Más tarde ese día, la escuela estaba hablando de dos cosas. Una era que Umbridge había puesto a Hagrid en libertad condicional, para deleite de Malfoy. En segundo lugar, estaba la noticia sobre los Mortífagos que escaparon. Todos tenían sospechas y teorías sobre dónde podrían estar. Alguien incluso dijo que fueron vistos en Hogsmeade, pero Faith no pensó que eso fuera cierto. Tenían que ser realmente estúpidos para que los vieran menos de veinticuatro horas después de haber escapado. Otros dijeron que se estaban escondiendo en la Casa de los Gritos, formando un plan para irrumpir en Hogwarts como lo había hecho Sirius.

También parecía haber un cambio de actitud hacia el Profeta ahora. Mucha más gente estaba insatisfecha con la versión de cómo los Mortífagos lograron escapar. El Profeta no había dicho nada al respecto que hiciera dudar a la gente. Tenían a recurrir a la única otra explicación y esa era la verdad de Harry y Dumbledore; que Voldemort había regresado.

Debido a esta noticia, a menudo se veía a los maestros acurrucados juntos, hablando en voz baja. Hermione pensó que probablemente era porque no podían hablar de cosas así frente a Umbridge en la sala de profesores. Ni siquiera un día después, Umbridge había hecho otro decreto, este prohibiendo a los maestros dar información a los estudiantes que no esté relacionada con la materia que están enseñando. Fred, George y Lee aprovecharon al máximo esto en su próxima clase con Umbridge cuando ella les dijo a Fred y George que se fueran por jugar a Snap explosivo en la parte de atrás de la clase. Lee le dijo que no tenía nada que ver con Defensa Contra las Artes Oscuras, pero que lamentablemente le valió la detención. Esa misma noche, Faith lo ayudó a curar su mano con el hechizo y un poco de esencia de Murtlap.

Faith había esperado que Umbridge hablara menos frente a los estudiantes y otros profesores, pero estaba equivocada. Parecía decidida a despedir al menos a un maestro mientras estaba a cargo. La pregunta era si iba a ser Hagrid o Trelawney. Faith esperaba que no fuera nadie más que Harry, a Ron y a Hermione no les importaba que Trelawney se fuera.

Umbridge estaba ahora en cada lección de Adivinación y Cuidado de Criaturas Mágicas con su portapapeles. Puso nerviosos a ambos profesores. Trelawney seguía prediciendo las respuestas de los estudiantes antes de que ellos contaran esas y Hagrid estaba inquieto y nervioso durante cada lección a pesar de que había seguido el consejo de Hermione sobre el tipo de criaturas que enseñaba a la clase. También pareció distanciarse de los cuatro amigos, diciendo que era demasiado peligroso para ellos visitarlo por la noche.

Todo esto le pasó factura a Harry, como advirtió Faith. Ahora, con las visitas a Hagrid, las cartas a Sirius, su Saeta de fuego y Quidditch desaparecidos, solo se centró en el ED.

Todos duplicaron sus esfuerzos después de la noticia de los diez Mortífagos que escaparon, pero nadie mejoró tanto como Neville. Nunca dijo mucho durante las reuniones, siempre se centró en los maleficios que Harry pensaba. Faith solía ser víctima de su brillante hechizo. Cuando aprendieron el encantamiento escudo, solo Hermione lo dominó más rápido que Neville.

Faith generalmente estaba bien durante las reuniones. No era la más rápida, pero sabía que se debía a sus problemas de concentración y la dificultad de los hechizos y maldiciones. Con un poco de ayuda de Harry, siempre llegaba allí.

Desde las lecciones de Oclumancia que tuvieron los dos, sus frentes, o la cicatriz de Harry, nunca dejaron de pinchar y ambos a veces se sentían realmente felices o realmente irritados en momentos aleatorios del día. Estaban seguros de que solo empezaba a empeorar desde la primera lección de Oclumancia.

—A lo mejor es como una enfermedad —sugirió Hermione, cuando Harry y Faith les dijo ella y con Ron—. Un virus o algo así. Tiene que empeorar antes de empezar a mejorar.

—Las clases con Snape lo están agravando —aseguró Harry con rotundidad—. Estoy harto de que meduela la cicatriz y de recorrer ese pasillo todas las noches.

—Solo desearía que se abriera la estúpida puerta,— asintió Faith. —Estoy harta y cansada de mirarla todas las noches.

—No tiene ninguna gracia. Dumbledore no quiere que sueñen con ese pasillo; si no, no le habría pedido a Snape que les enseñara Oclumancia. Lo que tienen que hacer es esforzarse un poco más en las clases.

—¡Estamos esforzándonos! —Harry exclamó, recordando la última lección en la que Faith había caído de rodillas cuando Snape estaba irrumpiendo en la mente de Harry y vio la muerte de Cedric de nuevo. —Inténtalo alguna vez ...Snape tratando de meterse en tu cabeza ... ¡Te aseguro que no es nada divertido!

—A lo mejor... —intervino Ron

—A lo mejor ¿qué? —dijo Hermione con brusquedad.

—A lo mejor, no tienen la culpa de no poder cerrar su mente— dijo Ron en voz baja.

—¿Qué quieres decir? —Dijo Hermione.

—Bueno, tal vez Snape no está realmente tratando de ayudarlos ... —Harry, Faith y Hermione lo miraron. Tal vez en realidad está tratando de abrir sus mentes un poco más ... hacérselo más fácil a Ya... sabes.

—¡Cállate, Ron! —Hermione lo interrumpió irritada. —¿Cuántas veces has sospechado de Snape, y cuándo has tenido razón? Dumbledore confía en él, trabaja para la Orden, eso debería ser suficiente.

A—un así, podría ser mucho más amable con los estudiantes que no son de Slytherins. No le hemos hecho nada, pero él siempre intimida a todos hasta el suelo. ¡Neville le tiene mucho miedo! No confiaré en él, pase lo que pase.— dijo Faith indignada. Sabía que Dumbledore probablemente tenía razón (¿Cuándo no?), Pero permitir que un matón enseñara a los niños pequeños era simplemente ridículo.

—Dumbledore confía en él— dijo Hermione. —Y si no podemos confiar en Dumbledore, no podemos confiar en nadie.

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Enero pasó borroso. Antes de que se dieran cuenta, ya había llegado febrero y se acercaba el día de San Valentín. Harry le había estado preguntando a Faith qué debería hacer en su cita con Cho porque sentía que era mejor hablar con Faith al respecto que con Hermione, pero lamentablemente para él, Faith no tenía idea. Siempre había sabido que no era similar a chicas como Cho o Lavender y Parvati. Siempre estaban en un gran grupo de chicas, riendo entre ellas mientras miraban a los chicos. Faith siempre tuvo más amigos hombres y eso le gustó.

—Bueno, ¿Qué te gusta hacer en una cita? —Harry le preguntó desesperadamente mientras caminaban hacia su próxima lección de Oclumancia con Snape.

Faith lo pensó por un segundo.

—Bueno, Alex y yo siempre caminábamos alrededor del lago o hacíamos la tarea juntos,— le dijo Faith. —Incluso una vez tuvimos una pelea con lodo, fue divertido, —sonrió al recordarlo. Harry también recordó ese día. Había llegado a la sala común de Gryffindor completamente cubierta de lodo pero con la más amplia sonrisa en su rostro. —Sin embargo, dudo que a Cho le guste eso.

Harry asintió. No podía imaginarse involucrado en una pelea de lodo juguetona con Cho en su cita, pero de alguna manera podía ver a Faith arrojándole barro en la cara con una sonrisa juguetona.

El catorce de febrero, Faith y Ron tuvieron un día completo de entrenamiento de Quidditch para que no pudieran acechar en secreto a Harry y Cho para ver cómo les iba, pero en realidad no les importó. Realmente no querían ver a los dos besándose en una esquina en alguna parte. Faith le prometió a Harry, sin embargo, que si no iba bien, lo arrojaría al lodo para mostrarle cómo era una cita real, como una broma para animarlo.

Solo el lunes por la noche tuvieron la oportunidad de tener una charla decente. Todos estaban ocupados con el Quidditch y la tarea, no habían estado hablando mucho. Hermione les había contado a Faith y Ron sobre la entrevista que Harry le hizo a Rita Skeeter después de su cita con Cho y que el padre de Luna la iba a publicar en su revista 'El Quisquilloso'.

Ron y Faith llegaron a la cena, cubiertos de barro y luciendo bastante malhumorados. Se sentaron frente a Harry y Hermione y rápidamente comenzaron a comer.

—¿Poco tacto? ¿Yo? —Harry solo exclamó ante el comentario de Hermione.

—¿Por qué suenas tan sorprendido? —Faith preguntó con el ceño fruncido. Harry le lanzó una mirada desesperada.

—Pero si estábamos pasándola bien, y de repente mecuenta que Roger Davies le había pedido salir y que ella solía ir a aquel ridículo salón de té abesuquearse con Cedric. ¿Cómo crees que me sentó a mí eso?

—¿Cedric se besuqueó con ella en público? Eso es repugnante—dijo Faith mientras tomaba un gran bocado de sopa humeante. Todavía estaba en su suéter de Quidditch, pero como hacía frío afuera, se estaba congelando. Ella pensó que el deporte activo ayudaría, pero Angelina enfocó el entrenamiento de esos días en pasar la Quaffle en lugar de anotar.— Espera, ¿se trata de tu cita con Cho?

Harry asintió.

—Asumiré que no salió bien... —murmuró Faith y Harry asintió de nuevo. —¿Qué tan falto de tacto fuiste?

Y luego Harry le explicó todo lo que había sucedido. Sobre cómo dijo que se reuniría con Hermione más tarde ese día y cómo habló mucho con Faith sobre Cedric y cómo ella estaba molesta por eso. Incluso le contó a Cho lo que Faith dijo en broma sobre una cita alternativa si no salía bien.

—Bueno, ya ves—dijo Hermione con impaciencia, —no deberías haberle dicho que querías conocerme a la mitad de tu cita o que Faith dijo que sería tu respaldo.

—Pero, pero—Harry estaba realmente confundido, —pero...me dijiste que te encontrara a las doce y que la trajera, ¿Cómo se suponía que iba a hacer eso sin decírselo? Y le dije que Faith lo dijo como una broma, no hay nada de malo en eso, ¿verdad?

—Tendrías que habérselo explicado de otro modo —aclaró Hermione —. Tendrías que haberle asegurado que te daba mucha rabia, pero queyo te había hecho prometer que irías a Las Tres Escobas, y que en realidad no tenías ningunas ganas de irallí porque preferías mil veces pasar todo el día con ella, pero desgraciadamente creías que no podíasdarme plantón; y tendrías que haberle pedido por favor que te acompañara, porque así podrías librarteantes de mí y que Faith estaba bromeando totalmente y que no veías a Faith de ninguna otra manera que no fueran amigos y eso probablemente estaba saliendo con algún tipo de Hufflepuff de todos modos. Faith sonrió, Hermione seguro que sabía lo que les gustaba a las chicas. —Y podría haber sido una buena idea mencionar lo feas que crees que somos también.

—¡Oye! —Faith dijo.

Harry miró de Hermione a Faith y viceversa.

—Pero yo no las encuentro feas.—dijo Harry con el ceño fruncido. Realmente no entendía nada de lo que acababa de decir Hermione.

Hermione y Faith se rieron.

—Harry, eres peor que Ron ...

—¡Oye!

—Mira, disgustaste a Cho cuando dijiste que ibas a encontrarte conmigo y cómo Faith, en broma, hizo un movimiento contigo, así que trató de ponerte celoso. Era su manera de descubrir hasta que punto te gusta.

—¿Estas segura? —Harry miró a Ron y Faith en busca de ayuda. Necesitaba estar seguro de que no era el único que pensaba que esa chica estaba loca.

—¿Las chicas hacen eso? —Faith le preguntó a Hermione, igualmente desconcertada.

—Bueno, ¿no habría sido más fácil si me hubiera preguntado si me gustaba más que ustedes dos?—Dijo Harry.

—Las chicas no suelen hacer preguntas como esa —razonó Hermione. Harry miró a Faith de nuevo, para ver si confirmaba, pero ella estaba tan sorprendida como él.

—¿No es así? —Ella preguntó. —¿Por qué no lo harían? Mucho más fácil. Le pregunté a Alex si le gustaba.

—¿Y Qué dijo? —Preguntó Ron, repentinamente interesado en la conversación pero con el ceño fruncido.

—Bueno, sí, por supuesto, ¿por qué más crees que nos hemos estado besando todo el año?

Ron se atragantó con su sopa y Harry tosió.

—¡Bueno, de todos modos, deberían! —Harry continuó. —¡Entonces podría haberle dicho que me gusta, y ella no habría tenido que preocuparse por la muerte de Cedric!

Faith pensó en Cho y Cedric por un segundo. Parecía que realmente lo amaba, cualquiera que la viera este año podría confirmar que lo único que había estado haciendo era llorar por eso. Pero Faith todavía estaba en conflicto acerca de cómo podría querer estar con Harry tan pronto. Mentalmente tomó nota de tal vez hablar con Cho sobre Cedric. Quizás Faith lo entendería.

—No estoy diciendo que lo que hizo fue sensato—dijo Hermione, sonriendo a Ginny que acababa de unirse a ellos, también tan embarrada como Ron y Faith. —Solo intento que veas cómo se sentía ella en ese momento.

—Deberías escribir un libro,— concluyó Ron, —Tendrías que explicar todas las locuras que hacen las chicas para que los chicospudiéramos entenderlas. O deberías escribir un libro, Faith, para que las chicas dejen de hacer esas locuras y tomen tu ejemplo.

—Bueno, eso es lo que pasa cuando creces con siete hermanos, —sonrió Faith.

—De todos modos, ¿Cómo estuvo el entrenamiento de Quidditch? —Harry pidió dejar el tema de su horrible cita con Cho.

—Fue una pesadilla— le dijo Ron.

—Oh, vamos —dijo Hermione, mirando a Ginny y Faith. — seguro que no ha sido tan...

—Sí, lo fue— dijo Ginny.

Ginny era nueva en el equipo, pero aún no estaba segura de su posición. Probó para el nuevo Buscador, pero Angelina comenzó a reconocer su talento de cazadora  y el talento de Faith en Buscador. Fue totalmente inesperado, pero dejó a Angelina solo más frustrada. Faith esperaba seguir siendo una cazadora.

—Fue espantoso—dijo Ginny con una burla.

—Estoy bastante segura de que Angelina está llorando en su cama en los dormitorios—le dijo Faith a Harry y Hermione.

Después de la cena, los tres jugadores de Quidditch se dieron una ducha antes de unirse a los otros dos en la sala común. Estaban hablando con Fred y George cuando Faith regresó, su cabello mojado goteaba sobre su camisa. Pensó para sí misma, podría querer revisar ese manual sobre diferentes habilidades metamorfomagas. Recordó un capítulo sobre secarse después de la lluvia o la ducha.

—Me parece que no quiero ni ver ese partido. Si Zacharias Smith nos gana tendré que matarme— dijo George.

—Querrás decir que tendrás que matarlo a él —refunfuñó Fred.

—Yo te ayudaré,— murmuró Faith mientras se sentaba en el sofá de dos plazas.

—Hey, Faithy-kins.

Faith puso los ojos en blanco.

—Te vimos atrapando la Snitch hoy— le dijo George. Habían estado viendo la práctica. —No sabía que tenías potencial para buscadora.

—¿Eres la nueva Buscadora? —Preguntó Harry sorprendido.

—Bueno, aún no es definitivo. Seremos yo o Ginny, pero espero que sea Ginny. Me siento mucho más cómoda siendo una Cazadora,— le dijo Faith. —Pero creo que matar al tipo Smith es una buena idea. Dije que iba a maldecirlo una vez que Harry nos enseñó algunos buenos hechizos así que ...

—Ese es el problema con el Quidditch—se mezcló Hermione en la conversación mientras miraba su tarea de Runas, —crea todo este mal sentimiento y tensión entre las casas.

Levantó la vista de su copia del Silabario del hechicero  y encontró a los cuatro jugadores de Quidditch mirándola con expresiones de disgusto.

—¡Es cierto! —se defendió—. En realidad no es más que un juego, ¿no?

—¿Perdón?

—Hermione—dijo Harry sin aliento, —eres buena en sentimientos y esas cosas, pero no entiendes sobre Quidditch.

—Tal vez no—se encogió de hombros, —pero al menos mi felicidad no depende de la habilidad de Ron como guardián.