Capítulo 5: Mi secreto expuesto.

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El dulce y adormecedor sonido de paz que creaban las cigarras en el patio de la institución comenzaba a ser una de las cosas que más le gustaban del lugar, sentía plenitud y tranquilidad... Evitaba de este modo los pensamientos que lograron aturdirlo con anterioridad.

Había pasado ya una semana desde que acepto de forma "sincera" las disculpas de aquellos extraños estudiantes. No dejaba de pensar cada momento de su plática posterior luego de que lo dejaran salir de aquel armario... Fue demasiado inquietante, lo dejaron con muchas más dudas que respuestas.

—Tus ojos son algo completamente singular, tienes una forma única de ver a alguien a través de ellos —había expresado el de mas altura con los brazos tras su cabeza. Los tres ahora se hallaban caminando despreocupados por el largo pasillo de la HS. Bonnie ladeó la cabeza ligeramente dedicándole una mirada dudosa por su afirmación, Puppet notó esto y procedió a explicarse aclarando su garganta—. Pues... Algunos piensan que tienen cierto tipo de "don".

Arqueó una ceja, sin saber en su totalidad que había querido decir con eso... ¿Él? ¿Tenía un don? De la forma en como lo dijo incluso sonó como si fuera algo positivo, cosa que para nada era su caso, porqué mas que un don su extrañeza fue un tipo de maldición del karma o mala obra del destino tomando represalias por algo que de seguro cometió uno de sus antepasados cobrándose en la actualidad contra él.

—¿Qúe es lo primero que se te viene a la mente cuanto piensas en el color rojo? —había preguntado, ahora Mai con un tono jocoso, paseándose y moviéndose de un lado a otro, casi dando saltitos de la emoción mientras caminaba. Le sorprendía la actitud tan vivaz que podía poseer esa chica.

Meditó un segundo sus palabras dudando de la respuesta que le daría.

—A-ahh, pues se me vienen a la mente frutas... Las fresas, manzanas...

Antes de poder continuar Mai tapó su boca con su dedo índice callándolo al instante.

—Buena respuesta~ —aseguró notando lo tensado que se encontraba y separando su dedo con lentitud sus labios—, pero ¿Podrías pensar en algo mas físico? "¡Mucho mas unido a las personas!"

—¿Eh? —¿Qúe clase de respuesta esperaban estas extrañas? se detuvo en medio del pasillo frenando de paso la caminata del par que simplemente lo observaron con intriga—... Pues, no sé, ¿las arterias? ¿la sangre?... ¿El corazón?

—¡Ding, ding!

Expresó la de larga cabellera completamente emocionada comenzando a dar saltos muchos mas elevados en su sitio. Puppet le otorgó una mirada aprobatoria con su típica sonrisa gatuna aplaudiendo lentamente, de forma que si alguna otra persona viera de lejos la escena pensaría que lo hacia con total sarcasmo, cosa que era todo lo contrario.

—He allí tu respuesta, Pequeñín —Puppet agrega acercándose a Bonnie enrollando uno de sus brazos por sobre su hombro—. Tus ojos son el camino directo al corazón de las personas.

—No entiendo... —frunció el ceño respondiendo con total sinceridad- ¿Podrían dejar de hablar con analogías? Es molesto.

—Son la puerta al corazón de las personas, la ventana que libera el viento de los sentimientos... Los ojos cómo los tuyos son tan especiales por el simple hecho de existir —mordió su labio intentando con tener la profunda emoción que las palabras que le dirigía al mas bajo le provocaban, ignorando por completo la petición del peli-morado.

El de cabellera violeta por otro lado no sabia exactamente a dónde es que queria llegar con todo lo dicho, se deshizo rápidamente del contacto por el mas alto y continuó con su caminata por el pasillo asintiendo, indicándoles así que había comprendido, aunque no fuera cierto.

Rápidamente ambos albinos se dedicaron una rápida mirada intrigada y alcanzaron al menor —en estatura— pues ésta ya había dado vuelta por unos de los pasillos.

—¡Oye, espera! ¡Todavía no terminamos de explicarte la situación! —indicó la de corta cabellera posándose frente a él.

Detuvo sus pasos y decidió por fin enfrentarles cara a cara, levantó la mirada, soltó un bufido completamente frustrado y procedió a acomodar sus gafas que se había movido ligeramente.

—Por si no lo sabían, yo sigo teniendo clases y como van las cosas estoy seguro de que su charla tardaría mucho mas del tiempo que tengo libre ¿O me equivoco?

No dijeron nada más y con eso —para su enorme alivio— le dieron la razón. Antes de finalizar Bonnie recordó que tenía cierta libreta que no era de su pertenecía por lo que procedió a tendérsela a la de larga cabellera quien con una sonrisa negó el ofrecimiento.

—Estoy segura de que pronto podría interesante todo lo que esta escrito allí —apuntó con su indice a la libreta—. Tiene recetas y secretos increíblemente misteriosos~

—... Claro.

Esa había sido una muy buena forma de huir de todo el embrollo en el que parecían querer meterle ese par, púes después de eso intentaron buscarlo en múltiples ocasiones para reanudar la plática, claro que cómo Bonnie sabia de que se trataba opto por... ¡Evadirlas a toda costa! Incluso si tenia que esconderse en muchos salones para que aquellos no lograran encontrar su paradero.

Lo mas vergonzoso que le causo este hecho fue haber entrado por equivocación a los vestidores de las porristas mientras estas se cambiaban y algunas no se encontraban en condiciones para nada presentables... Obvio se le subieron los colores a la cara... ¡¿Pero como iba a saberlo!? ¡No podía contar con los dedos de sus manos cuantas cosas le lanzaron y cuantas veces le recriminaron ser un completo pervertido!... Hasta ahora fue uno de los momentos mas vergonzosos de su vida. ¡Y todo por escapar de la mirada de aquellos extraños!

Esto ya había comenzado a serle frustrarte, durante los últimos días no había hecho otra cosa más que evadirlas y con ello incluso había estado evitando a múltiples estudiantes que se acercaban a él para pedirle algún deber de alguna materia, puesto que parecían que ese par conocía a toda la HS y habían estado preguntado por su paradero, de esta forma podría decirse que se volvió mas asocial que antes... Algo verdaderamente increíble si se lo ponía a pensar.

Incluso había sido una semana de no haber vuelto a ver al "chico gris". Apodo que creyó conveniente para bautizarlo, pues no sentía la suficiente confianza para llamarlo por su nombre... Bon.

Negó varios veces. A pesar de sentirse ligeramente culpable puesto que el chico pelirrojo le aviso sobre que cierto... ¿Jhon? Lo había estado buscando para seguir con el recorrido él decidió desistir... En ese momento había sentido un alivio enorme por su decisión, pues justo luego observó a una peculiar mancha gris conversando animado con cierto par de marionetas fascinadas por el teatro. En ese instante recordó las palabras que este le dedico sobre el club, y como con cada un se sentía que transmitía cierta... ¿calidez?

Así que de esta forma dio por hecho ese par y ese chico eran amigos, algo que para él no era conveniente si quería evitar a los albinos.

Suspiró mientras volvía a fijar su vista en el alrededor en el que se encontraba; Estaba arriba de uno de los arboles del patio de la Hing School, siempre había resultado ser muy habilidoso escalando, en su antiguo colegio esa fue la forma que tuvo para escapar de los acosadores, muchas veces los profesores lo descubrieron y por ende su madre le había tenido totalmente prohibido volver a hacerlo.

Quien lo diría, vuelvo a las mismas situaciones de antes... Solo que sin violencia.

Apenas habían unas cuantas personas a su alrededor así que simplemente se puso en cuclillas sobre aquella rama, y observó fijamente el suelto notando que si se inclinaba o daba un mala movida se daría un muy buen merecido golpe por andar de mono. Tomó impulso y cómo si de un hábil gato se tratase su salto fue limpio y con destreza cayendo de pie en el suelo. Notó cómo los que apenas si estaba le aplaudieron la pequeña acrobacia y sin tomar con importancia a los cumplidos de las chicas y comentarios bueno de los chicos se retiró de allí ingresando a las instalaciones.

—¡Bonnie!

Apenas escucho esa familiar voz decir su nombre se erizo por completo, volteo sobre sus paso, y con desgano le dedico una fría mirada al pelirrojo que se acercaba a paso rápido para llegar al lugar donde se encontraba su casillero.

—Joder, que alivio, ese si es tu nombre, pensé que me había equivocado... Tienes mas cara de Bonifácio, por que eres un estirado... Cara dura —expresa con mofa riéndose de su propio mal chiste, notando como no obtiene mínima reacción por parte del contrario—. Venga, acepta que fue buena, Capullo.

—No me llames capullo —expresa de forma tajante. No estaba de humor para aguantarlo.

—De todos los apodos que te dije en esa sola oración ¿Te quejas de ese? —arquea una ceja sin obtener respuesta alguna del peli-morado que organiza su mochila—. Hoy vienes con muy mal genio, ¿Eh? Pues como sea, el profesor nos encargo a ti y a mí un trabajo para la próxima semana sobres las antiguas culturas de los países de occidente, o algo así... Creo que lo tengo anotado en mi liberta —murmura esto último con una mano en su barbilla recordando si lo había hecho.

—Pero yo había dicho...

—Si, me lo repitió, —detuvo con desgano lo que el consideraba "parloteo" Por parte del más bajo—, pero se dio cuanta de que los grupos quedarían disparejos de esa forma, así que... —alza ambos hombros restandole importacia notando la molesta mirada del mas bajo sobre él a traves de los anteojos—. Me importa un rábano, te aguantas.

Bonnie simplemente asintió, conteniéndose internamente de hacer una queja sobre tal decisión, pues con anterioridad el había pedido a la mayoria de profesores que cualquier trabajo que le asignaran lo haría de forma individual, esto para evitar convivir más de lo necesario con sus compañeros de aula, también para librarse del estrés que ocasionaba estar preocupado todo el tiempo si su compañero había realizado su parte o no.

—¿Nos reunimos en tú casa o en la mía?

Bonnie lo mira incrédulo sin creer que haya echo esa pregunta.

—¿Qúe?

—Tienes razón, en la tuya podría ser mucho mejor —después de auto-invitarse decidió dejar atrás al contrario con la boca abierta... Es que esa afirmación debía ser una broma.

—No, ni lo sueñes —expresa de forma firme haciendo ademanes efusivos con ambos brazos. No iba a permitir por nada el mundo que alguien de la HS supiera siquiera donde es que vivía, y mucho menos él... Podría presentarse cualquier movimiento desagradable que prefería evitar—. Los puntos los repartiré aquí, y tú investigaras por tú parte y yo por la mía, ¿si entiendes lo que quiero decir?

El pelirrojo no pudo evitar soltar una carcajadas. Vaya que aquel chico era interesante, normalmente nadie se negaba por tener la apariencia de "chico malo"

Suspiró y procedió quitarse su mochila para sacar los apuntes que tal vez hizo —o no— sobre las labores para investigar y cerca del trabajo. Chasquea la lengua al encontrar la página y se la muestra al contrario.

—Vale, hoy estaré cooperativo contigo por que aunque no lo creas estas mucho mas majo que otros días... Así que busca una libreta y anota —aunque no pareciera Bonnie se encontraba grandemente sorprendido por la actitud que estaba tomando el pelirrojo.

Rápidamente buscó entre sus cosas y sacó lo primero que encontró para anotar, observó como Fox arqueó una ceja y parecia intentar aguantar una carcajada... ¿Y ahora que?

—Algo femenino ¿No cree? Pero vale, no juzgo gustos.

El pelirrojo apretó aun más los labios y tomó su libreta para leerle los puntos. Bonnie bajó la mirada al pequeño cuaderno morado pastel que se hallaba sosteniendo con un montón de pequeños dibujos y brillantina perteneciente a cierta melliza. Se avergonzó ligeramente y soltó un bufido.

—Eso no te importa.

Su madre siempre le comentaba que para que una persona tuviera éxito en la vida lo primero que tenia que poseer era carisma... Cosa que por obvias razones no tenía y que su progenitora no quería entender y en que múltiples ocasiones le reprochaba... No de mala manera, solo que no comprendía en su totalidad porque su hijo no se relacionaba con las personas como un "chico normal de su edad".

Ya que había pasado una semana, y él pequeño peli-morado cada vez que le preguntaba de su día no hacia otra casa mas que responder con un simple "Todo estuvo normal" "No hice nada interesante".

La hora de la cena —que era en donde todos se encontraban reunidos—; era para conversar de los logros obtenido en el día... Y Bonnie parecía no obtener ninguno... En ningún día.

Le frustraba que no le hubiera comentado acerca de ningún amigo, o algo de socialización, salvo esa vez que le dijo sobre lo de ese club, pero después de eso no agregó nada mas... Y de cierta forma sentía que le escondía las cosas. Bonnie sabia esto, lo notaba en la cara de su madre, y como cada vez que le respondía de forma monótona todos los días se enfrascaba en el mismo punto... Si, él no tenia amigos, no planeaba tenerlos, no tenia novia, no planeaba tenerla, y quería que dejara de preguntar acerca de eso.

—Kara, deja de hostigarlo —pidió el Albino en la mesa de forma serena, sin cambiar la seria expresión de su rostro. Su padre era un tipo frió, él se concentraba mayormente en su trabajo claro que nunca ignoraba las peticiones su hijo o a su mujer... Pero Bonnie había crecido con la mentalidad de no pedirle ayuda si se encontraba en problemas, así que no interfería mucho en sus decisiones, pero por otro lado, su madre...

—¿Cómo me pides eso? Bonnie ya lleva una semana en su nueva preparatoria y me dice que no ha echo ninguna amigo, que los evita, que prefiere quedarse solo en el almuerzo ¡¿Cómo pretendes que no me preocupe?! —preguntó de forma exaltada.

—Yo...

—Bonnie es del tipo solitario, yo también prefería quedarme solo a su edad, no tienes que tomarlo con importancia —expresa el cabellera albina sintiendo la punzante mirada de su mujer sobre él—. Sabes perfectamente por que prefiere estar solo, así que déjalo en su etapa.

—No es una etapa...

—Tú por que eres un amargado y lo sigues siendo, pero Bonnie no es así y no tiene que sentirse acomplejado por su condición —nuevamente fue interrumpido sintiéndose completamente ignorado en la conversación aunque se tratara principalmente de él. Su madre volteó a mirarlo fugazmente y le apuntó con el dedo—. No tienes que sentirte acomplejado por tu condición.

Bonnie respiró profundamente conociendo ya el tipo de persona que era su madre... Respondiéndose a si mismo que si no la amara tanto ya se habría ido a su habitación apenas pregunto por su día.

—¿Tal vez... Te estan molestando de nuevo? —asimilo en voz baja, frunciendo el ceño al instante de pensarlo— ¡Eso ni de coña! Hay que cambiarte de instituto...

—Mamá, no me siento acomplejado, no me acosan ni nada por el estilo, simplemente no estoy todavía completamente cómodo con los de mi preparatoria —expresa intentando aliviar de esta forma a su progenitora. De verdad no le gustaba que se preocupara de esta forma por el que no tuviera amigos. Una rápida imagen atravesó su mente de forma inconsciente... Apretó sus labios, tal vez de esa forma lograría aliviarla—. Pues, si logra tranquilizarte, todos son buenas personas allá... Hace unos días un chico muy amable que es parte del comité de bienvenida me recibió y me mostró las HS.

—¿Y por que no me habías hablado de eso? —preguntó suavisando el entreceño, obteniendo total atención también por parte de su padre.

—Creo que se me olvido, fue luego de haberme enfermado —mintió.

—¡Con más razón! ¿Ese es un nuevo amigo?

Dudó un par de segundos antes de contestar... Pues no lo consideraba de esa forma, pero de todos los que había conocido el momento hasta fue el que mejor le cayó. Pero su madre no sabia eso, así que solamente asintió con una sonrisa forzada.

—¡Que maravilla! ¿Cómo es? —preguntó ahora completamente emocionada.

Bonnie sintió una pequeña descarga eléctrica por tal pregunta... Pues, ¿Se refería a ragos físicos, cierto? Él solo había escuchado casi todos los colores que lo componía. Casi porque seguia sin imaginarse el tono de sus ojos, ironico. Tal vez también se refería a actitud...

—Es un chico alegre... Es mas alto que yo, y parece ser alguien seguro.

—¿Y en aspecto? ¿Cómo son son sus ojos? ¿Ya vio los tuyos?

Mierda.

Sintió como su cabeza intentaba procesar el error de carga... Bonniexcerebro.org ha localizado un error en el sistema.

Habia pasado mucho tiempo desde que su madre se veía tan emocionada por preguntarle sobre sus "amigos". Despues de cumplir los trece años dejo de preguntarle por los múltiples problemas que sucedieron.

—Él no sabe sobre mis ojos, nadie lo sabe y prefiero que siga así —decidió evitar la primera pregunta y mentir ligeramente en su segunda respuesta, prefería evitar contarle que apenas dos personas se enteraron sobres sus ojos lo encerraron en un armario y no dejan de preguntar por él... De esa forma incluso sonaría demasiado aterrador—. También hay otro chico que no para de molestarme y ahora hasta tengo que hacer una tarea con él...

Cambió rápidamente de tema tomando un poco de su jugo notando la mirada radiante de su madre que se notaba a kilometros que quería hacerle mas preguntas al respecto.

—Aunque no me cayó bien, así que no es relevante. Mamá, buenas noches.

—Pero...

Dio una ultima probada a su comida y se levanto agradeciendo cordialmente la cena, despidiéndose de su padre con un ligero movimiento de mano y de su madre con un pequeño beso en la frente dejándola con la palabras atoradas en la garganta. Sabias que si seguía estando allí le harían todavía mas preguntas, y conociéndose así mismo como era de despistado en cuanto al habla de seguro diría alguna estupidez que lo pondría en evidencia.

El grandioso mitad de semana por fin llegó, se sentía cierto alivio de que ahora solo faltaran dos días para el fin de semana, ya que estaba seguro que no podría seguir evitando eternamente al par de marionetas y cierto chico de aura gris... Se sentía mal con respecto de esto ultimo puesto que él se había comportado de muy buena forma, e incluso lo había presentado con sus amigas y ahora hasta su madre sabia de su existencia, pero ya lo había decidido, no se retractaría... Ademas por alguna razón cada vez que pensaba en él le resultaba un tanto inquietante por algún motivo.

No estaba seguro a que se debía, simplemente sentía algo muy raro, y todo el tema de que no pueda verlo con algún tipo de color en absoluto... Pero al menos ya no le dolía la cabeza cada vez que venia su imagen a la mente, aunque tal vez solo fue momentáneo y no lo repetirá, al menos eso esperaba.

Levantó la mirada encontrándose con el profesor que lo observa severamente con una mirada reprobatoria... ¿Ahora que fue lo que hizo?

—Presiento, joven, que no le esta prestando mínimo de atención a mi clase —Bonnie miró a ambos lados asegurando de que se refería a su persona.

—¿Se refiere a mí? —preguntó por inercia y el mayor simplemente lo miro incrédulo.

—No, que va, se lo pido a aquella pared que siempre parece estar atenta —especta ironico—. Por favor, ya que esta tan elevado en las nubes de su, seguramente, muy interesante imaginación, estoy muy seguro de que le sera muy fácil ejecutarlos elevados de estas ecuaciones de potencia... después de todo son de primer grado y solo es un repaso.

Le ofreció una tiza, el peli-morado abrió los ojos gradualmente... ¿Elevados? ¿Que él qué?

Miró a su alrededor y notó las miradas de todos sus compañeros clavadas solo en él... Algunas reflejaban burla por haber sido atrapado divagando y otras simplemente lo observaban con pena por lo que le toco hacer. Como odiaba que lo miraran de ambas formas, lo hacían sentir poca cosa.

Completamente resignado tomó aquella tiza y se levantó quedando justo frente a la pizarra... A ver, su madre le había explicado hace ya un tiempo sobre aquello, según su recuerdo era pan comido, nada de que preocuparse. Precioso ligeramente la tiza contra la pizarra, frunció el ceño ligeramente...

¡¿Como mierda no se acordaba de absolutamente nada!? Quedaría como un completo estúpido frente a toda la clase... Aunque tampoco es como si le importara, que más da. Volteó la vista notando la mirada desinteresada de cierto pelirrojo hasta el final del salón, este ladeó la cabeza ligeramente tanteando, haciendo señas con sus manos discretamente diciendo una palabra completamente sorda, ¡Que no entendió por que no sabia leer los malditos labios de la gente!

—Lo siento, no puedo hacerlo —comenta rendido ante la presión de su cabeza, nota como el pelirrojo se da un golpe en la frente y suelta una fuerte exhalación.

—Eso es para que la siguiente vez preste mas atención a las matemáticas, joven Valentine... ¿Todos comprendieron, cierto? —El salón asiente, y el docente vuelve con su explicación de como es que se resolvía el ejercicio.

Escucha el murmuro de las personas a su espalada... Lo mas probables es que sean diciendo algo de él.

—Que lastima, parecía ser un cerebrito —expresa una chica con cierta decepción.

—Bah, solo es apariencia, quería que creyéramos que sabe de cosas para juntarse con nosotros... ¿Que no le viste el tamaño de esos anteojos? Cualquiera pensaría que es un come-libros... Lo mas probable es que ni los necesite —asegura otra, en tono de burla justo tras él, seguramente pensando que esta susurrando, cuando no susurra un carajo.

¡¿Y que mierdas tienes que ver unos putos anteojos con el hecho de ser inteligente!?

Pensó, completamente frustrado sintiendo una vena palpitante en su cabeza. Una pequeña bolita de papel cayó en su cabello... ¿Tan rápido comenzaban ese tipo de molestias? Vaya en esta preparatoria no pierden el tiempo. Suelta un suspiró y procede a leer en silencio lo que trae escrito.

"Te señale mis manos y pronuncie doce, Como es que no supusiste la respuesta? è.é"

Bonnie arquea una ceja y mira como Fox le cuestiona con la mirada.

—El resultado del profesor dio veintidós —alega en voz baja mientras nota como las expresiones en el rostro del mas alto cambian radicalmente.

—Ohhh...

Menudo idiota.

Poco tiempo después la tediosa clase de matemáticas por fin concluyó y como era de esperarse el profesor no se quedó con los brazos cruzados con respecto a la falta de atención que el peli-morado tenía acerca de su clase, por lo que decidió otorgarle una pequeña tarea especial para que practicara sobre los ejercicios, ya que no veía conveniente que alguien de su edad no tuviera mínimo conocimiento de esos "simples" procedimientos matemáticos.

Bonnie no pudo hacer otra cosa mas que quejarse en silencio de la suerte que tenía, bien, ¿Quién lo mandaba a estar tonteando todo el tiempo en clase?

Detuvo sus quejas silenciosas al encontrarse justo frente a una enorme puerta de madera con un pequeño y bonito decorado que indicaba que se trataba de la biblioteca, supuso que si terminaba los procedimientos en ese mismo instantes seria mucho menos tedioso para el al llegar a casa y no se encontraría tan saturado. Pasó directamente notando las pocas personas que se encontraban en el lugar, el bibliotecario le otorgó una mirada indiferente y solo le hizo una seña indicándole que se acercara.

—¿Dónde puedo encontrar los libros de matemática de primer año? —el mayor rápidamente le señalo al final un par de estantes y junto a ellos una mesa en el rincón alejado de los pocos estudiantes en la biblioteca, casi escondido, conveniente.

Agradeció la ayuda y procedió a buscar un libro que tuviera alguna explicación sencilla sobre elevados y esas cosas.

Decide sentarse y comenzar a resolver los ejercicios cuando un murmuro logra llamar su atención después de unos minutos, apenas levanta la mirada se encuentra con cierto chico gris que carga en brazos una enorme pila de libros, que por lo que puede observar Bonnie impiden la visión de este como para notar que se encuentra sentado justo  él. El estruendo que hacen estos libros al dar con la mesa logran alertarlo, pero decide ignorar la presencia del mas alto.

—¿Eh? ¡Bonnie! Que alegría por fin encontrarte de nuevo —expresa con una sonrisa de oreja a oreja sentándose justo al lado del peli-morado—, no estoy seguro pero creo que todavía quedamos pendiente en el termino de recorridos —agrega tomando uno de los libros que trajo y abriéndolo en una de las paginas.

—De hecho eso ya no importa —excepta sin dirigiré la mirada comenzando a sentirse por alguna extraña razón verdaderamente incomodo con la presencia del contrario.

—¿Cómo que no? ¿Alguien más te mostró el lugar? —cuestiona arqueando una ceja, intrigado por su respuesta.

—Pues no...

—¿Entonces?

—No entiendo el porqué de su inasistencia —expresa frunciendo ligeramente el ceño.

—¿Me estas hablando de usted? —pregunta con media sonrisa—. No es tanto por insistencia... En el comité me asignaron mostrarte la HS, por eso creo que debo cumplirlo ¿No crees?

Bonnie no dice nada más y procede a alejarse unos cuantos centímetros del lado del menor pues justo acaba de sentir una pequeña punzada en su frente. Bon al notar esta acción arquea una ceja, e intentando comprobar algo se acerca esos centímetros de distancia que el peli-morado alargo entre ambos... Bonnie vuelve a hacer la misma acción separándose nuevamente al sentir como se encontraba mas cerca y como se asentaba en su frente aquel pequeño pinchazo provocando que cerrara los ojos y suspirara con fuerza... Y sintió nuevamente como el contrario se deslizaba por el asiento, por inercia termino haciendo lo mismo cayendo de lado al suelo.

Si antes no le terminaba de doler algo sentía que con aquel golpe podría compensarse la falta de dolor.

—Ok... ¿Por que estoy comenzando a sentir que me has estado evitando y que en este momento estas haciendo exactamente lo mismo? —cuestiona con cierto deje de molestia en su voz.

—¿Que? Para nada, esta desvariando —se levantó del suelo quedando de espaldas a el, tragó en seco, sin embargo por alguna razón se sentía nervioso, pero no lo dejaba notar... Sintió la fija mirada del menor sobre él, provocando el insistente pinchazo logrando desorbitarse, rápidamente se sentó a un lado mientras que Bon le hacia espacio en el asiento, velozmente desvió la mirada hacia el lado opuesto a él—, ¿Podrías evitar seguir hablándome? me sienta mal en más de un sentido.

Muy bien, en su cabeza se había escuchando de muchas maneras pero ninguna de forma tan grosera como salió de sus labios.

—¿Bonnie, acaso...?

—No.

Bon soltó un suspiró y volvió a mirar al más bajo concierta tristeza. Se sentía algo frustrado, no comprendía por que no le parecía agradar... ¿Acaso se comportó mal? Por que sentía que este quería tenerlo lejos, ¡Por Dios! Ni siquiera era capaz de mirarlo de frente.

—Yo no te caigo bien ¿cierto?

—¿Eh? —soltó de forma incrédula—, no se trata de nada de eso... Solo quiero mantener distancia.

—¿Por qué si apenas nos conocemos? —cuestiona arqueando una ceja para nada convencido por lo dicho.

—Simplemente no quiero que me relacionen contigo —explicó en tono firme y con simpleza sintiendo la mirada sorprendida del mas alto sobre él, rodó los ojos y procedio a explicarse mejor—. No solo contigo en especifico, prefiero evitar relacionarme con todos, no me lo tomes a mal, pero de verdad se me hace irritante que me repitas lo de mostrarme la HS cuando ni siquiera lo veo necesario, así que te agradecería desistir con esa idea ¿Vale? —expone centrándose en su libro de matemáticas ignorando por completo el dolor de cabeza que se le comenzaba a formar de la nada.

Bon aprieta los labios y sin decir alguna otra cosa pone la distancia que con anterioridad Bonnie había decido en el asiento que comparten y toma otro de los libros que trajo y que estaban formados en esa enorme pila.

Ambos mantienen un silencio muy incomodo y hasta tenso por al rededor de unos veinte minutos, sin intercambiar algún tipo de palabra y solo concentrados en los deberes que están realizando respectivamente. Bonnie suelta un gruñido al sentir como la migraña formada abarcaba todo lo que es su cráneo, apretando fuertemente los labios y pegando su frente al libro que se encontraba delante de su visión, sus lentes seguían manteniéndose posados en sus ojos, pero con este leve movimientos situado en el libro, rápidamente levantó el rostro y los arreglo. Sentía la vista penetrante del menor sobre él causando cierto aura asfixiantes, se encontraba agobiado... Comenzaba a pensar que no era adecuado seguir allí si no quería morir con el dolor de cabeza.

Bon al notar los inquietos e incómodos movimientos del mas bajo acerco su mano instintivamente con lentitud a la larga cabellera violeta.

—¿Estas bien?

Este apenas sintió los dedos del contrario rozando su melena por acto de reflejo lo apartó de forma inmediata y brusca moviendo su cabeza hacia otro lado, gracias a esto y por una mala pasada al pensar que había incomodado demasiado al más bajo, Bon con el codo golpeó toda la pila de libro que había traído y múltiples de ellos terminado ahora en el suelo junto con la libreta de apuntes de Bonnie.

—¡Yo de verdad lo siento! —se disculpa avergonzado, alzando un poco la voz de forma nerviosa y dispuesto a recoger el desorden que había creado.

Sin imaginarlo ambos ejecutaron esta misma acción golpeándose a frente frente y de esta forma los anteojos que el peli-morado traía cayeron al suelo rompiéndose de paso debido al impacto. Bon abren sus ojos a la par sorprendiéndose con lo que estaban presenciando.

Unos brillantes orbes tan rojos como la sangre hacían presencia en la visión del chico carente de tonos mientras que antes los ojos del peli-morado, las dilatadas pupilas del menor comenzaban a tornarse de un color verdoso opaco descendiendo poco a poco oscureciéndose pintándose y encendiéndose de forma brillante con aquel tono...

El rubí y esmeralda chocaron visualmente...

Una biblioteca solitaria, libros por todo el piso, ambos chicos verdaderamente impresionados por lo que estaban observando y nuevamente... El secreto de Bonnie fue revelado.

Menuda suerte que cargaba.

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Nota de autora:

¡Hello my star's!
Aquí cami reportándose de las tumbas con un nuevo capitulo.

Que opinaron aquí.

Impresiones por acá.

Teorías aquí mero, mis bebes.

Y este hermoso y bello cap esta dedicado para la sempai LuliTanBxB Y NO, no es por preferencia, se lo tiene ganado ya que hasta ahora a sido una de las personas que mas comentarios a dejado ;v; ¿¡Pueden creerlo!?

¡He decido hacer este tipo de dinámica a ver si se animan, corazones! ¿Que parte de que AMO los comentarios no entienden?

Si sigues leyendo esto alégrate en saber que la dinámica de allá arribita, también sera puesta para las próxima actualización UvU... Que no es cualquier actualización, nada mas y nada menos que actualización DOBLE, si, como leen.

Esta que esta aquí ya tiene los capítulos escritos... Simplemente falta editar y eso da caliweba xD

Dependiendo de amor (cofEstrellitascofComentarioscofcof) que le den a este cap tendrán actualización la semana que viene, sooo, si no los dejo todos intrigosos xD

Ajam, las dos primeras personas que mas comenten tendrán su dedicatoria.

SPOILER: El siguiente capitulo se llamara "El inquietante esmeralda" ya se imaginaran de que va eve

El cosito ese que hice del hilo rojo en blanco y negro es temporal... Mi hermana quiere hacer uno mejor, pero ajá...

Lamento mi ausencia de verdad, para resumirlo, primero fue un paro creativo descomunal (hasta afecto mi elección de carrera), comienzo de la Universidad, mis líos amorosos al no gustarle ni a una piedra, mis crisis existenciales y infinidad de problemas Familiares... Aparte de mi teléfono malo :'D

Y como no me puedo extender mucho aquí, en mi muro les dajare una explicación mas detallada y equis... 

También he notado que muchas mas personas han estado guardando o agregando "Hilo Rojo" a sus listas, y sus votos van en aumento... De verdad muchas gracias por el apoyo el saber que les va gustando este completo enredo me llena de alegría. Pronto llegaremos a las 3k leídas, MIL GRACIAS.

No se olviden de que pueden encontrar la historia a través del #HiloRojoBxB en twitter, también pueden seguirme como @CmCimi, estaré subiendo dibujos y demás cosos de esta historia, estoy segura de que no les gustaría perderse esto.

Es todo mis estrellas...

Att: Cami <3

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