—Lord Jimin

— ¿Sí?

—Acompáñeme un momento

Asintió mirando a Yoongi nuevamente antes de seguir al duque a donde mismo había estado con la madre del pelinegro y Jimin deseo no decir sus típicas estupideces.

—Bien, ¿Mañana está ocupado? —pregunto tan pronto llegaron.

—Tengo clase de baile, de ética y comportamiento, de parecer un avestruz como las señoras del baile...

— ¿Avestruz?

—Si, las señoras que andan con pelucas parecen avestruces

Seokjin tuvo que morderse la lengua para no echarse a reír, ¿Quién asemejaba los avestruces con las señoras de la fiesta? Aunque si lo miraba bien, tenían cierto parecido.

— ¿Quiere tomar esas clases?

— ¿Sinceramente? —el pelinegro dio un pequeño asentimiento. —Cada día huyo de Yoongi para que no me haga tomar esas clases, ósea ¿Quién le agrada leer una historia de gente muerta?

—Es la historia del reino

— ¿Y necesariamente tiene que ser tan aburrida? Digo, son como 10000 hojas de gente matándose entre sí, leyes que la verdad no me importa porque ahora ni se aplican y sobre herederos igual de insoportables que el baboso de Eunwoo aparte—hizo un ademan siendo observado por Seokjin. — ¿Dónde está el romance y la buena historia? Supongo que un rey no solo vive de leyes aburridas y de matar

— ¿Sabía que podría ser condenado a muerte por su osadía al hablar?

—Pues no me has condenado hasta ahora

El pelirrosa lo dijo, pero en realidad esperaba que el duque lo tomara bien porque si no, tendría que ver cómo salir de ese problema.

—Debería cuidar lo que sale de esos labios—dijo y aunque parecía una amenaza su voz era suave. —Por más lindos y tentadores que sean, podría ser acusado de osadía

Para el cerebro de Jimin solo se escuchó la primera parte, los demás ni siquiera llego a su cerebro.

— ¿Son lindos y tentadores?

—Como decía, si sus clases son tan importantes puedo ofrecerme a enseñarle la historia de nuestros antepasados

— ¿Quieres escuchar de estos lindos y tentadores labios como me quejo de lo aburrido que es?

El pelirrosa vio a Jin reír bajito y le encanto ver sus ojos achinarse un poco más.

—Lo hare divertido para usted, Lord Jimin

—Bien, Lord Seokjin ¿Mi casa o la tuya?

El pelinegro pensó seriamente quien en estos días tenía tal osadía como lo tenía aquel chico de baja estatura y de ojos que no dejaban que Seokjin dejara de parecerle cautivadores.

—Su casa, tengo negocios que hablar con su padre

— ¿Puedo saber que negocios?

— ¿No le parecen aburridos?

—Si no me explicas

Seokjin lo invito a apoyarse del balcón y a estar inconscientemente más cerca.

—Al usted y yo comprometernos debo de dar un atributo por tomar su mano, el atributo será prestigio, cuando nos casemos llevaras mi título y tu familia recibirá prestigio—explico con su misma expresión de siempre. —Lord Yoonsik pasara de ser Conde a Marques

—Entonces... ¿Yo soy solo un peatón para que mi familia sea más prestigiosa y tenga más razones para creerse que son los dueños del mundo?

— ¿No desea casarse, Lord Jimin?

—No es eso—definitivamente no era eso, ya se había decidido a casarse con él. —Mañana entenderás lo que digo, ¿No hay otro tributo que puedas dar?

— ¿Tan mala es su familia?

—No sé cómo explicarme—susurro. —Solo siento que este matrimonio es solo un plan para algo más grande

El día que Jimin había vuelto a ver a su padre en la oficina pudo ver papeles y apenas los leyó por encima, pero había algo que no cuadraba, sabía que Lady Lore no lo dejaría simplemente casarse con el duque sin ganar algo.

—Realmente no estoy entendiendo, pero hagamos algo en estos 3 meses voy a visitar su casa obviamente no todos los días, pero estaré analizando más de cerca lo que me está diciendo

—O simplemente es una excusa para poder verme sin problemas

Seokjin lo miro, en realidad estaba enfocado en ver más allá de ese compromiso, pero el pelirrosa tenía razón. Quería tener un motivo para ir a su casa sin tener que inventar algo diferente cada que quisiera ir y ver más de cerca los ojos del menor.

—Me atrapaste—susurro y Jimin sonrió dejando ver la sonrisa más encantadora que el pelinegro había visto.

Se quedo serio mirándolo y tuvo que mirar al frente para no hacer una locura.

—Creo que podría adelantar el tiempo

Era un pensamiento, pero por la sonrisa del pelirrosa supo que lo dijo en voz alta.

— ¿Dos meses te parece bien?

—Una semana

Jimin se rio y negó palmeando la mano apoyada del duque en el barandal.

—Creo que puedes esperar esos 3 meses

—Creo soportar, pero por ahora, ¿Me permite bailar con usted?

—No me hagas rogarte

Seokjin no lo pensó y se alejó del balcón atrayendo al menor hacia su cuerpo mientras la suave melodía de la canción que apenas se escuchaba ponía el ambiente mientras sus ojos se miraban como si hablaran con las miradas.

Jimin pensó seriamente que no debía de casarse, ¿Y si se enamoraba de esos profundos ojos oscuros y debía de volver?

Sin pensarlo se acercó más y apoyo su cabeza en su pecho sabiendo bien que los chismosos estaban escuchando e incluso escucho la música un poco más fuerte.

—Lord Jimin

— ¿Sí?

Hubo un largo silencio mientras se movían lentamente y mientras la mano de Seokjin se mantenía firme rodeando su cintura.

—Espero que podamos tener un matrimonio leal y duradero

—Yo también, Lord Seokjin—susurro sin alejarse y trato de no preocuparse como su corazón latía sangre más cálida mientras disfrutaba de estar en los brazos de alguien que apenas conocía. 

Yoongi vio como Jimin era llevado por el duque a la pista de baile y soltó un suspiro, por una parte, esperaba que Jimin no hiciera que el duque cancelara el compromiso, pero por otra parte estaba deseoso de poder vivir lo mismo que el pelirrosa estaba viviendo.

Tener un hermoso traje ajustado a su cuerpo, que todos le miraran con envidia mientras bailaba junto con aquella persona especial que lo mirara como si fuera lo mejor que le hubiera pasado en su vida.

—Por esos ojitos de perro mojado puedo suponer que deseas bailar—Yoongi sintió que todos los vellos de su nuca se dispararon al sentir un aliento cerca de esa parte sensible, sus orejas se calentaron y se volteo teniendo que levantar la mirada para ver a la persona que estaba frente a él.

Se quedo helado y ni siquiera se acordaba de como hablar, o siquiera estaba escuchando porque estaba viendo como sus labios se movían.

— ¿Me estas escuchando?

No hubo respuesta y el duque Jungkook no era un hombre demasiado paciente así que se atrevió a tomar la mano del pálido para traerlo al mundo, aunque para Yoongi eso era como darle una patada para que se fuera directamente al cielo y bajara al infierno.

—Bueno si no querías podías decir que no

Cuando Yoongi sintió que el calor que la otra mano le daba se alejaba no dudo en tomarla de nuevo, pero se arrepintió al segundo y la soltó al mismo tiempo que bajaba la cabeza.

—Lo siento, mi Lord no debí tocarlo

—Yo te toque así que estamos a mano, ¿Que dices?

— ¿Que digo? —Jungkook vio las cejas del pálido fruncirse y aunque tenía la cabeza ligeramente inclinada hacia abajo le dejaba apreciar la carita confundida del pálido.

— ¿Quieres bailar?

— ¿Yo? —se señaló y luego lo miro señalándolo. — ¿Con usted?

— ¿Tan malo es?

Yoongi negó y se mordió el labio mirado hacia los lados, ¿Qué dirían los demás? O peor, ¿Que diría Lady Lore si lo llegaba a ver cerca del duque Jungkook? Ese era el hombre con el que ella pensaba casar a Heejoo y no debía siquiera imaginar estar en el mismo lugar que él, pero su mente era tan traicionera que se encontró mirando a la pista donde bailaba el duque Seokjin y Jimin bailando con el deseo de bailar.

Jungkook se encontró su puchero tan tierno que no dudo en tomar su mano y llevarlo a la pista de baile.

—L-Lord, ¿Que hace?

—Se que quieres bailar, no se tu nombre, pero ahora mismo los miras como un niño que quiere un dulce y yo quiero dártelo—estaban un poco cerca de ellos cuando el duque se detuvo y atrajo a Yoongi cerca.

Para los demás esa imagen era tan extraña como despreciable, ¿Un duque de alta clase junto con nada más ni nada menos que un sirviente? Incluso sus vestimentas hacían un gran contraste, seda de la más finas junto con la tela más barata pero resistente y cocida que la madre de Yoongi le pudo conseguir.

Era su mejor ropa.

Yoongi no quiso mirar, ya era demasiada humillación, pero Jungkook lo hizo mirarlo y se olvidó incluso que Jimin —que bailaba cerca de allí— pudiera verlo.

—Espera

Yoongi dejo de contar lo que había pasado para ver al pelirrosa, justo ahora llevaba su pijama de seda y ambos estaban sentados en la cama de Jimin.

— ¿Estaban cerca de nosotros?

—Éramos las únicas parejas bailando—recalco Yoongi y Jimin seguía perdido.

—Yo no recuero verte

—Estabas ocupado pensando en el duque Seokjin

—Sigamos—pidió rápidamente el pelirrosa causando la sonrisa divertida del pálido.

—Como decía...

—La gente siempre criticara, ¿Por qué no le damos una razón para hablar? —la mano de Jungkook se deslizo por su cintura y lo guio por la pista viendo los ojos de Yoongi como los de un cachorro asustado, pero a la vez emocionado. — ¿Como te llamas?

—Yoongi, Min Yoongi soy un sirviente, mi lord

—Yoongi—susurro y sonrió. — ¿Estas casado?

—No... espere, ¿Qué?

—Genial, me sorprende que aún no lo estes, pero yo tampoco lo estoy

— ¿Por qué dice que es genial, mi Lord?

—Es obvio—Jungkook lo acerco más y bajo un poco su cabeza poniendo peor de nervioso al pálido. —Tengo la vía libre para ver más de cerca esos ojos de gatito que tienes, así que espero captar tu interés y tu corazón antes que otros, gatito

Las mejillas del rubio se sonrojaron, ¿El duque lo llamo por un apodo tierno? ¿Lo veía como un gato y por eso quería su corazón?

—No bromee con eso, duque Jungkook por favor

—Dime, Yoongi ¿Que duque bailaría con un sirviente donde hasta el rey le está viendo? —Yoongi iba responder, pero Jungkook no lo dejo hablar. —Exacto uno que no le importa lo que hablen y que solo quiere ver más de cerca esa carita de gatito, no estoy bromeando así que para que me creas—le dio una vuelta y lo acerco nuevamente a su cuerpo. —Iré a tu casa y si tengo que ganarme a tus padres y rogarte a ti toda una vida lo hare

—Yo... no creo que eso pueda pasar

—Pues yo lo hare posible, Yoongi—cuando la música se detuvo no se alejó si no que lo acerco aún más. —Suelo ser muy insistente, gatito—sonrió mostrando sus dientes delanteros y los ojos de Yoongi brillaron viendo lo tierno y hermoso que el duque se veía dedicándole una sonrisa.

Pedía con fuerza que él no estuviese mintiendo.

—Y antes que tú y el duque llegaran ya habíamos llegado con los reyes—termino de contar Yoongi sintiendo sus mejillas rojas mientras que Jimin lo observaba.

— ¿Entonces?

— ¿Entonces qué?

— ¿Le harás caso a ese duque? Se ve que de verdad quiere tener tu mano, gatito

Yoongi negó con la cara roja.

—No creo que lo diga de verdad, seguro que mañana ni viene

—Yo sí creo que vendrá, por cierto, el ya no viejo verde de Seokjin vendrá todos los días o por lo menos todos los que me toque clase de historia

— ¿Que el duque qué?

—Si, se ofreció a ayudarme a no aburrirme, pero le dije que era una excusa para que pudiera venir sin problemas a casa así que estas libres de mi en ese tiempo

— ¿No que no te querías casar?

— ¿Con ese papasito no dudarías? Voy a conocerlo y si a final de esos 3 meses me conviene me voy a casar, pero—Yoongi lo miro confundido. —Si me caso, ¿Tu vivirás conmigo?

—Como tu sirviente tengo el deber de seguir hasta el día en que yo muera

— ¿Y si de casualidad de la vida te casas con el duque de apodos lindos?

—Eso no...

—Dije casualidad de la vida

Yoongi rodo los ojos, el duque Jungkook era igual que Jimin.

—Si eso pasa, entonces no viviré contigo, pero de que si te visitare luego de 3 meses lo hare

— ¿3 meses? ¿Por qué tanto tiempo?

— ¿Quién irrumpe en la casa de recién casados? Después de 3 meses es más que suficiente, estarás muy ocupado—Jimin seguía confundido por unos segundos hasta que sus mejillas se sonrojaron.

¿En serio le daría su primera vez al duque?

¿Y qué pensaba hacer si se casaban o en su primera noche? ¿Jugar a las cartas todas las noches? ¿Darse las manos como dos pubertos?

Si quiera había pensado en darle su primer beso.

Y si, era universitario, pero traía tantos problemas que hasta para dar su primer beso los atrajo. Si Jimin empezaba a contar todas las experiencias que tenía no acabaría hoy.

—No pensemos eso, mejor centrémonos en que debes estar presentable para cuando tu enamorado venga

—El duque Jungkook no es mi enamorado, seguro se cansará al ver en las condiciones que vivo—Yoongi lo dijo y deseo al mismo tiempo equivocarse. —Aparte sabes que Lady Lore planea

—Que me importa que trame esa señora, deberías, aunque sea dale una oportunidad

Yoongi lo pensó y negó levantándose.

—Es hora de dormir, así que iré a dormir—evito mirar a Jimin y se escabullo de la habitación escuchando la risa de fondo del pelirrosa. 

Yoongi camino por los pasillos de aquella mansión iluminados por las lámparas, su mente estaba metida en lo que había pasado hace unas horas que no se dio cuenta cuando la sirvienta de Lady Lore salió de la habitación y se detuvo frente a él.

—Lady Lore quiere hablar contigo

Yoongi detuvo su andar y sintió su espíritu salir de su cuerpo al ver a Mary, la sirvienta de Lady Lore, que ya estaba cerca como para volver a la habitación de Jimin.

Trago duro y dejo que Mary abriera la puerta para ingresar, dentro hacia frio o así reacciono su cuerpo erizándose como si tuviera un escalofrió y es que estar cerca de Lore era de película.

—Yoongi

— ¿Si, mi Lady?

— ¿Por qué bailaste con el duque?

—Yo...

—Espero que no olvides tu posición, tu no debes siquiera soñar en respirar el mismo aire que el duque—Lore estaba aplicándose una crema olorosa en los brazos sabiendo que pronto pasaría a la habitación que compartía con su esposo. —Te daré el placer de quedarte con los recuerdos de hoy, pero, recuerda que el duque se casara con Heejoo así que lo único que le dirás al duque es que estas comprometido y que no quieres nada que ver con el

Yoongi no subió la mirada, pero sintió su corazón estrujándose, el rubio ya se había ilusionado con él.

—Escúchame, si tienes que ser descortés u osado, lo serás, pero cortaras las alas del duque, ¿Me escuchaste?

—Si, mi Lady—dijo sabiendo que su corazón no cumpliría al 100% con eso.

—Retirare y que no se te olvide—Yoongi no respondió, pero hizo una inclinación y salió de allí sintiendo su corazón destrozarse.

Estúpido corazón, apenas una noche y se había ilusionado locamente.

Pero sabía muy bien que no llegaría a ningún lado. 

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Disfruten uwu

—Kim ♪