POV Clarisse:

Después de aquella fuerte pelea de anoche, decidí quedarme en la habitación de invitados porque Liam no se encontraba en condiciones para llevarme a mi penthouse. Lo cierto es que al principio me negué, pero ante la insistencia de mi cuñado y su estado, no me quedó de otra que aceptar.
La noche pasó lenta para mi gusto, no pude dormir bien después de lo sucedido y todo este problema con Dominic. Odio estar mal con él, sobre todo cuando anteriormente éramos tan felices y lo que me duele aún más es saber que yo fui quien causó todo esto.

Me levanto de la cama, la tiendo, dejo todo ordenado y me lo pienso dos veces antes de salir de la habitación. Lo cierto es que me da algo de miedo encontrarme con Dominic y prefiero evitarlo, a la vez sé que no puedo ser cobarde y tomo fuerzas para salir de allí, cuando lo logro, miro dos veces a los dos lados del pasillo y al ver que está despejado bajo a toda prisa las escaleras rogando que la bulla que hay abajo sea de Liam y no de Emma o Dominic.
Para mi suerte, parece que mis ruegos fueron escuchados porque el ruído provenía de Liam que intenta hacer el desayuno. Me aproximo a él y éste al sentir mi presencia, se gira para saludarme.

— Buenos días cuñadita, ¿descansaste?

— A pesar de todo, ¿sigues considerándome tu cuñada?—Mi pregunta deja ver lo frágil que me pone todo esto, después de todo, Liam también me conoce a la perfección.

— Escúchame bien Clarie—Se acerca y sé posiciona enfrente mío con autoridad—. No tengo porqué dudar de la gran mujer que eres y eso también implica lo buena amiga, hija, hermana, novia, cuñada. No dejes que las palabras de mi tonto y terco hermano te afecten, porque sólo expresan lo dolido que está y si se alejó, no fue más que porque se dio cuenta que no te merece y eres mucho para él, pero tengo esperanzas de que pronto recapacite y se de cuenta de que si te deja ir... será el peor error que cometerá  y lo que posiblemente se reproche por el resto de su vida.

— Por otro lado, trata de entender que creo que al nacer le faltaron neuronas o algunas se le murieron en el proceso—Continua y bromea para sacarme una sonrisa, cosa que logra, luego me reparte un beso en la frente para seguir en lo suyo.

— ¿Te ayudo en algo?—Me ofrezco.

— No, ya estoy por terminar aquí, si quieres puedes relajarte en el sofá mientras están nuestros deliciosos pancakes—Asiento y me giro para ir en dirección al sofá.

Al quedar de frente a las escaleras, vislumbro la figura de Dominic en estas mirándonos fijamente a Liam y a mi, seguramente vio la escena de hace un momento completa y mi corazón comienza a acelerarse por el temor de lo que pueda pasar a continuación. El rubio termina de bajarlas por completo y se aproxima hasta mi, cuando me alcanza, me repara de arriba abajo para luego continuar su camino hacia la cocina.

— Me encantó aquel discurso que le dijiste a Clarisse, pero... ¿desde cuándo crees que puedes meterte en mi mente? ¿A caso también se perdió el respeto entre nosotros?

— No sé a qué te refieres con lo último Dominic y prefiero evitar pelear, así que te advierto que no me busques porque me encuentras.

— Yo no he dicho nada para provocarte, te recuerdo que ya tienes novia.

— Mira, no tengo ánimos para tus celos absurdos. Clarisse es también mi amiga desde que éramos niños y como tal tengo derecho de consolarla ya que tú, que deberías estarlo haciendo, prefieres vivir con rencor por algo absurdo y mandar la relación al carajo.

— No eres nadie para juzgar el estado de mi relación o lo que hago y dejo de hacer, mucho menos porqué lo hice. Ya estoy lo suficientemente mayor como para ocuparme de mis propios asuntos.

— ¿Ah si? Pues eso no es lo que parece, sigues comportándote como un adolescente que ni él mismo comprende qué es lo que le sucede. Para algunas cosas eres maduro, pero para otras... eres un niño inmaduro que espera que otros resuelvan sus problemas.

En ese momento Dominic explota y le manda un derechazo a Liam, como si no fuera suficiente todo lo que pelearon ayer. Sin contar que ambos amanecieron con los rostros hinchados y varios moretones.
Debo detenerlos antes de que la situación termine en algo peor, pero no se me ocurre ninguna forma efectiva de hacerlo.

El ascensor se abre, lo que distrae a los chicos y olvidan momentáneamente lo que estaba pasando. Aprovecho ese momento para tomar una servilleta del mostrador de la cocina y limpiar la sangre que corre por el labio de Liam, debido al golpe que Dominic le acaba de dar y para mí desgracia, Emma entra justo en ese instante, topándose con la escena en la que le limpio el labio a su novio.
Si las miradas matarán, yo ya estaría a tres metros bajo tierra. Está por decir algo, imagino que quiere preguntar qué pasó pero se contiene y sigue de largo escaleras arriba.

— ¡Emms!—La llama Liam, pero ella lo ignora completamente.

Veo como Dominic está dispuesto a seguirla, antes de que pueda hacerlo, su hermano es más rápido y se lo impide tomándolo por el brazo.

— No te atrevas a ir tras de ella, es mi novia—Resalta la última palabra dejando claro la posesión sobre la chica.

— Deberías preocuparte más por ella y dejar de meterte en otros asuntos—Hace referencia a la cercanía que hemos tenido Liam y yo últimamente—. Por si lo olvidaste, tus suegros venían hoy de estados unidos y supongo que Emma fue a buscarlos al aeropuerto.

— Ya me tienen harta ustedes dos con esa rivalidad, ¡son hermanos por Dios!—Ambos dejan la discusión y me miran atónitos y apenados, sin saber que decir—. Será mejor que no vayan detrás de Emma si no quieren empeorar las cosas, iré yo. En cuanto a ustedes, les aconsejo que reflexionen de su comportamiento.

Dominic no protesta acerca de lo que he dicho, cosa que me alivia porque lo último que quiero es seguir discutiendo con él, así que los dejo a ambos estupefactos y empiezo el camino rumbo a la habitación de mi dramática amiga. Al estar frente a la puerta, la presencia de los nervios se hace más fuerte y más el hecho de no saber cómo va a reaccionar, sin embargo me arriesgo y toco su puerta.
La respuesta no tarda mucho, abro la puerta e ingreso hasta la cama en la que ella se encuentra tirada, al parecer llorando.

— Emma, yo...—Estoy por empezar con mi discurso pero ella me interrumpe.

— ¿Que quieres Clarisse? ¿Porqué no vas mejor a ocuparte de Liam y las heridas?

— Emms... sabes que yo no voy a quitarte a Liam, no sé a qué vienen tus celos injustificados.

— ¿Injustificados, Crees que soy tonta? Me duele ver lo unido que está a ti, tanto así que se ha estado alejando de mí.

— Eso no es así, él ha estado ayudándome y sabes que es un gran amigo desde que éramos niños, eso no significa nada más. ¿Acaso porque Dominic pasa mas tiempo contigo, significa que se está enamorando de ti y me está engañanado?

— No, sabes que eso no es así.

— ¿Entonces porqué en lo que a mi respecta con Liam, si lo mal interpretas?

— Por la simple razón de que Liam y yo estábamos bien y de repente está actuando raro.

— Emms, él está pasado por un momento difícil.

— Ya no lo justifiques, parece que eso es lo único que todos sabemos hacer—La chica suelta algunas lágrimas más.

— Pero tu y yo podemos hacer algo, dejar de lado nuestras diferencias y comenzar de nuevo.

— Estoy de acuerdo contigo, te extraño amiga.

Debo admitir que eso me extrañó, creí que iba a ser difícil de convencer, precisamente porque antes lo había intentado y no había funcionado.

— Yo también te extraño mucho Emms y la verdad es que odio esta rivalidad y discusiones que hemos tenido en los últimos meses, no es justo que una amistad tan bonita como la que hemos construido se arruine por tonterías o por una simple discusión.

— Lo sé y lo siento, lamento haber mal interpretado las cosas entre tú y Liam. Por otro lado, odio estar así contigo, al menos esta discusión hizo mas fuerte nuestra amistad.

— Así es. Yo igual me arrepiento mucho por haberte dicho aquello esa vez, sabes que no lo pienso.

— Lo sé, fue solo un mal entendido, ya no tiene importancia ¿todo normal?

— ¡Si! Me alegra que todo vuelva a la normalidad entre nosotras—Ambas nos fundimos en un cariñoso abrazo y finalmente decidimos dejar todo de lado.

— Todos pasamos por momentos difíciles y creo que lo mejor es dejar los rencores y perdonar—Dice Emma, como si me leyera el pensamiento.

— No puedo estar más de acuerdo— Sonrío, me alivia tener de vuelta a mi amiga.

— Clarisse, debemos hacer que los chicos se reconcilien y que Dom y tú vuelvan a estar juntos. Aunque el gruñon se haga el fuerte, le afecta mucho tu ausencia—Sus palabras no me sorprenden, pero me dejan bastante triste—. Mira, aunque cuando bajemos yo parezca estar del lado de Dominic... yo te apoyo amiga. Lo que sucede es que Dom últimamente se está sintiendo muy solo, no lo justifico, simplemente trato de que se sienta apoyado.

— Lo sé y te lo agradezco, de verdad.

— Lo que me preocupa es que no sé qué le pasa a Liam, él es para nada violento y sus recientes reacciones de " bipolaridad" me dejan muy conmocionada.

— Tranquila. Todos sufrimos a nuestro modo, pero comparto tu angustia.

— No sé qué hacer con el ¿Crees que se siente dejado de lado porque he estado muy pendiente de James? ¿Soy muy mala novia?.

— No creo eso, Emms. Puede ser que tiene mucho en la cabeza, ya mejorará.

— Me da miedo que quiera alejarse.

— Creo que la mejor solución es hablar las cosas, lo hemos estado evadiendo por muchísimo tiempo.

— Tienes razón—Me apoya mi amiga—. ¿Vamos a terminar con esto?

Asiento y ambas bajamos las escaleras nuevamente hasta la sala donde los hermanos mantienen una gran tensión, aunque tratan de ignorarse, es más que claro que hace falta un pequeño detonante para estallar en otra pelea.

— Emma, no me digas que abandonaste nuestro equipo tan rápido—Reclama Dominic al notar que la rubia y yo estamos reconciliadas.

— Dom, por favor. Vamos a terminar con esto, es hora de que tengamos la conversación que hemos evadido tanto—Contesta Emma. Ambas damos algunos pasos hasta llegar al centro de la sala y antes de sentarnos, ella me susurra—. Clari... haré todo lo posible por ayudarte con Dom, aunque creo que lo que sucede entre Liam y yo no se resolverá tan fácilmente.

— No días eso, Emms. Vinimos aquí para tratar de ponerle fin a todos nuestros conflictos, así qué hay posibilidad entre ustedes igual.

— Puede ser, no estoy muy segura.

— Entonces yo también te ayudaré. Después de todo, creo que nadie es responsable de lo que pasa pero todos estamos involucrados—Una vez digo esto, siento la presencia de Liam cerca de nosotras. Parece que al vernos a su novia y a mí susurrando, su sentido de alerta se despertó.

— Chicas... ¿Sucede algo?

— No, nada. Todo está perfecto—Responde Emma con un claro sarcasmo.

— Vamos, Tesoro... no finjas que todo está normal.

— Liam, eres tú al que le gusta finjir que todo va de maravilla—En el tono de voz de mi amiga se evidencia lo dolida que está.

La chica se aleja para sentarse junto a Dominic, éste se pone de pie y la abraza con cariño al tiempo que le dice algo, ella asiente y aprietan su agarre. Emma aún tiene los ojos rojos y unas grandes ojeras, imagino por lo poco que ha dormido.
Es razonable que Dominic la abrazara por la apariencia de tristeza que tiene, además está el hecho que está mañana tuvo que ir sola por sus padres cuando ambos chicos dijeron que la acompañarían.

— ¿Está muy enojada conmigo?—Suelta de repente Liam, sobresaltándome por el hecho de que no lo vi venir.

— Diría que más bien preocupada por ti.

— Tenemos que resolver esto, Clarisse.

— Estoy totalmente de acuerdo, cuñis. No soporto más esta situación y tú debes sincerarte con Emma, le estás haciendo pensar que es una mala novia por preocuparse por James y dejarte de lado.

— Ella no me ha dejado de lado y no me molesta que se preocupe por James, sabe que confío en ella y que James me cae bien y entiendo a la perfección la situación.

— Al parecer, ella no lo tiene tan claro—El chico hace un puchero.

— Creo que soy un asco en cuanto a aclarar las cosas, pensé que Emma sabía eso.

— No te preocupes, es por eso que estamos aquí. Ambos necesitamos arreglar los problemas de pareja con urgencia, estoy agotada.

— Oigan, seguimos aquí y no es como que no los escuchemos por más de que estén susurrando—Reclama Dominic—. Sobre lo último que dijiste... Clarisse, no eres la única que está agotada. Tal vez si te dieras cuenta que el mundo no gira a tu alrededor, ya lo hubieses notado.

— Dom...—Estoy por protestar pero me corta, alzando la voz con autoridad.

— Dominic para ti desde ahora—Exclama firme.

— Dominic... no pienso discutir hoy. Lamento arruinar tus expectativas, a diferencia de ti, a mi si me importa nuestra relación.

Antes de que pueda contestarme algo, Emma le da un codazo en el estómago y lo riñe para que escuche con respeto y salgamos de esto de una vez. El rubio protesta unas cuantas veces, pero al ver que la rubia no cambiará de opinión, se rinde y no le queda de otra que obedecer.

— Está bien. Parece que hoy es tu día de suerte, Clarisse... te escucharé y más te vale que no me hagas perder el tiempo—Exclama resignado.

— Antes de empezar, quiero pedirte un favor Dominic. No le vayas a faltar al respeto a Clarisse o Emma, tienes que ser un caballero—Interviene Liam.

— Cierto, olvidaba que estoy hablando con el chico perfecto.

— No vuelvan a empezar ¿Pueden dejar de ser unos niños malcriados?— Toma el control Emma, frustrada.

— La rubia tiene razón, por favor. Esto es importante, nuestra amistad y relaciones se están llendo al carajo—Es imposible ocultar el enojo en mi voz—. Así que maduren y vamos a hablar de esto ahora.

—La única razón por la que estoy aquí es porque estoy harto de tenerte encima todo el tiempo—Dominic refleja cansancio en su voz—. También estoy harto de que todos piensen que soy el malo de la historia, excepto mi hermana adoptiva—El chico mira con cariño a Emma y ella lo fulmina con la mirada—. Cuánto cariño me tienes, hermanita.

— Dom, es enserio. Debemos arreglar las cosas y evitar echarle más leña a fuego.

— Yo lo único que quiero es protegerte.

— Para eso ya me tiene a mi—Contesta Liam a la defensiva.

— Justamente de ti es de quien la protejo, no puedo creer que la dejaras esta mañana sola. Se supone que la acompañarias a ir por sus padres, yo no lo hice porque se suponía que eso te corresponde a ti como su novio.

— No te metas en algo que no es tu problema, ¡es mi novia, joder! Deja de creerte su héroe y el único que tiene derecho sobre ella.

— Claro... ¿y tu no has hecho lo mismo con mi novia?

— Con justa razón, en los últimos meses has sido un idiota con ella y yo solo estoy haciendo mi trabajo como su amigo y cuñado.

— Perfecto... así que tu si tienes derecho, pero cuando se trata de mi, entonces soy un imbécil.

— Al menos no tuve que decir lo de imbecil, pero ya que lo reconociste...—Levanta ambos hombros.

— ¡Te voy a matar!—Le grita Dominic antes de lanzársele encima, pero yo me interpongo en la mitad de ambos para evitar mas problemas—. Clarisse no interfieras, quítate de en medio.

— ¡Ya basta! Ustedes dos son hermanos ¿cómo es posible que se traten de esta manera? Me tienen muy decepcionada, no esperaba eso de ustedes—Hace rato que estaba aguantando la rabia de verlos pelear de esa manera, uno llega a un límite y evidentemente ya no puedo más.

—Lo siento—Para mi sorpresa, Dominic entra en razón ante mi riña y deja de lado su orgullo—. Liam, hermano...

— Hermano nada, Dominic. Yo también estoy harto de esto ¿desde cuando nuestra amistad se fracturó tanto?

— Desde que los celos empezaron a cegarnos a todos y dejamos de confiar entre nosotros, hasta tal punto de que callamos las cosas que nos molestaban—Contesta Emma.

— Entonces es momento de ser honestos entre nosotros—La apoyo.

— No es tan fácil como parece, a veces el abrirnos no es lo mejor—Dice Liam y ante sus palabras, Emma suelta un gran suspiro.

— Siempre es lo mismo contigo, haciéndote el misterioso—Dominic vuelve a exasperarse.

— Yo empezaré. Después de todo, fui la primera que se alejó y la causante de lo que está pasando.

Tomo un largo suspiro y pienso bien lo que diré. Ahora que llegó el momento de hablar, estoy muy nerviosa de lo que pueda pasar.
Una cosa es dar un discurso en tu mente y otro decir todo lo que piensas a las personas que heriste, en momentos así los sentimientos se juntan y es una total confusión el no saber por dónde o cómo empezar.

— No sé cómo expresarles lo mucho que me arrepiento por haberme alejado y haber actuado como una idiota, como si no me importaran, quiero aclarar que todo eso sólo fue mi cobardía. La verdad es que no pensé con cabeza fría y me dejé llevar por mi dolor sobre la muerte de el que era mi mejor amigo, sin detenerme a considerar que la vida sigue y que la pérdida es algo a lo que debemos enfrentarnos tarde a temprano; es por eso que debemos disfrutar cada momento con nuestros amigos y familia. Lastimosamente yo caí en cuenta de esto tarde, puesto que para ese entonces ustedes siguieron viviendo su vida y dejaron de insistirme, cosa que no los culpo porque me lo merezco, todo lo que me dijeron lo merecía y acepto que tenían razón. Es más, agradezco que hayan sido sinceros conmigo porque fue todo eso lo que me hizo recapacitar.

— A pesar de que pareciera que nos estábamos rindiendo... no fue así, tanto Emma como mi hermano son testigos de que seguía preocupándome por ti y cuidándote desde lejos. No tienes idea de las noches que pasaba llorando y rogándole a Dios que entraras en razón, me preocupaba que tuvieras una crisis depresiva y se volviera en algo mas serio hasta el punto de tener que llevarte al psicólogo o al psiquiatra y tú mas que nadie debe saber que estabas a punto de traspasar ese nivel. Amor...—Esa última palabra me devuelve a la vida, me da esperanzas de que quizás esté cediendo y al igual que yo, quiera arreglar las cosas—. No voy a negarte cuánto te he extrañado y lo mucho que te amo y si, lo sigo haciendo así te haya demostrado lo contrario. Yo no soy perfecto y también me porté como un imbécil, pero eso solo fue una coraza ante lo duro que fue para mi el hecho de que en un momento difícil me dejaras de lado y me trataras como si ya no fuese nadie importante en tu vida. Yo entiendo lo duro que fue para ti la pérdida de Adam y a pesar de lo que te hizo merece el perdón, por otro lado, no todo giraba a tu alrededor... no fuiste la única que sufrió. Emma también lloró muchas veces por ti y temía perder a su amiga—Observo a la rubia estremecerse ante ese recuerdo.

— Eso es algo que tengo muy presente, para ninguno de nosotros fue fácil y me culpo a mi misma por eso. No saben cuánto me duele ver lo que he causado—Paso mi vista entre ambos hermanos—. Ustedes nunca habían sido tan lejanos y el hecho de que mi comportamiento haya fisurado su amistad me hace sentir terrible, ¿Me perdonan? Yo he recapacitado ya y de verdad que quiero que todo vuelva a ser como antes, que empecemos de nuevo y dejemos estos tiempos difíciles de lado. ¿Podemos volver a empezar?—Les ruego.

— Tu ya sabes lo que pienso al respecto Clari, ¡me alegra tanto que volvamos a los viejos tiempos amiga!—Exclama Emma emocionada, una vez concluye, ambas esperamos atentas la respuesta de Dominic.

— Hermano, si dejas ir esta oportunidad y dejas ir a una chica tan increíble como Clari... de verdad que me pierdes también a mi y el respeto que te tengo—Le advierte mi cuñado. Dominic se piensa bien las coas antes de proseguir.

— Te perdono amor, eres y seguirás siendo la mujer de mi vida, eres la mujer que rondaba mis sueños desde la niñez y eso nunca va a cambiar. Te amo demasiado y quiero que sigamos juntos, pues no imagino mi vida si no es contigo, pero necesito tomar las cosas con calma y que empecemos a construír nuestra relación de cero.

— Eso significa que... ¿terminamos?

— ¡Claro que no! ¿Crees que me voy a rendir tan fácilmente? Te advierto que de mi no te libras así de sencillo. Me refiero a que dejemos todo atrás y empecemos a construir nuestra relación sin vivir el pasado, sin rencores ni nada por el estilo.

— ¿Entonces volveremos a casa hoy?—Le pregunto esperanzada—. Quiero decir... ¿Volverás a nuestro edificio?

— No, antes de eso necesito un tiempo. Quiero que las cosas vayan con calma y que podamos sanar nuestras heridas, no me mal entiendas, ya te perdoné y sigo amandote más que el primer día. Es sólo que es importante y quiero que volvamos a estar completamente bien y que nos tomemos el tiempo para reconstruir lo más hermoso de nuestras vidas.

Por más de que me muera de ganas de estar con él, sé que tiene razón y lo menos que puedo hacer es respetar su decisión. La relación se fracturó de alguna manera y el ignorar y seguir sobre eso como si nada, empeoraría más las cosas.

— Estoy de acuerdo. ¿Por lo menos puedes...?—Dominic parece entenderme perfectamente porque no tengo necesidad de terminar la frase cuando sus labios se posan delicadamente sobre los míos, con tanto cariño y cuidado que me transmite el sentimiento. Hace tanto no teníamos el placer de besarnos, que tememos que este momento sea efímero e irreal.

A pesar de todo el tiempo sin esta muestra de afecto, el momento es hermoso y mágico, todo desaparece a nuestro alrededor, incluso nuestros temores, es simplemente perfecto.
Una vez nos separemos por falta de aire, ambos damos un respiro y volvemos a unirnos en intervalos de pequeños besos repetidos.

— Parece que se tomaron muy literal su reconciliación—Se burla Liam—. Yo quiero una así, ¿que dices, Emma?

— Pues deséala mucho—Refunfuña la rubia.

El calor sube a mi rostro inmediatamente, por una parte me siento muy apenada ya que nuestros amigos acaban de ver cómo casi literalmente Dom y yo nos "comemos " a besos. Pero por otro lado, no puedo estar más feliz de reconciliarme con mi gruñón.
En medio del encantador momento, suelto una carcajada por los nervios y los chicos se me unen, lo que hace que la tensión desaparezca del ambiente.

— Bueno tortolitos, tanto Emma como yo nos alegramos mucho de que vuelvan porque ya era hora, pero... esta conversación no acaba aquí, todavía faltan asuntos por arreglar—Interrumpe Liam.

— Lo siento, creo que ambos nos dejamos llevar hermanito. ¿Quien sigue por hablar?—Emma levanta la mano y aclara la garganta para continuar su discurso.

— Liam... las veces que hemos hablado me has asegurado que todo está bien entre nosotros pero yo no lo creo, últimamente has estado muy alejado y es algo que me preocupa en gran manera. Yo debo admitir que no he pasado mucho tiempo contigo por la situación de James, sin embargo no creo que esa sea la razón y me preocupa fallar como novia.

— Amor, no sé a que viene esto, yo estoy normal.

— Si claro y yo soy lady gaga—Dominic y yo soltamos la risa ante su comentario y ella nos fulmina de vuelta—. ¿Acaso ya no confías en mi? ¿Es porque he estado de lado de Dominic durante este tiempo?

— No, Emma escúchame y deja de lado el sarcasmo por un momento.

— Es que no quiero escucharte, porque sé lo que me dirás... últimamente siempre es lo mismo. Que todo está bien y que lo haces para protegerme.

— Eso es cierto, lo hago para protegerte.

— No somos idiotas, Algo raro pasa acá. Yo no estoy furioso contigo por lo de Clarisse únicamente, sino también porque estoy seguro de que nos ocultas algo y si no quieres decirlo, pues no puedo obligare pero tarde o temprano se sabrá.

— Dominic si me disculpas, es algo entre mi novia y yo.

— Ella también es mi amiga y somos familia, por lo menos deberías confiar en ella.

— Esto se está desviando de tema, estamos hablando de un problema de hermanos.

— Tan sólo sácame de una duda ¿porqué no acompañaste a Emma esta mañana a recoger a tus suegros? Estás actuando muy extraño y no me salgas con una excusa barata.

— Lo siento es que... me quedé viendo bob esponja—Me guiña un ojo aclarándome que es broma, lo mas chistoso es que Dom y Emma se lo creen y lo miran indignados.

— ¿Es enserio?—Pregunta Emma, ofendida. 

— ¡El capítulo de hoy es mi favorito! Es cuando bob esponja y patricio cantan la canción de la hoguera—Comienza a cantarla como un niño pequeño y yo no paro de reír—. "Vamos a reunirnos y cantar nuestra canción, la c-a-n-c-I-o-n de la hoguera y si quieres intentemos cantarla a la carrera".

— ¡ya basta Liam! Esto no es un juego, deja de escapar de la situación. Siempre es lo mismo contigo—Se levanta indignada de su asiento, Liam es rápido y la toma del brazo, ella resiste pero el la apega más y la calla con un beso.

— ¿Decías?—Alza una ceja para provocarla.

— Suéltame, no puedo creer que prefirieras un tonto programa antes que nuestra relación.

— ¿Estás despreciando a bob esponja?—Continúa el drama de su novia—. ¿Cómo te atreves a meterte con mis personajes favoritos? ¡Rubia Arpía!

— Liam, no tengo tiempo para tu inmadurez.

— ¿Primero bob esponja, ahora yo? ¡No tienes corazón!—Ante la mirada de odio de Emma, carraspea y se pone serio—. ¡Deberías ver tu cara! Obviamente estoy charlando amor, es que tenía vergüenza de que tus padres me vieran con el moretón del ojo y el labio partido.