-No me digas nada -le pidió Jimin a Jin cuando este apartó la mirada del periódico para mirarlo. Acababa de entrar en la cocina preparado para salir-. Ni una palabra, Hyung. No te tengo demasiada estima últimamente -añadió mientras se sentaba en una de las sillas de la cocina a esperar. Jin lo miró con inocencia.

-No entiendo por qué mi dongsaeng está de tan mal humor -se encogió de hombros-. Con lo que te gusta ir de compras...

Normalmente le gustaba ir de compras, pero aquello no tenía nada de normal y Jin lo sabía.

Jimin miró fijamente a su hermano.

-Creo que el hecho de trabajar con ese conejo cara de ratón te está afectando demasiado; te pareces a él-le dijo de mal humor.

-¿En qué me parezco? ¿Crees que soy un manipulador mentiroso como piensas que es él?

Aquella mañana, Jimin le había llamado aquello a su hermano después de que él le preguntara qué tal se lo había pasado.

-Se te ha olvidado decir que es demasiado listo para ti -le recordó Min, aunque sintió que su mal humor empezaba a desaparecer-. Deberías habérmelo dicho, Hyung -dijo negando con la cabeza.

-Pero si lo hubiera hecho no habrías acudido a la cena, por lo menos no con JungKook - dijo él-. Y eso hubiera sido una pena.

El rubio lo miró.

-¿Por qué?

-Por si lo has olvidado, JungKookie y yo somos los buenos de la película, Jackson en cambio es el malo.

Sí, ella sabía que Jackson era el malo. No podía olvidar la mirada triunfante de Wang cuando Kim había anunciado el compromiso:

-No se merece a Tae, Minie, como tampoco te merecía a ti -le había dicho Kook.

Y por aquella razón, durante la conversación de después de la cena, Kookie había sugerido que Jimin acompañara a Tae a comprarse un traje nuevo para la fiesta de aquella noche.

-Minie acaba de decirme que él tampoco tiene nada que ponerse -le había dicho Jungkook a su primo.

Jimin le había mirado, pero estaba seguro de que él sabía que Tae era la última persona con la que deseaba ir de compras.

-A mí no me importa acompañarte, Tae -intervino Wang de repente.

-Eres muy amable, cariño -Tae le dio un abrazo a Jackson-. Pero sé lo mucho que te aburre ir de compras, además quiero que el traje de mañana sea una sorpresa.

-Pensé que lo único que no podían ver los novios era el traje de boda -dijo Jackson mientras fruncía el ceño.

-Así es, tonto -repuso Tae con una sonrisa-. Sólo... Espera y verás -entonces se dirigió hacia Minie-. Me encantaría ir de compras contigo, ¿y a ti?

Estaba claro por la expresión de Taehyung que no esperaba que Jimin dijera que no, y Jungkook también parecía esperar lo mismo así que ¿qué podía hacer?

Por esa razón estaba sentado en la cocina esperando a que Tae pasara a buscarlo para ir de compras.

-Sé que Jackson es el malo, pero hasta que Jungkookie no me lo contó no sabía lo preocupados que estaban ByungChoon y SunHee.

-Es curioso que las cosas hayan pasado así, ¿no crees? Tu ex novio ahora está comprometido con el primo de Kook.

Min hizo un gesto de repulsa cuando su hermano le recordó que Wang había sido su novio, quería olvidarse de una vez por todas de él. Sin embargo, parecía imposible hacerlo por el momento.

Recordó las palabras de Jungkook.

-No se merece a una persona como Tae, como no se merecía a alguien como tú.

No estaba segura de lo que Kook había querido decir con aquello, pero estaba seguro de que escondido en algún sitio había un cumplido.

Aunque debía ignorar los cumplidos, después de lo que le había pasado con Jackson debía tener cuidado...

Aunque...

Se había sentido como un niño pequeño cuando el castaño lo había llevado a casa después de la cena, se había pasado todo el camino pensando en cómo se iban a despedir. Sabía que aquello no había sido una cita de verdad, sin embargo Jungkook lo había besado al comienzo de la noche.

Jimin no sabía muy bien si se había sentido aliviado o decepcionado cuando, tras acompañarlo a la puerta de la casa, él le había dado un beso en la mejilla antes de decirle que pasaría a recogerlo al día siguiente a las ocho.

-No debemos llegar demasiado temprano.

-De acuerdo.

-Y no te preocupes por la tarde de compras con el Alien. Limítate a comportarte con naturalidad y todo saldrá bien.

Sin embargo, el bajito no estaba de acuerdo. La idea de pasarse la tarde escuchando lo maravilloso que era Jackson no le resultaba muy atractiva.

-Cómprate algo azul, que contraste con tus ojos -añadió JungKook que estaba junto a Minie, en un tono seductor. Él sintió una sensación agradable al darse cuenta de que Kook se había fijado en sus ojos-. Por cierto -dijo tirándose antes de entrar en el coche-. MiKyung y HeonTae son mis padres y NamJoon es mi hermano mayor.

Dicho esto, abandonó la casa en su coche y sólo quedó Jimin y su hermano.

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-Ese traje es perfecto para ti, Jiminie -le dijo Tae al verlo salir de los probadores.

Tal vez lo era, pero al mirar la etiqueta Jimin también se había dado cuenta de que el precio también era perfecto, perfecto para dejarlo en la ruina.

Minie debía de haberse imaginado que Tae querría ir a tiendas de grandes diseñadores.

De hecho, Taehyung ya había comprado su traje, de color esmeralda como la esmeralda de su anillo de compromiso.

El traje que Tae le había propuesto a Jimin que se probara era de un color azul celeste, como Kook le había sugerido y estaba hecho de seda natural.

-Con el pelo como lo llevabas anoche, estarás fantástico -le dijo el chico de sonrisa cuadrada.

El traje era precioso, era el traje más elegante que jamás se había probado, sin embargo, ¿podré comprármelo?

-El Galleto se va a quedar sin habla cuando te vea -añadió Tae.

Jimin no estaba seguro de querer provocar algo así en JungKook. Él y Jeon pertenecían a mundos diferentes, aunque salieran juntos nunca tendrían nada serio y, a pesar de ello, Minie sintió ganas de comprarse el traje sólo por ver la reacción de Kook.

-¿Por qué no te lo piensas mientras nos tomamos un café juntos? -le propuso Tae.

-Es una buena idea -dijo él sintiéndose aliviado.

Aunque una vez sentados en la cafetería, a Jimin no le pareció tan buena idea, ya que en cuanto se sentaron Taehyung no tardó en sacar el tema de su compromiso con Jackson.

-Todo ha ido demasiado rápido, ¿no crees? -le sugirió Jiminie mientras le echaba azúcar al café.

-Quizá -dijo Tae-. He disfrutado mucho del año que he pasado trabajando como modelo, pero ya sabes, es un tipo de vida en la que te sientes muy solo. Echaba de menos a mis amigos, a mi familia. Sobre todo a la familia y la idea de tener mi propia familia y de casarme de repente me pareció una buena idea.

Sin embargo, el rubio sabía que el chino no era la persona adecuada para convertirse en su marido.

-Vas a cumplir veintiocho años, V. Tienes tiempo de sobra para casarte cuando hayas hecho lo que quieres hacer en la vida, ¿no me contaste una vez que te gustaría trabajar de diseñador?

-Ya he trabajado durante algún tiempo, se me había olvidado por completo. Le he dado unos diseños a Key, el diseñador con el que estuve trabajando en Japón, y estoy esperando que me diga qué le parecen.

-Eso parece interesante, ¿crees que eso podrá afectar a tu compromiso con Jackson?

Tae parecía sorprendido.

-He de reconocer que no había pensado en ello hasta ahora. El estar comprometido y tener que pensar en otra persona es algo nuevo para mí. Pero me gustaría trabajar de diseñador si Key me dice que tengo talento.

El enano pensó que aún había esperanzas, por lo menos el alien no parecía tan absorto en la relación como para renunciar a sus propias ambiciones, a sus sueños.

-Estoy seguro de que si tenemos que esperar un poco para casarnos, Jackie lo entenderá.

El de tez mas blanca pensó que Tae estaba siendo demasiado optimista en lo que se refería a la paciencia de Jackson, después de todo él debía de estar impaciente por convertirse en el marido de TaeHyung para lanzar su carrera. Sin embargo, no le contó nada de aquello a Tae, aunque sí se lo contó a Jungkook cuando fue a buscarlo para la fiesta, horas más tarde.

-Estás increíble, Minie -le dijo mientras se apartaba para mirarlo bien.

El bajito sintió que se sonrojaba.

-Kook, ¿me has oído? Te he dicho que Tae sigue pensando en dedicarse al diseño...

-Eso está bien, pero...

-¿Cómo que está bien? ¿Sólo bien? -Insistió Jimin - ¿No te das cuenta de que ésa puede ser la forma de separarlos?

-Por supuesto que me doy cuenta, a él no le gustará la idea de retrasar el matrimonio.

-Eso es -dijo muy satisfecho-. Lo que está muy bien, ¿no crees? -le preguntó al ver que Jungkook no parecía muy entusiasmado.

-Muy bien -dijo él asintiendo-. Pero por el momento lo que más me interesa es tu aspecto. Ese traje es... Estás maravilloso.

Jiminie había decidido dejarse llevar y se había comprado el traje. También se había arreglado el pelo y se había pintado muy sutilmente los ojos, como le había sugerido Tae. El resultado había sido muy satisfactorio, como también lo era que a Kookie le gustara... ¿O no?

Eso era lo que le preocupaba. No había duda de que se sentía atraído por Jungkook, sin embargo también sabía que la relación con él era tan sólo una parodia. No estaba bien que ninguno de los dos olvidara aquello, porque una vez solucionaran el problema con Jackson ambos seguirían con sus vidas como si nada hubiera sucedido.

El que Jeon Jungkook fuera tan elegante hacía que el pulso de Jimin se acelerara cada vez que lo miraba. También estaba la caja blanca que llevaba bajo el brazo...

-Tú me criticaste anoche por repetir las cosas -le dijo.

-Decirte lo bello que estás con ese traje merece ser dicho una y otra vez, además es azul. .. -concluyó muy satisfecho.

-¿No deberíamos irnos ya? -Preguntó él mientras miraba la hora-. Una cosa es llegar un poco tarde y otra ser unos maleducados.

El galleto se rió.

-¡Te pareces a mi madre!

Aquella comparación no le gustó mucho.

Te he traído un regalo -dijo mientras colocaba la caja blanca en la mesa de la cocina. Después la abrió.

-¿Un regalo? - Jimin se quedó estupefacto-. ¿Un regalo para mí?

-Para ti -dijo él con firmeza mientras sacaba algo pequeño de la caja-. Es un collar de plata con tu inicial. Es importado y lo compré especialmente para ti.

-Ya veo -le interrumpió Jimin sin apartar la mirada del collar, también sabía que era algo muy caro-. Jungkook, no deberías haber...

-Claro que debería -le dijo él con resolución mientras le ponía el collar-. Te mereces algo en agradecimiento a lo que estás haciendo. Es mi regalo de Navidad anticipado. Además -añadió al ver que el otro iba a decir algo-. Los collares quedan muy bien en ti.

Tal vez aquel traje no fuera suficientemente elegante para un hombre que saliera con él... Aunque Jungkook tenía razón respecto al collar, sin embargo el que Jeon le hubiera hecho un obsequio tan caro lo incomodaba...

Aun así el collar era una maravilla y no quería devolvérselo.

JungKook lo agarró suavemente de la cara y lo miró.

-Tan sólo dame las gracias, dame un beso y nos iremos -él pensó que aquello le iba a costar bastante-. ¿Demasiado difícil? -le preguntó él-. De acuerdo, olvídate de darme las gracias, con el beso valdrá -aquello era lo que más le iba a costar, ¿acaso sería capaz de darle sólo un beso?-. No tardes demasiado en decidirte, Mochi o la fiesta habrá terminado antes de que lleguemos.

-Gracias por el regalo, JungKook -le dijo finalmente-. Aunque no deberías haber...

Kook lo silenció colocando un dedo sobre sus labios.

-No digas nada más, Minie. Además, ¿acaso eso es un beso? TaeTae es más cariñoso conmigo que tú.

Aquello era cierto, pero TaeHyung era su primo, y un primo podía ser todo lo cariñoso que quisiera ya que no significaba nada, sin embargo él...

-¿Por qué no lo intentas de nuevo? -le sugirió Jungkook.

De repente el castaño se acercó mucho al rubio. Jimin podía sentir el calor de su cuerpo, podía oler su perfume, y al mirar los ojos de él pudo notar que sus pupilas estaban dilatadas...

-Kookie... -murmuró él mientras se ponía de puntillas y le besaba con todo el deseo que tenía dentro.

JungKook le rodeó la cintura con los brazos y lo acercó hacia él, aunque era Jimin el que seguía llevando el beso.

A Minie le costaba controlarse, aunque sentía ganas de derretirse allí mismo y dejarse llevar por el deseo de su cuerpo.

-¡Increíble! -Dijo él cuando Min separó sus labios-. Eso es un buen beso, tiene muchos talentos ocultos, señor Park.

Jimin tomó aire.

-Yo...

-¿Así estoy bien? -preguntó Jin al entrar en la cocina. Se paró en seco al ver lo cerca que su hermano y JungKook estaban el uno del otro-. Lo siento, no sabía... Quiero decir...

-Estás muy bien, Jin Hyung -le dijo Jeon mientras se alejaba de Jimin -. Sólo le estaba diciendo a tu hermano lo hermoso que está esta noche.

-Sí, Jiminie, estás muy bien -dijo Jin. Parecía algo perplejo e incómodo.

Jimin también estaba sorprendido, o más bien intrigado, no entendía por qué Jin iba vestido con traje también...

JungKook miró a Jin y movió la cabeza.

-¿Acaso se me olvidó mencionar que Hyung va a venir con nosotros esta noche? -dijo mientras recogía las llaves del coche, que había dejado encima de la mesa.

¡Jungkook no era el único al que se le había olvidado mencionarlo! ¡Jin tampoco había dicho nada!

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Ja weeeno xD

Ese Kuko, ay "el collar tiene tu inical"... no si, que hable claro y diga que es por el nombre de él, no na más por el Jimeno :v

Asito Tae, no sabe lo que le espera con el jackson, ay chamo.

Qué estará tramando el conejo? cuál será la tramoya que esta armando?

Descúbralo en el próx cap... xD

OkNo xD

Silver fuera; paz...