Capitulo VIII

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

Maratón 3/4

19 estrellitas + 36 comentarios para la actualización de la historia

📆 18 de marzo de 2025
📌 Mónaco (Montecarlo)

Dejo caer mi teléfono sobre mi pecho cuando envío ese último mensaje, extendiéndome por completo en mi cama.

Unos golpes a la puerta de mi habitación bastan para que vuelva al mundo verdadero, haciéndome creer que era nada más y nada menos que mi hermano pequeño, Monty.

-estoy ocupada -hablo con una voz bastante generosa y tranquila.

Y de vuelta esos golpes vuelven.

-Monty, deja de golpear la puerta! Ya sabes perfectamente que estoy ocupada...

-¿para mí también, Mon Coeur? -una dulce voz hizo que abriera los ojos como platos.-

-Oh, hola Pierre, bonita camiseta

-gracias -dice algo sonriente ante mi reacción a su camiseta nueva.- ¿puedo saber por que estas algo... devastada?

Señalo la multitud de papeleo que está apoyado en mi mesa, la cual, no me había dejado dormir en alguna que otra noche y mis ojeras eran prueba de eso.

-¿Y tú, qué haces aquí? ¿Te llame sin querer?

-Para nada -negó con la cabeza.- solamente me pasaba para verte, ya que llevo casi una semana sin verte y para ser tu es algo... raro, para ser exactos -da con la palabra exacta.

¿Una semana? ¿Llevaba una semana encerrada en mi cuarto? Wow.

-¿por qué no sales a la calle?

Dos palabras; No gracias.

-¿por qué no hacemos un maratón de películas de Disney? Creo que para eso no hace falta pisar la calle

El francés niega rotundamente con la cabeza, mientras saca de su bolsillo unas llaves de un coche.

-Tengo un plan mejor

Suspire fuerte. La realidad era que no tenía ganas ni ánimos de salir a hacer cosas, de gente normal y corriente.

-Por favor Pierre, que no sea uno de tus planes locos

-te lo prometo, solamente dame tu mano y de lo demás me encargo yo

Suspiro y mi mano se apoya en su palma, haciendo que de un leve y delicado tirón de mí, acercándome a su pecho por completo.

Supongo que me podía fiar de él...

-Antes de bajar del coche debes ponerte esto -deja una venda de color blanca en mi mano.

Observo la venda por todos lados y no encuentro significado alguno para esto, no era mi cumpleaños ni mucho menos estábamos celebrando un podio. Vuelvo a observar a Pierre y lo veo bastante contento, así que me dispongo a ponérmela lo antes posible.

-Bien, ya estoy lista -suspiré.- ¿Pierre?

-ven conmigo -susurra entrelazando sus dedos con los míos.

-¿a dónde vamos? -mi emoción se podía notar desde lejos. Por mucho que negara que no me gustaban las sorpresas, las amaba, poca gente sabía eso sobre mí y Pierre era uno de esas personas.

Noto como la mano de francés se despega de mi completamente, mientras se apoya detrás mía, abrazándome delicadamente, susurrandome que ya podía quitarme la venda puesta.

-¡surprise! -grita bastante emocionado, incluso más que yo.

Levanto la cabeza y miro a mi alrededor. Pierre había organizado una comida en la playa, de uno de los restaurantes más caros de Montecarlo.

-a veces te pasas, Pierre -me cruzo de brazos en busca de su respuesta.

-¿porque? ¿No te ha gustado?

-¿Qué si no me ha gustado? -cuando menos me dí cuenta estaba saltando a los brazos del francés en busca de afecto y cariño.- Te adoro Mon Coeur, no sé como lo haces pero siempre terminas sacándome una sonrisa

-La magie d'être française, ma belle dame -pronuncia en su idioma natal.- ¿que tal si pasamos y nos sentamos en la mesa? Los meseros vendrán en unos instantes

No tardamos mucho en sentarnos y que los camareros vinieran a tomarnos la cuenta.

-Pierre yo... Gracias, enserio, doy gracias por haberme topado contigo en mí camino y... no he podido tener más suerte al tener un mejor amigo como tú. Créeme que la chica de la cuál me hablaste deber tener mucha suerte -una sonrisa de formó en mí.

Noto como su sonrisa se desbanece en cuestión de segundos, cómo su mirada se pierde y... como no duda en besarme y cogerme de las caderas para guiarme.

-yo... perdón Sienna, tenía que hacerlo, entiendo que no sea el mejor momento para decírtelo pero... llevo enamorado de ti desde que tengo uso de razón, me encanta como sonríes por cada mínimo detalle, o como cuándo vas por la calle y ves un perro y das saltitos de alegría al verlo y no dudas en acariciarlo, cuando lloras por ver películas románticas creyendo que nunca te llegará alguien así, alguien que te cuide y no te suelte nunca... O cuando se iluminan tus ojos cada vez que subes a recoger el trofeo después de cada carrera...

Oh, Pierre...

Hay dios, eso sí que era una sorpresa. Pierre estaba enamorado de mí...

Muchos os preguntaréis si me gustó el beso y la respuesta era que sí, solo que hubo un pequeño inconveniente... ¡Le había puesto la cara de Max a Pierre!

-Lo siento, Sienna -repite.

-no te preocupes Pierre, solo qué... me gustaría ir despacio, ¿me entiendes?

Una sonrisa se forma en sus labios, creando en los míos una igual. No dudo en besarle de nuevo y nos disponemos a terminar de cenar.

Después de cenar nos dispusimos a andar por la playa y ver el atardecer.

-¿Puedo... darte la mano? -pregunta con cierto nerviosismo.

Sonrío cómo una tonta a aquella respuesta y afirmo.

-¿Crees que tú padre me vaya a matar por lo sucedido? -los dos reímos al compás.- la verdad es que no quiero que me corte la cabeza y la cuelgue en su salón encima de la chimenea

-Si es así por mí bien, así puedo verte todos los días -vuelvo a reír.

-¡Oye!

Salgo corriendo sin mirar atrás, y unos pasos más adelante me giro para ver por donde voy, pero el piloto francés me alcanza haciéndome cosquillas, hasta que una voz conocida hace que los dos nos demos la vuelta.

-¿Sienna, Pierre? -pregunta el moreno, asegurándose qué éramos nosotros.- ¿qué hacéis aquí?

-Oh, hola Max

-Sí, hola Max -repite Pierre.- ¿como tú por aquí?

Me observa determinadamente al igual que la mano que nos une a nosotros dos.

-¿Puedo hablar un momento contigo? -me pregunta.

-Sí claro, ¿me esperas en el coche Mon Coeur?

-¿Estás segura? ¿No quieres que me quedé por aquí cerca?

Afirmo y él deja un beso en una de mis mejillas, mientras por el lado del neerlandés estaba ardiendo de ira.

-¿Qué haces con ese idioot? ¿Y porqué te deja un beso en tú mejilla como si nada?

-primero, no llames idiota a Pierre, es mi mejor amigo y cualquier cosa que tenga que ver con él, yo lo voy a defender, segundo, ¡a ti no te importa! Ni que fueras mi padre... -rodee los ojos en señal de respuesta ante su tonta pregunta.

-¿Entonces porqué te mira así? -sigue cruzado de brazos, mientras frunce el ceño.

-¡¿Así cómo?! -exclamo perdiendo los nervios.

-¡Así como si te quisiera echar un buen polvo!

-¡¿Y qué si quiero que me eche un buen polvo?! ¿Tienes algún problema ante eso?

Se queda callado y sé su respuesta por su lenguaje corporal.

-eres un... eres un... ¡Hay dios! ¡No tengo palabras para describirte! - pongo mis manos tapando mi rostro mientras pienso.- ¿Puedes irte? Por favor, no quiero tener más problemas contigo

-Perdón... yo... no debí haber venido, disfruta con Pierre -sonríe falsamente.

-Sí, hubiera sido lo mejor para los dos, o más bien para los tres...

Y sin más, se va, sin despedirse.

Abro la puerta del coche de Pierre y me siento rápidamente. Estaba claro que aunque unos segundos atrás le haya gritado a Max, no me sentía en condiciones de hablar con nadie.

-¿Quieres hablar?

Niego con la cabeza a punto de llorar.

-Quiero irme a casa, eso era lo que debería de haber echo durante toda esta tarde, no salir, además, tengo demasiado papeleo y si mi padre no ve que está terminado y en orden, se enfadara

-Sienna yo...

-Llévame a casa Pierre, por favor -me apoyo en el cabezal del asiento, mirando fijamente la ventana que estaba a mi lado.

-Bien...

Pude observar de reojo, como el francés me miraba cada vez que tenía oportunidad, pero esta vez no con cara de felicidad, si no de tristeza.

En mi cabeza solamente rodaba la imagen de la cara de desilucion de Max, de como se puso lleno de ira delante mía y el como me vino a reclamar por lo que yo quisiera hacer con mi jodida vida.

-Hemos llegado

-Bien, gracias Pierre -acarició su barbilla.- gracias por traerme

-antes de que te vayas... ¿Puedo hacerte una pregunta? -puedo ver como juega con uno de sus anillos.

-Si, claro

Se queda unos segundos pensativo ante aquella pregunta cuestionada.

-...nada -finalmente habla.- no es nada, son cosas mías

-¿Seguro? -ahora la de la pregunta era yo.

Estaba miento, eso estaba claro.

-muy seguro, nos vemos Mon Coeur, dale recuerdos a el pequeño Monty

Me iba a despedir de él, pero por razones obvias arrancó, dejándome con la palabra en la boca.

¿Qué estaba pasando hoy? ¿Por qué todo el mundo se comportaba tan extraño?

Feedbacks ༄

siennahorner Mon bébé 🥹💙
@siennahorner @sierreforever La mejor pareja 🤌🏻🤌🏻

charlesleclerc Eso es Ma copain, you can!! 👀👀

emmadupont I love my babies!! 🤍

allewolff Do I have to kill someone? 😚😚

fernandoalonso Team Sierre forever!! 🙌🏻🙌🏻

haileybieber I love this for my loves, you deserve the best ❤️‍🔥❤️‍🔥

Ver más comentarios





























HELLO, HELLOOO!! ¿Qué tal vuestra semana my babies? La mía algo ajetreada la verdad!

—Anyways, primero de todo y algo que me encantaría saber esss, ¿Team Sierre o Team Masie? ¡Os leo! 👀👀

—Segundo agradeceros a todos y cada uno de vosotros por el apoyo que estoy recibiendo, millones de gracias, os quiero de aquí al infinito 🫶🏼💕

—Tercero y último, ¡espero que disfruteis del penúltimo capítulo de este Maratón! Peeero no tanto ya que el capítulo del Domingo viene cargadito de sorpresas 🤭🤭

Besos, Sisi ♡

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro