Capítulo 4

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Este nuevo día no resultaba ser nada interesante, ya era sábado y no quería hacer nada, solo quería seguir durmiendo. Aún así dejé la pereza y fui a preparar el almuerzo que se basaba en ensalada, carne a la plancha y puré de zanahorias. en cuanto terminé serví y me dispuse a comer tranquilamente hasta que el teléfono me interrumpió; Fui a contestar y se trataba del conserje informando que mi padre había llegado, yo le indiqué que lo dejara pasar.

A los cinco minutos mi padre ya se encontraba en el sofá del salón principal junto a Zoe y Thomas, en cuanto mi hermano me vio fue directamente a mis brazos y yo lo agarré fuertemente mientras le daba vueltas en el aire causándole gracia.

— Hola, que bueno tenerlos aquí —. dije saludándolos mientras le hacía cariños a Thom.

— Clarisse ¿cómo has estado?—. Pregunta Zoe amablemente.

— Bien ¿y tu?

— Bien, perdónanos por venir sin avisarte, quizás estés cansada—. mi padre le da la razón a su esposa en cuanto a esto y al igual que ella, también se excusa.

— No se preocupen, ¿quieren almorzar?

— No, gracias cariño. ya almorzamos—. Responde mi progenitor, sonriente.

— En realidad queremos pedirte un favor, tu padre y yo debemos trabajar hasta las nueve p.m y no tenemos quien cuide a Thom.

— No se preocupen por eso, saben que siempre y cuando pueda con gusto los ayudaré —. los tranquilizo.—Yo encantada de quedarme con mi hermano.

— Gracias mi amor, sabíamos que podíamos contar contigo.

— Clari aquí está todo por si necesitas cambiarle el pañal, también están sus biberones y juguetes.

— Lo cuidaré muy bien, está en buenas manos.

— Gracias de nuevo, lo sabemos—. Dijeron los dos al tiempo, se despidieron de Thomas y de mi y por último partieron rumbo al hospital.

— Sist ¿quieres jugar conmigo?

— Claro que si, pero espera termino de almorzar—. Mi hermano asiente y yo continúo con mi almuerzo. Cuando termino lavo los platos y me dirijo de nuevo al salón para jugar con él.

Pasamos la mayor parte de la tarde jugando, riendo y viendo caricaturas, hasta que el pequeño se cansó. Lo llevé a mi habitación, lo recosté en mi cama y bajé de nuevo a organizar el salón el cual estaba echo un desastre. A continuación subí a bañarme y ya lista me vestí, tomé mi computador y me recosté en la cama junto a mi pequeño hermano ya que debía escribir el ensayo del proyecto que haría con Abi y allí estaba cómoda.

Según habíamos planeado, Abi haría la presentación y exposición mientras que yo me encargaba del ensayo, ya que soy buena con la redacción. Cuando dieron las ocho y treinta p.m tenía todo listo y se lo envié a Abigail para que lo revisará e indicara que debía agregar o si estaba bien así.

Thom se despertó debido a que tenía hambre, lo bajé cargado y lo senté en una de las sillas del comedor mientras le daba su puré de frutas, una vez terminé lo dejé en el sillón jugando mientras yo comía. Mi padre llegó a la hora prometida por Thom y este solo se rehusaba a irse, al final mi padre lo convenció prometiendo traerlo de nuevo, antes de irse mi padre me pidió que fuera mañana por una reunión que habría con sus amigos y colegas, así que debía estar desde la hora del almuerzo para ayudarles con todo.

Se marcharon y yo me dirigí a mi habitación, revisé mi teléfono celular, el cual tenía varios mensajes de Samuel y Adam. Respondí en orden.

Samuel: Hey Clarisse, ¿que hará mañana?

Clarisse: A la hora del almuerzo debo ir donde mi padre, ¿porqué?

Samuel: Quería invitarla a mi Orfanato, también vendrá Emma y puede traer a Adam si lo desea.

Clarisse: Bien allí estaré, espera... ¿Adam?

Samuel: Si :D el muchacho me cae bastante bien.

Clarisse: Jaja okay. ¿A que hora?

Samuel: 8:30 a.m, así que a madrugar señorita.

Clarisse: Allá nos vemos entonces—. cerré la conversación y abrí el mensaje de Adam.

Adam: ¿Que tal tu día? Espero que te estés adaptando a Londres. :)

Clarisse: Bien, hoy cuidé a mi hermano pequeño. Si me estoy adaptando poco a poco, aunque no es la primera vez que vengo a Londres, solía venir todos los veranos por vacaciones.

Adam: Me alegro mucho, no hay nada como la familia. Oye no me habías contado esa parte.

Clarisse: Soy más bien reservada, poco a poco irás conociendo más de mi. ¿Que tal tu día?.

Adam: Eso espero. Yo realmente no hice sino dormir, estaba bastante cansado.

Clarisse: Está bien que descanses después de una semana dura. ¿Quisieras acompañarme mañana a la fundación de Samuel?.

Adam: Pues si Samuel quiere que esté allí, desde luego iré.

Clarisse: De hecho... él fue quien me sugirió que te invitara, le caes bastante bien.

Adam: Wow él y la rubia son grandes personas y muy divertidos, allí estaré.

Clarisse: Se llama Emma. ¡Oh! ósea que yo no lo soy >-<

Adam: ¡No dije eso! lo eres y es más, hay muchos otros calificativos para describirte —. Al leer su mensaje no puedo evitar sonrojarme y como no sé que más decir, ignoro esa parte.

Clarisse: Entonces... nos vemos mañana.

Adam: Pero que cambio tan repentino, ¿te molestó algo?

Clarisse: Solo es que tengo sueño.

Adam: Ve a descansar, mañana nos vemos.— Leo su mensaje y luego dejo el teléfono celular en la mesa de noche y me duermo tranquilamente.

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Al otro día me despierta la alarma a las siete y treinta de la mañana, me levanto y me dirijo al baño para alistarme, una vez lista desayuno y luego le envío un mensaje a Samuel para que me indicara la dirección, no tardó en enviármela, se la envié a Adam también y salí a tomar un taxi para no demorarme tanto. Llegué al fin y entré en ese amplio lugar encontrándome con niños de cinco a 14 años jugando en el patio, algunos al verme se acercaron, me saludaron con la mano y otros siguieron con sus actividades.

— Hola, ¿vienes a adoptar?—. pregunta acercándose una niña de aproximadamente seis años.

— Hola nena —. le respondo amablemente.— No, vengo a ayudar a un amigo, Samuel.

— El fundador, si quieres te puedo llevar con él.

— Claro, vamos.

Durante el camino a la oficina me la pasé hablando con la nena, se llama Georgina, tiene seis años, es muy habladora, es tierna y en cuanto al físico es de estatura promedio, cabellos castaño y facciones suaves. Georgina me lleva a conocer todo el orfanato y por fin me deja en la oficina de Samuel. La pequeña sonríe y luego se marcha dejándome con mis amigos, yo me acerco y los abrazo a cada uno.

— Me alegro que halla venido Clarisse —. Me recibe Samuel emocionado.— Quería que conociera el lugar y también que los chicos se divirtieran un poco.

— Gracias a ti por invitarme, estoy muy feliz de estar aquí y alegrar un rato a todos los niños.

 — Clari... — Me saluda Adam un poco tímido.

— Adam, al parecer lograste llegar antes...—. él se ríe y nos dirigimos al patio junto con Emma y Samuel para jugar un rato y hacer actividades recreativas con los niños. 

Todo lo que se escuchaba eran gritos y risas llenas de alegría y yo simplemente no podía ser más feliz de lo que era en ese momento. todos los niños estaban muy enérgicos y es claro que se divirtieron bastante, pero lastimosamente ya debía irme debido al compromiso con mi padre y sus amigos. Aproveché unos momentos antes para llamar a mi padre y preguntarle si podría ir con mis amigos, él solo me respondió que no había problema y que mucho mejor si iban más personas. Así que no dudé en preguntarles.

— Chicos mi padre tiene una reunión en su casa, ¿quieren acompañarme?.

— A mi me encantaría si no es problema...

— Claro que no, entre más mucho mejor y mi padre estará encantado de conocerles y mi hermano... pues ni hablar, ese chico es bastante amigable.—le interrumpo a Emma

 — Entonces  por mi parte, me apunto.

— ¿Samuel?

— Está bien Clarisse, yo también iré.

— Adam faltas tu... —. Al preguntarle me percato de que ha estado callado y algo raro, como incómodo conmigo.— ¿Te pasa algo?.

 — oh, si no es molestia. No te preocupes solo necesito un poco de distracción, solo es una de las tantas discusiones con mis padres.

— Bueno entonces vamos, yo los llevo—. Se ofrece Samuel.

Nos subimos al auto de este y el recorrido no duró mucho y la verdad fue bastante cómodo porque todos íbamos contando más acerca de nuestras vidas. En cuanto llegamos no bajamos todos del auto y mi padre nos esperaba en la puerta indicándonos que pasáramos, lo saludé a él y a Zoe; les presenté mis amigos, los cuales recibieron encantados y luego mis amigos estaban tontos con mi pequeño hermano.

Mientras mis amigos conocían a mi familia, yo me acerqué a saludar a algunos amigos y colegas de mi padre, los que más llamaron mi atención fueron William Clayton y Aliyah Reynold. Ellos eran los mejores amigos de mi padre y viejos colegas, me conocían desde pequeña y tenían dos hijos, el mayor que al parecer no se encontraba allí, se llama Liam y el menor aquí presente es Dominic. 

Me acerqué a saludarlos y fueron muy amables y cariñosos, excepto Dominic, el cual me miró de arriba a abajo sin decir palabra alguna y después se retiró ignorándome. <<¿De dónde había salido ese muchacho?, sus padres son un amor de personas y a puesto que su hermano mayor igual y ¿a caso no le enseñaron modales?. ¿No se acordaba de...?>>, pensé bastante enojada.

— Clarisse vamos a almorzar—. Me llama mi padre sacándome de mis pensamientos.

Salí al jardín donde estaban todos ya reunidos comiendo y conversando al aire libre, me dirigí a la mesa donde había una especie de Bufé con cantidad de alimentos para escoger. me serví y fui a sentarme junto a Emma, Adam y Samuel quienes conversaban animadamente con mi padre y su esposa, pero estos dos últimos se pararon y fueron hacia Will y aliyah.

— Clarisse ¿dónde estabas?, te estábamos buscando.

— Lo siento Adam, estaba saludando a los demás.

— ¿Viste a ese chico?—. Adam me señala a Dominic quien se encontraba sentado solo—. Es bastante raro.

— Si, de hecho me ignoró completamente cuando intenté ser amable.

— Fue igual con nosotros cuando tratamos de integrarlo, pero ni siquiera nos volteó a ver—. Opina Emma.— Se ve bastante aburrido.

— No es culpa nuestra, cumplimos con ser amables e integrarlo —. volteo mi vista de nuevo en su dirección y no puedo negarlo es bastante atractivo. Además de tener buen porte, es esbelto, de cabellos casi dorados, y ojos tan azules como el cielo. todo lo contrario a Adam que es de estatura media, cabellos negros y ojos color marrón. lo que más me molesta de Dominic es su actitud tan superior y orgullosa.

— Clari... ¡CLARISSE!—. me giro hacia Emma la cual está un poco irritada.

— ¿Que pasa Emm?.

— Te estábamos preguntando si te apuntas para irnos de paseo a la playa el otro fin de semana.

— Ah mmm si, ¡me encantaría!—. Digo bastante emocionada a lo que Adam y mi amiga ríen.

— Entonces estaremos en contacto cualquier cosa, ya intercambiamos nuestros números con Adam.

Terminamos de comer y entramos a la casa para ver una película mientras que los adultos seguían afuera escuchando música, hablando sobre diferentes temas y bañándose en la piscina. Aproveché para ir a la cocina por Snacks y bebidas para los cuatro mientras ellos trataban de escoger la peli, cuando entré encontré a Dominic buscando algo allí.

— ¿Sabes dónde están las cervezas?—. se expresó grosero.

— Busca en la nevera o en la reserva—. Respondí de igual manera.

— ¿Cuál es tu problema?

— ¡No! ¿cual es el tuyo?, desde que llegué y te saludé solo te has portado como un idiota. ¿Se te olvidaron los modales?.—por un momento veo arrepentimiento en su rostro, pero luego cambia rápidamente la expresión.

— Es parte de mala educación responder con otra pregunta, parece que no soy el único sin modales. ¿Tanto te importa?

— De hecho no me interesas en lo más mínimo, pero no tolero a las personas indiferentes y con aires de superioridad. Mis amigos y yo no hemos echo más que intentar incluirte y tu sólo has sido un grosero.

— ¡No sabes absolutamente nada sobre mi!, deja de juzgarme cuando ni siquiera tienes derecho.

— Si tienes razón y tampoco me interesa saberlo, sólo intentaba ser amable. Vete al carajo.—Salí rápidamente de ahí y me dirigí al salón donde se encontraba Adam esperándome.

— No te enojes Clari, pero escuché su pequeña discusión en la cocina...

— Lamento que haya escuchado eso, yo no suelo ser así, pero... él me sacó de quicio.

— No te disculpes, es bastante comprensible.

—  Volví lamento haber demorado, ¿ que pasó?—. Dice Emm inspeccionándonos a Adam y a mi.

—  Es solo que tuve una pequeña discusión, ya está.

— ¿Con quien? si se puede saber obvio. 

— Dominic.

— ¿El chico raro?.

—  Si Emm, ese mismo—. Respondo frustrada.

— ¿Dónde está Samuel?—. Adam pregunta con curiosidad

— Ah me pidió que les informara que tuvo que irse al orfanato, y Clari que muchas gracias por tu invitación.

 — Es una lástima que se halla ido, ¿vamos a ver la película?.

Bajamos a la sala de televisión y preparamos todo, luego nos acomodamos y empezamos a disfrutar la película "Mi abuelo es un peligro" y antes de que comenzara Dominic aparece en la habitación llamando nuestra atención.

—  ¿Les molesta si me siento a verla con ustedes?— Emma y Adam voltean a verlo sorprendidos para luego mirarme a mi esperando que respondiera.

— Adelante, no molestas —. Responde ella sin importancia al percatarse de que yo no iba a contestar.

Nos sentamos en el gran sofá y luego de poner todo en la mesa tomo asiento junto a Adam y Emma y empezamos la película. La película resultó ser bastante chistosa y divertida, cuando terminó apagamos la pantalla y fuimos hacia la cancha de tenis a practicar un rato. Dominic intentaba integrarse más y esto me extrañaba ya que cuando le reproché su actitud creí que seguiría comportándose igual o peor, pero no fue así, más bien parecía decidido a cambiar. Conmigo se le notaba incómodo y grosero, incluso también con los chicos, pero aún así decidimos tolerar su actitud.

Al cabo de un rato jugando Adam ya no lo soportaba más y casi se agarra a pelear con Dominic si no es porque Emma y yo los logramos separar a tiempo y hablar con Adam para que se comportara y lo ignorara. Terminamos el juego a las siete de la noche quedando empatados, volvimos al salón principal y ya quedaban tan solo los padres de Dominic, Emma recibió una llamada urgente y tuvo que irse, Así que quedamos Adam y yo.

— Clarisse ¿te acompaño a tu casa? —. Preguntó Adam.

— Si, iré a despedirme. — Él me sigue y nos dirigimos donde están todos reunidos.

— Hija ¿te irás tan pronto?.

  — Si quiero llegar a descansar, mañana tengo universidad.

— Entonces te llevo a ti y a tu amigo.

 — No hace falta señor, yo la acompañaré a casa.

— No dejaré que se vayan solo en taxi. 

 — Papá ya sabemos cuidarnos— . Protesto.

— Matt si quieres mi hijo los puede llevar, además por lo que me contaste él y Clari viven en el mismo edificio.  —. En cuanto oigo esto me altero un poco, <<no puede ser que por "casualidad" vivamos juntos, no después de...>>, interrumpo mis pensamientos.

—No Will, no pondré en esas a tu hijo.

— Perdón que interrumpa, pero no es ninguna molestia señor Sheffield.

— Siempre has sido tan considerado muchacho, dime Matt. Estamos en confianza.—Después de estas palabras tuve que aceptar a regañadientes.

Subimos al auto de Dominic y yo me fui adelante ya que este me abrió la puerta de forma burlona y me hizo sentar allí tan solo para molestarme en todo el camino, mientras que Adam iba cómodamente atrás.

Llevamos primero a Adam el cual vivía lejos así que fue un largo camino y bastante incómodo, Dominic puso música para mejorar el ambiente, dejamos a Adam en su edificio este se despidió de mi y salió del auto algo preocupado, dio las gracias y entró a su edificio. Dominic arrancó de nuevo y esta vez si directo a nuestro edificio.

 — Oye se que no he sido nada amable, pero ¿podríamos hacer el intento? aún más si nuestros padres son tan amigos y tendremos que vernos seguido.

— Dominic No hagas esto por compromiso si en verdad no quieres hacerlo.

— Perfecto, sigue de orgullosa...

 — ¡No soy orgullosa! solo no te entiendo, ¿porque eres tan prepotente e intentas alejarme de ti?

— No lo entenderías y, además, de verdad intento ser amable.

— Si no me dices la razón es mucho más difícil, déjalo así. ya no sé que más hacer

— Entonces ¿porqué dejaron que me integrara y tanta insistencia en ello si no me toleran?

— ¡El que no nos tolera eres tú! por tu actitud no te excluiríamos, no solemos ser así —. El auto se detuvo en los estacionamientos del edificio.— Gracias por traerme, feliz noche.

Dije esto y salí del auto, tomé el ascensor, marqué el número quince y la clave y así llegué al fin a mi hogar. Me encontraba tan agotada por todo los sucesos de hoy que fui directo a mi habitación y me tiré en mi cama. Antes de dormir respondí los mensajes de Adam y Emma.

Adam: ¿Cómo llegaste? debí irme adelante yo, lo siento >-<

Clarisse: Bien, ¿y tu? No te preocupes, ustedes dos se hubieran agarrado a pelear.

Adam: ¿Discutieron?

Clarisse: Algo así.

Adam: Creo que te dejo pareces bastante cortante.

Clarisse: Nos vemos mañana— . fue lo último que respondí ya que me estaba quedando dormida, así que me puse mis auriculares y reproduje mi música, entregándome así al cansancio.
 

Nota: Orfanato de Samuel en multimedia

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