Capitulo 1

Sonic the hedgehog

"explorador rango B" - Velocista escurridizo

Azul omega

Se levanta una vez mas de su rutina monotoma en aquel cuarto a oscuras. La única compañía eran los muebles básicos que lo rodeaban: una cama sencilla, un baño funcional y un armario que contenía sus icónicos zapatos rojos y blancos, entre otros.

Bosteza.

Se dirige al baño y acomoda su cama, sin la necesidad de prender la luz en ningún momento. Finalmente abre su armario saca sus zapatos y un conjunto de ropa oscura que debia usar, aparte de un canguro militar que debia llevar en su cintura y pierna. Antes de retirarse de ese cuarto minimalista aburrido para su estilo. Se prepara con una sonrisa optimista.

Antes de salir, llevó a cabo su rutina de calentamiento, asegurándose de estar en plena forma para lo que estaba por venir. Con un firme propósito en mente y poder atravesar la puerta.

Avanzó por los pasillos de tonos blancos. Se mezcló con la multitud que se movía con una sincronización sorprendente, cada individuo siguiendo su camino con orden y disciplina. Cada paso estaba imbuido de propósito, una misión que lo impulsaba hacia adelante. Finalmente, llegó a una zona donde otros antropólogos se reunieron para desayunar, todos luciendo el mismo conjunto de ropa oscura. Era como una forma que es parte de esa comunidad, apesar de que no le agrades a muchos y pocos te quieran.

Sonrie.

Una sonrisa se dibujó en su rostro, reflejando una mezcla de emoción y camaradería. Con gracia, se deslizó hasta la mesa donde había decidido sentarse, ocupando su lugar con naturalidad en medio de las demas mesas ocupadas por sus demas compañeros antropologicos 

Se sienta en la misma mesa. 

Entre la uniformidad de las vestimentas oscuras y el ambiente ordenado, resaltaba la figura de su amigo con su vestimenta de científico blanco, acentuado por una llamativa pulsera neón que adornaba una de sus piernas. Además, notó un leve cambio de en el diseño de la vestimenta blanca que llevaba y mostrando el rango actual dentro de la nueva comunidad. 

Sus miradas se encontraron en un reconocimiento instantáneo. No era necesario ningún gesto ni palabra para establecer una conexión profunda. El brillo en sus ojos hablaba de años de amistad, aventuras compartidas y un entendimiento mutuo.

Silver the hedgehog

"Asesor tipo ingeniero" - Especializado en tecnologias avanzadas - Telequinesis

Blanco omega

Sonrie.

Un cálido y sincera sonrisa se dibujó en sus rostros al encontrarse visualmente. Era como si un lenguaje secreto, solo entendido por ellos dos, se transmitiera a través de esa sonrisa. Era el reflejo de años de confianza, complicidad y camaradería. A pesar de las diferencias en su vestimenta y roles, su amistad era un lazo fuerte y sólido que había perdurado a lo largo del tiempo.

Asienten.

La sonrisa de complice. 

Una alarma rojiza destelló, sacudiendo a todos los presentes y desencadenando el caos en medio de la multitud. Mientras el pánico se apoderaba de la mayoría, el amigo cobalto pareció encontrar un atisbo de diversión en la situación. Con una agilidad y destreza notables, fruto de años de entrenamiento, superó a la agitada multitud, abriéndose paso con facilidad hacia su amigo albino de ojos ámbar.

El albino, aunque tenía la responsabilidad de vigilar a los demás en medio de la conmoción, no pudo evitar contagiarse de la risa que parecía brotar del cobalto. Mientras otros intentaban calmar la confusión, el contraste entre la alarma y la actitud relajada del cobalto añadía un toque de absurdo a la escena.

Alcanzó a su amigo albino y, en un gesto que reflejaba su fuerte conexión, lo abrazó con cariño. Era como si ese abrazo fuera un reafirmar de su amistad y una respuesta a la situación caótica que los rodeaba. En ese abrazo, todas las preocupaciones parecían disiparse y quedaba solamente el entendimiento mutuo y la camaradería.

La risa, contagiosa y liberadora, se apoderó de ambos mientras caían al suelo, dejándose llevar por la marea de emociones que habían estado acumulando en medio de sus roles y responsabilidades. Los sonidos del caos a su alrededor se volvieron como una especie de música de fondo para su risa compartida, un testimonio de que incluso en los momentos más inusuales y caóticos, su amistad seguía siendo una fuente de alegría y apoyo.

En ese instante en el suelo, riéndose juntos, el cobalto y el amigo albino encontraron un respiro en medio de la agitación. 

En un pasillo apartado del bullicio y la confusión, los dos amigos seguían riendo, observando la escena con un atisbo de asombro y diversión. El caos que se desenvolvía a lo lejos, aunque caótico y aparentemente descontrolado, no les era del todo extraño. No era la primera vez que enfrentaban eventos de este tipo, y esa familiaridad solo aumentaba la sensación de camaradería entre ellos y lo absurdo que puede llegar.

El origen de la alarma rojiza y del caos que había desatado era, de hecho, su pequeño amigo zorro amarillo de dos colas. Vestido con atuendo blanco y negro y luciendo unas gafas holográficas celestes, estaba ocupado tecleando en su teclado en su oficina, controlando la situación que él mismo había iniciado. A pesar de la gravedad aparente, una leve sonrisa adornaba su rostro y revelando su satisfacción por estar en el centro de la acción de manera anonima por ahora.

Miles Power the fox - Tails

"Asesor Técnico Intercosmo" - Etnólogo y Sanador rango A

Nine beta

Aprovechando una cámara cercana, ofrecieron un pulgar arriba al pequeño zorro amarillo, un gesto de aprobación y reconocimiento por su intrépida maniobra. El zorro amarillo asintió en respuesta, una confirmación silenciosa de que estaba disfrutando de su papel en la situación. Sus intenciones no eran dañinas, sino más bien queria una pizca de diversión esta comunidad monotoma.

~Toda una estrategia perfecta~

~¿Quién habra sido el inteligente o la cabeza de todo esto?~

— Sonic, esta ya es la tercera en esta semana, verdad? — pregunta el albino con una sonrisa.

Asiente.

Aunque su expresion cambia a una de tristeza y depresión.

— Sonic.. se que no soy el erizo correcto de decirlo, pero.. ellos no quisiesen verte asi — pone una mano en el hombro del cobalto. Trató de transmitirle apoyo.

— lo se.. pero, ellos.. yo — unas lagrimas se deslizan en sus mejillas.

— ellos murieron de forma natural y tranquila, igual ya iba a llegar su hora en cualquier momento, calma amigo — le da unas palmaditas en el hombro del azulado. Intenta consolarlo.

— quedan 6 minutos para que llegue y haga su escenita, ya sabes quien, jeje — intenta cambiar la situación a pesar de sus lagrimas. 

— sip, al menos tu no tienes que soportarlo y pa colmo tengo un compañero que me acosa y me para viendo fijamente a mi, ¿puedes creerlo? — exclama el albino. 

— wow, bro, calma, dile a los de seguridad del acoso — tranquiliza al albino.

Sus lagrimas ya no salieron mas del cobalto y trata de calmar a su amigo albino, todo preocupado y un poco nervioso. Dandole soluciones basicas.

..

La atmósfera cambió drásticamente con la llegada de una figura dominante y oscura, con destellos rojizos tanto en sus iris rubíes como en su atuendo, cambió completamente el tono de la situación. Un aura de intensidad y poder la rodeaba, evidenciando su posición de superioridad en comparación con los demás presentes. La vestimenta oscura acentuada con líneas neon rojizas era un testimonio visual de su autoridad y distinción.

¿Es que acaso no pueden mantener la tranquilidad ni por un momento? — penso.

— Lo siento, alteza, no sabíamos qué hacer con la alarma — hablo uno de sus guardias de su raza.

— La alarma roja solo se activa en situaciones de emergencia extrema. ¿Esto les parece una emergencia extrema? — lo mira profundamente.

— No, alteza — eso es lo unico que dice y hace una reverencia.

Se queja el azabache.

La expresión seria y malhumorada en su rostro dejaba en claro que no estaba contento con la alarma rojiza y su causa. Con un gesto aparentemente simple, presionó un botón en su pulsera, apagando toda la alarma y su estridente ruido. Sin embargo, la paciencia de esta figura oscura parecía estar llegando a su límite. Liberó un rugido poderoso, cuyo eco se extendió por el caos anterior, logrando que todos los presentes se quedaran completamente quietos y lo observaran con asombro. El rugido, en su intensidad, trascendía las palabras y comunicaba su dominio de la situación.

Shadow

Octavo cachorro - Línea de la realeza superior

En medio de la situacion y vizualizando a cada individuo.

— ¡Basta ya! ¡Suficiente caos! — el tono de su voz es penetrante y autoritario, cortando a través del caos.

Con una voz alta y clara, exclamo dando una orden a los terrícolas, utilizando el idioma que había estado estudiando. Su tono no dejaba lugar a dudas sobre su autoridad y expectativas. A pesar de la tensión en el aire, su determinación y confianza irradiaban como una fuerza imponente. Aunque comenzaron algunos susurros entre los individuos confundidos.

— ¿Quién es...? — confundio y desorientado.

— no otra vez — se escucha un golpe en su frente.

— como saben soy conocido como "el conquistador oscuro" y quien gobierna esta nueva comunidad, aparte que ya no es la primera vez mi presencia aqui — con algunas mimicas mientras seguia hablando y tratando de buscar quien hizo la pregunta inicial de quien era.

La escena había cambiado una vez más, esta vez bajo la influencia de una figura poderosa y misteriosa que había llegado para restablecer el orden. Las miradas atónitas y el silencio respetuoso que la rodeaban eran un testimonio de su presencia dominante y su capacidad para ejercer control sobre la situación. Aparte de que esta vez hablaba fluidamente su idioma terricola.

— ¿Estás entendiendo esto? — con incredulidad.

— ¿acaso estoy soñando? — asombrado.

— Parece que sí, está hablando en nuestro idioma — asiente con cautela.

— Escuchen bien  — Sus palabras son marcadas y decididas — He estudiado su lenguaje, y quiero que entiendan claramente. La alarma ha sido apagada. Esto no volverá a ocurrir — Su mirada se desplaza entre los presentes.

— ¿Por qué...?  —  balbucea.

— No toleraré más caos. Este lugar debe operar con orden y disciplina. A partir de ahora, seguirán mis directrices. — Hace una seña con su mano provocandole que guarde silencio. Sus iris rubíes se vuelven mas brillantes y parecen examinar a cada individuo. 

— ¿Quién te crees para... — se adelanta con determinación y apunta con su arma hacia el azabache. 

La tensión en la escena aumentó cuando uno de los terrícolas, desafiante y enojado, se adelantó hacia la figura dominante, apuntándole con un arma. Las palabras quedaron suspendidas en el aire, pero antes de que la situación pudiera escalar aún más, la figura dominante actuó con una rapidez impresionante. 

Su cola alargada se movió con agilidad, desarmándolo hábilmente y haciendo que el arma se rompiera en miles de pedazos al chocar contra el suelo. El sonido de la destrucción del arma resonó en el ambiente, provocando un silencio instantáneo entre todos los presentes. Las miradas se centraron en el terrícola que había intentado desafiar al azabache de iris rubies brillantes. El oscuro, con una expresión de frialdad en sus rubíes iris, consideró su respuesta cuidadosamente. Aunque su instinto podía impulsarlo a tomar medidas drásticas, era consciente de que no podía rebajarse al nivel de los terrícolas primitivos. Matar a uno de ellos sería percibido como una humillación, y no estaba dispuesto a hacerlo.

En lugar de eso, chasqueó los dedos, y un par de soldados de su misma raza se acercaron y llevaron al terrícola que había apuntado con el arma fuera del lugar y lejos de los presentes. La acción fue un recordatorio de su autoridad y una forma de poner fin a la confrontación sin derramamiento de sangre.

El silencio continuó mientras todos procesaban lo que acababan de presenciar. Era evidente que la figura dominante no toleraría desafíos abiertos y estaba dispuesta a hacer valer su posición de autoridad de manera contundente, pero también había mostrado cierta moderación en su respuesta.

— Esto es... intimidante — murmura a su compañero.

— No estamos en posición de desafiarlo — asiente nerviosamente.

Respira profundamente, su actitud se relaja ligeramente del azabache y aun mantiene su paciencia hacia los terricolas. Mas mayormente cuando ve al cobalto y a su lado un albino, a lo lejos de todos los presentes.

— Mi intención no es causar temor, sino imponer el orden. — Su voz se modera, pero mantiene su tono dominante — A partir de ahora, cooperaremos. Este caos no tiene lugar en mi dominio  — acompaña en sus palabras sus mimicas.

— entendido.. — respondieron en unísono y se disiparon.

— No sé si sentirme agradecido o preocupado — susurra el albino.

— Yo tampoco, pero parece que ha establecido el orden de una manera... impactante — susurra el cobalto manteniendo su mirada en la presencia del azabache y su cola se mueve como si tuviera vida propia. Mientras que sus mejillas toman un color rojizo.

..

Suspira y un leve sonrojo se formo en sus mejillas.

Se da media vuelta, emitiendo una última mirada de advertencia antes de alejarse con confianza, las líneas neon rojizas de su vestimenta destellando con cada paso, se iba a retirar del lugar pero de nuevo aparecen los guardias queriendo que los perdone. 

[Ya que al no ser perdonardos por algun miembro de la linea de la realeza superior, son rebajados a ser "objetos" que pueden utilizarlos de cualquier forma sin necesidad de su propia voluntad, ya no se consideraba seres vivos]

— No hay excusas. Estamos aquí para observar, estudiar y aprender. ¿Es tan difícil seguir las normas básicas? — interrumpe la suplica de los guardias. Manteniendo su paciencia y mal humor para sus adentros.

— Lo siento, señor, fue un accidente, no quisimos... aun seguimos aprendiendo.. dadnos una oportunidad mas.. — Tratando de explicar y arrodillados.

— Las consecuencias de sus acciones afectan a todos. No toleraré la indisciplina en mi presencia — con su tono cortante.

— Señor, lamento la situación, pero podemos asegurar que controlaremos mejor las alarmas en el futuro — interviene con respeto al ver al par de guardias rogar por sus vidas.. literalmente y compadecerse de ellos.

El azabache se sobresalta un poco, lo demuestra su cola alargada al ver al cobalto junto al albino a su lado. Hablandole en el idioma terricola. 

— Ustedes dos parecen tener una relación estrecha. No permitiré que sus acciones distraigan de nuestras tareas — mirando al cobalto de iris esmeraldas y respondiendole en su idioma.

— Comprendemos, señor — asiente con algo de temor hacia el azabache. Se mantiene atras del cobalto.

Entonces, el cobalto, al ver la situación de los guardias, tomó la iniciativa de hablar nuevamente. Sugirió que la figura dominante podría otorgar su perdón a los guardias. Si bien la situación ya había llegado a un punto en el que cualquiera podría darse cuenta de que los guardias estaban suplicando perdón, el cobalto estaba tratando de facilitar un camino hacia una solución menos conflictiva.

— Señor, entendemos la importancia de mantener la disciplina en su presencia, pero estos guardias están dispuestos a enmendar su error y cooperar en el futuro — aun manteniendo el respeto hacia el azabache y mostrar ningun indicio. Aparte que los guardias y el azabache comprendian fluidamente el idioma de los terricolas.

— ¡Lo prometemos, señor! No volveremos a causar problemas — asiente suplicando.

—  Sí, señor. Haremos todo lo posible para seguir las reglas, hagale caso al terricola azul— sigue el ejemplo de su compañero.

— Muy bien, veo que han reconocido su error y están dispuestos a corregirlo, les concederé mi perdón — mantiene su expresión seria — Pero recuerden, no toleraré la indisciplina en el futuro — con un tono un poco severo.

— ¡Gracias, señor! No le defraudaremos — responden en unisoro aliviados. 

Se levantan y se alejan con rapidez.

Por otro lado al estar solos, los tres, el azabache mira con su tipica expresion y se acerca al par.

— Escuchen bien. Estamos aquí para un propósito mayor. La cooperación y el respeto a las reglas son fundamentales. Si continúa siendo una fuente de perturbación, tomaré medidas más drásticas — les da una advertencia aquel par. Ya que no deben meterse en los asuntos de "otros".

— Entendido, señor — asiente temeroso el albino.

— Bien — mirando a su alrededor y da una pequeña sonrisa que duro solo segundos — Regresen a sus tareas. No quiero más distracciones — vuelve a su expresion seria y se va esta vez del lugar.

El cobalto se habia mantenido ahi perdido.

Mientras que el albino intentaba "arreglar a su amigo cobalto" y que haga volver a la realidad.

— ¡necesito un tecnico en el pasillo 6! — exclamo el albino de manera burlona.

— ¡Silver! Estoy bien — responde avergonzado y enojado.

— bien enamoradoo jajaja — se rie y se burla de su amigo de iris esmeraldas — y bien educado — elogiando aun continuando burlandose.

Alejado de todo, en las sombras, una figura oscura observó toda la escena con gran interés. Había notado el comportamiento peculiar del octavo cachorro y había sido atraída por la presencia del terrícola llamado "Sonic", que tenía iris esmeraldas. La figura oscura estaba claramente intrigada y quizás estaba planeando futuras acciones en función de lo que había presenciado.

Además de hacerle unas preguntas a su octavo cachorro, en un par de minutos, que seria su reunion de progenitor y cachorro.

~quiero saber porque tanto lo defiendes, shadow? Acaso ya lo escojiste como tu pareja? Podras cumplir el requisito que todos tus demas hermanos y hermanas, ya pasaron, a pesar de todo? Lo mas importante arriesgaras tu puesto por un común "terricola"?

Continuara..

Espero que les haya gustado este capitulo UwU