Era de esperarse que Félix correspondiera aquel beso, aunque lo que le sorprendió fue verse en la necesidad de cerrar los ojos y disfrutar de ello.

— ¡FÉLIX HYUNA TRAJO CORRESPONDENCIA!

El castaño no dudo en separarse de aquel beso bruscamente y pararse delante de los barrotes para esperar a que Changbin le pasará por el suelo la "correspondencia". Ellos llamaban así a las paletas que que señora Hyuna les traía para que los guardias no sospecharan.

Félix la tomo, aunque tuvo un temor en el pecho al percatarse de que no había cerrado la cortina desde que Hyuna le dio el sobre. ¿Ellos habrían visto algo?

Quitó la envoltura que ofrecía la paleta, aparentemente de uva y la tiro fuera de la ventana. Volvió a los barrotes y cerró aquellas cortinas para luego subir al segundo piso de la cama.

Si bien Félix tenía una buena cintura, para Hyunjin su redonda y abultada retaguardia era un rico postre que estaría seguro que pronto degustaria.

— ¿Esta rica? — preguntó Hyunjin desde el suelo viendo al castaño saborear aquella paleta con deseo y gusto.

Hyunjin había cometido un gran error al pensar en Félix haciendo eso.. con el amiguito que tenía entre las piernas.

— Mucho, ¿Quieres probar? — extendió su mano ofreciéndole la paleta.

Hyunjin era como un zorro, astuto y veloz, en lugar de tomar aquella paleta tomo el brazo de Félix y mágicamente lo bajo hasta dejarlo de pie en el suelo.

Félix no esperaba eso, pero tampoco que ahora sus labios estuvieran nuevamente sincronizados con los de Hyunjin.

— Tus labios saben a uva y me gustan.