Juntos

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

Cargué a Youngjae y lo coloqué sobre la silla de ruedas.

Finalmente le habían dado de alta. Se podría decir que el estaba contento, pero no del todo, podía darme cuenta de ello porque de vez en cuando su mirada se perdía y se ponía nostálgico, la idea de encontrarse en una silla de ruedas, no le agradaba para nada.

-Te amo- dije besando su frente, para después comenzar a empujar la silla de ruedas y salir del hospital.

Unos minutos más tarde, ya nos encontrábamos en su casa. Su madre había preparado el almuerzo y algunos postres para recibirlo.

Poco a poco, su tristeza y preocupación se fueron desvaneciendo, dejando únicamente una hermosa sonrisa, acompañada de su escandalosa pero alegre risa.

-Y ya han pensando qué hacer?- pregunta su madre.

Youngjae me observa con atención esperando una respuesta de mi parte al no tener una.

-Yo... desde que llegué, pensaba en irme a vivir con Youngjae, tal vez un lugar un tanto alejado de la ciudad, en donde las personas no puedan juzgarnos o molestarnos, creo que esa clase de ambiente nos haría bueno a ambos, además, no tengo problema con llevarlo al hospital. Qué piensas Youngjae?- pregunto, en realidad me siento ansioso por su respuesta.

-Me agrada la idea- asiente con alegría mientras toma mi mano.

Es normal que queramos vivir en un lugar poco habitado cuando muchas personas no han hecho nada más que lastimarlos, y no es momento para ello, sino de centrarnos en la salud de Youngjae.

-Podemos irnos cuando te sientas listo, yo busqué algunas opciones y me gustaría que elijas una de ellas, tal vez mañana podamos visitar las casas- le propongo, y él vuelve a asentir.

-Creo que es lo mejor para ustedes, en todo caso, cuentan con mi apoyo- dice su madre satisfecha al ver a su hijo feliz.

-Puede visitarnos cuando lo desee, no hay ningún problema.

En cuanto anochece, tomo a Youngjae en brazos, me es evidente que ha bajado mucho de peso, pero sé que en poco tiempo lo recuperará, porque su madre se empeña en prepararle cosas deliciosas para comer, luego lo dejo en el borde de su cama.

Comienzo a subir su camisa para quitarla, pero él me detiene.

-Pue...puedo hacerlo solo-  tartamudea con nerviosismo.

-Yo quiero hacerlo- digo apartando sus manos.

Sus mejillas se sonrojan en cuanto quito completamente su camisa, y en cuanto veo su abdomen, compruebo que está considerablemente más delgado.

-Debes comer más para recuperar tu peso- le menciono y él simplemente asiente.

Tomo de su armario una pijama, y coloco la parte superior de esta en su cuerpo, cubriendo nuevamente su abdomen.

Quito el botón de su pantalón y bajo el cierre de este, él deja caer sus pantuflas de perritos al suelo para lograr sacar su pantalón por completo y sustituirlo por un pantaloncillo de dormir más cómodo.

El rojo tiñe nuevamente sus mejillas, haciéndolo más adorable.

En cuanto me pongo completamente de pie, él me abraza, atrae mi cuerpo al suyo, y hunde su cabeza en mi estómago, acaricio su suave cabello por algún tiempo y él después levanta su cabeza para verme a los ojos.

Aún hay cosas que no hacemos, menciona, no sé a que se refiere, pero pensamientos no tan sanos, pasan por mi mente, pero al ver su expresión inocente los desecho.

-No hemos dormido juntos en mucho tiempo- me dice con una media sonrisa.

No puedo evitar reír y él me ve algo extrañado.

-Qué?- pregunta confundido.

-Nada, tienes razón, hay muchas cosas que todavía no hacemos.

Analiza las palabras por unos segundos y comienza a reír a carcajadas mientras me golpea ligeramente el estómago.

-No me refería a eso.

-Lo sé, pero deberías específicar más- digo, y él asiente.

Lo ayudo a desplazarse hacia el lado izquierdo de la cama y me acuesto a su derecha para después cubrir nuestros cuerpos con una cobija, atrago su cuerpo al mío en un abrazo, y él hunde su cabeza en mi pecho.

-Extrañaba tu olor- dice respirando profundamente.

-Yo estrañaba todo de ti- le digo.

Nos vemos a los ojos, y tiempo más tarde caemos profundamente dormidos, esta vez no es un sueño, verdaderamente le tengo entre mis brazos, y mi corazón se siente completo.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro