Jungkook seguía cortando el aire con su espada, estaba frustrado, de nueva cuenta el que Jimin le hubiera ganado le daba falsas esperanzas de que Taehyung se fijase en él, soltó su arma al suelo con furia, y apretó los dientes con fuerza.

—¿Qué se supone que haces? —la voz del alfa líder hizo que mirase detrás suya.

Jimin tenía su mirada justo en su espada, y luego paso a él en unos instantes.

—Entreno un poco... —respondió Jungkook de inmediato.

—Algo te preocupa, no puedes mentirme, Jungkook —era verdad, Jimin había aprendido mucho de todos sus compañeros a lo largo del entrenamiento, los conocía como la palma de su mano.

—Es ese omega —respondió Jungkook, no sabía si hacía lo correcto con decirle al alfa líder, usualmente siempre les decía que no debían de mostrar algún signo de distracción, y más con referente a los sentimientos—, sé que dirás que no debe ser un motivo de distracción, y que debería olvidarlo, pero... —relamió sus labios con parsimonia—, pensar que él está tan interesado en ti, solamente me hace sentir que debo mejorar para ser mucho más fuerte.

—Él no está interesado en mí, Taehyung tiene otros intereses —menciono Jimin, ¿cómo es posible que Jungkook pueda decir algo como eso?

—¡Él tiene mucho interés en ti! -exclamo Jungkook, bajo un poco a mirada—, ese omega no se fijaría en mí ni, aunque hiciera el mejor de los trucos de magia blanca.

—Entonces estamos en las mismas, Jungkook.

Jungkook miro con algo de sorpresa a Jimin, en eso tenía la razón, pero al parecer el príncipe ha estado mostrando interés hacia él, ¿por qué no solamente aceptarlo? Tenía que admitir que cuando se enteró de que el alfa líder es quien va ser la pareja del príncipe, se quedó sorprendido, y le daba esperanzas de que Taehyung dejase de mirar a Jimin con una posibilidad de cortejo, pero las cosas eran muy distintas.

—Entrena mañana, casi está a punto de anochecer, tenemos que vigilar —la voz de Jimin lo saco de sus pensamientos.

—¿No piensas darle cortejo al príncipe? —la pregunta había salido por si sola de los labios de Jungkook, pero quería saber si lo haría.

Jimin miro por unos segundos a Jungkook, sus miradas eran intensas, como si quisieran ver más allá del alma del otro, pero Jimin la aparto para darle la espalda por completo.

—Ya lo hice una vez, y me ha rechazado —Jungkook dejo de mirarlo—, ¿crees qué será diferente si lo intento de nuevo?

No hubo más que silencio, Jungkook podía comprender aquello, el rechazo del predestinado puede ser muy doloroso, te rompe por dentro, y ni siquiera sabes si vivir podría ser lo correcto, mirar cómo te rechaza quien será el amor para toda tu vida, es doloroso, demasiado doloroso para cualquiera, tanto omega como alfa al ser rechazados, se sienten terrible.

Jimin continuo con su camino, Jungkook miro como se alejaba poco a poco, pero no tardo en dar unos pasos para poder darle alcance al alfa líder.