Un día, saliendo de verse con Jheyker en su casa, Martín y Xochitl pasaron a una tienda de videojuegos a ver si podían comprar algo. Martín terminó comprándose un juego de peleas nuevo que estaba resonando mucho en redes sociales y que él deseaba probar, hablando sobre él con Xochitl mientras bebían unas cervezas de regreso a casa.

Xochitl: Entonces, ¿el juego es realmente bueno?
Martín: Según dicen lo es, pero lo tengo que probar, además, luego me junto con las chicas de eSports, quizás podamos entrar al competitivo
Xochitl: El competitivo me da mucha hueva, ¿en serio te dan ganas de eso?
Martín: Es cuestión de probar, si jugamos luego juntos quizás hasta te den ganas
Xochitl: Lo dudo mucho, pero veremos...

Mientras caminaban de regreso hacia su barrio, pasaron frente a una feria local, la cual se veía repleta de gente, destacando por sus luces, sus juegos mecánicos y el olor a comida qué salía de ahí.

Xochitl: Vaya, esta feria es grandiosa, qué ganas me dan de pasar un rato aquí
Martín: Me gustaría también, pero no tengo mucho dinero de sobra
Xochitl: Jaja, pues tienes razón, muchas de estas cosas son para sacarte dinero, aunque me gustaría subir a la rueda de la fortuna

Ambos siguieron caminando, hasta que, pasando cerca de unos arbustos, escucharon a una voz masculina junto a unos forcejeos femeninos.

??: Más les vale callarse, si no todo saldrá muy mal
??: Suéltanos, nunca accedimos a esto...
Xochitl: Eso suena a problemas...

Ambos se asomaron a través de los arbustos y miraron a dos chicas de otro grupo de su escuela, Mariloly, de piel oscura y cabello negro; y Mabel, de piel clara y pelo castaño. Ambas estaban atadas con una cuerda de las manos y pies y estaban frente a un chico llamado Eduardo, a quiénes ellos conocían como el novio de ellas dos.

Eduardo: *se desabrocha el pantalón* Me obligan a hacer esto a la fuerza...
Xochitl: Esas dos se metieron en un problema, hay que ayudarlas...
Martín: Las hemos visto con él en la escuela, creo saber qué hacer...

Entonces, Martín salió de los arbustos y se paró algo alejado detrás de Eduardo, sorprendiendo a las chicas y poniéndose en posición de pelea.

Martín: Hacerle eso a sus novias es de cobardes, ¿sabes?
Eduardo: Esto no te incumbe, idiota, aléjate o te parto la cara...
Martín: Atrévete, te reto...
Eduardo: Tú lo pediste, estúpido...

Eduardo se lanzó corriendo hacia él y Martín se posicionó para intentar pelear, pero, rápidamente, Xochitl le lanzó una de sus botellas de cerveza, a lo que él la atrapó y la rompió sobre la cabeza de Eduardo, haciendo que cayera inconsciente.
Apenas Eduardo estuvo en el suelo, Martín fue rápido a liberar a las chicas con su navaja y Xochitl se acercó también.

Xochitl: Era una botella bonita, pero valió la pena
Mabel: Gracias, ¿cómo supieron de esto?
Martín: Los escuchamos hace un momento, ¿qué pasó con ustedes?
Mariloly: Eduardo nos quiso obligar a tener sexo con él sin protección, nos negamos y nos intentó obligar a la fuerza...
Xochitl: Ya tenía sospechas de que este sujeto era un abusador de primera
Mabel: Cometimos un error...nos dimos cuenta muy tarde
Martín: Tranquilas, al menos, hicimos lo que se pudo por ustedes
Mariloly: Gracias, Martín, nos salvaste
Xochitl: No se olviden de mí...

Xochitl arrastró a Eduardo y lo puso sentado bajo un árbol, antes de volver con los otros.

Mabel: Bueno, podemos invitarlos a la feria, íbamos a ir con Eduardo hasta que salió con esto...
Martín: No, chicas, no es necesario
Mabel: Vamos, un héroe y su amiga necesitan divertirse
Mariloly: Así es y tenemos dinero de sobra *muestran sus billeteras llenas*
Xochitl: Acepto, pero no me gustan que me reduzcan a una simple secuaz
Martín: Tranquila, Xochi, no lo eres, pues, vamos entonces

Entonces, Mabel y Mariloly llevaron a Martín y a Xochitl a la feria, en donde disfrutaron de juegos de destreza, algo de comida y subieron los cuatro juntos a la rueda de la fortuna.
Aunque al inicio Xochitl notaba que las chicas se ponían sospechosamente muy cerca de Martín, pasados los minutos decidió ignorarlo y se puso a reír y a divertirse con ellos.
Después de unas dos horas, los cuatro salieron de la feria y Xochitl miró su teléfono al salir.

Xochitl: Me iré a casa, papá y yo cenaremos pizza, ¿vienes Martín?
Martín: De hecho, acompañaré a Mariloly y a Mabel a sus casas, no quiero que Eduardo se aparezca por ahí
Mabel: Jeje, gracias por el gesto, Martín, vamos

Entonces, Mariloly y Mabel se alejaron un poco, a lo que Xochitl se acercó a Martín y le susurró algo.

Xochitl: Noté como esas dos te miraban, si sucede lo que va a suceder, trátalas bien, no seas Eduardo...

Entonces, Xochitl comenzó a irse en la dirección contraria de las chicas y Martín, entendiendo a lo que se refería, tragó saliva y fue a alcanzar a las chicas.
Unos 10 minutos más tarde, ellos llegaron hasta un pequeño paso dentro de un bosque, a lo que ambas se sentaron sobre una banca de madera solitaria, a lo que Martín se sentó con ellas.

Martín: Este camino está pesado como para venir caminando
Mabel: Lo usamos casi todo el tiempo, acostúmbrate
Mariloly: Aun así podemos descansar un poco si deseas jeje
Martín: Gracias, chicas, lo necesito

Martín suspiró y se dejó caer sobre la banca, notando que ambas lo miraban con unas caras que denotaban placer y una especie de deseo.

Martín: Em...¿sucede algo?
Mariloly: Bueno, eres nuestro héroe, Martín, nos defendiste de Eduardo
Mabel: Y todo héroe merece una buena recompensa
Mariloly: ¿Qué te parece que yo y Mabs tengamos un rato de diversión contigo~?
Martín: Admito que ambas son hermosas, pero no quiero obligarlas...
Mabel: No serás Eduardo, tú no eres como él, estamos seguras de eso
Mariloly: *abre la cangurera de Martín y saca unas pastillas* De hecho, ¿por qué tan preparado?
Martín: Nunca salgo sin ellas, además, ustedes dijeron que querían protección
Mabel: Eso abarca también pastillas, un semen de alguien que no sea Eduardo es mejor para nosotras jeje

Martín lo pensó un poco, recordando lo que Xochitl notó y le hizo saber, además de ver la mirada de deseo de ambas chicas y, decidiendo obedecer a su instinto, abrazó a cada una por su lado.

Martín: Muy bien, pero me tienen que demostrar que saben lo que hacen
Mabel: Eso no será problema, tan solo mira esto~

Entonces, Mabel le dio un profundo beso a Martín, jugando un poco con su lengua, antes de separarse y dejar que Mariloly también lo besara.
La saliva y los labios de ambas eran deliciosos, por lo que él se dejó llevar por ambos besos, hasta que Mabel se juntó a Mariloly y comenzó a besar a Martín junto a ella.
Los tres se dieron un jugoso beso triple, tocando sus labios y jugando con sus lenguas por fuera, hasta que las dos se separaron de él, dejando un hilo de saliva entre sí.

Martín: Wow, qué buen beso fue ese
Mariloly: Somos expertas del beso triple, no te sorprendas mucho
Martín: Jeje, bueno, ahora me toca a mí, ¡camisas y sostenes fuera!

Ambas hicieron caso a su pedido y se quitaron sus camisas y desabrocharon sus sostenes, dejando al descubierto sus pechos, que eran algo pequeños, pero a Martín simplemente no le importaba.
Martín tomó los pechos de ambas con sus manos y empezó a chupar y a lamerlos, cada tanto cambiando de una a la otra, dando placer a ambas a la vez.
Las chicas se acercaron más a él, permitiendo que probara sus pechos tanto como él quisiera y así lo hizo, hasta dejar sus pezones muy erectos.

Martín: No resisto nunca ante los pechos~
Mabel: Si tanto, te gustan, tengo una idea en mente
Mariloly: Espero sea también la mía jeje, quítate el pantalón
Martín: Creo saber qué piensan y ahora me dan ansias~

Las chicas se alejaron de Martín y él se quitó el pantalón y su bóxer, dejando a su pene completamente erecto a la vista de ellas, con lo que no perdieron tiempo y se agacharon, una a cada lado de Martín.
Entonces, ambas levantaron sus pechos e hicieron que el pene de Martín quedara entre ellos, antes de comenzar a moverlos de arriba a abajo sobre el pene de Martín.

Martín: Uh sí~...sabía que esta era su idea~
Mariloly: Pues disfrútala, te lo mereces, héroe~

Como sus pechos eran algo pequeños, ambas estaban muy cerca de la otra, mientras Martín sacaba la lengua y jadeaba sintiendo el roce de los pechos de ambas y las lamidas que le daban cada cierto tiempo.
En solo 3 minutos, Martín tenía contenido bastante placer que no pudo resistir y se corrió, dejando salir el torrente de semen sobre las chicas, quiénes atraparon un poco con su boca y luego se besaron, intercambiando el sabor.

Martín: Oh, vaya...¿cómo pudo ser tan bueno?
Mabel: A eso se le llama experiencia en el sexo, tú debes saberlo
Martín: Yo tengo experiencia, pero...¿qué tanto hacían con Eduardo?
Mariloly: Con Eduardo fue poco, tuvimos más parejas antes jeje
Martín: Vaya, ni yo lo imaginaba, debí haber visto este lado suyo mucho antes
Mabel: Honestamente, no hubieras querido jajaja
Martín: Jaja, bueno, ahora, ¿cómo haremos para lo que sigue?
Mariloly: Fácil...

Ambas hicieron que Martín se levantara de la banca y, después de quitarse sus pantalones y panties, Mariloly se recostó en la banca, luego de lo que Mabel se subió boca abajo sobre ella, presionando sus pechos y sus vaginas ya mojadas.

Mariloly: Salchicha entre dos panes es la solución
Martín: Esta noche no la voy a olvidar jamás~
Mabel: Más te vale no hacerlo, ahora, deja de hablar y empieza a penetrar~

Sin decir nada más, Martín se posicionó detrás de las chicas y, después de darles una lamida a ambas vaginas, pensó un poco a quien penetrar primero.
Entonces, decidió penetrar a Mariloly, quien lanzó un leve gemido al sentir que Martín entraba en ella, para luego cambiar a Mabel y comenzar a embestirla.

Martín: Espero que mis cambios no las molesten mucho
Mabel: Tranquilo, siempre y cuando no dejes a ninguna sin semen, está bien jeje~
Mariloly: Danos todo el placer que Eduardo nunca pudo~
Martín: Jeje, será un placer hacerlo~

Entonces, Martín comenzó a embestir a las dos, cambiando cada tantos momentos entre una vagina y otra, lo cual causaba un buen placer en él al entrar y salir en vaginas diferentes cada vez.
Mariloly y Mabel se tomaron de las manos mientras Martín las penetraba, frotando sus pechos entre sí y dándose algunos besos, mientras jadeaban sacando sus lenguas.
Martín estuvo metiendo su pene en ambas durante casi 10 minutos, hasta que sacó su pene de Mabel y comenzó a masturbarse rápidamente.

Martín: Esto será difícil, pero...¡aquí les va!

Martín penetró fuerte a Mariloly, dejando salir parte de su semen dentro de ella mientras gemía, antes de retener su orgasmo, salir de Mariloly, tomar el culo de Mabel y penetrarla, ambos gimiendo mientras el resto de su semen la llenó a ella.
Una vez que descargó todo, Martín cayó rendido sobre el césped, jadeando bastante mientras las chicas se sentaban, dejando escurrir sus vaginas.

Martín: Wow, ustedes se sienten muy buenas por dentro~
Mariloly: Estamos entrenadas jeje, pero creo que se te olvida algo...
Martín: Para nada

Entonces, él se levantó y sacó dos pastillas anticonceptivas de su cangurera, para luego dárselas a ambas en la boca y sentarse con ellas.

Mabel: Debo admitirlo, esto fue mejor que cualquier noche que hayamos tenido con Eduardo
Martín: Jeje, me alegro de que les haya gustado, chicas
Mariloly: Jeje pues, claro que sí, quizás te busquemos luego para algo más~
Martín: Esperaré por eso jeje, pero creo es hora de llevarlas a sus casas, ¿no creen?
Mabel: Cierto, nuestros padres se estarán preguntando dónde estamos

Los tres se vistieron y siguieron su camino, hasta que Martín las llevó frente a sus casas, las cuales estaban contiguas una de la otra.

Martín: Aquí está su destino, señoritas
Mabel: Te vemos en la escuela
Mariloly: Y ten siempre en la mente nuestros pechos jeje
Martín: Esas cuatro hermosas tetas nunca saldrán de mi cabeza

Martín les dio un beso a ambas, antes de irse mientras ellas entraban a sus casas, luego de lo cual se detuvo en una esquina y llamó a Xochitl.

Martín: ¿Le dices a tu papási me recogen? Estoy en el barrio de las chicas...
Xochitl: No me digas, ¿soy adivina?
Martín: Que me conozcas bien no te hace adivina...
Xochitl: Jaja bueno, espero hayas disfrutado de ese sexo, ya vamos porti
Martín: Je, gracias, aquí los espero