Accidente Desafortunado

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Durante un viernes en el que no tenían clases, Martín había decidido acompañar a Xochitl a dar una visita a la universidad a la que ella iba a aplicar, con tal de no quedarse encerrado en casa.
Durante unas dos horas, ambos estuvieron caminando alrededor de los salones, los jardines y lugares del campus, mientras Xochitl se veía completamente emocionada.

Xochitl: Es una grandiosa universidad, ¿no crees?
Martín: Honestamente, sí, está bastante bonita, no lo voy a negar, me gusta
Xochitl: Jeje, tú te irás a la capital, yo me quedaré a disfrutar de esto
Martín: Siento que deberías buscar expandir tus habilidades pero es decisión tuya

Martín se sentó en una banca junto a Xochitl y comenzó a beber agua, mientras ella veía su teléfono y veía una foto que Melissa había posteado de ella y Martín, recostados en su cama.

Xochitl: Ah sí, ahora tienes novia, ¿no?
Martín: Pues sí, fue muy inesperado, pero la verdad muy oportuno, Melissa sí es la novia indicada
Xochitl: ¿No te dijo nada de lo que haces con otras chicas?
Martín: Pues, ella dijo que no tenía problema con ello, que le gusta observar je
Xochitl: Vaya, te sacaste la lotería con ella realmente
Martín: Un poco sí, alguien como tú sería más controladora
Xochitl: Jaja, qué gracioso...

Martín observó un poco el lugar con algunos estudiantes andando por ahí, antes de sentir un fuerte dolor de estómago.

Xochitl: Bueno, ya casi es hora de la comida, ¿quieres venir?
Martín: Mierda...*se sujeta el vientre* Creo que tengo que atender algo antes...
Xochitl: Te dije que comerte unas papas picantes junto a los omelettes de mi papá no era buena idea...ve al baño y te espero en el área de comida
Martín: Muy bien...ya vengo...

Martín comenzó a correr hacia uno de los edificios del lugar, buscando un baño, hasta encontrar un lugar con dos entradas que parecían baños, pero que no tenía señalización de hombres y mujeres.
Sin poder aguantar más, entró a la puerta de la izquierda y entró a un cubículo, antes de sentarse y dejar que todo saliera, sintiendo un profundo alivio.

Martín: Mucho mejor...

Martín estuvo en el lugar unos 5 minutos, hasta terminar y levantarse para irse, pero antes de salir, escuchó a unas voces femeninas entrando en el baño, lo cual se le hizo extraño.

Martín: *susurra* ¿Chicas?
??: ¿Qué te pareció anoche?
??: Meh, todos los chicos de aquí son idiotas, sólo quieren ser los dominantes, como si nosotras no pudiéramos hacer nada
??: Sí, pero ¿qué podemos pedir? No tenemos más opciones
??: Odio tener que conformarme con los idiotas de este lugar, ojalá pudiéramos simplemente tomar a alguien y hacerle lo que queramos ahora mismo...

Entonces, al escuchar correr algo de agua de la llave, se percató de que había entrado al baño de las chicas, por lo que supo que tenía que salir de ahí rápido.
Abrió levemente la puerta del cubículo y se asomó, solo para ver de espaldas a dos chicas, una de estatura baja de piel morena y pelo café y otra más alta de piel blanca y pelo castaño, ambas en ropa interior mientras se vestían.
Intentando no hacer ruido, Martín comenzó a ir hacia la salida del baño, pero se golpeó un pie con un bote de basura, causando qué hiciera ruido.

??: Vaya, vaya, miren qué tenemos aquí

Martín se dio la vuelta y vio a ambas chicas mirándolo fijamente, aún con sólo su ropa interior puesta.

??: Un maldito pervertido...
Martín: No, no, sólo entré al baño equivocado...
??: Todos saben que los baños de la izquierda son de mujeres, además este es nuestro baño privado...
Martín: Es que no soy de aquí, vine de visita con una amiga, pido perdón, solo voy a...

Entonces, la chica de piel morena lo tomó de la ropa y lo llevó hasta una pared al fondo del baño, mirándolo fijamente mientras Martín comenzaba a sudar.

??: Quizás tengas razón en eso, no te reconozco, pero entraste y nos viste, ¿qué pretendías, eh?
Martín: Nada, nada...miren, empecemos de vuelta, mi nombre es Martín y ¿ustedes?
??: Soy Maki y la chica de pelo castaño es Carmina
Martín: Bonitos nombres je
Carmina: No te pases de listo, no te irás hasta que nos expliques qué hacías...

Martín miraba a ambas chicas intentando no sonrojarse, pero su pene se comenzó a erectar un poco al verlas en ropa interior, por lo que intentó contraer sus piernas para ocultarlo, ayudado por su pantalón.

Martín: Juro que no hacía nada, solo vine a hacer mis necesidades...
Maki: Puede ser, pero hasta te podamos funar...entrar a un baño de mujeres es muy mal visto en esta universidad...
Martín: Oigan, pido perdón, pero no quiero eso tampoco, ¿puedo hacer algo por ustedes para enmendar esto?

Maki soltó a Martín y lo dejó caer al suelo, dejando que su pene se marcara en su pantalón, algo que Carmina notó y comenzó a tener una idea.

Carmina: Bueno...si estabas aquí supongo que escuchaste nuestra conversación
Martín: Em...sólo un poco de ella...
Maki: Veo a dónde vas, chica...¿qué sabes de sexo?
Martín: Mentiría si digo que no sé nada...
Carmina: Jeje, creo tener una idea, si nos dejas hacer lo que queramos contigo, te dejaremos ir~
Martín: Yo...yo no sé...
Maki: *toma su teléfono* Acá te puedo tomar una foto y la subiré a redes, es tu decisión
Martín: *suspira* No tengo más opción...muy bien, lo haré...

Entonces, ambas sonrieron perversamente y lo levantaron para pegarlo más a la pared mientras se acercaban, haciendo que tragara saliva antes de que Maki lo besara con lengua, mientras Carmina acariciaba su pelo.

Carmina: ¿Qué pasa, chico? ¿Asustado?
Martín: *separándose de Maki con un hilo de saliva* No lo sé...
Carmina: Déjame arreglar eso...

Carmina besó también a Martín, mientras Maki comenzaba a bajar su pantalón y su bóxer, dejando salir su pene aún más erecto.
Cuando Carmina se separó de él, ambas agarraron las manos de Martín y las dirigieron a sus pechos, haciendo que los apretara un poco.

Maki: Te notas tenso, déjate llevar, no mordemos...al menos no muy fuerte jeje~
Martín: M-Muy bien...

Las chicas se quitaron sus sostenes, a lo que Martín comenzó a apretar sus pechos y pezones, aun titubeando, mientras ambas usaron dos de sus manos para masturbar el pene de Martín.
Martín comenzó a dar quejidos, sintiendo como las manos de las chicas apretaban su pene muy fuerte, a lo que él respondía con algunos pellizcos.
Después de 3 minutos, Martín estaba sintiendo que se iba a correr, pero las chicas se detuvieron y quitaron sus manos de él.

Martín: ¿P-Por qué paran?
Carmina: Porque ahora empezamos con lo bueno~

Carmina hizo que Martín se sentara en el suelo del baño, recargado en la pared, a lo que Maki se agachó enfrente de él y tomó su pene con sus manos.

Maki: Más te vale que dures por lo menos otros 5 minutos~

Entonces, Maki comenzó a lamer y besar el pene de Martín, dándole buena sensación de placer por sus labios algo gruesos, pero su sentimiento fue interrumpido por Carmina, quien se subió sobre él.

Carmina: Te ves muy complacido así, pon esa boca a trabajar
Martín: Está bien...

Sin decir nada más, Martín comenzó a chupar los pechos de Carmina, lamiendo sus pezones con gentileza, mientras sentía como Maki comenzaba a darle una mamada, metiendo todo su pene dentro de su boca.
Por más placer que sentía, Martín logró retener su semen durante unos 6 minutos, hasta que no pudo más y dejó salir todo su semen en la boca de Maki, mordiéndole un pezón a Carmina, haciéndola quejarse del dolor.

Carmina: ¡Oye, no muerdas!
Martín: L-Lo siento...
Maki: Tranqui, Carmina *se limpia algo de semen de sus labios* Seguro no pudo contenerse del placer que le di jeje
Martín: Pues sí, supongo...
Carmina: Pues entonces verás el verdadero placer~

Entonces, Carmina tomó a Martín de los hombros y lo recostó con fuerza sobre el suelo, haciendo que sintiera el frío de los azulejos, antes de terminar de quitarle todo el pantalón, mientras ella se quitaba las panties.

Carmina: Dame una carga igual a la de Maki, ¡te lo ordeno!

Entonces, Carmina se subió sobre Martín y, posicionando su vagina, bajó hasta penetrarse, haciendo gemir a Martín.
Carmina también empezó a gemir mientras comenzaba a saltar sobre el pene de Martín y, antes de que él se pusiera cómodo, Maki se quitó las panties y se subió sobre su cara.

Maki: No creas que me quedaré de observadora, lame y hazme gemir
Martín: Como ordenes...

Cuando Maki se sentó sobre la cara de Martín, él la tomó del culo y le comenzó a lamer sus labios vaginales, haciéndola gemir fuerte, mientras Carmina aumentaba su velocidad. Durante unos 10 minutos, Martín sentía como las sentadas de Carmina se hacían cada vez más duras y rápidas, con lo que él sólo podía responder lamiendo y chupando el clítoris y las paredes de Maki, escuchando como ambas chicas gemían bastante.

Carmina: Al final tu deseo se cumplió de una manera, ¿no?
Maki: Ah~...yo creo que sí, nadie nunca me ha lamido como él lo hace~
Carmina: Este pene es mucho mejor que el de cualquier chico de aquí...ohh~...es oro puro~
Maki: ¿Un beso por haber logrado esto?
Carmina: Bueno, sólo un beso jeje~

Entonces, ambas se acercaron y se besaron, causando que Maki sacara todos sus jugos sobre Martín, con lo que él sólo pudo agarrarse de ella mientras su torrente de semen llenaba a Carmina, haciéndola gemir en su beso con Maki.
Cuando él terminó y ambas chicas se separaron, se quitaron de Martín, dejándolo rendido y con la cara llena de jugos vaginales mientras jadeaba.

Martín: ¿Esos cumplidos eran en serio...?
Maki: Claro que lo eran jeje, nos diste lo que queríamos y eres bueno teniendo sexo
Carmina: Así es, eres obediente, pero revisemos esta cosa...

Entonces, Carmina abrió la cangurera de Martín y, al encontrarse con una caja de pastillas anticonceptivas, tomó una de ellas y la tragó rápido.

Carmina: Para que esto haya sido espontáneo, venías preparado
Martín: Pues...no es la primera vez que me pasa de repente...
Maki: Nos dimos cuenta jeje, ahora levántate, eres libre de irte
Carmina: Y hazlo antes de que nos vuelvas a calentar jeje~
Martín: Sólo necesito un descanso...por favor...

Martín estuvo recostado durante unos 5 minutos, hasta recuperar fuerzas y levantarse, luego de lo que se limpió y se puso la ropa, antes de que las chicas le dieran su cangurera junto a un papel que tenía escritos sus números.

Carmina: Ten la libertad de llamar y venir cuando quieras, búscanos en Ingeniería
Maki: Y descuida, no tomamos nada, sólo una caja de pastillas por si las dudas
Martín: ¿Muy bien?...pero bueno, gracias, chicas, al fin y al cabo...sí fue algo placentero je...
Maki: Ese era el chiste jeje, duro pero placentero...

Martín volvió a tragar algo de saliva, salió del baño y caminó un poco cansado hasta encontrar a Xochitl, quien estaba en la zona de comida comiendo un burrito, y se sentó con ella, jadeando del cansancio.

Xochitl: ¿Dónde estabas? Dieron burritos gigantes a 2 dólares, te los perdiste...
Martín: No me creerías si te lo dijera...
Xochitl: ¿Te follaste a alguien o por qué te ves tan...derrotado?
Martín: Más bien...me follaron...
Xochitl: Wow...*le toma una foto* Directo a mis estados jeje
Martín: Oye, borra eso, ¡dámelo!

Martín comenzó a intentar tomar el teléfono de Xochitl, pero ella, aprovechándose de su cansancio, solamente se movió un poco, hasta que derrotado, Martín sólo suspiró y se cruzó de brazos, frunciendo el ceño.

Xochitl: Ay ya, sólo era una broma, no te pongas así
Martín: Tranquila, sólo quiero descansar, espero no se haga viral eso...
Xochitl: Pues esperemos jaja, descansa, lo necesitas

Xochitl siguió comiendo, mientras Martín se echaba en la banca, pensando en que, aunque sufrió un poco, terminó teniendo una de sus historias más interesantes para contar.

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