Esta es la tumba de Axel Haraldsson, más conocido como Rompe Cráneos, un hombre descendiente de los vikingos. En vida midió más de siete pies de altura. Un guerrero por excelencia, conquistó grandes ciudades y alcanzó una fama vikinga que superó incluso la de su padre, llegando a estar a la altura de los grandes nórdicos de la historia. A pesar de que su reinado tuvo lugar después de la era de estos berserkers, la cual culminó precisamente con la muerte de su progenitor, su presencia volvió aterrorizar a la Inglaterra, tal como lo habían hecho aquellos nórdicos. Por tanto, creo que merece la pena conocer quién era este afamado guerrero.

Fue tan despiadado como su padre Harald Hardåde, el cual murió en la batalla de Stanford en el año 1066 d.C. Su madre Elizabeta, tuvo que huir de Inglaterra tras la muerte de su marido, cuando Alex apenas lograba controlar su esfínter vesical.

Escaparon tras miles de trabas a Vinland, actual Islandia. Tras cientos de dificultades la reina nórdica, junto a sus cinco vasallos lograron asentarse.

Cinco años duró la paz en la pequeña finca que construyeron. Sufrieron un ataque por una banda de mercenarios de la propia Vinland. Los atacaron de noche, no lograron casi ni defenderse, solo sobrevivieron el pequeño Axel y Úlf, el más joven de los vikingos, que acompañó a la reina nórdica a escapar de los ingleses. Ambos fueron capturados y vendidos como esclavos a un esclavista. Este, después de unos años se trasladó a York, Inglaterra, a su legítimo hogar. Para entonces Alex tenía unos 15 años de edad

Alex siempre supo de quién era hijo y lo que representaba, Úlf se encargó de que conociera de sus orígenes. El joven tenía ansias de poder. Tal vez eso o su excelente condición física conllevó a que su amo lo involucrara en combates por dinero junto a su fiel amigo Úlf.

No pasó mucho tiempo para que gracias a su agilidad y fortaleza ganara fama. Tenía su propio sello para matar a sus rivales, les escachaba la cabeza, de ahí salió su sobrenombre: Alex, El Rompe Cráneos.

Si bien no era más que un esclavo para su amo, este desconocía lo que estaba adiestrando y como todos sabemos o bueno, no todos, pero yo sí, por las arterias de Alex corría la sangre vikinga. Le bastó un mínimo descuido para clavar una lanza en el centro del pecho del esclavista que lo había hecho prisionero por tantos años, liberándose así de sus cadenas.

Luego de autoliberarse y liberar a sus amigos de crianza, él decidió partir a Vinland nuevamente y dar caza a los hombres que habían arruinado su vida. La mayoría de los hombres que liberó lo siguieron. Años más tarde logró vengar la muerte de su madre, pero a un alto precio, en batalla murió su amigo de infancia, el hombre que dejó todo atrás por ayudar a su madre a escapar de las tropas inglesas. Sí, como ya has de sospechar, nuestro amigo tuvo que decirle adiós a Úlf. No se entristeció, porque sabía que tarde o temprano se verían de nuevo en el Valhalla.

Rompe Cráneos, tras saldar las deudas del pasado comenzó a crecer, su fama como guerrero llegó hasta los confines del mundo. Cada día que pasaba se unían a sus tropas más y más hombres provenientes de todas las regiones, a su lado el oro y las riquezas estaban garantizadas. Lo primero que conquist ó fue Vinland, recuerden que es la actual Islandia. Luego de hechar raíces en esas tierras dirigió sus tropas a Inglaterra una vez más, pero en dicha ocasión iba con intenciones diferentes, quería terminar lo que su padre había empezado, quería que Inglaterra fuera de él.

Comenzó bien, tomó Anglia Oriental sin mucho trabajo y se hizo rápidamente de un castillo. Tales acontecimientos volvieron a sembrar el pánico en los ingleses, una vez más sufrían a manos de los rubios de ojos azules provenientes del mar. La respuesta inglesa fue inmediata, pero eso no bastó para repeler la avanzada vikinga y cada día que pasaba se los hombres de Haraldsson se hacían con más tierras.

Rompe Cráneos conquistó Mercia, Wessex e incluso, un poco más al norte llegó a tomar York. Le fue bien en las batallas, pero precisamente al querer tomar Stanford sus tropas se toparon con las del nómada Craus Lodbrok, hijo de Rollo Lodbrok. Sí, ya sé, quizás el apellido les suene, pero eso es una larga historia que algún día he de contarles, porque ahora no tenemos tiempo.

Fue una batalla desigual, Rompe Cráneos llevó cerca de 2500 hombres, los cuales se encontraron en campo abierto con los 20000 hombres de Craus y como es de esperar, ante la inferioridad numérica, fue derrotado. Sin embargo antes de morir Alex logró causar más de 50 bajas enemigas y lesionar a más de 100 soldados él solo. Hasta que sintió en su pecho el frío metal que se adentraba dentro de él, era la espada de Craus Lodbrok que lo atravesó directo en el corazón, dejando un cuerpo desvitalizado a los pocos segundos.

Los pocos hombres que sobrevivieron fueron capturados y hechos prisioneros en la batalla. Por ser un guerrero tan renombrado, Craus se encargó de llevar el cuerpo de Alex Haraldsson, Rompe Cráneos, hasta Vinland donde hasta el día de hoy descansan sus huesos.