Capítulo 11

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Naruto siempre tuvo por donde fuera adorado, la vista de un Dios, Benévolo, Justo, Misericordioso, Compasivo, Amable, pero también Valiente, Dedicado y Determinado. Los humanos lo adoraban por ser todo lo que representaba de lo bueno de la masculinidad, no era mujeriego, lascivo, orgulloso, belicista, pese a su dominio en la Guerra, pero algo de lo que más se destacaba era por su paternidad, a diferencia de otros dioses, él jamás dejaba a sus hijos solos, arreglándose de sí mismos, sino que guiaba, educaba, y en casos determinados corregía, a la par que demostraba un profundo amor por descendencias, en sus nietos. Catalogado como Buen esposo, pese a ser de los practicantes de la poligamia, era el modelo a seguir del hombre ideal en Grecia, celando a muchos Dioses masculinos, los cuales ponían en contra a grandes ciudades de la zona, Esparta y Atenas, eran las que más aborrecían al dios rubio.

Fue mucho el odio que Ares y Zeus profesaban por él, que hicieron que Niobe, hija de Tántalo y la reina de Tebas, esposa de Afión, sintiera mucho orgullo de sus 7 hijos varones y 7 hijas mujeres. Tal era el orgullo que ambos Dioses causaron en ella, que presumía a sus 14 habilidosos y bellos hijos e hijas a todo el mundo, claro que sus hijos jamás se sintieron orgullosos de si mismos, al contrario de la madre, eran humildes, algo que Naruto admiraba

Fue en una ocasión, cuando se celebraban los ritos de adoración para Leto, la madre de Apolo y Artemisa, y Primer esposa de Naruto, que Níobe habló con gran desprecio ante sus súbditos. Según la reina, a quien debían adorar era a ella que había conseguido dar a luz a 14 hijos. Una persona real que además tenía un marido que había obrado el milagro de crear las propias murallas de Tebas con su música.

Estas palabras fueron subiendo un poco de tono, hasta que finalmente la propia Níobe canceló las ceremonias para presentar los honores a la diosa, pues para la reina ella tan sólo había dado a luz dos hijos.

El pueblo obedeció a su reina, cancelando las celebraciones, no obstante, Apolo y Artemisa se enteraron de lo sucedido, por lo que decidieron tomar represalias. En su furia, se posicionaron en las torres de la ciudad que adoraba a su padre, el mismo día que la ciudad celebraba las olimpiadas, donde participaban los 14 hijos de Níobe, tensaron sus arcos, lanzando sus flechas, dejando nada más a los menores del matrimonio humano y antes de que siguieran locura, su padre, con un rostro que reflejaba dolor y traición a sus enseñanzas, les colocaría un sello noqueándolos a ambos. Atinó a escuchar al más pequeño de los hijos de Niobe, un chico bello de unos 14 años, pelimarrón

Joven: Perdónenme Dioses

[Nota del autor: cambien la ropa por algo griego asique no se quejen]

Cargó a ambos y chasquearía los dedos haciendo que la mujer se transformara en un grotesco ser de un solo ojo y un solo pie, basándose de un viaje a las tierras de Japón, en una criatura que en esas tierras llamaban Yokai, una especie de Demonio llamado Yamanji.

Afión en su furia, quiso quemar el templo del protector de Tebas, pero el joven sobreviviente lo detuvo, siendo visto por Naruto y unos recientemente despertados Apolo y Artemisa, escuchando

Joven: no permitiré que profanes el templo

Afión: quítate ahora y deja vengarme de los dioses

Joven: y causar más dolor del que mi madre causó!!! Jamás nos lamentamos de algo, y ahora lo haré, ella se enorgullecía de nosotros, y ofendió a los dioses, sé que quizá no pueda redimirme por no parar a Madre antes, pero no dejaré que el templo de Lord Naruto sea profanado y ultrajado por ti en venganza.

Afión se arrojaría contra su hijo quién con una espada que brillaba en dorado, mientras un sorprendido y sonriente Naruto observaba la escena y lo reclamaba como su campeón. Apolo y Artemisa, sintieron un poco de culpa, y al ver que su padre le sonreía al joven sintieron algo de celos, pero no podían hacer nada debido al sello que Naruto les puso. El joven enterraría la espada en su padre quitándole la vida y salvando el templo, mientras por el Shock emocional el joven se desmayaba. Fue entonces cuando la expresión de Naruto cambió, a una de dolor y traición, se giró a ambos gemelos, quienes se sorprendieron de verlo así, Artemisa que era bastante consentida quiso abrazarlo pero Naruto no loa dejaría. Con acuerdo de Leto, gracias a su convocatoria más leal, Gamakichi, un sapito naranja, tomaron la decisión

Naruto: sé que no soy un padre del que ambos se merecen –eso calaría hondo en ambos dioses- pero sí se algo, y es que los eduqué de modo que no sean como los demás Dioses, arrogantes, vengativos, vanidosos, ególatras y narcisistas.

Artemisa: pa papá –tratando de hablar, esas palabras le herían

Apolo: papá –sintiendo algo pasar

Naruto: les enseñé a diferenciar un inocente de un culpable, les enseñé el reconocer y tener piedad y compasión

Apolo: pero papá defendimos a mamá

Naruto: y créeme que a ella y a mí nos duele demasiado esto, como no tienen idea, pero así lo hemos decidido, con sus hermanos de acuerdo.

Artemisa: que cosa? –teniendo un mal presentimiento

Naruto: Con su madre, hemos decidido que estarán castigados y exiliados de la Isla –dijo derramando lágrimas y mostrando cuan traicionado se sintió, a pesar de que los amara más que a su vida misma- sus poderes serán sellados y sus acompañantes no abandonarán la isla. El tiempo que estarán fuera dependerá de cada uno de ustedes, y créanme que si pudiera tomar un castigo menor, no podría, se dejaron influenciar por una humana y actuaron sabiendo que jamás lo hemos hecho. Hasta que aprendan a valorar y entender lo que Leto y yo les hemos enseñado, estarán fuera de la isla, y cuando lo aprendan, el sello lo sabrá y les permitirá pasar los remolinos. Hasta entonces, les deseo suerte.

Acto seguido Naruto tomaría al joven desmallado y a su hermana sorprendiendo a la misma, y se retiraría del lugar dejando con la mirada en blanco a los gemelos. Cada uno sentía algo, tristeza, decepción de si mismos, los dos notaron la mirada de dolor, de cuanto le dolía a su padre hacer eso, se sintieron como basura. Se miraron y partieron a lugares separados para encontrar las respuesta, privados de su poder divino, amistades y familia, solos como humanos.

Al llegar Naruto a Uzu, abrazaría a su esposa mientras ambos jóvenes se inclinaron y pidieron perdón por la acción de su madre. Leto con un aura maternal hablaría

Leto: no puedo aceptar el perdón de quienes no me han ofendido, pues los hijos no deben de pagar los pecados de sus padres.

La sorpresa de los jóvenes era sorprendente, por lo que el muchacho se voltearía a ver a Naruto, quién le diría lo mismo, él no culparía a un inocente por los delirios y el orgullo de sus padres, sino que al contrario le reveló al joven que al defender con valentía su templo de su colérico padre, le dio al joven la oportunidad de ser su campeón, Naruto había escuchado de Jason y los argonautas, quienes contaban con el favor de Hera, asique si ellos tienen campeones, por qué el no.

El joven, a pesar de su sorpresa, aceptaría ser su campeón, jurándole su lealtad y compromiso hacia él. La devoción de aquel muchacho no tenía precio, por lo que, con voz casi paternal, Naruto le dio la capacidad de usar el chakra, y dotó al chico de una habilidad para usar las sombras y controlarlas, siendo las habilidades del Clan Nara de su tierra natal, asombrado por el poder del Joven, Naruto lo entrenó durante casi 8 meses, convirtiéndolo en su primer Anbu, su primer líder de la defensa de la isla. Cobrándose un favor de Hades, le daría una inmortalidad parcial al chico, siendo capaz de vivir eternamente siendo joven, pero capaz de morir siendo asesinado.

Con Apolo y Artemisa:

Ambos vagaron por Grecia por 9 meses, miraron las familias humanas, sintiendo celos y añorar su vida al lado de su padre y madre, en su viaje juntos, tras 6 meses de estar cada quién por su lado, escucharon la respuesta de una madre a su hijo tras una pelea, la madre tras oír a su hijo querer vengarse de un hombre, quiso matar a su hijo, un recién nacido, su madre con sorpresa y un tono maternal preguntaría a su hijo

Mujer: ya veo, pero pregunto, quién te hizo el daño?

Joven: el hombre

Mujer: y el niño, siendo un inocente, al ser un recién nacido?

Joven: no, pero por qué lo dices?

Mujer: lord Naruto nos enseña mucho a veces, es un dios que jamás hemos pedido ni merecemos, pero sus enseñanzas nos nutren, es por ello, que te pregunto, te vengarías de un inocente

Joven: no

Mujer: y de aquel niño que no tuvo nada que ver lo lastimarías?

Joven: no –tomando raciocinio y dejar ir su enojo contra un inocente- crees que Lord Naruto me perdone –viendo una estatuilla del mismo- sabiendo que fallé las enseñanzas

Mujer: Lord Naruto siempre dijo, que quién lo merece obtiene un nuevo inicio

Allí entendieron como obraron en contra de las enseñanzas de su padre, sintieron el dolor que ellos causaron, la mirada de dolor que les daba, la entendieron, por lo que cargados de valor, se dispusieron a enmendar su error, partieron a Uzu, y cuando llegaron vieron los remolinos abrírseles. Entraron a la Isla, y quisieron saludar a su madre y hermanos, pero fueron bajo la mirada de Leto a acercarse a un lago donde su padre meditaba en la orilla.

Leto se escondió para oír todo, mientras ambos se sentaban frente a Naruto.

Apolo: papá

Artemisa: sabemos que debes de tener

Apolo: sentimientos encontrados con nosotros al vernos

Ambos bajaban la cabeza y Naruto escuchaba atentamente todo.

Ambos: pero queremos que sepas, que sentimos mucho todo papá, lo sentimos mucho y nos avergüenza el haberte fallado a una de tus más valiosas enseñanzas. Sabemos que no regresaremos a la vida a 12 jóvenes y doncellas que asesinamos en nuestra ira, no sabemos como podremos compensarlo pero te juramos que....

Antes que terminaran de hablar serían jalados en un abrazo por Naruto. Mientras Leto daba una sonrisa de felicidad, Apolo y Artemisa derramaban lágrimas, a la par que Boruto y los demás se escondían viendo y escuchando todo.

Apolo: cómo

Artemisa: cómo nos perdonas así

Apolo: tan fácilmente

Artemisa: pensamos que estabas furioso con nosotros

Naruto: nunca estuve enojado con ustedes, estaba triste, pensé que habían perdido el camino

Apolo: sí, perdimos el camino

Naruto: pero lo encontraron otra vez y lo han hecho por ustedes mismos –derramando lágrimas y sonriendo orgulloso- y me alegra mucho que hayan encontrado el camino hasta aquí

Ambos serían abrazados otra vez

Artemisa: no fue muy sencillo papá

Apolo: nos costó

Artemisa: y creo que con mamá acertaron en nuestro castigo

Naruto: no importa que tan duro sea el camino, pero si logras completarlo te alegrarás de ello.

Artemisa: lo sabías? Sabías que lo lograríamos

Apolo: pero cómo sabías que

Naruto: El destino es algo extraño, nunca se sabe cómo van a resultar las cosas: pero si mantienen su mente y corazón abiertos, les prometo que encontrarás tu propio destino algún día

Apolo: no lo logramos solos

Artemisa: tuvimos que ver a una madre hacernos entender al hablar con su hijo

Naruto: Lo más importante es siempre creer en uno mismo, pero una pequeña ayuda de los demás es una gran bendición

En los árboles

Los 3 muchachos miraban a su padre sorprendidos, lo habían visto, sobreprotector, infantil, amoroso, cariñoso, pero jamás lo vieron actuar tan sabio.

Iasion: desde cuando papá es tan sabio? –mirando a Boruto y susurrando

Adonis: misma pregunta hermano –susurrando

Boruto: creo que fue hace unos años, cuando se fue con el tío Konohamaru a Oriente, creo que conoció a un tipo anciano con bastantes frases sabias

Konohamaru: ah el buen Tío Iroh, fue en nuestro viaje por China

Los 3 iban a gritar pero Hebe y el hijo de Konohamaru, un niño de 9 años, producto de su amor con la diosa de la juventud cubrieron sus bocas para que no gritaran como niñas.

Arashi, era un chico similar a Konohamaru, un calco del Sarutobi de niño.

Con Naruto:

Tras que Naruto, Apolo y Artemisa se separaran Leto hizo acto de presencia, sumándose al abrazo familiar, para que después de 10 minutos, la alegría regresara a la familia.

Apolo y Artemisa conocieron al chico, quienes no los culparon a los hermanos, pero, aun así, aceptaron las disculpas por lo de sus hermanos, quedando en buen término, ya que la doncella, se volvió concubina de Boruto, debido a cierto encontronazo y aventura a los 5 meses de haber llegado.

Todo iba a ir sobre ruedas, pero un viaje a unas tierras cambiaría todo, y dejaría en evidencia que los demás panteones no son como se han pintado en citas y demás charlas. A la par en las Naciones elementales, un joven pelirrojo corría por Suna

El nombre del chico, Ayato Uzumaki Uchiha, hijo de Boruto Uzumaki, Dios de la Batalla, la Fortuna, la Familia, El relámpago y la Protección, Con Sarada Uchiha, hija de Sasuke Uchiha, y conocida como la Nueva Emperatriz del Fuego Negro. éste chico era el primer Semidiós Olímpico nacido en Naciones Elementales. Quién sonrió al ver el rostro de Kankuro no Sabaku todo pintado luego de una broma, con su "Pintura de Guerra".

Fin del cap.

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