Maratón 2/5

Harry no se molestó en sentarse en la mesa de Gryffindor. No miró las linternas flotantes ni los murciélagos. No escuchó las conversaciones ruidosas y excitadas de las cuatro mesas. Simplemente se acercó a Dumbledore con Neville a su lado y los gemelos detrás de él, de pie como guardaespaldas.

Dumbledore levantó la vista cuando se acercó, y una mezcla de aprensión y enfado apareció en su rostro.

"Director", dijo por encima del ruido, "me gustaría decir algo al Gran Comedor".

Una falsa mirada de abuelo apareció en su rostro. "Estoy seguro de que puede esperar hasta después..."

"Nick Casi Decapitado nos ha invitado a Fred, a George, a Neville y a mí a su fiesta de cumpleaños", interrumpió Harry con suavidad, "y si esperamos hasta después del banquete, nos lo perderemos. Quiero hacerlo ahora".

El director frunció los labios por un momento, y luego dijo: "Muy bien". Se puso de pie, haciendo que el Gran Comedor se quedara en silencio. "Harry Potter quiere hablar con todos ustedes", anunció.

Harry puso los ojos en blanco mientras se giraba. "Decir algo" y "hablar con" no era lo mismo.

"Como Señor y Heredero de Gryffindor", dijo en voz alta, "exijo que Fred y George Weasley, Neville Longbottom y yo seamos reordenados".

Se oyó un estruendo en el edificio, y entonces el Sombrero Seleccionador y su taburete aparecieron de repente frente a la mesa de los profesores. Dumbledore ya tenía el ceño fruncido.

Murmullos y gritos resonaron entre los alumnos y Harry se volvió hacia McGonagall y enarcó una ceja. Ella parecía aturdida.

"Profesora McGonagall", le indicó cuando ella no se movió.

Ella se sacudió y se puso de pie mientras un pergamino aparecía frente a ella. "Longbottom, Neville", dijo en voz alta, acallando los susurros.

Neville se mordió el labio y Harry le lanzó una mirada de ánimo. Relajado, el chico se acercó al Sombrero Seleccionador, se sentó y se lo puso.

Hubo una larga pausa, y luego el Sombrero gritó: "¡Hufflepuff!".

La mesa de Hufflepuff vitoreó con entusiasmo mientras Neville dejaba el Sombrero y corría hacia su mesa.

"Potter, Harry". Y el Salón volvió a quedar en silencio.

Harry se acercó al Sombrero, con la cabeza alta, asegurándose de caminar como un sangre pura. Oyó murmullos mientras se sentaba y se ponía el Sombrero.

"Bueno, hola de nuevo, Harry", dijo el Sombrero. "¿Listo para ir a tu verdadera Casa?"

"Definitivamente, Alistair", respondió Harry en voz alta con una sonrisa de satisfacción.

"Nadie me ha llamado por mi nombre desde los tiempos de Merlín", dijo Alistair con voz alegre pero temblorosa. "Bueno, excepto la querida Luna..."

"¿Lovegood?"

"Sí, ella. Ella será muy útil para tus planes", añadió Alistair. "Y será una muy buena amiga".

"Lo pensaré", reflexionó Harry.

"Bien. SLYTHERIN!", bramó el Sombrero.

Harry se levantó con el silencio más fuerte que jamás había escuchado. Entonces los Slytherins empezaron a gritar, la mayoría con alegría, pero algunos con rabia.

Sonrió maliciosamente a todos en el comedor antes de acercarse a la mesa de Slytherin y sentarse junto a Draco, que le sonrió.

"Weasley, Fred", dijo McGonagall con una voz tenue que apenas se oía por encima de los gritos de los Slytherin.

Fred cuadró los hombros y se acercó al Sombrero.

"¿Por qué lo estás clasificando otra vez?" Preguntó Ron Weasley en voz alta. "¡Es un Weasley! Todos estamos clasificados en..."

"¡SLYTHERIN!", gritó el Sombrero, interrumpiendo la perorata de Ron Weasley.

"¡QUÉ!" Gritaron Ginevra, Ronald y Percy al mismo tiempo, por encima de los vítores y cacareos de la casa Slytherin.

"¡Ya no eres un Weasley!" bramó Percy a Fred, que se mofó, volviendo a poner el Sombrero suavemente en el taburete.

"¡Sr. Weasley!" dijo McGonagall furiosa. "¡Cincuenta puntos de Gryffindor! Es su hermano, independientemente de la Casa en la que esté!"

"Se supone que no éramos Gryffindors, Perfecto Percy", dijo Fred con frialdad. "Georgey y yo sólo fuimos a Gryffindor porque no teníamos a nadie más. Ahora que tenemos a Harry, podemos ser nuestro verdadero yo".

"Weasley, George", gruñó McGonagall, haciendo que Percy se sentara de nuevo.

George se acercó al Sombrero y se lo puso.

"¡SLYTHERIN!", bramó el Sombrero después de dos segundos. George dejó el Sombrero Seleccionador, que desapareció junto con su taburete. Los gemelos se unieron a la mesa de Slytherin, que parecía encantada de haber enganchado a los Gemelos Demonio.

"Podéis volver al banquete", dijo Dumbledore con firmeza, con aspecto de estar comiendo un caramelo de limón especialmente agrio. Harry, Draco y los gemelos se sonrieron entre sí.

"¿Así que sois verdaderas serpientes?" preguntó Blaise Zabini con una risita.

"Definitivamente", dijo Fred.

"Snape parece extasiado", se burló George, señalando la mesa del personal. Snape parecía a la vez horrorizado y encantado.

"Bueno, probablemente esté molesto porque los gemelos Demonio están en su Casa", señaló Draco, sonriendo a los gemelos, "pero encantado de que Harry sea una serpiente, también. Se ha acercado más a Harry desde esta mañana. ¿Qué ha pasado, por cierto?"

"Más tarde", le dijo Harry.

⚜⚜⚜

"Mis queridos amigos", dijo Sir Nicolas con gravedad, ignorando los escalofríos de Neville y la falsa mirada solemne de los gemelos, "me alegro de que hayáis podido venir....". Y se quitó la cabeza y el sombrero, haciendo una reverencia.

"Gracias por la invitación", respondió Harry cortésmente, asintiendo. Él, Neville, Fred y George pasaron junto al fantasma hacia las mazmorras.

Había una orquesta que sólo tocaba la sierra musical; un suelo de salón de baile, donde varios fantasmas bailaban el vals; una lámpara de araña con velas azul noche; y una mesa llena de comida podrida.

Harry estaba a punto de sugerir que fueran a hablar con el Barón Sanguinario cuando oyeron una voz familiar.

"Ten cuidado de no atravesar a nadie".

"¿Qué hace Ronald aquí?" preguntó Neville, horrorizado.

"Y Granger", se mofó Harry. Los dos idiotas habían intentado volver a ser sus amigos, pero no los había visto desde la reordenación.

"Oh, no", dijo Granger de repente, pareciendo alarmada, "Vuelve, vuelve, no quiero hablar con Myrtle la Llorona-".

"Qué grosera", resopló Harry mientras los dos de segundo año se retiraban más cerca de la mesa de la comida, mientras Weasley exigía saber quién era Myrtle.

"¡Mira, la comida!"

"Idiotas, los fantasmas no darían comida, no pueden comerla", dijo Neville con un suspiro de irritación.

Peeves, pensó Harry, haciendo uso de su condición de Señor de Hogwarts, moléstalos, ¿quieres? Quiero que se vayan.

Al instante, Peeves, que estaba molestando al fantasma de una anciana, salió disparado hacia los dos Gryffindors, cacareando. Los gemelos sonrieron.

Unos instantes después, la orquesta se detuvo bruscamente y sonó un cuerno de caza. Harry sonrió sombríamente y Neville rió suavemente.

Una docena de caballos fantasma irrumpieron de repente en la sala, montados por doce fantasmas, cada uno de ellos con ropas de bandidos que uno vería en una obra de Robin Hood. Entraron al galope en medio de la pista de baile y el líder se arrancó la cabeza, levantándola por encima de la multitud para ver mejor. La multitud se rió.

"¡Nick!", sonrió la cabeza. "¡Cómo estás! Veo que por fin has perdido la cabeza".

La multitud se rió. Harry vio que el Barón ponía los ojos en blanco.

"Por cierto, ¿cómo lo has hecho?", preguntó el fantasma, volviendo a poner la cabeza sobre sus hombros y acercándose.

"Un estudiante le pidió al Barón que me cortara la cabeza con su hacha", dijo Nick emocionado. "Bienvenido, Patrick".

"¡Vivos!" exclamó Sir Patrick al ver a Harry, Neville, Fred y George, dando un enorme salto falso, para que se le cayera la cabeza. La multitud volvió a reír, y los gemelos intercambiaron sonrisas.

Nick se rió. "Muy divertido. Los dos de allí -señaló a Granger y Weasley, que estaban mirando a Peeves- son Ron Weasley y Hermione Granger, y estos cuatro -señaló con la cabeza a Harry y sus amigos- son Fred y George Weasley, Neville Longbottom y Harry Potter."

La cabeza de Sir Patrick parpadeó, boquiabierto. Luego se sacudió. "Un placer conocerlos", dijo con reverencia a Harry, Neville y los gemelos. "No he conocido a los vivos personalmente... ¡casi nunca!"

"Es un placer conocerlo también, Sir Delaney-Podmore", dijo Harry cortésmente. "Sir Nick, se está haciendo un poco tarde para los 'vivos', ¿le importa mucho si nos vamos temprano?"

"¡Oh no, Lord Gryffindor!" Exclamó Nick rápidamente. "Por supuesto, lo siento, debería haberme dado cuenta de que se estaba haciendo tarde, ¿lo habéis pasado bien?"

"Oh, sí", sonrió Harry. "Peeves, ven".

El poltergeist se abalanzó al instante desde donde estaba atormentando a Myrtle la Llorona y se quitó el sombrero a modo de saludo. "¡Sí, mi señor!", dijo con entusiasmo. Granger y Weasley los miraron fijamente.

"Muchas gracias por invitarnos a su fiesta de cumpleaños, Sir Nick", dijo Harry con suavidad. "Adiós, Nick, Sir Delaney-Podmore". Condujo a sus cuatro amigos fuera de la mazmorra.

Cuando se fueron, los gemelos rieron. "Si nos convertimos en fantasmas..." Fred comenzó.

"-Vamos a ser tan graciosos como Podmore", sonrió George.

"Es más probable que vosotros dos os convirtáis en poltergeists", rió Neville. Peeves soltó una carcajada de acuerdo.

Harry se detuvo y levantó una mano para pedir silencio, frunciendo el ceño.

~Rasgar... desgarrar... matar...~

"~¡Es esa voz otra vez!~" siseó Harry, y los otros cuatro intercambiaron miradas alarmadas.

~...tan hambriento... durante tanto tiempo...~

"Está subiendo", susurró Harry. Hizo una pausa. "Peeves, sube las escaleras, quiero saber qué pasa".

"¿Qué vamos a hacer los demás, mi señor?" Preguntó Fred mientras el poltergeist subía las escaleras.

"Esperar", respondió Harry. "Peeves nos dirá lo que ha pasado por la mañana. Te acompañaremos a la entrada de Hufflepuff, Nev". No quería que ninguno de sus amigos se quedara a solas con un monstruo suelto...

Cuando él y los gemelos volvieron a la sala común de Slytherin, ésta era una conmoción. Eran una mezcla de excitación, aturdimiento y confusión.

Harry dio un silbido agudo y penetrante, y todos se callaron. "¿Qué está pasando?", preguntó.

Draco se apresuró a acercarse a él. "Ha aparecido tu habitación", contestó, haciendo que la mayoría de los Slytherin jadearan y algunos pusieran cara de incredulidad.

"¿Mi qué?" Harry frunció el ceño. "¿No estoy compartiendo habitación con los otros de segundo año?".

Los gemelos resoplaron. "Harry, como el Señor de Hogwarts-" Comenzó Fred.

"Es lo suficientemente indigno-" Continuó George.

"-mezclarse con la mera chusma", dijo Fred de forma dramática.

Los Slytherins se rieron en voz baja.

"El Señor y Heredero de Hogwarts siempre tiene una habitación especial, separada de los demás estudiantes", informó Draco a Harry.

"¿Por qué no me dieron una habitación el último...? Dumbledore", gruñó Harry.

"¿De qué estáis hablando?" Preguntó Blaise. "¿Potter es el Señor y Heredero de Hogwarts? ¿Cómo?"

"Como he dicho, es una larga historia, Blaise", dijo Harry con frialdad. "Estoy agotado y te lo explicaré mañana. Buenas noches, Draco, mis Gemelos Demonio". Subió las escaleras, ignorando las miradas.

***

Que no se pierda la costumbre de que pase algo en Halloween jsjsjsjs

¿Cómo serían si fueran fantasmas? Probablemente sería un poltergueist también xd