*Flashback*

La noche en la que Suga fue traicionado parecía una noche normal.
Paek le dió las instrucciones para recibir un paquete en el otro lado que tendría que llevar con mucho cuidado.

-Esta vez no pesa mucho así que estoy seguro que será rápido ¿Verdad?

Suga asintió mientras se colocaba la mochila.

-Es un paquete muy valioso, ten cuidado con romperlo, quién nos lo ha pedido es un mafioso que opera en este lado del muro...

-¿No será droga?

Paek sabía que Suga no le hacia gracia
transportar droga de hecho se había negado a algún trabajo por ello, aunque eso fuese lo que más dinero reportaba.

-¿Cuántas veces te tengo que decir que eso no se pregunta?.- dijo Paek enfadado.- Tú haz tu trabajo y ya está.

-Paek...te lo advierto, com...

-Y yo te lo advierto a tí, Suga.- el dedo índice del hombre se puso frente a la cara de nuestro protagonista.- Ya no puedes echarte atrás. Coge la puta mochila y métete en el agujero.

Suga se mordió la lengua.
Transportar droga era lo más seguro que había porque nadie estaba dispuesto a perderla.

El pelinegro se deslizó por el túnel y comenzó a arrastrase.

La ida normalmente era más rápida porque entraba "fresco" y sin cargas.

Al llegar al otro lado un par de guardias corruptos le esperaban como siempre.

-Rapido chaval, no tenemos toda la noche.- le espetó uno sin ni siquiera ayudarle a salir de dónde estaba

Suga se levantó y abrió la mochila. El guardia puso el paquete.
Normalmente era así. Él no debía hablar, ni preguntar ni sugerir nada y a Suga eso se le daba bien.

El camino de vuelta lo hizo rápido también, tenia ganas de acabar. Sólo pensar que esta era la última vez, que iban a darle bastante dinero y que por fin se podría quitar el peso de estar mintiendo a Jimin lo hizo avanzar con una rapidez extrema.

Le daban igual los arañazos. Ya tendría tiempo de curarse.

Sonrió cuando vio la luz al final del túnel, ya estaba más cerca. Un poquito más.

Un poco más...

Ya podía sentir el abrazo acogedor de Jimin en su cómoda cama.

Un poco más, vamos...

Le contaría a Jimin alguna mentira piadosa o quizá sería honesto y le diría la verdad, ya lo pensaría por el camino de vuelta a casa.

Ya podía sentir el aire fresco golpeando su cara.

Iban a alquilar una casa, iban a vivir juntos...compraría un piano y adecuaria una sala para que Jimin pudiera bailar.

Llegaba, le faltaban escasos centímetros para tocar la apertura.

¿Quién decía que los sueños no se podían cumplir?

Sus manos agarraron los bordes del túnel y se impulsó hacia el exterior.
Sacó el cuerpo, por fin, quedando a cuatro patas dándose un momento para calmar su agitada respiración.

Entonces algo le golpeó en la cabeza haciéndole caer de bruces y quedando aturdido.
Vió dos caras borrosas que lo miraban desde arriba.
Uno de ellos lo volteó con el pie poniéndolo de lado y le sacaron la mochila a la fuerza, haciéndole daño en los hombros.

Intentó quejarse pero la cabeza le daba vueltas.
Se toco dónde le dolía y notó algo húmedo.
Se miró la mano y se la vió machada de sangre.

Después, Suga, perdió el conocimiento.

🎈🎈

Se despertó y le costó un rato averiguar que estaba atado a una silla en medio de un almacén vacío.

Se giró a ambos lados, la cabeza dolía horrores y el dolor se intensificó con los movimientos.

-¿HOLAAAAAAAA?

Gritó obteniendo el eco de su voz como respuesta.

-AAAAAAGGGHHHHHHHH

La rabia le invadió mientras intentaba soltar las cuerdas que le laceraban la piel de sus muñecas.

Estuvo un buen rato peleando con las gruesas cuerdas hasta que sintió unos pasos por detrás de él.

Suga se quedó estático en la silla.

-Min "puto" Yoongi ¿Que coño has hecho?

Paek y otros dos hombres que no conocía se pusieron frente a él.

-¿Que demonios pasa Paek? ¿Esto es una broma? ¡Suéltame!

Paek se cruzó de brazos mirándolo divertido.

-¡Que me sueltes, joder!

Paek chasqueó la lengua rápido en negación.

-Te vas a hacer daño y esos bracitos valen oro.

Suga bufó sin entender nada e intentó calmarse.

-Explicame por qué estoy así.

Suga fingió aparente calma. Relajó los músculos y estiró las piernas.

-Has perdido un paquete muy valioso. El dueño está muy enfadado contigo.

Suga abrió la boca indignado.

-¡Me lo robaron! Fueron dos hijos de puta, me lo robaron, Paek.

De la indignación Suga volvió a intentar aflojar las ligaduras.

-Te creo, Suga, cálmate...- Paek se acercó a él y se arrodilló quedando a su altura.- pero tenemos un dicho en este mundo y es que "el que pierde, paga"

Le intentó tocar la cara pero Suga se apartó.

-Eso es injusto.

Paek se rió y se levantó.

-¿Desde cuándo el mundo es justo?

-Me queréis hacer pagar por algo que no he hecho...¡es injusto, Paek! .- repitió

Paek le fue rodeando y puso una mano en su pelo.

-Tienes dos formas de pagar, Suga.

El peligro tensó su mandíbula ante las caricias que le estaba propinando su ex amigo.

-Puedes pagarnoslo ahora mismo,cosa que dudo porque eres más pobre que las ratas ¿Verdad?

Suga escupió al suelo.

-Vete a la mierda.

-....O puedes seguir trabajando con nosotros hasta que saldes tu deuda.- se había puesto delante de él otra vez.- Pagandonos en cómodos plazos.

-¡Y una mierda!

-No tienes elección, amigo. Es eso o morir. - dijo Paek

Jimin le vino a la cabeza. Bajó su barbilla resignado.

-No tienes elección, Yoongi.- repitió como un mantra

Escuchar ese nombre en aquella persona le dió ganas de vomitar.

No. No tenía elección.

Suga estaba jodido. Atrapado.

-Sueltame.

-Dime qué es lo que prefieres.

-Seguire trabajando.- dijo con resignación

Paek sonrió satisfecho.

-Has elegido la mejor opción, amigo. A nadie le gusta morir ¿Verdad? Aunque estés solo en este mundo.- le hizo un gesto a uno de los hombres.- suéltalo.

El hombre se agachó y comenzó a soltar sus cuerdas.

-Recuerda, amigo Suga,que aquí no tienes escapatoria.

Suga apretó sus muñecas cuando se sintió liberado.

-Eres un cabron, Paek.

-Lo fui siempre pero tú no lo quisiste ver en su día.

Suga se levantó y se puso frente a su amigo que no reculó, al contrario, se enderezó más.

-No, no lo eras. - dijo realmente triste.- Yo nunca hubiera sido amigo de un hijo de puta como tú.

Se miraron mientras sus pupilas temblaban.

-Dentro de tres días tienes un nuevo encargo -Le informó Paek.- Si no estás aquí te buscaré y te mataré yo mismo.

Suga siguió atravesandolo con la mirada.

-Largate antes de que me arrepienta de haberte dejado con vida.

Nuestro protagonista se dio la vuelta despacio y salió del almacén.

La vida, de nuevo, lo ponía a prueba pero esta vez no vió esperanza alguna.

🎈🎈

Jimin se despertó aquella mañana con los golpes que su hermano pequeño daba en la puerta.

-Ya voy...ya voy

No tardó mucho en darse cuenta de que Suga no había dormido ahí. Su lado estaba intacto.
Abrió la puerta.

-¿Qué ocurre, Tae? .-preguntó molesto

-Suga está al teléfono, quiere que te pongas.

Jimin corrió por las escaleras, presentía algo malo.

-¿Yoongi? ¿Què pasa? ¿Por qué no has venido a dormir?

-Calma Jimin. Estoy bien...

-¿Y por qué no estás aquí?

-Escuchame, no te alteres con lo que te voy a decir.

Tarde. Ya era tarde para que al rubio no le castañearan los dientes.

-Volveré en dos días.

-¿Qué? ¿Por qué?

-Me ha surgido un trabajo.

Jimin frunció el ceño.

-¿Así como así? ¿De la noche a la mañana? ¿Dónde estuviste anoche?

-Jimin, no empieces con las paranoias.

-¿Paranoias?.- A Jimin se le habían puesto rojas las orejas.- ¡A la mierda! ¿Dónde coño estás, Min Yoongi?

-No hagas más preguntas. Te lo explicaré todo cuando vuelva. Confía en mí, por favor.- rogó Suga.

Jimin bufó.

-Me cago en la puta, Suga.

-Por favor, no pienses cosas raras.

-Vale.- dijo pero en absoluto convencido.- te espero en dos días con una buena excusa.

-Te quie...

Pero Jimin ya le había colgado.

Suga también lo hizo desde el poste donde llamaba que estaba al lado del hospital donde fue a curar sus heridas.

Le habían vendado la cabeza y las muñecas.
Esos dos días estuvo deambulando, durmiendo en la calle...
¿Que le hubiera dicho a Jimin si lo hubiera visto aparecer lastimado?

No. Lo último que quería Suga es que Jimin supiera algo de todo esto.

Eso sería admitir que le había mentido y tendría que aceptar que Suga se enfrentaría a un peligro constante hasta que la deuda estuviera saldada.

Sería hacer sufrir a Jimin y eso es lo último que Suga haría en esta vida.

La lluvia comenzaba a caer después de que el cielo se hubiera puesto negro como el carbón.

Por un momento y de manera inconsciente pensó en volver a casa.

Entonces sintió cómo la soledad le atrapaba con sus negras manos y le apretaba el cuello sintiendo un doloroso nudo en la garganta

"Sólo es temporal" se dijo mientras apoyaba su cabeza en uno de los pilares de aquel puente que le estaba resguardando de aquella lluvia que se había intensificado.

Como si el mismo cielo estuviera enfadado con él.

Se arropó mientras pensaba en la mala suerte que tenía.

Y en como, las malas decisiones podían hacer de tu vida una miseria.

Se maldijo a sí mismo por idiota.

Lo tenía todo y sentía que, si no comenzaba a jugar bien sus cartas, lo iba a perder todo también.

Y ese todo tenía nombre y apellido:

Park Jimin

🎈🎈

Nota de la autora:

Todo los humanos cometemos errores pero unos se pagan más caros que otros.