El pequeño albino - parte 1

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°°°3 horas antes°°°

En un campamento fortificado al pie de las montañas se encontraban muchas mujeres realizando sus labores correspondientes para sobrevivir y luchar.

Hacía no más de un año un misterioso virus acabó con todos los hombres del planeta, ya sean niños o adultos, y causó una gran crisis mundial. Pero no fue sólo eso, sino que, misteriosa y aterradoramente, los hombres comenzaron a revivir, mordiendo y matando a todos aquellos seres vivos que se les cruzaran. Su fuerza era sobrehumana y no tenían consciencia más que la primitiva de cazar y comer. Sus cuerpos, aun en descomposición, atacaban a las mujeres, únicas sobrevivientes del mundo, para devorarlas. Fue así que de inmediato comenzaron a crearse fuerzas de resistencia que trataban de repelerlos. Pero aún con aquello todas sabían que no sería suficiente, pues sin los hombres no podrían procrear y los laboratorios fueron destruidos. Incluso la esperanza en las mujeres embarazadas se perdía, pues aunque anteriormente hubieran confirmado que algunos de los bebes serían varones, por alguna razón acababan naciendo todas niñas.

En aquel campamento se encontraba al mando la General de brigada Erza Scarlet, más conocida como "Titania" debido a su ferocidad y habilidad en el campo de batalla. Desde el día anterior se preparaban para salir de la fortificación e ir en busca de provisiones y otros elementos que pudieran servirles para la sobrevivencia: instrumentos de herrería, de carpintería, materiales para construcción, armas, etc..

Frente a la tienda de campaña más grande y llamativa del campamento se encontraba una rubia con un mapa y algunos papeles en las manos, indecisa de si entrar y arriesgarse a que su General la "mate" por despertarla o irse y esperar a que su General la "mate" por no haberla despertado cuando llegó.

-«De una u otra forma puedo morir.»-pensó con un escalofrío.

Tragó duro y se armó de valor-«Adios, mundo cruel.»

Se acercó a la entrada de la tienda y por fin habló.

-General Erza Scarlet, soy la capitana Lucy Heartfilia del segundo escuadrón: traigo aquí la información de la zona semi-explorada que usted pidió.-habló con voz firme pero por dentro estaba que se moría de los nervios.

No se escuchó ningún sonido ni respuesta por unos cuantos minutos. La capitana estaba que le temblaban las piernas y de pronto sintió un fuerte escalofrío.

-¿Qué dije acerca de despertarme tan temprano?-preguntó una oscura voz desde adentro de la tienda.

Como en una película de terror, una figura alta y voluptuosa apareció por entre las sombras que se proyectaban a la entrada de la tienda, dejando ver una larga y muy despeinada cabellera roja como el fuego. La miraba de manera asesina y Lucy se sentía como una pequeña hormiga a punto de ser aplastada.

-P-p-pero a-aquí traigo l-lo que usted m-me pidió, G-general.-le dijo como pudo mientras se sentía cada vez más pequeña.

La general posó una mirada curiosa en lo que tenía en sus manos y lanzó una exclamación.

-¡Anda, es cierto! ¡Bueno trae aquí esos papeles! ^.^ -le pidió con una sonrisa PARA NADA tenebrosa.

Enseguida la capitana le entregó los papeles e hizo, aunque algo tarde, el saludo militar.

La General, sin dejar de ver los papeles, se encaminó hasta otra de las tiendas, siendo seguida por la capitana que respiraba aliviada.

Una vez en la tienda, comenzó una reunión con la capitana Heartfilia y algunas tenientes de otros escuadrones, incluyendo el de ella.

(😒 tengo pachorra y poca imaginación militar, así que yolo)

Salieron de allí una hora después, dejando en claro qué lugares deberían recorrer los grupos escogidos y por qué teniente serían dirigidos.

Pero en secreto la General tenía otro plan en mente: sorpresiv, incluso para ella, pero "mentalmente" necesario.

-¿Que quiere enviar a un grupo a investigar? Pero si apenas faltan dos horas para que amanezca.-le comentó confundida la capitana Heartfilia a la General cuando ésta le comentó su plan en su tienda.

-Sé que suena ilógico y peligroso pero tengo un presentimiento extraño que no me deja en paz desde hace algunas semanas. Tengo la sensación de que habrá algo en ese pueblo que es importante pero sigo sin saber qué es.-le comentó Erza frustrada.

La capitana, sabiendo que cuando su General tenía un presentimiento éste era 99,9% acertado, suspiró y se puso firme.

-Entonces con gusto dirigiré al grupo hasta allí y no regresaremos hasta que encontremos algo.-le dijo de manera solemne.

La General asintió con una sonrisa y fueron en busca de las chicas que conformarían ese pequeño grupo.

Teniendo cuidado, obviamente, de que no las descubriesen las demás.

Al cabo de una hora ya se encontraban en las afueras de la fortaleza, muy alertas y armadas con dagas, cuchillo y algunas con katanas.

*El grupo era conformado por siete chicas de entre quince y diecinueve años:

·Mei Misaki: 15 años, cabello negro hasta la mitad del cuello, ojo derecho color borgoña con un parche sobre el izquierdo, altura promedio y experta en el manejo de la katana y pistolas.

·Annie Leonhardt: 17 años, cabello rubio largo atado en un rodete, ojos marrón claro, altura promedio y experta en el manejo de dos katanas y francotirador.

·Tõko Murasame: 16 años, cabello rosa opaco largo hasta el muslo, ojos verde agua, altura promedio y experta en el manejo de dagas y shurikens.

·Tenten: 18 años, cabello castaño largo atado en dos rodetes altos a los costados, ojos café, altura promedio y experta en cuchillas, kunais y metralletas.

·Temari no Sabaku: 19 años, cabello rubio largo atado en cuatro coletas, ojos verde azulado, altura promedio y experta en francotirador, pistolas y cuchillas.

·Mikasa Ackerman: 17 años, cabello azabache largo hasta la mitad del cuello, ojos azabaches, altura promedio y experta en el manejo de dos katanas, dagas y francotirador.

·Lucy Heartfilia: 18 años, cabello rubio largo hasta la cintura, ojos café, altura promedio y experta en armamento pesado, pistolas, cuchillas y kunais.

Las siete iban vestidas con trajes militares de camuflaje en verde oscuro, llendo hacia un automóvil detrás de muchas ramas y emprendiendo marcha hacia el pequeño pueblo que estaba más cerca.

Al cabo de cuarenta minutos ya se encontraban a doscientos metros del pueblo. Decidieron estacionar el auto allí y tener en mente un plan de escape en caso de ser necesario. Caminaron separadas dos metros las unas de las otras, observando atentamente a su alrededor y buscando "algo" que sea "importante", tal y como presentía su general.

Lucy observó cuidadosamente en el interior de una casa pero se extrañó de que no hubiese ningún muerto. Tampoco encontraron por las calles o los callejones donde, estaban seguras ellas, habían unos cuantos muertos la última vez que pusieron un pie allí.

Estuvieron unos cuantos minutos revisando el lugar, teniendo un mal presentimiento debido a su repentina ausencia.

Hasta que los oyeron: esos muy conocidos y familiares gemidos guturales y gritos inhumanos. Ocultas, vieron como los "muertos" perseguían algo o alguien, el cual vieron que se trepo rápidamente a un árbol.

Lo que les fue más curioso fue que parecía tener cabello blanco.

Sin perder mas tiempo, la capitana les ordenó por medio de señas rodear a la horda y acabar con cuantos pudiesen.

Mikasa y Annie se pusieron una al lado de la otra y con sus katanas abrían paso entre los muertos. Cuando estos notaron su presencia se lanzaron hacia ellas con sus fauces abiertas, pero la capitana junto con Tenten y Temari acababan con ellos, cubriendo los flancos. Tõko y Mei de un salto se posicionaron en frente de Mikasa y Annie y atravesaban las cabezas de los muertos que quedaban con una rapidez extrema. El sonido estruendoso de las armas de fuego se oía como eco por el pueblo, aunque afortunadamente ya no había más muertos por allí cerca.

Al cabo de unos instantes, los muertos fueron rematados y sólo quedaban sus cuerpos, o los restos de ellos, desperdigados por alrededor.

La capitana, luego de guardar sus armas, se giró en dirección al árbol y observó hacia arriba, quedando petrificada en el lugar, con los ojos bien abiertos.

Las demás, confundidas por su actitud, vieron hacia el mismo lugar... sintiendo en su interior el florecer de una nueva esperanza.


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:v asco de capítulo pero whe~...

( \(=^=)/ editado, shit)

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