Capítulo 14

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Taehyung estaba preocupado por ella, comprendió _______, resultaba
conmovedor, pero también le hacía gracia: era evidente que él no tenía ni la menor idea de cómo había tenido que ingeniárselas toda la vida,bajar las escaleras en su situación no era nada comparado con las situaciones a las que había tenido que enfrentarse.

—Tranquilo, me las arreglaré —contestó ella con sencillez.

—Estoy tranquilo, pero esa no es una respuesta —dijo él, serio de nuevo.

Taehyung se cruzó de brazos, ______ sabía muy bien qué significaba aquel gesto: que no iba a ceder si no le daba primero la respuesta que esperaba.

—Escucha, sé que te sientes responsable de mi herida, pero ya te lo he dicho antes, no ha sido en absoluto culpa tuya,no tienes por qué preocuparte por Jackson y por
mí, nos hemos visto en situaciones mucho peores, créeme.

—Te creo —contestó él serio, pasándose una mano por el cabello—, pero a pesar de todo me preocupo por ti.

—Tengo muchos amigos en el pueblo, Taehyung ,si necesito ayuda, solo tengo que levantar el teléfono —añadió ella encogiéndose de hombros.

—Te he oído hablar por teléfono antes, ________ —oyó él— sé que estabas llamando a tus amigos, pero ninguno de ellos parecía muy dispuesto a ayudarte.

—Ah... así que has estado escuchando mis conversaciones telefónicas privadas, ¿es eso? —preguntó _______ sonrojándose al comprender que la había pillado en una mentira.

—No pude evitarlo, ________ además, sé muy bien que fingirías que todo va bien aunque no fuera así.

Bueno, en eso tenía razón,había hecho unas cuantas llamadas justo antes de la cena, pero sus amigos no parecían disponibles, por una u otra razón.
Su mejor amiga, Kim Chungha abriría la tienda por ella, pero tenia cinco hijos y una madre en el hospital
a su cargo, así que no podía ayudarla demasiado,_______ se mordió el labio inferior.
—Aún me quedan amigos a los que llamar, seguro que alguno de ellos me puede ayudar.

—Muy bien, haré un trato contigo —se ofreció Taehyung acercándose a su lado y sentándose en el sofá junto a ella.
________ sintió deseos de salir corriendo, pero su tobillo se lo impidió.

— ¿Qué trato?

—Si consigues que alguien venga a ayudarte me voy,pero me refiero a ayuda de verdad, no simplemente a dejarte la bolsa de la compra en la puerta y hacerte una visita de cinco minuto,si no consigues que venga nadie, me quedaré aquí para ayudarte a ti y a Jackson. —¿Pensaba quedarse con ella... solo para ayudarla? Taehyung llevaba en el pueblo únicamente veinticuatro horas, pero para _______ era como si toda su paz
interior estuviera en peligro—. ¿Por qué me miras así, _______? —continuó él—. ¿Es que no me crees capaz de hacer lo que haga falta?

—No... no es eso... —respondió ella sacudiendo la cabeza, Taehyungtenía el brazo apoyado sobre el borde del sofá, detrás de ella. No la tocaba, pero aquello bastaba para distraerla—. Es solo que no hace falta que te quedes por el hecho de que te sientas culpable.

—Eso ya me lo has dicho..... No me quedo porque me sienta culpable, ¿de acuerdo?
La sinceridad de su mirada volvió a penetrarla.

Aquellos enormes ojos marrones lograban conmoverla una y otra vez _________trató de ignorar la sensación de calor. Seguía sin creer en él.

— ¿Y qué hay de tu vida en Seul? ¿Puedes permitirte el lujo de estar
tanto tiempo lejos de tu oficina?

—La oficina no va a venirse abajo porque falte yo, por mucho que me moleste admitirlo —sonrió él—. Además, en cuanto consiga llegar al coche podré seguir en contacto con ellos. Tengo teléfono móvil, ordenador portátil, módem, e-mail... de todo.
—Por supuesto, debería haberlo imaginado —contestó ella.
Un abogado a la última como Kim Taehyung iba siempre con todo el juego completo, con lo último en tecnología. No podía ser de otro modo, reflexionó.

—Sí, deberías haberlo imaginado —contestó él con una sonrisa sexy.
Taehyung puso un cojín sobre la mesita de café y se inclinó para colocar la pierna herida de _______  cómodamente sobre él.

— ¿Qué estás haciendo? —preguntó ella alarmándose. Se había puesto una falda larga y una camiseta de sport para cenar. Era mejor que luchar para ponerse unos pantalones. Y, al menos, se había depilado las piernas en
la bañera.

—Tienes que tener la pierna en alto, es lo mejor para la hinchazón —contestó él con la mano sobre la espinilla, observando el tobillo—. Vaya, aún está muy hinchada.
Mañana iremos al médico, a primera hora de la mañana. Sinceramente, creo que necesitas una placa de rayos X.

Taehyung levantó los ojos y la miró con expresión de preocupación, con la mano aún sobre la pierna, acariciando la espinilla arriba y abajo y dándole después un ligero
masaje en el músculo de la pantorrilla.

—Detesto ir al médico —admitió ella.

—Tenía la sensación de que ibas a decir eso —rió él sin dejar de darle masajes.

Aquella sensación resultaba relajante, la hacía languidecer pictórica de paz. Taehyungrodeó con el otro brazo su hombro—. Yo me haré cargo de la factura, tranquila —añadió evitando su mirada.

Aquel comentario la hizo enderezarse y ponerse tensa de nuevo. Tomó la mano que él tenía sobre su pierna y la apartó.

—Eso no será necesario —aseguró _______ a pesar de su escasa cobertura médica y de sus apreturas económicas.

—Bueno, ya veremos —contestó el echándose hacia atrás sin dejar de
mirarla—. ¿Sabes? He oído decir que, a veces, de pronto, aparece un extraño en nuestras vidas por una razón muy concreta, para enseñarnos una lección.

—No me digas... así que tú has aparecido en mi vida para enseñarme a no abrir la puerta a los desconocidos en mitad de la noche, ¿es eso? .

Taehyung se echó a reír, y luego contestó:

—No, en absoluto. Creo que estoy aquí para enseñarte a aceptar la ayuda de los demás con un poco más de... gracia.

— ¡Ah! —exclamó _______ cruzándose de brazos. Por un instante había creído que él iba a decir algo más... romántico. Había sido una estúpida—, ¿Y qué se supone que voy a enseñarte yo a ti, Taehyung?

—Quizá deba aprender a no hacer suposiciones tan precipitadas sobre los demás... o algo así.

Taehyung fascinado de pronto por un rizo de los cabellos de _______, lo tomó entre sus dedos y se lo retiró de la mejilla. ______ tragó y apartó la vista.

—Bueno, Jackson estará encantado de saber que vas a quedarte un poco más —comentó ella tratando de cambiar de conversación.

—Es un chico fantástico —lo alabó él con sinceridad.

—Gracias, eso mismo pienso yo —sonrió ella.

—Cuéntame cosas de él —pidió Taehyung recostándose contra el respaldo, pero sin mover el brazo, que seguía apoyado sobre el hombro de ella.

— ¿Qué es lo que quieres saber?

—Todo. Debe haberte costado mucho trabajo criarlo tú sola.

La ternura y la calidez que la habían embargado se evaporaron al escuchar esa pregunta. O, más bien, al recordar ciertos hechos sobre sus relaciones con él.

—Sí, no fue fácil, pero claro, tú eso ya lo sabes. Lo sabes todo por el informe de tu investigador privado. Seguramente sabes incluso la fecha de nacimiento de Jackson, dónde nació y cuánto pesaba, así que, ¿para qué te molestas en preguntar? .

Taehyung ladeó la cabeza. Esa fue la única reacción que ella pudo observar.

—Me lo merezco —contestó tras una pausa acariciando su hombro, obligándola a olvidar su enfado—. Conozco los hechos, lo básico, pero quiero que tú me lo cuentes.
Según el informe, te marchaste de la casa de tus padres a la edad de... diecisiete años, ¿no? —ella asintió—. ¿Y por qué? .

Eso era difícil de explicar, incluso después de los años transcurridos. Y más difícil aún explicárselo a un hombre como Taehyung, cuya vida era tan distinta a la de ella. ¿Por qué tenía que sentirse obligada a hacerlo? No le debía ninguna explicación,
sus decisiones no eran asunto suyo. Mirarlo de nuevo, sin embargo, fue su perdición.

Taehyung parecía tan interesado en lo que ella tuviera que decir, tan atento. La expresión de su bellísimo rostro acabó con toda su resistencia, _______ se encontró de pronto buscando una respuesta.

—Mi padre me echó de casa cuando descubrió que estaba embarazada.

— ¿Que te echó de casa? —repitió él incrédulo.

—Era un hombre muy rígido —explicó ella respirando hondo—. Le
preocupaban mucho las apariencias. Siempre estaba pensando en qué opinarían los demás de nuestra familia. Era abogado, ¿sabes?, por eso nuestra familia tenía que estar
siempre libre de todo posible reproche. Ni siquiera quiso que lloráramos en el funeral de mi madre.


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Uno o dos Capítulos más y se viene el Lemon 👀

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