía Paúl a su esposa.

_ Quizás se quedó en casa de Denisse a pasar la noche ahí.— decía Silvia a su esposo.

_ Puede que si, aunque se me hace raro que no llamara para avisarnos. Cuando regrese tendremos una charla con ella.— dijo Paúl.

En la escuela vemos a Denisse quien estaba en su lugar de siempre, miró hacia el pupitre en donde se sienta su mejor amiga. La chica de cabello negro se preguntaba el porqué no ha llegado, pensó que quizás se haya enfermado y no puede venir.

Vio que por la entrada apareció Jason, el cual entró como si nada, fue a su asiento y se quedó ahí hasta que empiece las clases. Denisse observó a Jason y se le hacía raro que él viniera a clases luego de faltar varios días.

_ "Me pregunto si le habrá afectado que fuera rechazado por Liliana. Aunque viéndolo mejor parece como si no le hubiera importado"— pensó Denisse sobre Jason.

Mas tarde luego de clases Jason volvió a su casa y fue al sótano en donde tiene cautiva a Lana. La rubia estaba callada y con la mirada perdida. Vio a Jason llegar y se le veía que traía algo en sus manos.

_ Espero no estés dormida, como dije antes de matarte me quiero divertir contigo, así que traje esta ropa para que te la pongas.— dijo Jason a Lana.

Eso que dijo Jason hizo que Lana pusiera su atención en él, ya que como dijo él trajo ropa para que ella se la ponga, por lo que Jason tendría que quitarle las esposas, lo cual esto lo usaría para escapar de aquí.

_ Sé que debes de estar pensando y te digo que no podrás salir de aquí. Eso gracias a un collar especial que te puse y que provoca descargas eléctricas por medio de un control remoto, si intentas escapar no dudaré en usarlo, estás advertida.— le dijo Jason a la rubia.

Su plan de escape se vio afectado debido a eso que le dijo Jason y a decir verdad no sabía de ese collar ni mucho menos que lo llevaba puesto.

_ Te voy a quitar las esposas y si haces algo te daré una descarga eléctrica.

Así Jason le quitó las esposas de pies y manos a Lana, la rubia se levantó de donde estaba y estiró su cuerpo, estar en una sola posición por mucho tiempo no era bueno.

_ Ahora te pondrás cada uno de estos disfraces que hay en esta bolsa, no quiero preguntas ni quejas.— dijo el pelirrojo.

Lana tomó la bolsa que había traído Jason y vio su interior, y como dijo el pelirrojo era disfraces, pero no cualquiera, eran disfraces muy reveladores, quería negarse en hacer eso pero si lo hacía recibiría una descarga eléctrica.

Tomó el primero y era un uniforme de colegio, pero con el detalle de que la falda era muy corta al punto que se podía ver parte de su ropa interior.

_ Bien, ahora quiero que hagas poses kawai ante la cámara, tal como lo hacen las modelos japonesas y las Idols.— le pidió Jason a Lana.

La rubia hizo lo que el pelirrojo le ordenó, aunque no sea fanática de los animes y mangas conocía medianamente del tema, sin decir nada hizo varias poses y saludos a lo japonés, en donde Lana hacía varias poses muy provocadoras todas ellas mostrando en primera vista su trasero.

Jason tomaba varias fotos a la rubia haciendo lo que él le pidió. Fue así en donde Lana se puso varios atuendos, unos más atrevidos que el anterior, entre esos atuendos había uno de diabla, y un bikini amarillo muy diminuto dejando casi al descubierto sus partes íntimas.

Luego de una larga y humillante sección de fotos de Lana el pelirrojo volvió a ponerle las esposas a la rubia dejando a esta última en ropa interior.

_ Por ser una buena chica te daré algo bueno de comer. Ni creas que esto ha acabado, todavía falta mucho mas.— le dijo Jason a la rubia.

El adolescente salió del sótano dejando a Lana en la oscuridad, la rubia se preguntaba para que quería Jason esas fotos, fue ahí que recordó que hay una página prohibida donde se muestra videos muy fuertes en donde hacen muchas cosas ilegales. No se imaginaba que esas fotos vayan a parar ahí.

Dos días después.

Un par de días ha pasado desde que Jason secuestró a Lana y manteniendo a esta última cautiva. Durante esos días los padres de Lana se preocuparon al ver que su hija no ha regresado a casa, estos fueron a la policía a reportar que su hija está desaparecida.

Pero por ahora vayamos con nuestro albino favorito, el cual quería ir a visitar a su hermanita del alma para hablar con ella con respecto a algo. Salió de su habitación para ir a la casa de Lana, al salir vio a Loren que llegaba a su apartamento cargando unas bolsas blancas.

_ ¿A donde vas Limbert?— preguntó Loren a su hermano.

_ Iré a visitar a Lana en su casa, quiero hablar de algo con ella.— respondía el albino.

_ Está bien, me mandas saludos de mi parte.— dijo la rubia.

Así Lincoln dejó a su hermana sola para ir ver a Lana. Loren por su lado veía a su hermano irse, en eso pensó en cómo sería las cosas cuando Lincoln y Lana sean novios, realmente deseaba que ellos dos sean pareja, incluso se imagina a ellos dos casados y con hijos.

Regresando con en albino este fue caminando hasta que minutos después llegó a la casa de Lana. Tocó el timbre y esperó a que la puerta se abra. La puerta se abrió dejando ver a la madre de Lana, la cual se le veía con sus ojos lagrimosos, esto sorprendió a Lincoln.

_ ¿D-desea algo jovencito?— preguntaba Silvia aún llorando.

_ ¿Le ocurre algo? ¿Pasa algo malo?— ahora preguntaba Lincoln preocupado.

_ E-es mi hija Liliana..... desde hace unos días que no ha regresado a casa, le he llamado a su celular y no responde, estoy muy preocupada de que algo le haya ocurrido.— respondía Silvia.

Esto a Lincoln se le hizo un hueco en el pecho por lo que dijo la madre de Lana. De que esta última no ha regresado a casa y que no han podido contactar con ella. Lincoln no iba a quedarse de brazos cruzados, también haría algo para encontrar a su hermanita.

_ ¿Ya avisaron a la policía sobre esto?— preguntó Lincoln.

_ Ya lo hicimos, ellos nos llamarán cuando la encuentren. Tú eres uno de sus amigos, también podrías ayudarnos a encontrar a mi bebé.— pedía Silvia ayuda a Lincoln.

_ Haré todo lo posible para dar con ella, si es posible moveré cielo y mar hasta encontrarla. Le avisaré a sus demás amigos para que así puedan ayudarnos.— respondía el albino.

Sin tiempo que perder Lincoln fue en busca de su hermanita y dar con los responsables. Para eso debía de saber en donde estuvo Lana antes de que desapareciera. Fue al trabajo de ella y fue directo con su jefe.

_ Oiga, ¿Se encuentra aquí Liliana?— preguntaba Lincoln.

_ Desde hace unos días que no ha venido al trabajo. Supuse que se habrá enfermado y por eso no vino a trabajar, aunque me extraña que haya dejado su bicicleta aquí.— respondía el señor Walter.

_ Lo que sucede es que ella está desaparecida, sus padres dieron aviso a la policía, con su ayuda podemos dar con los responsables.— contaba Lincoln lo ocurrido.

_ Cielos, descuida chico, tengo unos amigos que son de una fuerza especial de la policía, le diré lo que ocurre y así puedan encontrarla mas rápido.— dijo Walter a Lincoln.

El albino dejó el taller en donde trabaja Lana, ella no se encuentra ahí y su jefe no sabe que pasó, debía de hablar con sus amigos, en especial a su mejor amiga Denisse. De pura casualidad se la encontró saliendo de una tienda de dulces, el albino se acercó para preguntarle si la ha visto.

_ Hola Denisse.— saludó el albino.

_ Oh, tú eres el amigo de Liliana. ¿Cómo has estado?— preguntaba la pelinegra.

_ No bien en estos momentos, dime, ¿Cuando fue la última vez que viste a Liliana?— preguntó Lincoln a Denisse.

_ Hablando de ella me preguntó qué le habrá pasado que no ha ido a la escuela, le he estado llamando y no me contesta. ¿Tú sabes que le ocurre?— ahora preguntó Denisse.

_ Lo que ocurre es que ella está desaparecida, sus padres llamaron a la policía avisando de que ella no ha regresado a casa.— respondía el albino.

_ ¡Oh Dios mio! Esto es malo, ella es muy buena persona para que le hagan algo como eso.— exclamó preocupada Denisse.

_ Por eso necesito de tu ayuda, dime cuando fue la última vez que la viste. Cualquier detalle es necesario.— pedía Lincoln información.

_ Fue hace 3 días en la escuela, le pregunté cómo le había ido a ella junto con Jason, ya que ambos salieron juntos luego de clases. Ya de ahí ella se fue en su bici a su trabajo.— contaba Denisse todo lo que sabe.

Lincoln al oír lo que dijo la pelinegra le trajo algo de sospechas a Jason, esto debido a que precisamente hace unos días atrás los vio a los dos juntos saliendo del cine y luego ir a la feria. Algo andaba mal, por lo que debía de resolver esto preguntándole a Jason.

_ Gracias por tu ayuda, te avisaré cuando pase algo con respecto a Liliana.— agradeció Lincoln la ayuda.

Dejó a Denisse para ir directamente con Jason, ya que como se mencionó había visto a Lana junto a Jason y parecía que ambos estaban teniendo una cita o algo parecido. En el momento que ellos estaban en la feria pudo ver como Jason le dijo algo a Lana, para paso seguido cerrar sus ojos e irse de ahí sin decir nada, algo de lo que le dijo Lana no le agradó a Jason.

Y hablando del rey de Roma, vio como Jason llevaba consigo un saco de color blanco y luego de eso entró a una camioneta blanca y luego partir.

_ ¿A donde irá ese tipo? Sea como sea debo de seguirlo.— decía el albino.

Lincoln corrió para no perder de vista a la van, pero esta aceleró el paso y Lincoln no podía seguir adelante. Debía de buscar una forma de poder seguirlo. Frente a él había una tienda en donde vendían varias cosas entre ellas varias bicicletas.

_ ¡Bingo!— exclamó Lincoln.

Volviendo con Jason vemos a este quien bajó de la camioneta, lo había dejado al frente de su casa. Tomó el saco blanco y luego de eso se dirige al conductor de la van.

_ Gracias por traerme viejo, luego te lo pago.— agradeció Jason.

_ Me mandas unas fotos de esa chica que dices tener en tu casa. Ansío poder darme unas buenas caricias con esas fotos.— dijo el tipo de la camioneta.

El vehículo dejó el lugar y Jason fue directo a su casa, entró y lo primero que hizo fue ir al sótano, el cual estaba precisamente por el pasillo que conduce al comedor al lado izquierdo había una puerta oculta que se camufla bien con el tapiz de las paredes.

Entró y vio a Lana, la cual seguía esposada y en ropa interior. Jason se acercó para que así hiciera algo para esta ocasión.

_ Levántate perra, que hoy tienes algo que hacer para mí antes de que te mate.— dijo Jason a Lana.

La rubia con desinterés miró a Jason y vio que traía un saco con él. El pelirrojo le quitó las esposas a Lana para que hiciera otro encargo para él.

_ Te debes de preguntar que harás para mí para esta ocasión. ¿No?— preguntaba Jason.

_ No lo sé ni me interesa saberlo.— respondió Lana.

_ Vaya forma de mostrar interés. En fin, lo que harás para mí es un video snuff. Para eso traje a estas ratas conmigo.— decía Jason.

Jason tomó el saco y lo vació frente a Lana, la rubia vio con asombro lo que había dentro del saco, era muchos hámster, los cuales comenzaron a correr por todo el lugar. Del mismo saco había caído un martillo, lo tomó y lo extendió a Lana.

_ Toma, con esto harás el trabajo, por si no sabes lo que harás es simple, mata a estas ratas con este martillo mientras yo lo grabo.— dijo Jason a Lana.

Era más que evidente la reacción de Lana ante tal espantosa y asquerosa petición que le había dado Jason. ¿Matar a unos indefensos animalitos? Realmente está mal de la cabeza.

_ ¡No haré eso! Estos hámster no merecen que les haga eso, no tengo el corazón para hacerlo.— se negó Lana hacerlo.

_ Lo harás quieras o no, no me obligues a usar el collar.— amenazó Jason a la rubia.

_ ¡Eres un maldito enfermo de mierda! ¡Espero que cuando mueras te vayas al infierno, gente como tú no merece vivir!

Jason no le gustó lo que dijo Lana, a lo que le propinó un golpe en su rostro. La rubia cayó al suelo tras recibir ese golpe, pero la cosa no terminó ahí. Tomó el control remoto del collar y lo activó, Lana sentía como una descarga eléctrica recorría por todo su cuerpo.

_ ¡¡Aaaaaaahhhhhh!!

_ Eso te pasa por querer pasarte de lista, si no lo harás entonces lo haré yo mismo. Pero eso si, me vas a grabar mientras mato a estos bichos.— le dijo Jason a Lana.

A duras penas Lana pudo levantarse luego de recibir esa descarga eléctrica, Jason le dio la cámara a Lana para que empiece a grabar. El pelirrojo tomó el martillo y atrapó uno de los hámster, luego de eso lo goleó salvajemente hasta matarlo.

Lana veía con horror como Jason terminaba con la vida de una inocente criatura ante sus ojos, no podía hacer nada para defenderlos, ya que si lo hace terminaría como los hamster. Tras matar a todos los hámster Jason estaba todo lleno de sangre, y en su rostro no había ninguna pisca de arrepentimiento ante lo que hizo.

Lana le entregó la cámara a Jason y se puso a llorar al ver morir a esos pobres hámster. El pelirrojo tomó del cabello a Lana y la tiró al charco de sangre que había en el suelo.

_ Aún no hemos acabado, quiero que juegues con esa sangre como si fuera agua. Tirate y rueda, como si eso fuera divertido.— ordenó Jason a Lana.

Sin más opciones Lana obedece a lo que Jason le pidió y se tiró en donde había más sangre, dio varias vueltas a su vez que lloraba y sentía asco, no cabía duda que Jason es un verdadero psicópata, alguien que merece estar encerrado toda su vida en un manicomio.

El pelirrojo sólo grababa el como Lana se revolcaba entre la sangre y los cuerpos muertos de los hámster. Esta clase de videos es lo que mas le gusta a él. Un rato después se ve a Lana cubierta de la sangre de los hámster, estaba totalmente traumada, jamás en su vida había presenciado algo como esto.

_ Estos son los videos que pagan bien en la Deep Web. Con unos cuantos videos así capaz saque una buena ganancia.— decía el pelirrojo.

_ M-maldito enfermo..... ya verás...... pagarás por esto, hijo de perra...

Jason le dio un golpe en el estómago a Lana por ese insulto que le dijo, la rubia cayó al suelo tratando de recuperar el aliento. No conforme con eso dejó la cámara y procedió a golpearla en su rostro repetidas veces.

_ Nadie tiene derecho a decirme eso, pero descuida, ya no tendrás que pasar por ese sufrimiento una vez que estés muerta.

Tomó nuevamente la cámara y salió del sótano dejando a una golpeada Lana, quien no pudo defenderse. Quería salir de ahí, regresar a casa, con sus padres, pero más que nada, estar con su único amor, Lincoln.

_ L-L-Lincoln..... por favor.... s-sálvame.— dijo Lana.

Fuera de la casa vemos a Lincoln quien había llegado luego de haber seguido a la camioneta en la bicicleta que compró. Vio la casa en donde se supone vive Jason, no era una casa grande, aunque notaba que no es tan decorada.

_ Tengo que descubrir si Jason sabe algo de Lana o si él está detrás de todo esto.— decía el albino.

Dejó la bicicleta y se acercó a la vivienda, vio por las ventanas por si viera algo, pero estas estaban cerradas y más aún tenía unas cortinas que impedían ver algo. Vio que había un patio trasero y fue a investigar, atrás no había mucho, pero veía que tenía una puerta ahí.

Se acercó a esa puerta y notó que también está cerrada, aunque tenía una pequeña ventanilla para ver por dentro. Miró y se podía ver la cocina, más adelante se podía ver un pasillo que daba a la sala, pero no veía rastro alguno de Jason.

_ Si tan solo pudiera entrar sin hacer mucho ruido podría descubrir que está tramando este pervertido.— decía Lincoln.

De la nada Lincoln vio a Jason que había salido de una puerta del mismo pasillo que daba a la sala. Vio que traía en sus manos una cámara, además de eso notó que Jason tenía su ropa toda manchada de lo que parecía ser sangre.

_ ¡¿Pero que mierda?! ¿Por qué está cubierto de sangre? ¿Que habrá hecho?— se preguntaba Lincoln.

Vio como Jason iba camino a la cocina, a lo que Lincoln se agacha para no ser visto. Escuchó cómo Jason abría la puerta del refrigerador y luego lo cerró, después escuchó los pasos de Jason alejarse, Lincoln se levantó y miró que el pelirrojo se había ido.

_ No sé qué habrá pasado ahí adentro, pero algo me dice que no fue nada bueno. Tengo que entrar de alguna manera, voy a esperar a que Jason salga de casa, o pueda distraerlo lo mas que pueda.

Lincoln pensó que podría hacer para que Jason salga de su casa y así entrar y ver que pasó ahí dentro. Fue entonces que se le ocurrió una idea, no era la más adecuada, pero todo era válido en este tipo de situaciones.

Fue hasta la entrada e hizo que apenas acaba de llegar, tocó la puerta y esperó a que Jason la abriera. Segundos después Jason abre la puerta quedando sorprendido de ver a Lincoln.

_ Hola Jason, hace días que no te veía.— saludó Lincoln al pelirrojo.

_ Ah hola..... Limbert, también no te veía desde hace días.— saludaba Jason a Lincoln.

El albino vio la ropa manchada de Jason y se hizo como si no supiera nada de lo que vio.

_ ¿Eso es sangre en tu ropa?— preguntaba Lincoln fingiendo asombro.

_ Tranquilo no es sangre, es.... salsa de tomate, estaba preparando la cena y pues.... hice un desastre.— trató de mentir Jason.

_ Oh a todos nos pasa eso, por cierto, ¿No haz visto a Liliana? Desde hace días no la he visto, ¿Ella está contigo?— preguntaba el albino.

_ De hecho no, también me estoy preguntando en donde está ella. No la he visto en la escuela en estos días.— mintió Jason al peliblanco.

Lincoln vio más a detalle el interior de la casa de Jason, pudo ver en donde está el pasillo y notó manchas de sangre. Esto a Lincoln no le traía buena espina, algo está haciendo el pelirrojo, tenía que buscar la forma de sacarlo de su hogar para ver que ha hecho.

_ Si en dado caso sabes algo de que pasó con ella no dudes en decírmelo. Que tengas una buena tarde.— dijo Lincoln yéndose de ahí.

_ Está bien viejo, si me entero de algo les aviso.— decía Jason a Lincoln.

El peliblanco tomó su bicicleta y volvió a su apartamento, en donde vendría mañana para así entrar a la casa de Jason mientras este último anda en la escuela. Aunque sea un delito entrar a la casa de otra persona sin su consentimiento, pero sabe que lo hace por una razón importante.

Al día siguiente.

Ya es un nuevo día y en este en especial Lincoln tenía algo importante que hacer, y eso era entrar a la casa de Jason y ver que había hecho el día de ayer y más importante aún si lo que había hecho Lana está incluida.

Para poner en marcha su plan no iría a la universidad poniendo de excusa de que se sentía mal, mentira que Loren y Ryan se creyeron. Estando ya solo y viendo la hora que es Lincoln aprovechó en ir a la casa del pelirrojo y ver que ha hecho.

_ Es hora de ir a la casa de ese pervertido, tengo que actuar rápido y que no ser visto por nadie.— dijo el albino.

Lincoln salió de su apartamento y fue con rumbo a la casa de Jason y averiguar que hizo este último el día de ayer. Mientras caminaba Lincoln pensó en cómo abrir la puerta de la casa de Jason, tenía varias opciones, pero la mejor es usar un pasador para el cabello tal cual como vio a Leni hacerlo para abrir un maletín.

Llegando a la casa de Jason notó que no había nadie a su alrededor. Se dirigió a la ventana y pudo ver por medio de un espacio que dejó las cortinas, no vio a nadie, ya Jason se fue a la escuela.

_ Ya que ese pelirrojo se fue tengo que entrar a su casa, lo haré por la puerta trasera y evitar que alguien me vea y piense que voy a robar.— decía el albino.

Caminó hasta el patio trasero y fue hasta la puerta que estaba ahí, intentó primero probar si la puerta estaba abierta, al hacerlo notó que estaba cerrada.

_ Era de suponerse, será mejor que haga esto rápido antes de que algún vecino me vea.

Sin mas Lincoln sacó del bolsillo de su pantalón unos pasadores para el cabello que le pidió prestado a Loren. Quiso abrir la puerta tal cual como lo hacía Leni con esos mismos pasadores. Tomó el primero pero se le rompió, siguió con el siguiente y lo mismo sucedió.

_ Fue buena idea pedirle muchos a Loren, no sé cómo le hace Leni abrir las cerraduras con un pasador, lo hace ver tan fácil.— se preguntaba el albino.

Tras unos intentos pudo por fin abrir la puerta, entró y se encaminó al lugar en donde había visto a Jason salir cubierto de sangre.

_ Si mi memoria no me falla ese idiota salió por aquí, justo en este pasillo.

Lincoln veía detenidamente el pasillo de la cocina a la sala, pero no veía nada, puso sus manos sobre la pared para ver si encontraba alguna perilla o palanca para abrir una puerta. Estuvo así hasta que sintió una pequeña perilla oculta, le dio vuelta y la puerta se abrió.

_ Un sótano, me sorprende que la puerta que lleva a este sitio esté bien escondido, de seguro lo hicieron en caso de emergencia.— dijo Lincoln.

El albino bajó por las escaleras de ese sótano oculto, estaba muy oscuro, la única luz que había ahí es de la propia entrada. Pasaba sus manos por la pared y entrar de encontrar un interruptor.

_ ¿En donde estará ese interruptor? Mejor uso mi celular para encontrarlo más rápido.

Sacó su celular y puso la luz para encontrar el interruptor, al localizarlo encendió la luz, todo el lugar se iluminó, fue ahí que Lincoln se llevó una grandisima sorpresa. Vio a Lana encadenada de pies y manos sobre una cama vieja en ropa interior y cubierta de sangre.

_ ¡Lana!

Lincoln corrió para ver si Lana sigue con vida o llegó muy tarde, le tomó el pulso y al sentir que respiraba fue que se calmó, pero no por eso debía dejar de preocuparse por la sangre que tenía en su cuerpo.

_ ¡Lana, despierta Lana, vengo a rescatarte!

Lincoln movió a Lana para que esta despierte, vio como la rubia abría sus ojos lentamente. Lana abrió sus ojos y pudo ver una silueta, por unos segundos pensó que se trataba de Jason, pero al ver mejor se dio cuenta de que en realidad era Lincoln.

_ ¿L-Lincoln? ¿Es mi imaginación o ya estoy muerta?— preguntaba Lana.

_ No estás muerta, ¡Gracias al cielo que te encontré!

La rubia al oír lo que dijo Lincoln y estar segura que no estaba muerta su rostro se formó una sonrisa inmensa.

_ ¡Lincoln! ¡Viniste a rescatarme! Por favor quitame estas esposas y salir de aquí.— pedía Lana liberarla.

_ Enseguida, solo déjame usar estos pasadores para el cabello y así librarte.— respondía Lincoln.

El albino usó los pasadores para el cabello y así quitarle las esposas a Lana, tras varios intentos de abrir las esposas era inútil, no era lo mismo que abrir una cerradura.

_ Rayos, no puedo abrir las esposas con estas cosas.— dijo el peliblanco.

_ Revisa si no hay alguna herramienta por aquí que puedas usar.— decía Lana.

Sin perder tiempo Lincoln revisó por todo el sótano si había alguna herramienta que pudiera usar. Por más que buscaba no encontró nada, no había nada ahí.

_ No hay nada que pueda usar, iré arriba y buscar algún cuchillo o lo que sea para quitarte las esposas.— dijo Lincoln.

Lincoln subió para buscar algo útil para quitarle las esposas a Lana y sacarla de ahí. Nomas saliendo del sótano Lincoln escuchó que la puerta de la sala comenzaba a abrirse, rápidamente Lincoln cerró la puerta del sótano y fue a esconderse en la cocina.

Quién había llegado era Jason, quien traía lo que parecía ser una caja de herramientas muy grande. El pelirrojo abrió la puerta del sótano para hacerle una nueva visita a su víctima. Lincoln por su lado vio que era Jason quien había llegado, debía de detenerlo, pero antes sacó nuevamente su celular y realizó una llamada.

Dentro del sótano vemos a Jason quien se acercó a Lana, la rubia vio que Jason había regresado, ya que pensó que iría a la escuela, pero vio además que traía una caja de herramientas.

_ Buenos días, espero estés lista, porque este día me voy a divertir mucho contigo.— dijo Jason a Lana.

_ ¿Que traes ahí?— preguntó Lana.

_ Son unas herramientas, las cuales uso en mi trabajo en el depósito de chatarra. Y las cuales usaré para matarte, ya que mi tío solía usar un método para acabar con la vida de sus víctimas.

Fue así que Jason sacó las herramientas que trajo, había varios entre los hay martillos, destornilladores, llaves inglesa, alicates, incluso un soplete. Todo eso hizo que Lana sintiera mucho miedo, pero en eso recordó que Lincoln está en la casa.

_ Antes de usar a estas bebés contigo haré algo que lo voy a disfrutar al máximo.

Jason se puso encima de Lana y acto seguido le despojó el sostén a Lana dejando al descubierto sus pechos. La rubia al ver lo que Jason estaba por hacerle le hizo recordar lo ocurrido hace años, cuando ella y Lincoln estuvieron en esa falsa casa hogar y casi fueron víctimas de violación.

El pelirrojo veía en primera fila los grandes pechos de la rubia, estaba por tocarlos y saciar sus instintos primitivos. Justo cuando estaba por tocarlos pasó algo.

_ ¡¡Quita tus mugrosas manos de ella!!

Jason volteó asustado de donde provenía la voz y su sorpresa era evidente, era Lincoln quien tenía una mirada para nada agradable al ver lo que ese tipo le iba a hacer a su hermanita.

_ ¡¿Cómo supiste que estaba aquí?! ¿Y como entraste a mi casa?— preguntaba Jason.

_ Mejor guarda tus preguntas y será mejor que te alejes de ella o sino las cosas se van a poner feas.— ordenó el albino.

_ No me hagas reír, tú no podrías conmigo.— se burlaba Jason de Lincoln.

_ Si es así entonces ven y demuestra que eres tan hombre.— retó Lincoln a Jason.

_ Si eso es lo que quieres tendrás el mismo destino que a esta perra. Así formarás parte de mi lista de víctimas.— dijo Jason.

_ ¡No le digas así y ven a pelear!

Jason no dudó ni un segundo y se lanzó a pelear con Lincoln. El albino se sorprendió al ver la reacción de su oponente, pero no dejaría que se salga con la suya luego de lo que le hizo a Lana.

El albino lanzaba golpes los cuales Jason algunos pudo retener, pero Lincoln al tener cierta experiencia en pelea pudo acertar algunos golpes. Jason por su lado también se defendió y le devolvió los golpes recibidos.

Lana veía como Lincoln y Jason se daba golpes seguidos, sabía que Lincoln podrá acabar con él y sacarla de ahí. El albino mandó al suelo a Jason de una patada, Jason había caído cerca de donde dejó las herramientas, de ahí tomó una llave inglesa y con ella atacó a Lincoln.

_ ¡Sé un hombre y pelea con los puños!— exclamó Lincoln.

Lejos de hacerle caso a Lincoln Jason siguió atacando al peliblanco con esa herramienta, Lincoln buscaba la forma para desarmar a su oponente y que la pelea sea pareja.

Fue así que aprovechando uno de los ataques de Jason Lincoln pudo golpear la mano de Jason del cual tenía la llave, quien este la soltó. Lincoln al desarmar a su oponente siguió lanzando golpes a Jason. La pelea se extendió hasta que de un momento a otro los dos chicos dejaron el sótano para ir a la parte de arriba.

Los dos fueron a parar a la cocina, Lincoln pateó a Jason en el pecho y este fue a caer en el fregadero, el pelirrojo vio un cuchillo y con este mismo lo usó para atacar al peliblanco. Nuevamente Lincoln debía de desarmar a Jason, Lincoln esquivó los ataques de Jason, en una de esas le dio a Lincoln en su brazo derecho.

Lincoln sintió un gran dolor debido a la herida que le propinó Jason, este último aprovechó que su oponente está herido y le dio una patada hacia sus piernas haciéndolo caer. Lincoln cayó al suelo y este quiso levantarse, pero Jason se lanzó encima para evitar que lo hiciera.

_ Fin del juego, ahora te mataré y luego me encargaré de la perra de allá abajo.

Jason levantó el cuchillo lo más alto que pudo para así apuñalar al peliblanco. Estuvo a punto de cometer su primer homicidio hasta que.

_ ¡¡Es la policía, salga con las manos arriba ahora!!

Los dos chicos escucharon el sonido de un megáfono y también de varias sirenas de varias patrullas. Jason estaba asustado, la policía estaba afuera para llevarlo, miró a Lincoln y este último estaba sonriendo.

_ ¿Creíste qué sería tan estúpido para no pensar en algo más? Llamé a la policía momentos antes de empezar a pelear contigo.— le dijo Lincoln a Jason.

_ ¡Salga con más manos en la cabeza, lo tenemos rodeado, salga ahora mismo por las buenas o sino nosotros iremos por usted!

El pelirrojo no tenía escapatoria, la policía no dudará en llevarlo, no quería ir a la cárcel. Lincoln al ver la distracción de Jason aprovechó en quitárselo de encima.

_ Será mejor que te rindas, la policía está aquí y no hay nada que puedas hacer.— le dijo Lincoln.

_ ¡Última advertencia, sino sale por las buenas iremos a sacarlo de ahí adentro por las malas!

Sin mas opciones Jason hizo lo mejor que puede hacer en este tipo de situaciones. Huir.

Fue corriendo por la puerta trasera para así escapar de la ley, Lincoln al ver que se quería escapar intentó detenerlo pero no pudo. La policía entró a la casa por la fuerza, había varios elementos policiales que venían para llevarse a Jason, vieron a Lincoln que estaba adentro.

_ ¡El secuestrador escapó por aquí, hay que detenerlo!— exclamó Lincoln.

_ ¿Que apariencia tiene el sospechoso?— preguntó uno de los oficiales.

_ Cabello rojo, camisa manga larga a cuadros y pantalón negro, ¡Dense prisa para detenerlo!— dio Lincoln la descripción de Jason.

_ ¡Vamos por ese individuo!— exclamó el jefe al mando.

Varios elementos fueron tras de Jason mientras el resto liberaron a Lana de su prisión, la cubrieron con una manta y se la llevaron a una ambulancia.

_ ¡Ya tenemos a la chica desaparecida hay que llevarla a un hospital!

Mientras con Jason este corría para así librarse y evitar ser detenido, detrás de él le seguía varios policías que le daban caza. El pelirrojo corrió por algunos callejones hasta que entró a uno que no tenía salida, vio cómo los policías lo tenían como querían.

_ Se acabó el camino, mejor entregate por las buenas, no queremos hacerte daño.

_ ¡Nunca! ¡No pienso ir a la cárcel, no sin antes matar a alguien!— exclamó Jason.

Loco por la impotencia de que su carrera como asesino serial se arruinó se lanzó para atacar a uno de los policías con el mismo cuchillo con el cual iba a matar a Lincoln.

Los policías al ver que Jason tenía un arma estos no dudaron en dispararle para neutralizarlo, pese a las heridas de bala Jason no se rindió y saltó para apuñalar a los policías. Estos últimos volvieron a dispararle hasta provocarle la muerte.

_ ¡El sujeto acaba de ser abatido, repito, el sujeto acaba de ser abatido! Intentó atacar a los agentes con un arma blanca.— avisó uno de los agentes a en su radio.

Los policías sólo veía el cuerpo ya sin vida de Jason, a su lado quedó el cuchillo. Más tarde llegaron más patrullas y miembros forences para llevarse el cuerpo de Jason. En la casa del pelirrojo los agentes hicieron una inspección para encontrar evidencias.

_ Encontré en la computadora del sospechoso mucho material ilegal. Ese chico si que tenía serios problemas mentales.

_ En el sótano en donde tenía a la chica había muchas herramientas, además de sangre y varios hamster muertos. Que horror.

Lincoln estaba afuera dando su declaración a uno de los agentes, le informó de que fue él quien hizo la llamada y de cómo él había sospechado de que Jason fue el responsable de secuestrar a Lana.

_ Muchas gracias por tu ayuda joven, de no ser por ti posiblemente esa chica estaría muerta.

_ De nada oficial, no quise quedarme de brazos cruzados y quise ayudar a encontrarla.— respondía Lincoln.

Vio como se llevaban a Lana a una ambulancia y que le dieran asistencia médica por si tuviera alguna herida de gravedad, además se le veía un poco delgada debido a que habrá pasado hambre.

Ya todo ha terminado, Lana fue encontrada y según escuchó de uno de los policías Jason fue abatido, por lo cual no tendrá que preocuparse por él. Lo único que puede hacer ahora es avisarle a los padres de Lana de que ya la encontraron, también de darle la noticia a Denisse y a Loren, esta última supo de lo que pasaba gracias al peliblanco.

______________________________________

Hola amigos míos, ¿Cómo están? Espero que bien.

Bueno, en este capítulo hubo de todo, vimos como Jason le había pedido a Lana salir con él según Lana en una salida de amigos pero que resultó ser una cita de verdad. En donde Jason se le confesó a la rubia pero esta lo rechazó de manera amable, cosa que no le gustó a este y optó por cometer una locura y es secuestrar a Lana y mantenerla cautiva por varios días.

Ya de aquí las cosas se pondrán buenas, ya que el siguiente capítulo comenzará lo que es el noviazgo entre Lana y Lincoln. De aquí en adelante habrá momentos de los cuales como he contado en capítulos anteriores en como se dará todo y como estos logran tener todo lo que tienen. No se lo vayan a perder.

Ya sin nada más que decir los dejo con mis angelitos para despedir este capítulo.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro