Lo correcto

Hidroxizina: No mezclar con alcohol

Es una de las principales advertencias, además que no sabia que la champaña dañara tanto mi sistema nervioso, entre eso y el vino blanco que dieron en la cena, sentía que mi cuerpo pesaba demasiado, estaba totalmente ida. Ver a Yoongi, el que me hablara me había desarmado de nuevo, el juraba que arreglaría todo, pero no creo que sea tan sencillo, el video no me hubiera dolido tanto si él no hubiera sido tan cariñoso con Jun sin mencionar que saber que ambos olían igual ese día no ayudaba nada.

No pude dejar de ver a Yoongi, que estaba demasiado tranquilo platicando con Hobi, se veía tan lindo con ese smoking, no ayudaba nada a mi cordura emocional en este momento, súmenle el coctel que traía encima, solo quería ir y que me besara de la manera posesiva que siempre lo hace.

Al final de la cena mi estado era un poco mas que inconveniente, Jimin se paso un poco de copas que yo, pero estaba mas estable que yo.

—Es hora de irnos Cherie.

—¿Podrás conducir?

—Pediré un uber, mañana vendré por el auto.

Jimin me tenia por la cintura para no caerme, me quite los tacones para mejorar mi equilibrio, el suelo del estacionamiento me hizo sentir escalofríos por lo frio, Jimin me recargo en su auto en lo que sacaba su teléfono para pedir el uber.

—Tengo frio.

—Deja saco mi chaqueta.

Abrió el auto y la tomo de la parte trasera, me la comenzó a colocar, al terminar sus manos acariciaban mis mejillas.

—Odette.

Subí la cabeza para mirarlo, sus ojos viajaban de los míos a mis labios, sentí que trago saliva para acercarse a besarme, me quede quieta, no entendía que estaba haciendo, lo intente empujar pero mi estúpido cuerpo no me respondía del todo bien.

—No, Jimin, detente.

—Perdona es que te vez tan bonita.

—Somos familia Jimin.

—No de sangre.

Esta vez bajo a mi cuello, sentía que sus dientes daban pequeñas mordidas, su mano en mi muslo se sentía irreal, su cuerpo se apretaba contra mí no me dejaba moverme, sentí como deslizo sus dedos hasta mi ropa interior, ¿Por qué me estaba haciendo esto?, sus hombros no se movían ni un milímetro por mas que lo empujaba.

—Jimin, por favor, detente.

—No puedo Odette, te deseo tanto, desde siempre, desde niños, me he contenido tanto, ahora verte hecha una mujer completamente ha acabado con la poca paciencia que tenia, déjame ayudarte con tu tristeza.

—Por favor.

Pero él no me escuchaba, con su pie separo mis piernas lo suficiente para que su cuerpo quedara en medio de mí, comencé a llorar, este no es Jimin, debo de estar soñando es un efecto secundario, si, debe ser eso, si cierro los ojos, esperando que todo termine.

—¿Qué crees que haces?

Alguien aparto bruscamente a Jimin de mi, sentí otro par de manos en mis hombros.

—¿Estas bien Odette?, soy Hobi tranquila.

Escuche el sonido de algunos golpes, pero solo veía dos siluetas borrosas peleando.

—Espera aquí.

Yoongi

Hobi me detuvo el puño lleno de sangre, me sujeto por las axilas para quitarme de encima de ese bastardo.

—¡Basta amigo esta ebrio también!

—Eso no le da derecho, nada de derecho— no reconocía mi voz, era mas un gruñido que palabras, sentía tanta rabia solo quería seguir golpeándolo.

—No hagas esto, te pueden sacar del equipo por un imbécil, ahora concéntrate en ella que es la que te necesita.

Gire el rostro para verla, tambalearse hipeando por el llanto, se tocaba las piernas de manera nerviosa, estaba tallándose tanto que dejaba marcas rojas en su piel, tenía razón necesitaba ir con ella, me acomode la chaqueta del smoking.

—Escúchame Jimin, si vuelves a tocarle un solo cabello te matare, no me importara si ella termina odiándome por ti, pero no dejare que te le vuelvas acercar basura.

Hobi me cubriría con el entrenador, pedí un uber para llevarla a un hotel junto conmigo, ella no decía nada su mirada estaba perdida, en la recepción del hotel fueron amables y me facilitaron algo de ropa para ella, claro que con dinero todos son amables, pedí dos habitaciones, lo menos que quería era que ella estuviera aún más incomoda.

—Te deje ropa en la cama, estaré al frente del pasillo, si necesitas cualquier cosa llámame.

—Yoongi— sus labios temblaban un poco — ¿quédate si?

—Necesitas descansar.

—No quiero estar sola.

—Solo dame un minuto.

Sali de la habitación, para marcar por teléfono, el único numero que se que me ayudaría.

—¿Qué sucede dumpling?, son las dos de la mañana.

—Necesito de tu ayuda, te explicare algo, primero no te alteres, segundo no se que hacer en esta situación.

—Te escucho.

Le explique a grandes rasgos, primero me regaño por la golpiza que le di a Jimin después me dijo que se lo merecía, me explico que debo de ser cuidadoso, porque ella esta demasiado vulnerable ahora, dejar que ella se me acerque o que quiera hablarlo, necesitaba toda mi paciencia para esto, mi madre se encargaría de decirle a los padres de Odette la situación mañana temprano.

Entre frotando mi rostro, ella estaba acostada ya cambiaba con la ropa que le había dejado, me senté en un pequeño sillón al fondo de la habitación, me quede de manera tranquila sentado viéndola como respiraba de manera calmada.

—¿Yoongi?

—Aquí estoy.

Se sentó y me miro con sus enormes ojos azules, sujeto sus piernas colocando su rostro sobre sus rodillas.

—¿Puedes sentarte en la cama?

Asentí y avance con cautela, me senté en la otra orilla de la cama, ella se acercó y me abrazo.

—Juro que no he hecho nada malo, ¿Por qué me pasa esto?, si hubiera estado en mis cinco sentidos.

—Oye, el que se aprovecho fue él, no tú, no es tu culpa, tu no hiciste nada malo, mucho menos le daba derecho a nada tu estado.

—Quiero irme a casa.

—Claro, mañana le hablamos a tu padres, o ¿quieres hablarles ahora?

Negó con la cabeza, bese su frente.

—A dormir ahora.

Regreso a la cama acomodándose en la almohada, sentir mis brazos vacíos teniéndola tan cerca era algo triste, pero entendía la situación, mañana hablaríamos con mas calma, por ahora solo queda velar sus sueños.