La puerta bien engrasada se abrió silenciosamente, el joven que la atravesó se quitó los zapatos y sus piernas se hundieron en la cómoda alfombra.

Se puso un par de cómodas camas, caminó por el largo pasillo, giró a la izquierda y abrió las pesadas puertas dobles, una sonrisa se dibujó en su rostro al notar a la persona sentada detrás de la mesa, bebiendo té tranquilamente, con un pequeño libro abierto al frente. de él.

"Corvus" dijo el adolescente volviendo su atención, con una sonrisa a juego en su rostro "Nos preparé té".

El hermano mayor sonrió agradecido y se sentó detrás de la pesada mesa de madera.

Se sirvió una taza de té humeante y sorbió ligeramente, cerrando los ojos mientras saboreaba el líquido tibio.

"¿Leer de nuevo El señor de los anillos?" le preguntó a su hermano menor, Hsu, mirando el libro "¿qué hora es ahora?"

El adolescente asintió "La duodécima vez, JRR Tolkien es uno de los mejores escritores de todos los tiempos"

Corvus sonrió levemente y sacudió la cabeza.

La puerta se abrió una vez más y entró un hombre con un esmoquin negro, con el pelo negro manchado de plata aquí y allá.

"Espero que el té sea de tu agrado", dijo con una pequeña reverencia.

"Es genial como siempre Maximiliano" respondió Julius.

"Un placer, mi señor" el hombre sonrió "¿Hay algo que desee, señor?"

Corvus echó un vistazo al reloj detrás de él. "Apreciaría una cena", respondió, poniendo la taza nuevamente sobre la mesa.

"Como desee señor", respondió el hombre antes de salir de la habitación, cerrando las pesadas puertas detrás de él.

Bebieron el té en silencio, el aullido del viento afuera era el único ruido en la habitación.

Finalmente Julius dejó la taza y sus ojos se dirigieron a su hermano mayor.

"Realmente no te entiendo Corvus" dijo el joven con un pequeño movimiento de cabeza "Sé por qué estás ayudando a Tohsaka, pero ¿no tienes miedo de que al final te haga daño?"

Corvus dejó su taza en su lugar y su mirada recorrió las pinturas de sus antepasados ​​antes de detenerse en su hermano menor.

"Sería una pena, pero es mi decisión".

Julius miró con cariño a su hermano mayor "A veces me pregunto cómo puede alguien como tú sobrevivir en la torre del reloj" negó con la cabeza.

Tomando un sorbo de su té, sus ojos se centraron en el libro frente a él "¿No crees que hubiera sido mejor si la era de los dioses hubiera continuado? Maravillas como Tir Na Nog habrían existido, un lugar sin muerte". o dolor", sonrió con nostalgia.

Corvus, por otro lado, tuvo una reacción completamente opuesta, entrecerró los ojos cuando un destello de ira los atravesó.

"Julie" su voz era tensa, la taza en su mano casi se rompía "Ni siquiera vayas allí".

El joven se apresuró a apaciguar a su hermano "No te lo tomes en serio Corvus, solo estaba hablando hipotéticamente"

Corvus suspiró pero no tuvo oportunidad de responder antes de que se abrieran las puertas y entrara el mayordomo con la cena.

Sus ojos recorrieron el texto una y otra vez. De vez en cuando tomaba otro documento, con el ceño fruncido en su rostro.

Rin suspiró, sus ojos se apartaron por un momento de los papeles frente a ella, comprobando la hora.

Ocho y diez.

Con un suspiro, volvió a mirar los documentos y frunció el ceño aún más.

Tenía cuatro pilas sobre la mesa, cada una etiquetada con un nombre diferente, y cada una contenía información que pudo investigar sobre las cuatro personas que estaba investigando en ese momento.

Ella sonrió al pensar en el esfuerzo que le llevó obtener toda esta información y, lo que es más importante, asegurarse de que nadie sospechara lo que estaba haciendo.

Claramente la subestimaron, y eso significa que su acto de mansedumbre funcionó a la perfección.

Un momento después su sonrisa se convirtió en un ceño fruncido, odiaba actuar débil y aunque al principio era útil ahora se estaba volviendo molesto.

Sus ojos volvieron a los papeles, cuanto más rápido lidiara con el problema que la llevó a compilar todo esto, más rápido podría dejar el acto.

Es decir, un tal Corvus Alstreim y lo que sea que lo rodeaba.

No podía bajar la guardia con nadie, no mientras supiera con certeza qué era exactamente lo que el hombre quería de ella.

Si no estuviera tan preocupada de que el hombre tuviera algún plan que pudiera terminar poniéndola en peligro, tal vez se habría sentido agradecida con el hombre que por sí solo insistió en que se uniera al lugar que ofrecía la mayor oportunidad para ella, un lugar lleno de tantas cosas. conocimiento oscuro y el lugar donde se decidieron todas las decisiones verdaderamente importantes en la torre del reloj.

Desafortunadamente, esta misma razón fue la que hizo que ella sospechara de él.

No tenía sentido, ¿por qué haría todo eso por ella? ¿Una persona que nunca había conocido antes?

Esto, junto con la advertencia tanto de su maestro como de Ainsworth, no le dejó otra opción que continuar actuando.

Sin embargo, no era tan ingenua como para creer que el anciano y Ainsworth no tenían sus propios objetivos, razón por la cual dos de las pilas de papeles tenían sus nombres respectivamente.

Por eso no pudo evitar fruncir el ceño ya que no podía encontrar nada que el segundo y Ainsworth tuvieran en común; además, el anciano tenía lo que parecía una buena relación con el mayor de los Alstreim, mientras que los Ainsworth no.

Le faltaba algo y eso la molestaba muchísimo.

Miró el expediente de Ainsworth.

Nombre: Elizabeth Ainsworth.

Edad: 34

Especialización: Magia de la familia Ainsworth, Flash Air.

Puntos notables: Elizabeth no es la directora actual de Ainsworth, sino que es una representante.

Elizabeth Ainsworth es religiosa.

Después vino una larga lista de preferencias y hábitos.

La segunda pila, la que tenía el nombre de Zelretch, era mucho más corta, con poca información disponible sobre el enigmático segundo mago.

El tercero tenía el nombre de Julius Alstreim, pero si era honesta le resultó casi inútil, aparte de que el niño tenía su edad y nació con una gran cantidad y alta calidad de circuitos y además era el jefe. de la familia Alstreim, no había nada útil allí.

Sus ojos se volvieron hacia la última pila, la que estaba etiquetada como Corvus Alstreim.

Fue aquí donde pudo recopilar la información más importante y relevante.

Nombre: Corvus Augustus Alstreim.

Edad: 21

Especialización: Runas (?)

Punto de interés: Se rumorea que Corvus nació con baja calidad y cantidad de circuitos mágicos, "esto", afirma el rumor, "es la razón por la que el mayor de los Alstreim no es el heredero de la familia Alstreim".

Corvus Alstreim es también el hombre encargado de comandar el conflicto contra los grupos 'ortodoxos'.

El resto de las páginas detallaban los hábitos y preferencias del hombre, su agenda y logros notables, así como otros rumores.

Rin suspiró frustrada, escribió páginas llenas de información y, sin embargo, todavía no estaba más cerca de nada que revelara qué quería exactamente el mayor de los Alstreim ni su rivalidad con los Ainsworth.

Mirando nuevamente el reloj, suspiró antes de levantarse de la silla, apilando todos los archivos antes de colocarlos nuevamente dentro de un compartimento oculto dentro de su taller, con los innumerables otros archivos de casi todas las personas posibles en la torre del reloj.

Una pequeña sonrisa apareció en su rostro mientras salía de la habitación y caminaba hacia la habitación que estaba a dos puertas de la suya, llamándola suavemente, con un pequeño papel apretado en la otra mano.

La puerta se abrió sola un momento después y se encontró dentro del taller del mayor de los Alstreim.

Lo primero que sintió al entrar fue el intenso calor que la rodeaba.

Por un momento pensó que la habitación estaba en llamas antes de ver al hombre parado frente a una cosa extraña que parecía un cruce entre una fragua y un horno.

Por cierto, el intenso calor aparentemente provenía del dispositivo, como era evidente por el rostro rojo que se giró hacia ella, con una sonrisa en su rostro.

"Buenas noches señorita Tohsaka, veo que tiene mi nota", dijo señalando el pequeño papel que tenía en la mano. "Gracias por venir", dijo antes de cerrar la tapa del dispositivo y Rin respiró aliviada cuando el golpe desapareció. como si nunca hubiera existido.

Ahora tuvo la oportunidad de inspeccionar la habitación y se sorprendió de lo espartana que era.

Toda esta habitación parecía una forja en lugar de un taller mágico, con martillos y trozos de metal esparcidos y algunas hojas y baratijas como anillos y amuletos cuidadosamente colocados.

Podía sentir la magia proveniente de ellos incluso sin ver las runas grabadas.

"Códigos místicos" dijo entendiendo.

"De hecho, bienvenido a mi taller. El lugar donde se fabrican las mejores armas y herramientas para los magos", dijo con un toque de orgullo.

"Aunque todo es muy interesante" dijo con impaciencia "Estoy segura de que no me pediste que viniera sólo para mostrar tus habilidades, ¿verdad?"

Sacudió la cabeza. "No, tienes razón. Por favor, sígueme en mi oficina", dijo señalando una puerta que Rin podría jurar que no estaba allí antes.

Siguiéndolo cuidadosamente, entró en la habitación.

Era una habitación grande, de color amarillo moderado, llena hasta el tope de estantes y estantes de libros, que sorprendentemente no tenían nada que ver con runas, sino que se centraban en la mente y el alma.

'Nota personal, Runes podría no ser su enfoque principal' pensó para sí misma frunciendo el ceño por dentro, seguramente él sabía que ella podría deducir eso... ¿Estaba tratando de jugar con ella?

Al parecer sin darse cuenta de su vacilación, se dirigió hacia una gran mesa en el medio de la habitación cubierta por un enorme mapa del Reino Unido con otro mapa más grande del mundo colgado en la pared, con multitud de pequeños carteles por todos lados.

Cuando se dio la vuelta, su sonrisa tranquila se desvaneció, reemplazada por una cara severa.

"Señorita Tohsaka, no sé si lo sabe, pero parte de mis deberes aquí en el círculo interno es cuidar de los elementos desagradables que están tratando de socavar la seguridad del mundo" giró su dedo moviéndose hacia cierto punto en el mapa del Reino Unido.

"Finalmente pudimos rastrear a un grupo en particular que estuvimos cazando durante más de un año, y están exactamente aquí" señaló el punto antes de girarse hacia ella una vez más "Es una tradición llevar al miembro más nuevo una búsqueda para darles una idea de algo que podrían necesitar hacer en el futuro"

Rin no era estúpida, entendió lo que quería decir, no tenía miedo... Ella luchó contra héroes de antaño... ¿Qué son algunos magos en comparación?

"¿Cuando?" ella preguntó.

El hombre sonrió satisfecho "Prepárate, nos movemos mañana a las nueve de aquí, no llegues tarde" dijo.

"¿Algun consejo?"

Él asintió. "Por eso estás aquí ahora", dijo señalando una pila de papeles que ella podría jurar que no estaban allí antes.

Ella asintió con cansancio, no sabía cómo se sentía al respecto, pero en ese momento no podía desafiarlo... Al menos no todavía.