El amanecer de un nuevo había llegado, la luz del sol entraba por las ventanas en donde se veía a una mujer de cabellera negra dormir sobre una especie de computadora, tenía su cabellos totalmente esponjado y se le caí un poco de baba encima del teclado, hasta que rayos de luz le dieron en la cara despertandola poco a poco.

Yoriko: "5 minutos más...mmm", dijo levantándose un poco. "Me quedé dormida otra vez en el computador aparentemente", dijo volviendo a dormir pero se levantó de golpe al ver de reojo la insignia. "¡Mier...", se tapo la boca para ver si la niña aún dormía en la cama, suspiro al verla ahí. "Me salve, no puedo permitir que se entere de esto, así que lo guardaré por ahora", dijo apagando el computador y regresando el libro a la estantería haciendo que todo volviera a la normalidad.

Eri comenzó a despertar lentamente mientras la mujer se le acercaba con un sonrisa.

Yoriko: "Buenos días Eri, ¿qué tal dormiste?", preguntó con una dulce sonrisa.

Eri: "Bien...", dijo un poco nerviosa.

Yoriko: "Me alegra mucho, vamos a desayunar, te quiero presentar a alguien", dijo amable confundiendo a la niña.

La pequeña siguió a la mujer a través de la casa hasta llegar a la cocina en donde sentó a Eri mientras ella se dirigía al refrigerador y tomaba algunas huevos, para posteriormente dirigirse a un y tomar una sartén cercana, comenzó a cocinar unos huevos revueltos ante la mirada atenta de la niña.

Pasado unos minutos se vio llegar a Momo a la cocina, quien se notaba algo cansada, como si no hubiera dormido bien, quien al notar la presencia de la niña quien se le quedó viendo para salir rápido de la cocina.

Momo: "(Apenas me ve y ya doy una impresión tan deplorable)", pensó lamentándose.

Yoriko: "¡Momo, ven, el desayuno ya casi está listo!", grito asustando un poco a la mencionada.

Momo: "¡Ya voy!", grito no tan fuerte para disimular que no estaba cerca, quería tener tiempo para arreglarse y no verse tan floja.

Yoriko: "¡Te vi entrar en la cocina, no me engañas!", grito.

Momo: "Diablos", dijo para entrar con un leve sonrojo.

Eri se veía un poco asustada, se había familiarizado con Yoriko, pero no conocía a la recién llegada.

Yoriko: "Eri, ella es Momo, mi hija, es una persona muy amable, aunque suele estar mejor arreglada otros dias", dijo con una sonrisa un poco burlesca.

Momo: "Madre...", dijo avergonzada.

Yoriko: "Como decía, ella te estará cuidando hoy, mientras yo me ocupo de algunas cosas de mi trabajo", dijo con tranquilidad.

Eri: "¿Ella me cuidara?", preguntó sorprendida.

Momo: "Madre, yo no creo ser capaz de cuidar de ella, al menos no sola", dijo preocupada.

Yoriko: "Momo, eres lo suficientemente responsable como para poder cuidar de una niña, cree un poco en ti misma, si sientes que es mucha carga, llama a alguno de los mayordomos o criadas, estarán felices de ayudar", dijo con una sonrisa.

Momo: "No estoy segura", dijo algo caída pero recibió un pequeño golpe en su cabeza.

Yoriko: "Sin ánimos bajos, tu puedes ¿me oíste?", dijo fingiendo estar molesta, pero no lograba ocultar su sonrisa gentil.

Momo se le quedó viendo unos instantes, hasta que asintió alegrando a la pelinegra de mayor edad.

Yoriko: "Eri, tal vez te asuste un poco que no esté, pero confía en mí hija, te prometo regresar antes de que llegue el atardecer, lo juro por el meñique", dijo extendiendo su meñique.

Eri: "¿Por el...meñique?", preguntó ladeando la cabeza.

Yoriko: "Si dos personas juntan sus meñiques están haciendo una promesa que ambos deben de cumplir, yo aunque vaya a salir prometo que regresaré antes del atardecer, tu parte de la promesa es estar aquí para cuando regrese ¿te parece bien?", explicó gentilmente.

Eri: "Entonces lo prometo por el meñique", dijo extendiendo su meñique.

Yoriko: "Buena niña, las dejo, que debo hacer cosas importantes", dijo retirándose mientras Eri y Momo volvían a desayunar en un silencio un poco incómodo.

Yoriko siguió caminando hasta llegar a una puerta que llevó a lo que aprecia ser un garaje, al abrir se veía la sombra de un camión, encendiendo las luces reveló la apariencia de este siendo un camión de color naranja con un remolque blanco con pasto y flores dibujados y teniendo un texto que dice "FLOWERS AND MORE FLOWERS" que se traduciría como Flores y Más Flores.

Yoriko: "Hola amiga, ¿lista para un paseo?", preguntó posando su mano en la puerta para posteriormente entrar. "Mi esposo me va a matar si se entera de lo que voy a hacer...bueno, no se tiene que enterar", dijo encendiendo el camión mientras presionaba un botón que hizo que las puertas del garaje se comenzarán a abrir.

El camión salió del garaje de la mansión el cual si no fuera por el tamaño de la mansión, se podría considerar un hogar, Yoriko manejo hasta la entrada en donde tuvo que presionar otro botón para que las puertas de la entrada se abrieran.

Yoriko: "La barda y la gran puerta es por seguridad, seguridad un Vulpimancer", dijo molesta por tener que esperar a que las puertas se abran.

Fuera de su momento de enojo la mujer comenzó a conducir con tranquilidad escuchando un poco de música mientras veía un poco su alrededor, un parque con niños jugando, algunos puestos de comida con jóvenes disfrutando su juventud, etc, le traía cierta calma para poder embozar una sonrisa gentil.

Se detuvo frente a lo que parecía ser una florería común y corriente con un cartel que tenía las mismas palabras que el camión, lo que era raro es que la florería estaba totalmente cerrada con un papel que decía "De vacaciones hasta nuevo aviso" y a lado tenía el dibujo de una especie de persona planta carnívora con raíces como piernas y de un solo ojo que estaba sentada en una silla de playa y tenía unos lentes de sol.

Yoriko: "Veamos, las llaves de la florería están...", dijo buscando entre los compartimientos que tenia frente suya. "Aquí están, hora de trabajar", dijo tranquila saliendo del camión.

Yoriko camino hasta la puerta de la florería mientras silbaba y usaba las llaves para abrir, se adentro en la tienda y volvió a cerrar, salto sobre el mostrador para presionar una serie de botones debajo de este, al hacerlo se abrió una puerta en la pared a lo que parecía ser un elevador iluminado en una luz verde, en el que entró como si fuera lo más normal del mundo, sacó la extraña insignia con el reloj de arena verde y la puso frente a un panel en el elevador para que este se cerrará y comenzará a bajar lentamente.

Yoriko: "Y el elevador es lento...y ni siquiera hay música", dijo con lagrimas de sufrimiento.

Cuando por fin el elevador llegó hasta abajo donde quería llegar revelando una especie de centro de operaciones en donde el color predominante era el verde, enta central había personas y algunos seres que no parecían humanos caminar bastante rápido de un punto a otro, lo que compartían era que llevaban una especie de armadura blanca con algunos círculos rojos.

Yoriko: "Wow, ¿Qué sucede aquí?", preguntó sorprendida.

Pero un especie de topo humanoide con un gran bigote choco con ella evitando su avanzar.

???: "Lo siento pero tengo prisa", se disculpo para ir a un computador.

Yoriko: "La cosa si que esta agitada si Jerry de recursos humanos está apurado", dijo sorprendida nombrando al que choco con ella.

???: "Estamos en una situación extraña, por lo que tu deberías estar ayudando también", dijo una voz intimidante detrás de Yoriko.

La mujer al voltear se encontró con una criatura humanoide de gran tamaño, su piel era de color blanca y garras negras, portaba una armadura de su tamaño blanca como la de los demás, su cabeza era triangular, con una parte de color morado y cuatro ojos de color rojo, este ser al ver a la mujer detenidamente se sorprendió.

???: "Agente Kondo, lamento mi falta de respeto", dijo avergonzado.

Yoriko: "(Hace mucho que no se me dirigen por mi viejo apellido)", pensó con una sonrisa. "Tranquilo, no te preocupes, aunque, no me suena que hubiera un Highbreed aquí antes", dijo intentando hacer memoria.

Neu: "Mi nombre es Neu, me uní a los Plomeros poco después de que se retirara, es un honor poder conocerla en persona, yo y mi gente estamos en deuda con usted", dijo cordialmente.

Yoriko: "No me estimes tanto", dijo con una risa nerviosa. "Hablando en serio, ¿Qué sucede?", preguntó confundida.

Neu: "Hace dos días aproximadamente a las 22 horas una nave no identificada paso cerca de la orbita de la tierra siendo captada por uno de nuestros satélites, por la tecnología parecía ser una nave Mecamorfa Galvánica", dijo mostrando en una pantalla cercana la nave. "Pero gracias a ciertos invitados no deseados nos podemos hacer una idea de que puede estar sucediendo", dijo serio mostrando la imagen de un dron de color naranja.

Yoriko: "Vilgax", dijo seria.

Neu: "Así es, creemos que Vilgax busca conquistar la tierra, el Mecamorfo Galvánico que conducía la nave tal vez se entero de esto de alguna forma y trato de advertirnos viniendo a la tierra, pero entre las imágenes que tenemos vemos que Vilgax lo siguió y posiblemente para eliminar a esta posible amenaza en sus planes lanzó su mejor ataque para garantizar la destrucción de su objetivo, los extraños meteoritos que han estado cayendo han sido partes de la nave resultado del ataque de la nave de Vilgax, un escombro de la nave dio al satélite, por lo que son todas las imágenes que tenemos", dijo mostrando varias imágenes de lo sucedido hasta que la último parecía estar repleta totalmente de estática.

Yoriko: "Ese maldito, no importa cuántas veces se le derrote, siempre vuelve", dijo con notable enojo.

Nue: "Actualmente la agente Sosaki lleva a cabo la misión de investigar los restos de la nave que han caído en la tierra en busca de alguna pista que nos proporcione más información, se que usted ya es una plomero retirada, pero yo...no, nosotros apreciaríamos que nos apoyara en esta investigación, según los informes usted ya ha tenido encuentros con Vilgax en el pasado, requerimos su ayuda en esta situación", dijo serio.

Yoriko: "Agradezco mucho que se me reconozca, pero la verdad no se como ayudar, que Vilgax dejara escapar a alguien que podría arruinar sus planes es extraño", dijo pensativa. "(A no ser que en realidad estuviera cazando a este Mecamorfo Galvanico porque tenía algo que quería, ¿Pero qué es lo que quería?)", pensó buscando otra solución.

De repente una señal de alarma se hizo presente, sorprendiendo a todos.

Nue: "Algo acaba de atravesar la atmósfera, su punto de origen parece ser la zona en donde se detecto la nave de Vilgax", dijo serio usando el computador.

Yoriko: "Su punto de impacto es...", dijo analizando la información pero sus ojos se abrieron de par en par. "...no...", dijo para correr hacia el elevador golpeando el panel haciendo que unos pequeños ratos salieran de este.

El elevador se activo y sorpresivamente a diferencia de antes iba a una mayor velocidad que llevó con rapidez a Yoriko.

Neu: "Necesito a algún plomero cercano vaya a la posible zona de impacto, debemos de manejar posibles amenazas", dijo serio movilizando a los presentes.

Yoriko: "Yo me haré cargo", dijo a través de un comunicador.

Nue: "Necesitará ayuda, no sabemos que peligro se puede presentar", dijo serio.

Yoriko: "Ya he enfrentado a Vilgax y sus robots, no me puede sorprender", dijo saliendo de la tienda para subir a su camión.

Nue: "...Esta bien, contamos con usted, solicite ayuda si lo ve necesario y de un informe si solventa la situación agente Kondo", dijo serio.

Yoriko: "Entendido, por cierto, ahora soy Yoriko Yaoyorozu", dijo mientras pisaba con fuerza el acelerador.

Cambiando de escena se puede ver a Momo y Eri caminando en un bosque que se encontraba un poco detrás de la mansión.

Momo: "Entonces Eri, ¿tienes algo que te guste?", preguntó nerviosa.

Eri simplemente bajo la mirada con nerviosismo.

Eri: "L-las manzanas", dijo nerviosa.

Momo: "Ya veo, es bueno que te gusten las frutas", dijo con una sonrisa. "(Siento que no le agrado)", dijo algo decaída.

Eri: "Y-y-y", dijo nerviosa llamando la atención de la joven. "¿A-a ti que te gusta?", preguntó temblorosa.

Momo se sorprendió un poco pero dio una ligera sonrisa.

Momo: "A mi me gusta leer", dijo feliz.

La niña dio una pequeña sonrisa nerviosa al ver como la pelinegra le había respondido, pese a que no había una gran relación entre ambas, parecía ser un buen inicio el poder intercambiar unas pocas palabras, Momo alzó un poco la mirada para tener una mirada sorprendida, en un rápido movimiento cargo a Eri mientras comenzaba a correr sorprendiendo a esta misma quien alzó la mirada para ver como una especie de bola de fuego caía dirección a donde estaban, al impactar logró generar una fuerte onda de impacto que sacó volando a ambas pero por suerte Momo se alejo lo suficiente para que las heridas no fueran a mayor.

Eri: "¿Q-qué pasó?", preguntó confundida levantándose un poco.

Momo: "No lo sé", dijo cubriendo a Eri de cualquier peligro.

No muy lejos de ellas se podía notar un cráter causado por lo que sea que haya caído, humo salía de dicho cráter, peor en un momento una especie de garra metálica salió de entre el humo asustando un poco a ambas que estaban presente.

La garra se alzó mientras una sombra se hacía presente, era un tipo de robot de colores naranja, tenía 3 patas con las que se mantenía en pie, brazos con lo que parecían ser garras y una parte extraña en lo que se podría considerar palmas, lo que más resaltaba era los ojos del robot que brillaba en un color rojo.

Momo: "Eri, guarda silencio, no se que sea eso, pero parece que aún no nos ve", dijo en voz baja a lo que la niña asintió.

Momo se levantó con cuidado intentando no hacer ningún ruido, cosa que logró de milagro, ahora procedía a ayudar a Eri a levantarse dándole la mano.

En ese momento el robot dirigió su mirada hacia donde estaban helando la sangre de la mayor al notar eso, el robot no parecía hacer ningún movimiento, solo las veía, como lo veía el robot era con un puntero analizar los brazos de la joven al no detectar lo que quería paso a analizar los de la niña, fijando el reloj que portaba, el robot alzó la mano mientras comenzaba a brillar en un tono rojizo.

Momo: "¡Eri corre!", grito mientras generaba un escudo con su quirk.

Eri hizo exactamente lo que se le dijo mientras el robot le apuntaba para posteriormente disparar un rayo de energía, Momo logró ponerse enfrente de Eri para intentar detener el ataque, un brillo cegador se hizo presente en ese instante.

Momo perdió la consciencia unos cuantos segundos, estaba en el suelo y enfrente de ella el escudo que hizo pero derretido se levantó lentamente pero al apoyarse en sus manos sintió dolor, ssus manos se habían quemado.

Momo: "(Ese laser destruyó con facilidad mi escudo)", pensó sorprendida.

Eri: "¡Señorita!", grito preocupada deteniendo su correr.

Momo: "¡No te detengas Eri, estaré bien!", grito seria.

Pero grande fue su sorpresa al ver como el robot ya estaba a nada de llegar a ella, por el miedo solo pudo tomar una postura defensiva cerrando los ojos, pero el robot pasó totalmente de ella caminando encima de ella como si no le importara.

Momo: "¿Q-qué?", preguntó confundida hasta que noto que el robot iba a por Eri.

Mono trato de pararse pero sus piernas no se lo permitían, estaba asustada, muy asustada, solo podía ver las quemaduras que tenia en sus manos con impotencia, quería intentar ayudar pero su cuerpo no reaccionaba.

Yoriko: "Se como una hermana mayor"

Las palabras de su madre le llegaron a la mente haciendo que dejara de temblar un poco.

Momo: "U-una hermana mayor, debería de cuidar de su hermanita, sea o no mi hermana, debo cuidar de los que son más pequeños que yo", dijo creando un palo de metal que usaba de apoyo para pararse.

Momo una vez de pie comenzó a correr hasta llegar a la pata trasera a la que comenzó a dar varios golpes con el palo pra intentar por lo menos llamar su atención, pero por más golpes que diera el robot la ignoraba estando muy cerca de alcanzar a Eri, la joven al ver eso decidió dejar de dar golpes con el palo para clavarlo en la pata haciendo que algunos rayos salieran.

El robot dio algunos movimientos erráticos por la falla que generó dicho ataque, por lo que de un golpe lanzó a Momo contra un árbol dejándola apenas consciente, pero aún así la falla en su pata hizo que perdiera el equilibrio para posteriormente cae contra el suelo, por su peso género un pequeño temblor que tiro a Eri quien por la caída hizo que el reloj que tenía en su muñeca chocará contra el suelo activan una especie de holograma rosa.

Eri: "¿Q-qué es esto?", preguntó confundida y asustada viendo el reloj.

Momo: "E-eri...c-corre", dijo extendiendo su mano tratando de mantener la consciencia.

El robot se había levantado mientras extendía su mano para atrapar a la pequeña, quien apenas notó como una sombra la comenzaba a tapar alzó la mirada para ver la garra del robot, asustada hizo lo único que pudo, cruzar sus brazos para intentar protegerse, pero por accidente presionó el reloj haciendo que una fuerte luz rosa se manifestará mientras la garra la aplastaba.

Momo: "¡N-no!", grito preocupada y adolorida arrastrándose como podía hacía donde estaba Eri.

Pero la mirada preocupada de la chica se volvió una de sorpresa al ver como la garra se estaba levantando lentamente, se veía a una figura humanoide que parecía una mujer tigre de pelaje blanco que usaba ropa y un antifaz de color rojo, con grandes garras por encima de sus manos y un cinturón con lo que parecía ser el reloj que portaba Eri.

¿Eri?: "¡Déjame decirte algo robot que me cuatruplica el tamaño, meterte con una niña y una adolescente te hacen ver de forma patética, por lo que Tigresa te pateara el trasero robotico que tienes!", grito enojada dando un fuerte empujón que hizo que el robot perdiera el equilibrio.

Momo: "(¿Quién es esa persona?, de repente una luz rosa se hizo presente pero Eri ya no está, ¿qué esta pasando?)", preguntaba mentalmente pero estaba tan agotada y herida que no aguanto más y se desmayo.

El robot logró recuperar la postura y cargo un disparo contra la que se denominó Tigresa, pero esta tomando carrerilla dio un fuerte salto hacia el brazo del robot comenzando a golpearlo con sus garras dañandolo mucho.

Tigresa: "¡Te destruiré y te venderé como chatarra!", grito molesta dando una ráfaga de golpes.

Por su concentración en dar golpes, Tigresa no noto cuando la otra mano del robot se acerco tirandola contra el suelo y apuntandole con su otro brazo para dispararle el daño de energía, humo salía de donde había caído Tigresa, pero una sombra se movió a gran velocidad cortando la pata trasera del robot haciendo que este perdiera mucho el equilibrio.

Tigresa: "¡Si crees que eso basta para derrotar a Tigresa estas muy equivocado, nada puede derrotar a Tigresa, ¿oíste?!", grito molesta comenzando a escalar el robot.

El robot intentaba golpearla con sus garras, pero Tigresa las esquivaba con facilidad, llegó hasta la cabeza en donde con sus garras comenzó a arrancar pedazos de metal como si de papel se tratará, el robot trataba de quitársela de encima, pero estaba lejos del alcance de sus manos y por más que se agitara se no se caí, no podía hacer movimientos más bruscos ya que perdería el poco equilibrio que tenía.

Tigresa: "Pero que tenemos aquí, un lindo cableado, que pasaría si lo arranco", dijo enojada jalando los cables a los que llego tras arrancar las piezas de metal.

Lo que no esperaba es que una fuerte descarga eléctrica recorriera su cuerpo al arrancar los cables, los ojos rojos del robot se habían apagado mientras que los brazos de este caían hacia abajo.

Tigresa: "Te dije que nada derrotaba a Tigresa...oh ¿es hora de la siesta?", preguntó cayendo dormida mientras caía al suelo.

Al caer solo se acomodó para estar en una posición más cómoda para dormir, de repente el reloj en su cinturón comenzó a brillar a momentos de color rojo para que una luz rosa saliera nuevamente dejando a Eri dormida en la misma posición que había tomado Tigresa.

De repente el camión de Yoriko llegó derrapando, este se detuvo y de este salió la mujer con una mirada preocupada.

Yoriko: "¡Momo, Eri!", grito preocupada al visualizar a ambas chicas.

Fue con rapidez a donde su hija preocupada revisando su pulso y respiración, al ver que aún estaba viva dio un fuerte suspiro de alivio, cargo a su hija en su espalda para ir a por Eri quien simplemente estaba dormida, la cargo como pudo para dirigirse al camión.

Yoriko: "(Es un milagro que ambas están bien, pero...)", dijo viendo el robot que estaba totalmente quieto. "(¿Quién las salvo?, esos robots de Vilgax no son tan fáciles de vencer, alguien con un quirk eléctrico o un alien tal vez, no, algo con mucha fuerza lo enfrento, los daños que recibió son de fuerza bruta)", pensó analizando la situación.

Yoriko llevó al coche a ambas chicas y les puso el cinturón para subirse y presionar un botón que activo una pantalla en el vehículo.

Yoriko: "Requiero apoyo, una maquina autónoma identificada como parte del armamento de Vilgax cayó en la tierra, mando la ubicación para control de daños, además de que se requiere ayuda médica, una persona se vio herida en la llegada de esta armada, actualmente se encuentra desactivada, no de cuanto tiempo lo esté, así que de ser posible traigan un equipo lo antes posible", dijo seria a través del comunicar mientras presionaba la pantalla. "(Algo esta pasando, Vilgax normalmente enviaría solo drones exploradores, pero enviar ya un robot de batalla, algo grande esta pasando, tal vez deba visitar a esa agente Sosaki, pero primero resguardare a mi hija y a Eri)", pensó dirigiendo una mirada preocupada a ambas, fijándose más en Momo quien tenía las heridas más notorias.

En algún lugar, en lo que parecía ser un bar con individuos muy variados se veía a una persona de gran tamaño encapuchada, se encontraba comiendo, hasta que una especie de insecto gigante de piel verdosa se le acercó volando.

Insecto: "Tu eres ese famoso cazador ¿verdad?", preguntó serio.

???: "¿Y que si lo soy?", preguntó indiferente.

Insecto: "Verás, quiero que te encargues de cierto objetivo", dijo serio mostrando unas especie de gemas.

???: "Soy un cazador, no un sicario, además ya tengo una presa", dijo parándose dejando en la barra unas gemas idénticas a las que el insecto tenía.

El encapuchado salió del bar siendo seguido por el insecto.

Insecto: "Espera, te pagaré el doble, enserio necesito ayuda", dijo desesperado.

???: "Consiguete a otro y deja de molestarme", dijo serio.

Insecto: "El triple, te daré el triple", dijo aún más desesperado.

El encapuchado se detuvo sacandole una sonrisa al insecto, pero de repente el sonido de un silbido se hizo presente, el insecto de repente fue tacleado a un callejón cercano por una criatura que no se logró ver mientras un leve brillo rojo se hacía presente, gritos de desesperación se hicieron presentes.

???: "Te dije que tenia una presa y será la más difícil que tendré hasta ahora", dijo serio caminado hacia una nave de gran tamaño.

Continuará...