*Bienvenidos al segundo capítulo de esta historia*

*The loud house es propiedad de Nickelodeon*
*Lina Loud propiedad de javisuzumiya*
*Suzume Cheng propiedad de bisping studios*

* Y sin más que decir, disfruten la lectura*

Ahí estaba ella, de pie en un oscuro lugar, tan oscuro como el vacío, moviendo su cabeza de lado a lado intentaba encontrar algo pero hasta donde llegaba su vista era total oscuridad, ella cayó de rodillas y comenzó a sollozar y lágrimas derramar, creyendo haber llegado a aquel lugar tan temido por los mortales... el Hades, no sentía clima alguno, ni frío ni calor, es el lugar de espera pensó, el terrible silencio aún más la tensó, aquel lugar era tan extraño que le transmitía terror, mientras abrazaba sus rodillas y lloraba en silencio se preguntaba una y otra vez ¿cual había sido su error? ¿porque esto le habría pasado? y ¿cuál había sido su pecado para terminar en ese frívolo lugar?

entonces fue que una luz la iluminó, una luz entre la oscuridad.
la niña aún con lágrimas en los ojos levantó su cabeza y vio esa luz dorada que brillaba como una estrella en el firmamento.
- no temas, sígueme yo te sacaré de aquí. -
habló una voz proveniente de esa luz dorada, ella se levanta y seca sus lágrimas al oír esto, una media sonrisa se dibujo en su rostro atormentado.
la luz comenzó a alejarse y la niña corrió detrás de la luz, corría y corría sin parar por el oscuro lugar con tal de a esa Luz alcanzar, no existía otra cosa para ella en ese momento.
la luz disminuye su velocidad y ella le logra alcanzar.
- lo has logrado. -
volvió a hablar aquella voz que salía de la luz y
la niña vio la luz con clara esperanza por un momento...

pero de repente dos gigantescas luces se encendieron allá en el horizonte frente a la niña y la luz dorada, su sonrisa se borró y su expresión paso a ser de horror, aquellas luces resultaron ser dos ojos que la veían fijamente, de pronto se escucha una risa demoníaca por todo el lugar aumentando los latidos de la niña a tal punto que su corazón casi sale de su pecho, aquellos ojos se alzaron en lo alto, se dibujaba una silueta gigante en el horizonte, ella al ver esto quedó petrificada.

- ATAÚD DE ARENA!!! -
gritó una voz ronca e hizo eco por el lugar.
de pronto la enorme silueta lanza lo que parece ser su puño directo a aquella niña horrorizada, la cual no se pudo mover ni hacer nada y para peor sin explicación alguna, el oscuro lugar comenzó a convertirse en arena pura.
- NOOOOOOOOO!!! -
gritó la niña y por último, todo se puso en blanco y aún se escuchaba el eco del gritó desgarrador de esa niña...

[ ... ]

puente de Brooklyn, New York
08:15 pm
Lina Loud, la chica de cabello blanco y mechón color turquesa despertaba lentamente, lo primero que vio fue el cielo nocturno y las estrellas brillantes e inmediatamente levantó su tronco superior, sentada en el suelo, vio a un lado y a otro, encontrándose con la hermosa panorámica del puente de Brooklyn y los altos edificios atrás, cayó en cuenta que aún seguía viva, tocó sus brazos y su pecho, sintió su boca húmeda y se limpió, al parecer se había quedado dormida por el babeo y aquella pesadilla que tuvo.
- hasta que por fin despiertas. - habló una voz al lado de Lina, esta se alertó y vio a la extraña chica sentada junto a ella sin bajar la guardia.

- ¿que pasó?... ¿quien eres tú?... y d- d- ¿donde estamos? -
preguntó una muy alterada Lina.
- tranquila, una pregunta a la vez... ¿no recuerdas nada verdad? -
respondió con una pregunta la chica a Lina
y esta solo negó con la cabeza.
- lo último que recuerdo fue... - Lina dejo de hablar y abrió los ojos como platos al recordar lo último que le había sucedido.
- co... co... ¿como es... posible? - habló nuevamente Lina con asombro.
aquella chica tenía el cabello hermosamente largo y era de color rosa, ya no usaba máscara, tenía ojos de color esmeralda y su semblante transmitía tranquilidad.

con una sonrisa la chica de cabello rosa le respondió.
- nuestra probabilidad de sobrevivir era de una en cien millones, tuvimos mucha suerte nos tocó ese uno. -
Lina aún no procesaba lo que había oído, peor aun no procesaba todo lo que había pasado.
- imposible. -
susurró Lina con incredulidad.
- bueno, creo que es hora de irnos. -
comentó la mujer de cabello rosa mientras se ponía de pie e invito a Lina a ponerse de pie.

- ¿a donde vamos? -
preguntó Lina al tiempo que se ponía de pie.
- voy a dejarte en algún departamento de policía para que localicen a tus padres. -
le respondió la chica, Lina la interrumpió.
- no, no porfavor, no me lleves ahí, ayúdame tu a encontrar a mis... -
Lina freno de nuevo sus palabras al sentir una terrible presión en su pecho, de sus ojos se asomaban unas lágrimas y de pronto cayó de rodillas y estalló en un llanto inconsolable.

- nooo!!! Mami!!!, papi!!! ella los mató!!! y yo no pude hacer nada!!! -
decía en su llanto la niña, la mujer vio a Lina ahí arrodillada, una mirada compasiva fue lo que dirigió antes de hablar.
- escucha... tus papás -
intentaba decir algo pero el llanto de la niña la interrumpió.
- tus papás... -
volvió a ser interrumpida, entonces frunció el ceño y una vena se resaltó en su frente.

- ¿¡¡QUIERES CALLARTE!!? -
gritó enojada la chica, Lina detuvo su llanto y vio atentamente a la chica.
- estoy segura que tus padres aún están vivos y deben estar buscandote. -
con autoridad habló la mujer mientras sacaba un pañuelo de su pantalón y se lo daba a Lina.
- ya deja de llorar, secaté las lágrimas y los mocos, la esperanza es lo último que se pierde, tu no pierdas esa esperanza. -
la chica pelirosada cambio su expresión por una más tranquila, Lina seco sus lágrimas y asintió con la cabeza afirmativamente, la niña de cabello blanco se tocó el pecho y sintió el dije de corazón, era el collar alrededor de su cuello que su mamá le había dado, ese collar se había convertido ahora en un símbolo de esperanza para ella.

- si aún están vivos, me ayudas a encontrarlos? -
decía Lina mientras jadeaba por efecto de su llanto.
la chica de cabello rosa volvió a ver a Lina con compasión, la niña a la que había salvado le pedía tal cosa sin conocerla, sin saber absolutamente nada de ella ni de donde viene... pero había algo que le decía a la chica que aceptara, no perdía nada, quizá iba a ganar algo, pero no era eso lo que le importaba realmente... le importaba más volver a unir a esa familia.

- esta bien. -
contestó finalmente la chica de cabello rosa dibujando una media sonrisa en su rostro, Lina también sonrió pese a lo que había sufrido.
unos diez segundos de silencio incomodo se adueñaron del momento entre las dos féminas, la chica de cabello rosa fue la primera en hablar.
- y emm... ¿en qué parte de New York vives? -
Lina cambio su expresión a una de confusión.
- yo... no soy de aquí, ¿pero y tu? - respondió Lina
la chica de cabello rosa se quedó muda.

- ¿tienes celular? -
contrarrestó la pregunta con otra la pelirosada.
Lina negó con la cabeza, la chica de cabello rosa lanzó una risa nerviosa mientras jugaba con su cabello.
- jejeje, veras... yo tampoco soy de aquí, ni de ningún otro estado. - admitió finalmente, Lina abrió los ojos como platos al oír esto.
- ay no puede ser, esto está genial primero mi cumpleaños se ha arruinado y ahora ¡estoy perdida en New York! ¡acaso esto no podría empeorar! -
exclamó Lina con los ojos cerrados alzando las manos al cielo en plena señal de frustración.
- basta de lloriqueos, no todo está mal ¿ok? -
intervino la chica con molestia.

- ¿y que se supone que haremos? no se ni donde estamos. -
respondió Lina igual de molesta.
- quejarse y ponerse a llorar no es una opción... se donde podemos ir. -
acotó la chica aun mas molesta, al ver que su carácter casi la domina, largó un profundo suspiro y se alivio.
- ¿y a donde iremos? -
preguntó en voz baja Lina.
- a... los barrios bajos. -
al decir esto, la chica de cabello rosa desvío su vista al sur, Lina no sabía de lo que la chica estaba hablando, pero sonaba realmente insegura y esa inseguridad se le contagio de inmediato.

- ¿y eso es malo? -
preguntó Lina con temor.
- no... ya viste lo que puedo hacer, nadie se atreverá a hacernos dañó.-
Lina inmediatamente sonrió al oír esto y también recordo lo que ella hizo en coney island hace un rato.
- antes de irnos, quiero estar segura de que confías en mí, voy a ayudarte a reunirte con tus padres así que... ¿confías en mí? -
la chica pelirosada le extendió la mano a Lina, y esta ante la pregunta asintió tímidamente, no lo pensó dos veces y tomó la mano de ella y ambas emprendieron rumbo al sur.
- ¿cual es tu nombre? -
le pregunto Lina.
- soy Suzume Cheng... y tú ¿como te llamas? -
- Lina... Lina Loud. -
- que nombre tan lindo, ¿cuantos años tienes? -
- trece años, los cumplí hoy. -
- Ah pues felicidades. -
- gracias... oye no pude preguntar antes, pero ¿como hiciste todo eso allá en coney island? fue impresionante!!! -
- ¿sabes que será impresionante? el golpe en la cabeza que te daré si vuelves a decir que tus padres están muertos. -
- ok ya no lo diré más, ¿¡pero dime cómo hiciste eso!?-

ambas chicas iban conversando mientras caminaban tomadas de la mano al dicho barrio bajo, Lina iba muy emocionada preguntandole cosas a suzume, esta sonreía al oír hablar a la niña de cabello blanco, esto no fue impedimento para distraerse de a dónde se iban a ir a meter, ¿porque buscar ayuda ahí? ¿en el barrio bajo? ¿quien en su sano juicio iba a buscar ayuda ahí? y peor aún en un estado que fue fundado en 1624 por holandeses y es conocido por sus pandillas y organizaciones criminales, antes New Amsterdam ahora New York.
barrio bajo es sinónimo de asaltantes, asesinos, violadores, secuestradores, todo tipo de negocio o tratos ilícitos, no hay ley o constitución que valgan, o sobrevives por tus medios o mueres. ahí iban al vientre de la bestia, a la boca del lobo... al mismísimo infierno.

[ ... ]

Coney Island, New York
08:20 pm departamento de policía
- Lina Marié Loud Sharp, edad trece años oficial. -
Hablaba un joven de cabello blanco.
- bien... descuiden señores Loud,  haremos todo lo que este a nuestro alcance para a encontrar a su hija, no pierdan la fe, nuestro equipo de inteligencia ya ha iniciado las investigaciones para dar con el paradero de su hija. -
el oficial se puso de pie y salió de la oficina.
Lincoln Loud y Sam Sharp  encontraban en el dicho departamento de policías, reportando la desaparición de su hija, ya que su cadáver no fue encontrado después de haber sido comprimida al extremo
Sam lloraba en los brazos de su novio, Lincoln acariciaba su cabeza y espalda tratando de consolarla, cosa que resultó inútil.

- ay Lincoln, quiero a mi niña de vuelta... mi Lina, no se si creer algo de lo que ese oficial dijo. - decía en su llanto Sam.
- tranquila mi amor, yo tengo fe en que la encontrarán, mi hija no está muerta yo lo sé. -
- ¿como sucedió todo esto? no lo entiendo. -
- yo tampoco comprendo nada Sam, pero descuida, todo va a salir bien. -
finalizo Lincoln con toda certeza, tomo el rostro de Sam y le dio un beso en la frente.

pero todo se trataba de una máscara para darle fuerza a su novia, por fuera era optimista, pero por dentro Lincoln Loud se sentía impotente, una irá y una rabia había despertado en el, mezclado con la preocupación y la incertidumbre de no saber que fue de su hija, ¡su única hija la puta madre! todas estas emociones hacían estragos en su mente, esta situación de seguro le sacaba las canas, pero por suerte el tenía el cabello blanco.

- Luna... ¿que te pasó... hermana? -
pensó Lincoln, por su mente también pasó el rostro resquebrajado de Luna y aquella arena que la cubria, Lincoln cerro los ojos y abrazo aún más fuerte a su novia, para olvidarse de esas escenas.

[ ... ]

South Bronx, New York
08:40 pm
- ¿y que haces en New York? - preguntó suzume.
- estábamos celebrando mi cumpleaños. -
contestó Lina.
- ya veo. -
- si, la verdad es que había tres lugares que quería conocer, pero solo podía elegir uno, el primero era Detroit, pero es peligroso porque hay androides que dan veintiocho puñaladas, el segundo era Florida, a conocer algun parque temático en Orlando o Miami y por último New York...yo elegí New York, pero nunca imaginé que esto pasaría. -
- nadie sabe cuando o como pasarán las cosas, solo pasan, pero lo sé, fue traumante para ti ¿no? -
- no puedo sacarme de la mente ese rostro quebrado como el cristal. -
- yo tampoco. -

Suzume y Lina detuvieron su caminar.
- llegamos. -
dijo con frialdad Suzume, Lina se quedó viendo ese laberinto de callejones y calles anchas, había poca iluminación en esa área y no había mucha gente deambulando por la calle, las paredes de los edificios estaban pintadas con graffitis muy coloridos, unas decían "Bronx" otras decían "guetto 4 Life" otras pintadas los rostros de algún artista de música urbana y detrás las banderas de Puerto Rico, República Dominicana y México.
- bueno, vamos. -
habló Suzume y entonces reiniciaron de nuevo su caminata.
mientras caminaban tomadas de la mano por la primer calle, se escuchaba música de trap o reggaeton con lenguaje explícito o muy vulgar.

en la segunda calle, se encontraron con sujetos de diferentes etnias vestidos como pandilleros, otros sin camisa, otros tatuados hasta en el rostro y otros fumando cannabis, estos al ver a Suzume y a Lina comenzaron a decir y a hacerles gestos obscenos, palabras soeses y denigrantes como por ejemplo.

- a las dos me las cojo. -

- están buenas para un polvazo. -

- si las agarro las pongo en cuatro. -

repentinamente Lina apretó con fuerza la mano de Suzume, esto no pasó de ser percibido por la pelirosada, Suzume le dijo a Lina que no tuviera miedo y que no volteara a ver a los sujetos, los latidos del corazón de Lina se aceleraron rápidamente, pero se aceleraron más al oír el ruido de un arma siendo recargada, estaba muy atemorizada, terror que le infundía oír aquellas palabras vulgares, denigrantes y las voces graves de los que hablaban, el arma siendo recargada y también no podía creer que pudieran existir personas asi.

10 minutos después...
Suzume y Lina ya estaban en lo profundo del barrio bajo, ahí si estaba más despejado pero también más oscuro, a lo lejos solo se podía escuchar a un grupo de sujetos rapear uno contra otro.
- ya estamos a solo tres calles de llegar Lina. -
- que bueno, odio este lugar. -
Lina respiraba con tranquilidad al oír que ya estaban por llegar.
- oye Suzume, gracias por salvarme la vida en coney island. -
- aún no me agradezcas, recuerda que te voy a reunir con tus padres. -
- si, pero estoy muy agradecida contigo por salvarme. -
Suzume esbozó una leve sonrisa y vio a Lina a los ojos y podía ver claramente en esos ojos azules temor, un temor indescriptible para ella, después de todo se trataba de una niña de trece años, pero todo lo que vivió era mucho para una niña de su edad... esto enterneció a Suzume, no lo pudo soportar y le extendió sus brazos invitándola a un abrazo, Lina se lanzó hacia ella y la abrazo con todas sus fuerzas, como cuando estaban dentro del tumulto de arena...

- jajajajaaa... -
se escuchó una risa por aquel lugar, Suzume rápidamente soltó a Lina, la escondio detrás de ella y se puso en modo de defensa.
- ¿que fue eso? -
preguntó Lina con temor.
- problemas. -
contestó Suzume moviendo la cabeza para localizar al hueste.
- jajajaja, Suzume pero que grata sorpresa encontrarte en New York. -
- ¿quien eres y como sabes mi nombre? -
de repente Suzume se encontró cara a cara con un sujeto más alto que ella, Lina se llevó tremendo susto al ver su rostro, su rostro era de maldad pura y lo que resaltaba era aquella sonrisa gigante, literalmente de oreja a oreja, vestido con ropa negra y un par de botas de vaquero en sus pies, cargaba una especie de sable gigantesco en su espalda, irónicamente su cabello era color blanco como el de Lina.

- Silent. -
dijo Suzume en voz baja.
- Oh vaya, te sabes mi nombre, que halagador. -
le contesto el sujeto haciendo ademanes exagerados con sus manos.
- ¿que demonios haces en New York? -
preguntó con agresividad la chica pelirosada.
- que bueno que lo preguntas, estoy en una misión importante... ordenada por "destructor"... conseguir más reclutas para sus experimentos, a cambio de recompensas jugosas. -
contestó Silent sacando el sable de su espalda y clavándolo en el suelo.
- ¿q-q-que p-pasa? -
preguntó Lina temblando de miedo.
- quédate detrás de mi. -
contestó de mala gana Suzume.
- ¿y quien es la pequeña que te acompaña eh Suzume?. -
- eso no te incumbe Silent. -
Silent vio los cabellos blancos de aquella niña y sonrió.
- pero si es un pequeño copito de nieve, niña si fuera tu me apartaría de esta chica, es una busca problemas, veo que la mujer de arena falló la misión. -
Lina y Suzume jadearon al oír esto.
- deja de decir estupideces. -
- jajaja, aquí la única estúpida eres tú, al creer que puedes detener a "destructor" deduzco que a eso has venido a norteamerica, nadie las salvara... ¡a ambas las voy a decapitar!. -
al oír esto Lina abrió los ojos como platos, el miedo no la había abandonado en ningún momento.
Entonces Suzume hizo aparecer los círculos azules en sus manos y su cabello paso de lacio a puntiagudo cual puercoespin.
- no permitiré que toques a esta niña ¿oíste bien enfermo mental? -
- reto aceptado. -
y de pronto Silent levantó el pesado sable en el aire y lo dejo caer violentamente contra Suzume, está reaccionó con rapidez y coloco un campo de fuerza que detuvo al sable aunque el campo de fuerza se fracturó.
- ¡desapareció Suzume! - 
gritó Lina alterada, efectivamente el sujeto no estaba por ningún lugar.
- abre bien los ojos Lina, la virtud de este maldito es la velocidad, cubreme la espalda. -
- si. -
- jajaja, ni aunque hagan equipo podrán enfrentarme, es inútil ya acepten su destino... ¡LA MUERTE! -
de repente el sable volvió a chocar contra el campo de fuerza de Suzume, todo paso muy rápido que Lina no lo vio, Suzume intento golpear a Silent pero este desapareció nuevamente.
- esa espada es gigantesca. -
Comentó Lina temblando de nervios.
- no le temas, eso es lo que lo exita. -
acotó Suzume para tranquilizar a Lina.
- como no tenerle miedo, parece el Guasón combinado con zabusa... espera ¿que? -
- jajaja Suzume no tienes porque ocultar tu miedo. -
habló de la nada Silent, provocando a Suzume.
- no te tengo miedo maniático. -
- deberías, están a punto de morirse, me he sacado la lotería con este premio doble, "destructor" me recompensará muy bien si llevo tu cabeza y la de la niña como trofeos para el, ya que la mujer de arena no termino el trabajo... ¡yo si lo voy a hacer! -
de repente el silencio llegó, Suzume aún estaba guardia en alto, Lina detrás como queriendo romper en llanto... no se escuchó nada por un segundo hasta que de pronto...

CRASH!!!
Lina vio como aquel desalmado sujeto dejo caer el sable sobre su humanidad, pero al ver que no pasó nada levantó la vista y vio atonita como Suzume detenía el sable con el campo de fuerza, en un acto desesperado Silent le volvió a pegar rompiendo el dicho campo, pero hacer esto le costó, ya que el pesado sable se volvió difícil de maniobrar y perdió velocidad con el segundo golpe, Suzume no perdió tiempo y de repente...

SMASH!!!
le propinó un golpe al estómago que hizo que Silent volara levemente hasta chocar contra una pared, Suzume lo siguió, aquel sujeto se levanta, Suzume le lanza un derechazo, pero Silent se lo bloquea agachándose y le propinó dos golpes rápidos al estómago,
Suzume cayó de rodillas, estuvo a punto de propinarle una patada, pero repentinamente recibió el golpe de una roca en la cabeza, este se voltea y ve a la niña de cabello blanco con la mano extendida.

SMASH!!!
a una velocidad impresionante, Silent llegó hasta Lina y le propinó un golpe al estómago que tiro a Lina al suelo retorciéndose del dolor.
Suzume se puso de pie y le dio una patada a silent directo a las pelotas, silent cayó arrodillado tomándose esa zona, Suzume aprovecho y le dio derechazo tras zurdazo inmisericorde al rostro, Suzume iba a finiquitar con una patada, pero Silent reaccionó y agarro la pierna de Suzume y con su otra mano el gran sable, en un movimiento rápido, silent tomó de la camisa a Suzume y con la cacha del gran sable le propinó un golpe al rostro y por último con la parte sin filo del arma blanca acertó un golpe demoledor a la humanidad de la chica pelirosada mandándola a rodar por el piso.

- no se porque proteges a esta niña, pero debe ser un precioso cargo. -
silent se dirigió a Lina quien se incorporaba lentamente, la agarro por su camisa sin mangas de color anaranjada y la arrojó violentamente contra la pared, Lina se quedó sin aire pero lo recobró al sentir el gigante sable afilado en su cuello.
- hoy, rodará una cabeza blanca, nunca he matado a un albino... hoy será la primera vez... lo voy a gozar como no lo puedes imaginar. -
Lina temblaba, lagrimeaba, se quejaba por los dolorosos golpes que recibió ese día y su vida comenzó a pasar frente a sus ojos al estar nuevamente al borde de la muerte.
- ¿esto es todo?... ¿se acabó?... ¿sobreviví solo para morir? -
Silent ya había movido el sable para amortajar la cabeza de Lina.
- papi, mami... si están allá arriba, ya estoy por llegar con ustedes, nos volveremos a reunir... -
Lina esbozo una débil sonrisa y cerro sus lagrimeantes ojos aceptando su destino cruel...

[ ... ]

la noche era silenciosa pese a la hora, exepto a lo que aconteció después, Lina Loud abrio lentamente los ojos y se llevó tremenda sorpresa por lo que vio.
Suzume tomaba con sus propias manos y todas sus fuerzas el pesado sable de Silent, tenía una herida en la frente por la que lloraba líquido vital, ella evito la inevitable decapitación de Lina.

- puede que seas muy veloz... - le dijo Suzume con la mirada encendida al asesino mientras forcejeaba.
- puede que seas muy sádico... -
de repente Silent comenzó a ceder y poco a poco soltaba el sable.
- pero... ¡ERES MUY DÉBIL! -
gritó Suzume y por último le arrebató el sable al asesino de las manos y lo lanzó lejos ante la mirada atonita de Lina, la pelirosada hizo aparecer el  círculo azul en su mano y la apunto contra el asesino.
- ¡tormenta ultravioleta! -
exclamó Suzume y un destello brillante salió del círculo, solo se escuchó un gritó de dolor y por último todo se puso en blanco...

[ ... ]

Suzume le tendió la mano a Lina, ayudándola a ponerse de pie.
- ¿estas bien? -
le pregunto Suzume a Lina.
- si pero tu... estas sangrando. - contestó Lina alarmada al ver sangre brotar de la frente de Suzume.
- Ah no te preocupes estoy bien. - afirmó Suzume con una sonrisa.
- agh... ahhh... -
Silent yacía en el suelo arrastrándose, fue brutalmente carbonizado por la técnica de la chica pelirosada.
- ay no sigue vivo Suzume. -
dijo alarmada la niña peliblanca y se escondió detrás de Suzume.

- ja.. jaja... ja ganaste... esta vez, pero no correrás con tanta suerte Suzume. -
habló con voz débil Silent.
- y tú... -
se dirigió a Lina.
- te vas a arrepentir de haber confiado en esa ramera... Solo es cuestión de tiempo hasta que... -
fue interrumpido por un latigazo que recibió y por consecuencia de este, la cabeza de silent rebotó hacia atrás y quedó frio.
Suzume tenía su brazo derecho extendido y el círculo azul en su mano izquierda, había terminado el trabajo.

- que bueno que terminó. -
habló primero Lina, largó un profundo suspiro de alivio, todo había pasado y podía decir que era la primera vez que sobrevivió a dos muertes inminentes.
- vámonos de aquí... ven Lina. -
Lina atendió el llamado y tomó la mano de Suzume y ambas siguieron su caminata, su cabello rosa paso de puntiagudo a lacio nuevamente.

- eso fue épico Suzume, el golpeó con esa espada gigante pero tu detuviste su ataque y ahhh... - hablaba con entusiasmo Lina pero repentinamente un dolor la detuvo.
- ¿estas bien? -
preguntó preocupada Suzume, ella vio que Lina se tomaba el vientre con ambas manos.
- mi estómago duele, el me golpeo. -
contestó Lina con dolor.
- ¿segura que puedes caminar? - volvió a preguntar Suzume preocupada.

- si, si puedo. -
contestó Lina, pero al caminar trastabillo debido al dolor, era pésima disimulando, su dolor se notaba en su rostro.
- ya vamos a llegar, ven te cargaré en mi espalda ¿te parece? -
Lina dudo por un segundo, pero asintió débilmente, entonces Suzume se agachó y Lina se montó sobre su espalda.
- pesas niña. -
comentó Suzume y Lina lanzó una risita nerviosa.
- de seguro esa espada pesaba más que yo. -

Suzume camino con Lina sobre su espalda hacia su destino después de esa cruel batalla, Lina se acomodó en la espalda de Suzume, relajo su respiración y cerro los ojos posando su cabeza en la espalda cubierta por ese largo cabello rosa.
- ¿vas cómoda? -
preguntó Suzume.
- si. -
le contesto Lina.
- por su puesto que si, te voy cargando. -
acotó Suzume y Lina se rió levemente.

[ ... ]

Suzume y Lina llegaron a su destino, un edificio semi abandonado, la pelirosada tocó dos veces la puerta, después de unos 5 segundos la puerta se abrió y Suzume pasó adentro, al entrar ella la puerta se cerró.

dentro del inmueble, Suzume rápidamente dejo a Lina en un sillón.
- ¿Suzume que es este lugar? -  preguntó con clara desconfianza Lina, ella miro a todas partes, encontrándose con retratos, un montón de fotografías y la sala parecía que no tenía color debido a la carencia de luz.
- que inesperada sorpresa mi Lady... -
Lina volteo a ver de quién era esa voz, se encontró con un señor de  bigotes, su voz era gruesa con un acento campirano, el hombre vestía un pantalón negro, camisa sin mangas blanca.

- ay ya Eliseo, no finjas ya estabas claro que venía y no fuiste a buscarme, sabes muy bien que odio Estados unidos. -
le respondió Suzume enojada y con los brazos cruzados.
- perdón por eso mi Lady, el negocio ha estado muy ajetreado, al menos llegaste a tiempo... y ¿quien es esta niña? -
el sujeto de nombre Eliseo se fijó que Lina los veía con una ceja alzada.
- ella es una sobreviviente al ataque de hoy a coney Island, le ayudaré a encontrar a sus padres. -
- vaya, como siempre bondadosa mi Lady, es bueno saberlo... ¿cual es tu nombre chiquita? -
- soy Lina... Lina Loud. -
- es un nombre muy bonito Lina... sobre el ataque mi Lady, ¿que pudiste averiguar? -
- pues nada Eliseo, esa mujer de arena estuvo a punto de matarnos a mi y a la niña. -
- las noticias en este país valen madres, los titulares mecos con el encabezado de " atentado terrorista " como siempre culpando al enemigo que ellos mismos crearon, no saben a lo que se enfrentan en realidad. -
Lina vio en la TV el rostro de Luna, mejor conocida como la mujer de arena por los medios de prensa.
- ella... es mi tía. -
dijo Lina, Suzume y Eliseo detuvieron su conversación al oír a Lina.
- ¿como dices? -
preguntó Suzume.
- la mujer de arena... es mi tía. -  repitió Lina.
Suzume vio a Lina a los ojos, no estaba mintiendo, era verdad.
- demonios. -
dijo Suzume.
- chale. -
dijo Eliseo.

[ ... ]

casa de Eliseo, south Bronx, New York
09:10 pm
Lina estaba recostada en el sillón, en eso llega Suzume y se sienta frente a ella, la chica pelirosada abre su mano derecha y un círculo rojo aparecio en ella.
- ¿que haces? -
preguntó Lina.
- voy a curarte. -
contestó Suzume.
- ¿también puedes hacer eso? -
entonces Suzume aplicó con delicadeza su mano por el vientre de Lina, creyó que dolería pero no fue así, al levantarse del sillón ya no sentía dolor alguno.
- ja... Ya no duele... jajaja no duele. -
habló Lina con emoción, Suzume sonrió y tomó a Lina de los hombros.
- ¿ahora sí estas lista para hablar? no te preocupes por Eliseo, el no nos oirá. -
Lina se había rehusado a hablar sobre un tema que ella prefería no tocar, era algo muy delicado, pero Suzume la convenció de que solo se lo dijera a ella y a nadie mas.
Lina no estaba lista para tocar ese tema, así que suspiro pesadamente y se preparó para hablar.

- todo comenzó asi, según el relato de mis tías, la tía Luna estaba enamorada de mi mamá y...-
Lina se detuvo, Suzume le hizo un gesto con la mano de porque se había detenido.
- ¿y eso que tiene de malo? -
preguntó Suzume.
- pensé que eras homofóbica. - le contesto Lina.
- claro que no... yo también estuve enamorada de una mujer. -
acotó Suzume sarcásticamente.
- que??? -
- na era broma soy hetero, adelante. -
- no atrás. -
contesto Lina también sarcástica, haciendo enojar a Suzume.
- que continúes con el relato. -
- ok... -
dijo Lina tímidamente.

- por donde iba... a si... ella hacia cualquier cosa con tal de tener la atención de mamá, le escribía cartas, le dedicaba canciones, incluso la invitó a cenar con toda la familia, ahí fue cuando mamá conoció a papá, según mi tía Luan, ella descubrió que mamá y papá tenían una relación amorosa... a sus espaldas, al descubrirlo, la tía Luna cayó en depresión y no solo eso... se sintió traicionada, todas las noches lloraba y lloraba, al tiempo tía Luan descubrió a la tía Luna drogándose, bebiendo alcohol y cada noche salía con un chico distinto. -
Suzume escuchaba atenta el relato de Lina, ya sabía por donde iba todo.

- después de todo eso... ella se fue y no volvió... algunas de mis tías la dieron por muerta, mis abuelitos y las otras creyeron que encontró un hombre que se la llevó a vivir con el... hasta hoy día que la volvimos a ver... antes de desaparecer, dijo que nunca iba a perdonar la alta traición que papá y mamá le hicieron y que algún día los iba a hacer pagar. -
finalizo Lina su relato, la mente de la pelirosada ya tenía sus deducciones sobre esto.
- se sintió traicionada, eso es. - habló Suzume.

- una historia de amor y traición que bien suena eso, me recordo a las novelas de mi país. -
comentó el hombre del mostacho, Lina se asustó al ver a Eliseo aparecer de la nada.
- fue una presa fácil para el... ese infeliz usa a las personas fragiles de mente y corazón para sus morbosos experimentos, debió habérselo encontrado en algún momento. -
siguió Suzume
- em... ¿de quién estás hablando? - preguntó Lina confundida.
- es lógico, ¿quien mas puede darte el poder de controlar arena? -
Suzume estaba inspirada sacando sus conclusiones, realmente anonadada con esa información, tal parece que ya tiene un plan.
- con respecto a eso Suzume... ese desgraciado... ya está en norteamerica y según he oído... trajo a su liga de villanos. -
el plan de Suzume se fue a la mierda al escuchar lo que Eliseo le dijo.
- eso explica porqué Silent estaba aquí, sobrevivimos a el también. - Eliseo abrio ligeramente los ojos de la impresión.

- esos hijos de la chingada... -
- esto no es bueno, no solo tengo que ahuyentar a "destructor" de norteamerica, ahora tengo que ahuyentar a toda su liga de malandrines sin morir en el intento. -
decía Suzume sumamente estresada, Eliseo puso su mano sobre el hombro de Suzume.
- eso no es ningun problema para ti. -
Eliseo le asintió a Suzume dándole a entender que confiaba en ella.
- no es ningun problema, pero debo encontrar cuanto antes a los padres de esta niña, no puedo involucrarla en mis asuntos, luego me ocuparé de el, sus esbirros y la mujer de arena. -
Suzume ahora tenía dos problemas entre manos, uno más difícil que el otro.

- yo estoy muy confundida, ¿quien es el destructor y la liga de villanos? -
preguntó Lina.
- nos quedaremos aquí esta noche Eliseo, mañana vamos a partir de vuelta a coney Island. -
- sabes muy bien que mi casa es tu casa, pueden usar la habitación de arriba. -
- muchas gracias. -
- no es nada mi Lady. -
Suzume le pidió a Lina que la acompañará al segundo piso y esta la siguió.
- ¿como es eso de que vamos a volver a coney Island? no quiero volver ahí. -
- tus padres aun deben estar ahí buscandote, es bueno que comencemos a buscar en ese sitió. -
- solo espero que la tía Luna no aparezca de nuevo. -

[ ... ]

ambas féminas llegaron a la habitación, esta se veía igual que la sala, sin color, tenia una sola ventana, había una cama, un armario y una mesita al lado de la cama.

Suzume le lanzó una pijama a Lina y esta iba a ponérsela, cuando ve a Suzume quitándose la camisa de mangas largas, la camiseta sin mangas que llevaba por dentro y por último, el sostén.
Suzume se voltea y Lina se quedó boquiabierta y totalmente enrojecida por lo que vio, Suzume alzó una ceja y llevo las manos a su cintura.
- ¿que? somos mujeres, no hay nada de malo que veas mi senos. -

replicó Suzume.
Lina no contesto y solo se quedó quieta en su sitio, Suzume se puso una camiseta más holgada y así cubrir sus atributos.

después del momento incómodo, ambas ya estaban acostadas listas para dormir, Lina no podía cerrar los ojos, Suzume noto esto aún con los ojos cerrados.
- ¿todo bien Lina? -
- ¿quien era ese tipo del sable? -
- no querrás saber de él. -
- no seas así Cuéntame. -
- ya tuviste un día largo, descansa. -
- Suzume. -
- ok pero conste que te lo advertí. - enfatizó Suzume y volteo a ver a Lina.

- Gerald hateboer, nacido en Cardiff City, era un estudiante de psicología, tenía 22 años, llevaba una vida llena de éxitos, no tenía problemas ni nada por el estilo, pero un día se topó con "destructor" el asesinó a toda su familia tanto en Reino Unido como en Holanda, con la misma espada que el uso contra nosotras, al pobre no le quedó más remedio que unirse a él, le dio la virtud de ser veloz por eso se apodaba Silent, el gran sable y esa macabra sonrisa fue creciendo y creciendo conforme asesinaba a quien se opusiera a "destructor" víctimas favoritas, niños... los cortaba como una tijera corta el papel, cuantas atrocidades cometió y lo peor es que "destructor" solo los utiliza y luego los desecha como juguetes. -
Suzume bostezó mientras contaba la historia.
- lo bueno es que ya no causará más daño a nadie... ahora sí buenas noches Lina. -
finalizó Suzume la terrible historia de silent.

si bien Lina no podía cerrar los ojos, por lo del "destructor", la liga de villanos y todo lo que vivió ese día, los ojos ahora los tenía completamente abiertos después de oir lo que le contó Suzume.

continuara...