"Sorpresa de año nuevo"

Año nuevo, generalmente en el ambiente del 31 de diciembre se respiraba en el aire expectativa por un nuevo año, también había alegría, familiares disfrutando de la buena música y también de la buena comida pero este 31 a sido distinto a los demás por obvias razones, Anne decidió quedarse en casa después de haber estado todo el día en el hospital junto a su hijo, Kenneth aún no despierta y ni siquiera sabemos cuando lo hará, los hermanos Morton, Keyla y Mandy se quedaron en casa junto a la familia de Lander, Fanny a permanecido pegada a Dante durante todo este tiempo.

Me froto las manos intentando darme calor, el hospital definitivamente no es mi lugar favorito, su ambiente frío y silencioso no son de los mejores escenarios en los que he estado y si agudizas un poco tus oídos puedes escuchar sollozos, algunos de ellos de alegría y la otra gran parte de dolor.

Observo el cuerpo quieto de Kenneth recostado en la cama, su rostro se ve pálido provocando que los moretones en él sean aún más notables, su brazo derecho tiene un yeso que va desde sus dedos hasta su codos, en tres de sus dedos tiene tornillos, tres tornillos en su dedo anular, dos en su dedo índice y cuatro en su dedo corazón según lo que dijo él doctor quedará un pequeño temblor involuntario en sus dedos pero se podrá mejorar con terapia, en su tobillo izquierdo una venda lo inmoviliza ya que solo tuvo un esguince, sé que en su costado es donde se encuentra la herida más grave con quince puntos de sutura, tres costillas rotas y varias cortadas más a lo largo de su cuerpo pero gracias a Dios su cabeza está bastante bien solo tiene una pequeña contusión de primer grado, y tal vez se pregunten porqué le inducieron el coma, el doctor nos explicó que durante la operación hubieron varias complicaciones además de que llegó muy débil al hospital por la gran pérdida de sangre.

Tomo un gran suspiro cuando escucho los fuegos artificiales, bajo mi mirada a mi reloj que marca las doce en punto, feliz año nuevo del 2021, Lander se acerca y me estruja en un fuerte abrazo, entierro mi cabeza en su pecho y suspiro todo su aroma.

-Feliz año nuevo- me sonríe a medias.

-Feliz año nuevo- beso la comisura de sus labios.

-Iré a la cafetería por algo de café, ¿quieres algo?- se coloca de pies.

-Un café y un sándwich si no es mucha molestia-

-Con gusto se lo traigo señorita- hace una pequeña reverencia y sonríe divertido.

Le doy una palmada divertida en su brazo, Lander sale de la habitación segundos después.

Me paro del sillón y me acerco a Kenneth, me siento en la silla metálica a su lado y tomo su mano izquierda-la que no tiene el yeso-, le doy un pequeño apretón, su mano se siente cálida al tacto y eso definitivamente es una muy buena señal, desvío mi vista a su rostro, es increíble el gran cariño que siento por él en el poco tiempo que lo he conocido, Kenneth es una persona fácil de querer además que es un chico cariñoso y divertido solo espero que toda esta situación no lo cambie y que su luz se vea opacada, él se merece seguir adelante pero tampoco soy quién para decidir como va a sobrellevar la perdida, lo único que sé es que estaré aquí para él.

Estoy apunto de separar mi mano de la suya cuando siento un leve apretón, me sobresalto en mi lugar pero decido no prestarle atención según el doctor los pacientes que se encuentran en estado de coma llegan a mover alguna extremidad de vez en cuando, o no estoy muy segura si eso fue lo que me dijo, él usó términos médicos y la verdad casi ni entendí la mitad de las cosas que dijo. Mantengo mi mano sobre la suya, ni siquiera sé en que momento me quedé inmersa en mis pensamientos que no me di cuenta que me estaban llamando..

-¿Olivia?-

Doy un respingo en mi asiento al escuchar la voz rasposa de Kenneth, me levanto más rápido que un rayo y miro sorprendida el rostro de Kenneth, sus ojos están bastante abiertos y me miran con confusión, su atención se traslada a su alrededor y mira todo con el ceño fruncido.

No paso mucho tiempo en shock cuando comienzo a gritar el nombre del doctor, corro de un lugar a otro sin saber en realidad que estoy haciendo.

No sirvo para este tipo de situaciones.

Una enfermera entra escandalizada a la habitación y me mira con preocupación, no digo nada y señalo a Kenneth con la mano, ella entiende inmediatamente y sale corriendo en busca del doctor.

Me quedo estática en el centro de la habitación, los cables en mi cabeza se unen y un grito de alegría salen de mis labios, me acerco rápidamente a Kenneth y tratando de no hacerle daño le doy un abrazo.

-Santa Virgen poderosa de los enfermos- digo sin pensar, creo que ni siquiera tiene sentido lo que acabo de decir pero ya que.

-Te estás comportando raro cuñada-Frunce el ceño.

- Lo sé échale la culpa a tu hermano-

Al pensar en Lander me levanto como un resorte de la cama, salgo corriendo de la habitación justamente cuando el doctor está entrando, él me mira un poco extraño pero decido ignorarlo. Corro por los pasillos del hospital hasta llegar a las escaleras, no tengo tiempo para un elevador en estos momentos y gracias a Dios la cafetería está en el piso de abajo, bajo las escaleras de dos en dos y en varias ocasiones pierdo el equilibrio pero logro estabilizarme, no necesito un chichón como el de la vez pasada.

Cuando llego a la cafetería buscando desesperada con la mirada a Lander, cuando lo encuentro haciendo la fila me acerco corriendo a él.

-¡Lander! -grito a todo pulmón.

La mayoría de las personas voltean a verme con curiosidad pero no les presto atención mi objetivo es darle la noticia.

Lander se voltea confundido, inspecciona un poco mi rostro y su ceño se frunce aún más, tal vez parezco una loca desquiciada y ya piensa que se me zafó otro tornillo, quien sabe, él sale de la fila cuando me paro a medio camino, mi respiración es desigual, me duelen un poco las piernas y un sudor frío empapa mi frente y nuca.

No sirvo para correr.

-¿Le pasó algo a Kenneth? - me mira preocupado.

Alzo un dedo en señal de que me espere un momento y trato de normalizar mi respiración, tomo grandes bocanas de aire mientras siento mi corazón latir a mil por hora.

-Me estás poniendo nervioso, di algo rápido Olivia.-

-Kenneth despertó- digo sin tapujos.

Lander da un paso hacia atrás y me mira sorprendido, evalúa todas mis expresiones en busca de que le estoy jugando alguna broma o si le estoy diciendo alguna mentira.

-El año comienza de una buena manera- dice antes de tomar mi mano y comenzar a correr.

O vamos a penas me estaba recuperando de la maratón que hice para llegar a la cafetería, ignorando las quejas de mis piernas por la actividad física corro al lado de Lander pero para mi desgracia no tomamos el elevador, subo las escaleras lo más rápido posible, siento que en cualquier momento se me va a salir un pulmón y mis piernas arden como si las estuvieran cocinando.

Me suelto del agarre de Lander cuando llegamos a la habitación, ni siquiera me da tiempo de ver su reacción cuando me tiro al sillón con la respiración agitada y mi corazón bombeando sangre como nunca, creo que no es bueno acostarse cuando terminas de correr pero si me levanto en estos momentos estoy segura que mi rostro terminará besando el suelo.

-¿Y tú quién eres? -

Frunzo mi ceño y miro confundida a Kenneth, su atención está totalmente en Lander su expresión es seria y mira con desconfianza a su hermano, estoy por asustarme y llamar a el médico pero recuerdo que cuando despertó él me llamó por mi nombre.

-Estás de joda Ken- Lander lo mira incrédulo.

-Sí la verdad sí- ríe a carcajadas- hubieras visto tu expresión- se sigue riendo divertido pero su risa es interrumpida por una mueca de dolor, lleva su mano izquierda a su costado y frunce un poco su ceño.

Estoy por decirle algo cuando la puerta se abre de golpe, Anne entra a la habitación como alma que lleva el diablo, rápidamente la habitación es llenada por siete personas más entre ellas está nuestros amigos, supongo que el doctor dio la orden de llamar a los familiares.

Las lágrimas y las risas de alegría estuvieron presentes de manera automática, Kenneth fue abrazado por su madre y por sus otros dos hermanos definitivamente una familia maravillosa.

-¿Y como está papá? -

Las sonrisas de todos se desvanecen, Kenneth frunce mucho su ceño y nos mira con preocupación, Anne se separa un poco de él y le da una media sonrisa, Mandy, Keyla y los hermanos Morton deciden salir de la habitación.

-Tú papá no lo logró cariño- Anne es quien le da la noticia.

-Me estás mintiendo, yo lo escuché el me vino a visitar- niega rápidamente.

Todos nos sorprendemos por lo que dijo.

Kenneth trata de incorporarse en su lugar, unas cuantas lágrimas bajan por sus mejillas y su mano tiembla.

- Papá fue enterrado hace dos días Ken- Fanny se acerca cautelosamente a su hermano.

Se que Fanny y él son muy cercanos, aunque todos se aman por igual ellos dos tienen una conexión impresionante y creo que por eso el golpe de realidad para Kenneth es mucho peor, él sabe que su hermana no le mentiría con algo como eso, más lágrimas comienzan a brotar de él junto con sollozos lastimeros, dice palabras en voz baja que no logro entender.

Anne se acerca a consolar a su hijo y yo decido salir, siento que esto es muy personal y que no debo de estar aquí, no se siente correcto, una mano me impide salir.

-¿Y a donde se supone que vas? -

Frunzo mi ceño y entrecruzo mis brazos en mi pecho.

-Esto es algo muy familiar Land, tal vez no debería de estar aquí-

El me mira incrédulo.

-¿Pero que dices?, si ya eres parte de la familia- me hace acercarme.

El resto de la madrugada transcurre con las enfermeras entrando cada hora por alguna muestra para hacerles exámenes a Kenneth.
Kenneth se queda la mayoría del tiempo viendo a la nada, justamente como lo hacía Lander pero esta vez no se si yo pueda ayudarle.

A mi mente viene la chica que ayudó a Kenneth cuando sucedió el accidente, rebusco desesperada mi teléfono en mi pequeña bolsa, cuando lo encuentro busco rápidamente su contacto, Melody se tuvo que ir ya que pasaría el año nuevo con su familia en Roma y ella me pidió que cuando despertara Ken la llamara.

Me acerco a Kenneth y me siento a su lado.

-Melody me dijo que cuando despertaras quería hablar contigo.-

Kenneth parece reconocer el nombre porque automáticamente se endereza en su lugar.
Presiono el ícono de llamada y llevo el celular a mi oreja, espero que este despierta, cinco tonos después y estoy a punto de colgar pero la voz de la chica se hace presente.

-¿Olivia? - escucho su voz del otro lado.

-Sí soy yo, me dijiste que te llamara si habían buenas noticias-

-¡¿Él despertó?! -me alejo un poco el teléfono por el grito.

Veo a Kenneth sonreír, estoy segura que la escuchó.

-Sí, te lo voy a pasar-

-Espera, qué... -

No le doy chance a terminar y le paso el teléfono a Kenneth.

-Al parecer generalmente nunca paras de hablar- la sonrisa en el rostro de Kenneth se ensancha.

Decido dejarle un poco de espacio y me alejo de él, me siento junto a Fanny quien mira una revista lo más concentrada posible, me inclino un poco para ver que es lo que mira, el poster de dos chicos muy guapos y por lo poco que puedo ver mas o menos de su edad.

-¿Y esos quienes son? - pregunto interesada.

Los dos chicos son extremadamente guapos, uno de ellos es pelirrojo con ojos azules y piel blanca es un poco más grande que su compañero de al lado pero en realidad no es mucha la diferencia, mientras que el otro es castaño de ojos verdes y piel tostada solo es unos cuantos centímetros más bajo que su compañero.

—Es como especie de un Dúo, los estuve escuchando hace algunos días y son bastante buenos.— Fanny me pasa la revista para que la vea mejor.

Solo la ojeo un rato más y después procedo a devolvérsela, mi atención vuelve a Kenneth cuando lo escucho reír, no se que es lo que le este diciendo Melody pero agradezco que se este distrayendo un poco, él habla por un buen rato más hasta que lo escucho despedirse y es ahí cuando me acerco nuevamente a él.

—Es buena chica— sonrío, tomo mi teléfono cuando me lo tiende.

—Sí, lo es—

Es todo lo que dice antes de relajarse y descansar un poco.
Me acerco a Lander quién se encuentra junto a Dante hablando de cualquier cosa supongo.

—Me iré a casa, necesito descansar un poco—

—Yo te acompaño, Dante dijo que él se quedaría haciéndole compañía a Ken— se levanta de su lugar y se acerca a mí.

Los dos nos despedimos de Dante y Fanny la cual insistió en quedarse junto a su hermano y la señora Anne se iría en unas cuantas horas. Al salir de la habitación nos topamos con los chicos, los cuatros nos brindan una sonrisa y se levantan de su lugar.

El camino a casa es tranquilo, la madrugada es lo suficientemente fría para hacerme tiritar y hacerme temblar un poco en mi lugar, como Dante se quedó con las llaves del auto tuvimos que irnos en taxi en el cual íbamos muy apretados, cuando llegamos a casa todos fueron directo a la habitación de invitados y como solo había una habitación para las visitas yo me tuve que mover al cuarto de Lander y sendéreles la habitación a los chicos.

Voy directo al baño para cambiarme y ponerme mi pijama, dejo mi ropa en mi maleta para después poderla lavar,  Lander ya se encuentra cambiado y acostado en su cama pero antes de acostarme a su lado me quito todas mis prendas y las dejo en la mesita de noche junto a la lámpara y un cuadro, me hago una trenza floja y me acuesto a su lado, me arropo con la colcha para después acostarme de lado y verlo a la cara, su mirada está un poco perdida y sus ojos están cristalizados no digo nada, solo me acerco a él y lo abrazo pasando mi brazo por su torso y recuesto mi cabeza en su pecho desnudo, su calor corporal es bastante reconfortante.

—¿Crees que papá se despidió de Kenneth? —

Alzo un poco mi cabeza para verlo con detenimiento.

—Él dijo que lo fue a visitar, y si lo piensas tu padre se despidió de ustedes, tal vez no se pudo despedir bien de Kenneth—

Paso mi mano de arriba hacia abajo sobre su torso, su piel es suave y tibia, de vez en cuando lo siento suspirar al igual que siento su corazón latir rápido bajo mi oreja.

—Tal vez antes de descansar se tenía que despedir bien de Kenneth, aunque a mi también me hubiera gustado despedirme de él— suspira— aunque suene un poco tétrico hay veces en el que siento su presencia, pero al contrario de asustarme me reconforta saber que de alguna manera sigue aquí—

Me incorporo un poco en mi lugar y lo miro sorprendida, esto si que no me lo esperaba.

—No quiero explotar tu burbuja Lander, pero debes dejarlo descansar si te estás aferrando a él te estarás dañando a ti mismo y eso no es bueno—

Veo como pequeñas lágrimas recorren sus mejillas o se pierden en la almohada, llevo mis manos a su rostro y le limpio sus lágrimas.

—Es que no lo quiero olvidar y no quiero que él me olvide, me asusta mucho— su voz se entrecorta de vez en cuando.

Trago el nudo que se forma en mi garganta.

—Te prometo que no lo vas a olvidar, yo me encargaré de eso—

Sus brazos me rodean y me aprieta a él, deja varios besos en todo mi rostro.

El resto de la madrugada lo escucho llorar en silencio, yo no intervengo, es necesario que él se desahogue y llore todo lo que necesite, al rededor de las cuatro de la madrugada es cuando ya no lo escucho y me doy la oportunidad de dormir.

A pesar de todo hoy a sido una buena noche definitivamente, Kenneth despertó y al parecer todo se encuentra bien con su salud.

Por ahora hay que enfocarnos en las cosas buenas y aferrarnos a ellas.

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Espero les haya gustado y perdón si encontraron alguna falta ortográfica o alguna frase con poca concordancia subí este capítulo por mientras que estoy en mi clase de biología.

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~VMBM❄🧚‍♀️