La Calma antes de la Tormenta

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Tras el nacimiento de Eneas, pasarían los años, donde por donde lo veas, el continente disfruto de una relativa paz, pese a estar en una situación de Guerra fría, dado que Iwagakure quería hacer caer a Roma y Konoha quería hacer caer a Olimpia. En estos años, la situación se volvió cada vez más latente, dado que varias naciones estaban esperando la guerra, Guy y el equipo Shinobi de Sasuke lo confirmaban, Iwa, Konoha, Orochimaru y posiblemente Akatsuki estaban preparándose para la batalla. 

Danzo en Konoha, lanzó escaramuzas contra países pequeños, sumiéndolos en guerras internas, donde él, usando la fuerza de Konoha, llegó haciéndose ver como el salvador, mientras expandía sus fronteras y chocar las mismas con Sunagakure, quién con Kankuro a la Cabeza se estaba preparando para una inminente guerra con la Hoja.

Onoki por su parte empezó a cerrar más a los habitantes de países cercanos al País del Rayo, dado que necesitaba estar con poca distancia para acabar con Roma, dado que después de la batalla contra ellos en las puertas de la ciudad, hubieron muchas escaramuzas entre el Iwa Shinobi y las Legiones Romanas, donde gracias a su táctica y avance determinado cercaban y forzaban na la huida a los shinobis.

Por otro lado, Danzo trató de derrocar al Daimyo del Rayo, pero no lo logró dejándolo muyy herido y aprovechando ello, para dar su golpe, y tomar Kumo, forzando al ex Raikage a refugiarse en Roma. El Nuevo Raikage, simplemente rompió toda relación con Olimpia y Roma, empezando una preparación sin precedentes, lo que cementaba el enfrentamiento de Kumo contra Roma, y Sasuke, sabía que si ello pasaba, debería tomar todo el País del Rayo para asegurarse de que no haya una inestabilidad política, a pesar de que tuviera el apoyo de gran parte de los civiles y mucho shinobi de la zona, los consejeros del Daimyo, eran otro tema.

En el Mar, Themiscyra, la tierra de Sakura, se vio bendecida por el nacimiento de su hija con Sasuke, una niña a la cual bautizaron como Sarada, la cual desde que empezó a caminar fue sometida a entrenamientos de diversa índole, con excepción de las artes shinobi. Por su parte Sakura, vio cómo aquellas que tenían un odio ciego por los hombres, siendo la mayoría de las mujeres más viejas que vivían a sus pies, conspiraban en su contra, por lo que antes de que iniciara la guerra civil, junto a Moegui y Tenten, las asesinaron en pleno combate y cementando un futuro libre de odio sin límites ni justificaciones verdaderas. Sakura permitió que si tendrían hijos varones, que ellas decidan qué hacer con ellos, sin contar con la muerte, lo que terminó con más de 45 bebés masculinos siendo llevados a Olimpia, dado que pese a quererlos, la isla sería habitada sólo por mujeres.

En el caso de Sarada, simplemente se dedicó a aceptar las enseñanzas de su madre y reunirse con su padre y hermano mayor cuando ella partía al continente y visitaba Olimpia, por Perseo y Roma por su padre y medio hermano por parte de él. Honestamente estaba muy sorprendida por los logros, aunque se preocupaba por ellos, debía estar con su pueblo esperando el llamado para ser la nueva líder.

En Roma, Sasuke logró un cometido mayor al esperado, dado que en conceptos militares poseía en pie 13 legiones, alrededor de 7000 hombres y mujeres por legión, dado la gran inmigración de pueblos pequeños a sus fronteras, quienes se sumaron a su estilo de vida, expandiendo su influencia, lo que generó el malestar del nuevo Raikage, dado que Roma ya podía catalogarse como potencia a la par con las 5 grandes aldeas shinobi. Ésto fue demostrado por Marco Aurelio Uchiha, quién al mando de una legión logró poner en fuga a una avanzada de varios Kumo shinobis, oto-shinobis y renegados que quisieron sobrepasarse.

Marco Aurelio fue sin dudas un joven azabache de fortaleza similar al padre, y valiente como su madre Yugito, a sus 15 años, era todo un general romano, ganándose el título de Augusto por sus hazañas, lo que enorgulleció a su padre cuando se lo dio. Augusto en romano significa merecedor de gran respeto y veneración por su majestad y excelencia. Ésto pudo haberlo vuelto un arrogante, pero a pesar de su capacidad táctica y militar, era un pacifista, guiándose por el pensamiento filosófico más que por el de un guerrero, aún así, estaba más que decidido en defender su nación, ganándose un puesto de admiración con su media hermana Sarada.

En caso de Sasuke, conocer a su hija fue un golpe importante a su capacidad, dado que aún no superaba a Yugito, pero ello fue algo bueno, logró cementar un inicio de relación con Karin Uzumaki gracias  a la pequeña Uchiha que estaba entristecida al ver a su padre decaído y no como el azabache valiente como lo había definido Sakura, es por ello que inició una relación amorosa con la Uzumaki y gracias a ello se recuperó, y en poco tiempo, a la mitad de la edad de Marco Aurelio, nacieron los frutos de ese amor, dos gemelos, dos pequeños niños, a quienes bautizaron como Rómulo y Remo, en honor a los fundadores de Roma, a la par que esperaban que ambos gemelos, no terminaran como ellos.

Los niños enorgullecidos y admirando los logros de su hermano mayor, con 7 años, decidieron enlistarse en las escuadras de formación de la legión, empezando su carrera militar en torno a favorecer los designios de su ciudad, ciudad que heredaría su hermano mayor, y ellos, dado el lazo de hermanos, siendo la espada que defiende la ciudad, sus protectores.

En Olimpia, las cosas marcharon a un ritmo muy bueno, en estos años, Boruto se volvió uno de los jóvenes más apuestos y codiciados de toda la ciudad, junto con Perseo Haruno. Ambos siguiendo las tradiciones de su hogar a los 10 años empezaron su adiestramiento en las artes de la guerra, aumentando mucho más su lazo, dado que fueron criados como hermanos, forjando una hermandad por las armas sólida y fructífera, siendo de los mejores guerreros que salieron a los 15 años de las formaciones de soldados. Al igual que su padre, Boruto se volvió un extraordinario jinete, junto con presentar una habilidad sin igual en el manejo de las armas, a la par que dicha habilidad la compensaba con una gran inteligencia estratégica que le permitió ser vencedor en numerosas contiendas con sus hermanos y hermanas de armas, en las que participó como su comandante.

Ese fue un gran inicio para el mayor de los hijos de Naruto, siendo para el rubio un gran orgullo, y cimentando el futuro y el inicio de la prueba del nuevo Dios, donde bajo designio de Zeus, y sin ayuda de Naruto, con tal de poder ascender y poder sentarse en el trono de los Dioses, como miembro del consejo Olímpico, el joven Uzumaki, el primero de los hijos de Naruto, debió enfrentar una serie de pruebas, siendo provisto de un poco de ropa precaria y una espada. En su viaje de misión, conoció a una chica, Sumire Kakei, con quién el joven rubio forjó un lazo de amistad que poco a poco se iba transformando en romance.

Las dos tareas que debió realizar fueron Asesinar al León de Nemea, el poderoso león devorador de hombres y poseedor de una piel invulnerable, y Asesinar a la poderosa Químera, un ser que vomitaba llamas y tenía cabeza de león, vientre de cabra y cola de dragón. La primer bestia con la que se topó fue la Químera, quién sin pensarlo atacó al joven que acompañado por su leal corcel llamado Belerofonte, cargó contra ella usando un arco, que su padre le dejó para usar, aunque no debía ayudarle. Como el héroe que mató a la bestia la primera vez, Boruto, lanzó varias flechas al lomo con su arco, debilitando a la bestia, quién en su dolor no sintió cómo la cabeza de cabra de la misma fue cortado, dejando la cabeza de león que exhaló fuego, el cual siendo esquivado por el rubio golpeó una pared, causando desconcierto de la bestia, que sintió como su vida se acababa al sentir una espada enterrándose en su cabeza restante. Para asegurar la muerte de su oponente, el joven Uzumaki decidió clavar la espada en numerosos puntos vitales asegurando así el fin de la bestia.

Su tarea restante, luego de que Sumire lo vendara para continuar fue matar al León de Nemea, un terrible león de gran tamaño que parecía invencible y poseía una piel difícil de penetrar con las armas. Su piel era tan dura que ningún arma podía atravesarla. Su rugido helaba la sangre del más valiente. Pero ello no frenó al rubio, quién vagó por varias islas por una semana hasta llegar a su destino. El León al verlo rugió con furia ante el intruso y saltó al ataque, Boruto pese a no contar con armadura, se lanzó contra el monstruo aprovechando su pequeño tamaño y mayor velocidad. Usando su espada logró dañar al animal, enterrándole en sus oídos el acero, dejándolo sordo, para luego lanzar flechas a los ojos de la bestia, que rugía del dolor. A diferencia de Heracles, que con su fuerza logró estrangular al animal en el pasado, Boruto quitó la espada de los oídos del animal y la enterró en su boca cortándole la garganta desde dentro, pues la invulnerabilidad era superficial y no interna. Una vez muerto el león, quitó las garras del mismo y desprendió su piel, dejándola como su trofeo.

Boruto regresó al Olimpo Victorioso, siendo recibido por Naruto, que no pudo ocultar su orgullo por su primogénito, por lo que Zeus al tomar la piel del animal en señal de ofrenda, procedió a nombrar al joven Boruto como dios, mientras Naruto cedía un par de Dominios. Boruto Uzumaki desde ascender al Olimpo fue considerado el nuevo Dios de la Guerra, la Estrategia y el Tiro con Arco, tomando su lugar a la derecha de su padre.

Perseo Haruno, el hijo de Sakura, se volvió junto a Boruto en uno de los mejores guerreros de Olimpia. Su hermandad de armas con el rubio Uzumaki, en lugar de perjudicarle dados los celos al estar cerca de la familia Uzumaki, lo favoreció, se volvió tan bueno en las artes de la guerra estando a la par en habilidad con Aquiles, el gran héroe de los griegos de la guerra de troya. Fue por su buena disposición, lealtad y habilidad, que fue el segundo al mando de los Mirmidones tras Konohamaru, un honor que muy pocos se habían ganado al entrar allí. Su relación con su madre y hermana fue muy buena, dado que jamás les guardó rencor, y entendía el por qué debía ser protegido dado el supremacismo de muchas mujeres en el hogar natal de su madre. 

En conceptos de amor, Perseo, sintió un acercamiento con uno de sus compañeros de armas, un joven llamado Millicas, ambos practicaban y entrenaban juntos, empezando una relación de amantes de esa forma. Para Naruto, ello no fue repulsivo, dado que lo aceptaba y permitía que ellos eligieran sus parejas, pero, a diferencia de la Grecia Antigua, Naruto condenaba la pederastia, por lo que por leyes, las relaciones entre hombres y mujeres adultos con jóvenes y doncellas, estaban prohibidas. 

Su relación aunque en principio algo resistida por su madre, fue aceptada por ella, al final, generando un gran respeto de el joven por su madre.

Orfeo Uzumaki, el segundo hijo de Naruto, un Dios joven en sangre, se volvió un joven apasionado a la música y el arte, como aquel que originó su nombre. Fue enseñado en las artes de la guerra y en las artes y música donde el propio Naruto le enseño a tocar la Lira. Su música, lograba hacer bailar a los quietos, cantar a los mudos y alegrar a los tristes. El mundo se detenía a escuchar su música, haciendo que por donde pasara la paz y la armonía que se encontraren sea inmensa. Los animales salvajes frenaban su accionar entre ellos para escuchar sus tonadas, llenas de una gran emoción y sentimiento, logrando aplacar a la más iracunda bestia. Orfeo lograba ésto con tan sólo 13 años, siendo considerado un gran prospecto a músico en el futuro por las Mismas musas, diosas de las artes que proclaman a los héroes.

Eneas Uzumaki, el menor de los hombres Uzumakis de la familia, sacó como sus hermanos los ojos celestes de su padre, y junto a su hermano mayor, el pelo rubio, pero sin heredar las marcas de bigote de la cara. Al igual que Orfeo, sintió una pasión distinta al de su hermano mayor por las batallas. Su personalidad fue la misma de su padre en Konoha, bromista, juguetón, pero lo que en verdad le afectaba, era la capacidad para generar amor, ésto llamó la atención de Naruto, pero cuando lo comprobó, se llevó la sorpresa de que Eneas, había logrado sacar dos pares de alas, dos alas de ángel. Ésto llevó a que Naruto le enseñara los secretos del amor y de la pasión, para que un día, él sea el nuevo Dios del Amor y todo lo que conllevara, así mismo le enseñó a usar el arco, junto con la peligrosidad y riesgos del romance, pues si uno aprende a amar, debe aprender a odiar.

Eneas, Boruto y Orfeo, no fueron los únicos, pues a los 18 meses de nacido Eneas, Hinata confirmó un nuevo embarazo, alegrando a la familia, donde 9 meses después nacería Himawari, una niña ojiazul como el padre y pelivioleta como la madre, presentando las marcas de bigote como su padre y hermano mayor poseen en el rostro. Tan inocente tan pura, por lo que Naruto ya había decidido que llegado el momento, le heredaría un par de dominios, como el terreno virgen, los nacimientos, la virginidad y las doncellas, su hija sería pura, mucho más pura que Hestia y ningún bastardo sediento de poder mancillaría esa pureza en su bebé, algo que sus hijos masculinos asentirían con firmeza, Himawari no sería tocada por nadie que no fuera digno.

Por otro lado hubo otros quienes progresaron, Ino y Sai, tuvieron un hijo a quién nombraron Inojin, a la par que en un viaje de visita a Roma, fueron atacados por varios Shinobis de Danzo, para matar a Sai, cosa que casi logran, pero generando que Sai quedara sin poder mover las piernas, y teniendo que quedarse a vivir allá. Inojin Yamanaka, sin dudas, para muchos fue el mejor amigo de Marco Aurelio, su consejero y compañero de armas, a quién le confiaría hasta su vida, dado que fue nombrado por él mismo, su segundo al mando en la Legión, siendo de los mejores y cosechando numerosas victorias juntos, siendo por mucho un terror más grande para Iwa que lo que fue Minato Namikaze.

De regreso en Uzu, Naruto estaba viendo a sus hijos conversar como dos jóvenes de 14 años, siguiendo los pasos de su hijo mayor, Boruto de 16. En estos años Naruto jamás pudo ocultar su orgullo por sus hijos, después de todo, cada uno forjaría su leyenda en el futuro, para ser recordados por generaciones. Simplemente les recordó siempre, dado su futuro, que el ser Dioses no debe ser motivo para dejarse llevar por el Narcisismo, la Egolatría, el Orgullo, la Vanidad, ni mucho menos la Venganza, aunque ésta última en una leve porción estaba bien.

Quedó concentrado en sus pensamientos que no notó como su pequeña girasol se tiró encima

Himawari: papi

Naruto: hey que pasa princesa?

Himawari: Boruto-nii vendrá?

Naruto: no creo, estaba poniéndose al día con su nuevo deber

Himawari: aún la extraña verdad?

Naruto: si sin dudas, pero ello no lo tirará abajo, como se que a ninguno lo hará

Eneas: cómo lo sabes padre

Orfeo: si dinos

Naruto: porque son mis hijos, mi sangre, y si algo nos caracteriza a los Uzumakis es que no nos rendimos con nada

En ese momento llegaría su hijo mayor, pero lo que notó Naruto fue ciertas marcas de "Labial"

Boruto: ni una palabra -diría sonrojado

Naruto: quién?

Boruto: Nike

Naruto: La diosa de la Victoria? ese es mi hijo

Boruto: bueno tengo que superar el hecho de que ella ya no está

Naruto: ey -diría abrazando a su hijo- él pagará cada daño que nos haga, te lo garantizo, Danzo y Konoha pagarán la muerte de Sumire.

Boruto: gracias pa

Naruto: bueno, vayamos adentro que su madre nos matará si no cenamos

Todos: HAI

Todos ingresarían a la casa sin esperar que pronto la tierra empezaría a teñirse de rojo.

Konohagakure:

Danzo estaba reuniéndose con varias personas en su alrededor, había tratado de usar el Edo Tensei en varios Shinobi poderosos, pero no podía resusitarlos, ni con ayuda de Zetsu y Tobi de Akatsuki. Trató con Tobirama, Hashirama, Hiruzen, Minato, Kushina, Nagato, pero no podía, sus almas estaban bloqueadas y no podría ser usados en contra de su enemigo. Sin embargo dejó esos pensamientos de Lado cuando Orochimaru llegó riendo de forma tétrica

Orochimaru: kukukuku está listo

Danzo: bien -diría serio.

Orochimaru: cómo acordamos, yo tendré a Uchiha Sasuke y toda Roma, esas muestras -señalando los tubos- tienen tipos de gran poder

Danzo: a quiénes tienes?

Orochimaru: veamos, El Yondaime Kazekage, el Sandaime Raikage, Madara Uchiha, entre otros

Kabuto: esto será interesante para ver no creen

Danzo: pronto, todo estará a mis pies

En Iwa

Onoki estaba reuniéndose con su par de Kumo, ambos estaban más que decididos a tomar las riendas y recuperar su influencia, Roma iba a desaparecer.

Onoki: es hora

Raikage: así es

En Roma:

Sasuke estaba leyendo varios informes de sus espías en la zona, notando como las cosas ya se movían para mal, dado que Onoki haría que el Daimyo muera y que el Raikage tomara el poder.

Sasuke: es hora de actuar

Marco Aurelio: padre?

Sasuke: alista a tu legión y llama a los demás generales

Inojin: como ordene César

Marco Aurelio: es grave? -recibiendo el asentimiento de su padre- bien

Ambos se retiraron de la sala.

Themiscyra

Sakura y Tenten estaban preparándose para sumarse a la pelea, no cederían nada y sin dudas le darían la pelea de su vida a Danzo.

Sakura: esos dos no se quedarán con toda la diversión.

Fin del Cap.

Siguiente Cap................................ Guerra.

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