"Virgen de lo pecaminoso"

Nunca pensé que le tomaría tanto cariño a esta habitación, nada más llegar aquí me hizo sentir en casa y lo primero que hice al atravesar esas puertas fue quitarme la peluca e ir al baño para quitarme las lentillas y guardarlas en su respectivo lugar, veo la hora en mi móvil.

Son las once y quince de la noche, lo más seguro es que todos ya estén acostados en sus respectivas habitaciones.

Llegué tan tarde porque mamá y papá querían pasar un tiempo conmigo antes de dejarme aquí, fuimos a comer a un local de comida rápida, tenía tantas ganas de una buena hamburguesa de doble carne y papas fritas que ni mis padres se pudieron resistir a la idea de no ir por una.

Estuvimos por horas hablando sobre cualquier tema.

Veo mi reflejo en el espejo, la base y un poco de polvo cubren mis moratones.

Abro la llave del lavabo y junto mis manos formando una especie de cuenco para poder recolectar el agua y después remojar mi rostro, cuando siento mi cara lo suficientemente húmeda tomo un jabón en líquido para lavarme el rostro y quitar cualquier rastro de maquillaje.

Sentir el agua fría en mi rostro hace que me relaje, sé que a muchas personas le relaja el agua tibia o la caliente pero yo prefiero un millón de veces el fría y más cuando mi día no a ido de lo mejor.

Tomo una toalla de manos y me seco el rostro con ella.

Escucho mi celular sonar por lo que me dirijo hacia donde lo dejé, veo como vibra y el nombre de Lander iluminar la pantalla.

Descuelgo y dirijo el celular hacia mi oreja.

-Oye qué pas....-no logro terminar la frase.

-Joyita estoy afuera en el balcón y se me está congelando hasta el espíritu por favor abre la bendita puerta.-habla rápidamente.

Me cuesta unos segundos procesar lo que dice pero rápidamente hago lo que me pide.

Londres se caracteriza por su clima frío y bipolar así que no dudo que Lander se esté congelado allá afuera.

Me dirijo hacia la puerta de mi balcón, puedo ver una sombra afuera, si él no hubiera avisado estaría segura que habría pegado un grito en el cielo al ver una sombra desconocida ahí.

Tomo el pomo y lo giro para poder abrirle.

En menos de medio segundo Lander está en mi habitación, veo como frota sus brazos intentando darse calor.

Lleva puesto unos pans grises y una sudadera color negro.

-Ya no siento mis manos.-se sopla las misma intentado darse calor.

-¿Cuánto tiempo llevas allá afuera?-frunzo mi ceño.

Lander se dirige a mi cama y se sienta en la misma.

-Tal vez una media hora.-se encoje de hombros restándole importancia.

Me asombro, lleva media hora afuera de mi balcón, alguien pudo haberlo visto, que tal si un vigilante lo atrapaba sería su fin, está más que prohibido escabullirse por las noches y aunque ya lo hubiera hecho eso no quita que se encuentre en mi habitación casi a media noche.

-Te daría un sermón sobre avisar antes pero estoy realmente cansada.-decido no darle muchas vueltas al asunto.

Voy a uno de mis cajones para tomar una pijama abrigadora que consiste en un suéter manga larga con el estampado de un panda y un pantalón largo de cuadros azules y negros.

Cuando ya tengo todo en mano me quito la ropa, me lo pensaría dos veces antes de hacerlo al frente de Lander pero después de todo el me cambió hace algunos días atrás.

Paso mi suéter por mis brazos y me bajo el pantalón jean.

Quedo en ropa interior frente a él.

-Santa virgen de lo pecaminoso-lo escucho decir.

Llevo mi vista a un muy sonrojado Lander y no puedo evitar sentir ternura. Siento como el rubor se expande por mis mejillas hasta mi pecho.

Me coloco lo más rápido posible el suéter del pijama al igual que el pantalón. Recojo la ropa de suelo y me dirijo a mi baño donde tengo una sesta para la ropa sucia.

Usualmente duermo sin sostén ya que cuando lo hago siento que no puedo respirar, llevo mis manos a mi espalda para poder desabrocharlo.

Al sentir como se afloja tomó un gran suspiro.

Verdaderamente está es la mejor parte del día para una mujer.

Echo el sujetador a la sesta junto a lo demás y salgo del baño.

-Perdón por no avisar antes de venir Joyita solo quería verte y confirmar que todo este bien contigo.-dice apenas me ve salir del baño.-lo más seguro es que estás cansada y quieras descansar.-considera antes de pararse de mi cama y dirigirse al balcón nuevamente.

Siendo sincera no me esperaba verlo a estas horas de la noche pero no puedo negar que me alegra verlo aquí y preocupándose de mi bienestar.

-Estás loco si piensas que te vas a ir de aquí.-camino rápidamente y cierro la puerta de un empujón cuando apenas alcanzó a abrirla.

Tanto el como yo nos sorprendemos por el estruendo al ser cerrada de un portazo.

Quizás se me pasó la mano.

-¿Quieres que me quede? -frunce el ceño extrañado.

-Claro que sí después de todo eres mi novio y no te he visto desde hace dos días que se sintieron semanas además mañana es sábado no tenemos clases y no hay que despertarse temprano.-me encojo de hombros y camino hacia mi cama.

Aparto la colcha para poder acostarme, para después cubrirme con ella.

Lander sigue en su mismo lugar sin moverse y mirándome fijamente como si yo fuera una especie de alienígena que en cualquier momento le fuera decir "no estamos solos en este universo".

Sus ojos me miran fijo, su expresión es entre sorprendida y un tanto confundida, usualmente Lander es fácil de leer pero en estos momentos no se que pasa por su cabeza.

Intento recordar mis palabras anteriores pero no encuentro nada que haya podido dejarlo así de sorprendido.

-¿Y no te vas a mover? -pregunto confundida.

Él sacude su cabeza como si quisiera espantar algún pensamiento y poder volver a concentrarse.

-Dijiste la palabra que comienza por No y termina en vio.-se acerca lentamente hacia mí.

Frunzo mi ceño confundida.

-Claro que no-niego rápidamente.

-Joyita sé que mi vista suele fallar pero te juro que mi sentido auditivo no me falla jamás.-cuando llega hasta la cama se sienta a mis pies.

Me reincorporo en mi lugar, como si eso me fuera a ayudar a recordar algo que haya dicho.

Repito en mi mente una y otra vez lo que dije hace minutos.

Mierda.

-Lo siento es que estoy cansada... -me cayo cuando siento sus manos en mis mejillas.

Sus ojos comúnmente color verde claro, lucen en estos momentos oscuros debido a sus pupilas dilatadas.

-Yo estaría encantado de ser tu novio Joyita. -me sonríe.

Sus dedos acarician mis pómulos, al igual que él llevo mis manos a sus mejillas y acaricio su suave piel.

-No crees que vamos muy rápido-susurro indecisa.-llevamos muy poco saliendo además no nos conocemos del todo, todavía no se cuando cumples y... -me cayo cuando siento una breve presión en mis labios.

Regreso mi atención a su rostro.

Lander me sonríe ampliamente, una de sus manos coloca un mechón de cabello detrás de mi oreja.

-Cumplo el 24 de diciembre, ¿ahora si podemos ser novios? -sonríe divertido.

-Que día más inoportuno naciste Lander, lo más seguro es que tú mamá estaba celebrando noche buena y tú te empeñaste en nacer eso no se hace.-Cuando estoy nerviosa suelo soltar cualquier babosada.

Y en estos momentos estoy más que nerviosa.

-Además tú no sabes mi cumpleaños. -aparto mis manos de su rostro para cruzarlos bajo mi pecho.

Su mirada baja ahí por unos segundos antes de volver su vista hacia mis ojos.

-Hay que leer la biblia.-susurra mirando hacia el techo, como si le estuviera hablando con alguien en particular. Él toma un suspiro y me vuelve a mirar.-12 de julio, ¿Ahora sí somos novios?-pregunta ya exasperado.

Decido no preguntar como sabe mi fecha de cumpleaños, lo más seguro es que lo googleo o algo por el estilo.

Quien sabe.

-Pero todavía no sabes...-se levanta de mi lado y lleva sus manos a su cabello.

Creo que ya hice que perdiera la paciencia.

-Me basta con un no Olivia.-me mira serio.

Me paro rápidamente de la comodidad de mi colchón, me acerco a él y tomó una de sus manos, cuando no me dice algún apodo o mote él está hablando pero muy en serio.

-Lo siento, es que estoy muy nerviosa-me excuso.

El niega.

-Estás segura que sólo estás nerviosa o es algo más lo que influye en ti.-sus manos viajan a mí cintura acercándome a él.

Mi rostro queda a la altura de su pecho por lo cual necesito hacer mi cabeza un poco hacia atrás para así poder verlo a los ojos.

No se que me pasa pero todo esto lo hago involuntariamente.

-Siento qué lo que pasó con Devon hace algunos días pueda influir en nosotros, que tal vez cuando todo esto se haga público no vayas a poder con toda la presión que significa estar conmigo, que tu vida deje de ser privada para pasar a ser totalmente pública, yo sí quiero ser tu novia pero no quiero ocultarte, yo quiero que cuando salgamos de este internado pueda estar en la calle tomándote de la mano y publicar cosas contigo en mis redes sociales-sus manos acarician mi cintura.

No me quiero admitir que Devon dejó secuelas en mí, en serio no quiero que por su culpa mi vida se limite ahora a inseguridades a tener miedo, no quiero a tener miedo de Lander porque sé muy bien que él no me haría daño.

-Primero que nada el tema de Devon, él va a influir en nuestra relación si nosotros se lo permitimos, corazón tú necesitas ayuda profesional y no lo digo porque estés loca.-se apresura a decir.-no se como tu te sientes y no se lo que pasa por tu cabeza, pero estoy seguro que si recibes ayuda de algún profesional todo ese peso que sientas se puede alivianar.

Asiento en acuerdo, mamá y papá esta tarde estaban hablando sobre ese mismo tema y la verdad no me molesta para nada, yo sé que me hará bien hablar con un terapeuta, en el internado hay una por lo que va a ser mucho mejor para mi, podría visitarla unas dos o tres veces por semana, además ella está al tanto de todo esto.

-... Yo sería tú novio a pesar de eso Joyita, sé que tú estilo de vida es diferente a la mía, que en cierto punto te agobia no tener tu privacidad y que si salgo contigo lo más seguro es que yo pierda la mía, pero eso no importa sabremos controlarlo.-su rostro se acerca al mío.

-Estarías dispuesto a eso. -susurro al sentirlo tan cerca de mí.

-Claro que sí Joyita. -me sonríe confiado.

No espera ni un segundo más y junta nuestros labios en un beso profundo y lleno de promesas, sus labios se mueven a la par que los míos en un beso suave pero a la vez exigente como si me estuviera pidiendo lo mejor de mi.

Sus dientes capturan mi labio inferior provocando que suelte un jadeo al sentir mil corrientes eléctricas recorrer mi cuerpo entero, es como si de repente todo mi cuerpo fuera estática pura. Lander aprovecha el jadeo para introducir su lengua comenzando un beso aún más profundo, mi ritmo cardíaco se acelera.

Nos separamos por falta de aire, siento mis labios inflamados y mi respiración entrecortada.

Soy yo o hace calor.

Siento como sus manos se presionan en mi cintura.

-¿Somos novios? -pregunto dudosa y en un tono bajo.

Su mano va a mi barbilla tratado que mi vista vaya hacia sus ojos.

-Según yo lo somos Joyita.-se acerca nuevamente a mi, planta un beso breve en mis labios para después alejarse y dejarme con ganas e más.

Apoyo mi cabeza en su pecho y lo rodeo con mis brazos en un fuerte abrazo.

-¿Te quedarás? -pregunto contra su pecho.

Tomo una gran bocanada de aire, su aroma a jabón y menta llenan mis pulmones al igual que embriaga mi sentido de el olfato.

Huele delicioso.

-¿Quieres que me quede? -se separa un poco de mi para verme a los ojos.

-Sí quiero, además correr el riesgo a que se den cuenta que estás afuera de tu habitación en horas no permitidas.-pienso en voz alta.

Él solo me sonríe y asiente.

Me separo de él y me dirijo a la cama, me acuesto y me cubro con la colcha color lila.

-¿Podrías apagar la luz Land? -le pido.

Él no dice nada y hace lo que le pido.

-Gracias.-agradezco antes de cerrar mis ojos.

Siento como se unde la parte izquierda de mi cama por el peso de Land, él alza un poco la colcha para poder cubrirse con ella.

Él se queda quiero en su lugar, puedo incluso jurar que esta viendo hacia el techo y recto en su lugar con sus brazos a cada lado de su cuerpo.

Como le estoy dando la espalda decido enfrentarlo.

Efectivamente está justo como pensé.

-Si vas a dormir tienes que cerrar los ojos Land-lo molesto al verlo tan perdido en sus pensamientos.

Y gira su cabeza para verme fijamente. Aunque todas las luces de la habitación están apagadas, la luz de la luna y de algunos faros se cuelan por la puerta del balcón, gracias a eso puedo verlo perfectamente.

-Solo pensaba.-se acerca a mi.

Vuelvo a ponerme de espaldas a él.

Pasan unos minutos en los que trato dormir pero simplemente no puedo, al parecer Lander ya se durmió por que en ningún momento se a movido.

Me giro un poco para verlo con los ojos cerrados y su rostro relajado, evalúo cada una de sus facciones, sus cejas un tanto pobladas, sus pestañas son una envidia para todas las mujeres, sus labios rosa y rellenos tan suaves como lucen, recorro todo su rostro con mi mirada.

Lander es hermoso.

Veo su mano sobre su estómago y la tomo, hago que su brazo me rodee la cintura y lo abrazo contra mi pecho como si fuera un peluche.

Siento como se mueve en su lugar y me pega a su pecho.

Vuelvo a cerrar mis ojos tratando de conciliar el sueño el cual no tarda mucho en llegar y arrastrarme a los brazos de morfeo.

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Espero que les haya gustado este cap.

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~VMBM💖✨