"Tu nunca seras un héroe, Deku"
(Luego de enfrentar la realidad de ser un sin quirk Izuku busco un trabajo por así decirlo real, y su mejor opción fue ni mas ni menos que ser un maestro, digo, el amaba los niños, y ellos a el, y lo mejor, no necesitaba un quirk y decían que había buena paga-aunque en realidad no-.)
Izuku llego a la escuela en la que trabajaba caminando a paso rápido, cargando papeles de colores y además con la mochila casi cayéndose de sus hombros, ya que se había olvidado por cuarta vez de abrocharla y si, justo ahora estaba a segundos de caersele si no fuera porque el chico de cabellos morados la tomo con rapidez.
Izuku volteo y lo miro, sonriendo agradecido por el acto.
-Gracias Shinsou-kun, no se que hubiera hecho si no hubieras estado tras de mi, la computadora esta ahí junto con mis apuntes de clase, imágenes, ¡ah! y la galería con las fotos de mis niños, dios, si se hubiera roto mi corazón se partiri-
El peli-morado tapo su boca impidiéndole seguir hablando.
-Ya entendí, no tienes que hablar demasiado, camina Izuku, y también buenos días -dijo con el tono frío que lo caracterizaba, aunque Izuku noto el tono burlesco que le daba a sus palabras.
Shinsou había decidido ser maestro también, ya que su quirk siempre había sido tachado de ser solo para villanos -aunque Izuku siempre le decía que hubiera sido mejor demostrar que no era así - y él había decidido quitar ese prejuicio de los futuros habitantes del mundo y quizás héroes, Izuku se enterneció al primer momento de escuchar aquello y desde el momento en que se conocieron se volvieron inseparables.
-S-Si, buenos días Shinsou-kun -avergonzado Izuku acomodo los papeles que traía y apresuro su paso para ponerse junto a Shinsou.
-¿Mucho trabajo? -dijo Shinsou, refiriéndose a los papeles que traía el de cabellos verdes a la mano.
Izuku negó sonrojado.
-S-Son los dibujos que los niños hicieron para mi...solo quería, ya sabes....
-Mostrarmelos -termino Shinsou con una pequeña sonrisa, a lo que Izuku asintió aun mas rojo, si es que se podía -siempre adorable por naturaleza.
Izuku lo miró haciendo un puchero molesto, cosa que solo funcionó para que Shinsou apretara una de sus mejillas infladas por el enojo
-¡suelta mi mejilla! -quejo a lo que Shinsou solo respondió con una carcajada
-Adorable -soltó la mejilla por fin, y si no fuera porque tenia esos papeles Izuku se hubiera sobado la mejilla -bueno me los muestras en el almuerzo, ahora camina brócoli, ya pronto llegamos, de hecho solo faltan unos pasos.
-Esta bien, pero el hecho de que me hayas apretado las mejillas en mi momento de vulnerabilidad y además, que me dijiste brócoli, no significa que no me vengaré -dijo enfurruñado Izuku para después entrar a la pequeña escuela en la que trabajaba.
Shinsou volvió a reír.
-Siempre eres vulnerable.
-Ugh, no es verdad.
()
-¡Hola niños! -grito con euforia Izuku entrando a su aula de trabajo, para después ser atrapado por un montón de brazos.
-¡¡Izu-sempai!! -gritaron al unisono, cosa que enternecio y lleno de felicidad a Izuku.
-¿Como les fue en su fin de semana mis niños? -dijo después de que lo soltaran y se pusieran en una rueda sentados.
Uno de los niños alzó su brazo con mucho fervor, Izuku le concedió la palabra con una sonrisa.
-Yo fui con mi Mami a ver a mi Papá en acción, fue súper, además fue asombroso ver como derrotaba a los malvados con su quirk -dijo con entusiasmo mientras fingía golpes en el aire
Izuku fingió una sonrisa.
-Estoy muy contento con eso Rey-chan
-¡gracias!, no puedo esperar a tener mi quirk y ser como él -dijo con una gran sonrisa, lo que apretó el corazón de Izuku.
-Bueno, ¿alguien mas?
Y en eso más niños alzaron sus manitas,Izuku suspiro, sería un día largo.
-Son muy talentosos -dijo Shinsou refiriéndose a los dibujos que Izuku le había entregado para que los viera.
Izuku sonrió orgulloso.
-Sip, lo son.
Shinsou los acomodo en una pila y se los entrego a Izuku, quien miraba los dibujos como si fueran lo mas valioso en su vida, Shinsou lo miro con seriedad y una preocupación escondida.
-... Estas preparado, ya sabes mañana, algunos de ellos...
-Si, van a despertar su quirk, ya lo se, no te preocupes -dijo Izuku suspirando, cambiando su actitud alegre por una vacía.
Shinsou tomo la mano de Izuku y la apretó leve.
-Estaré vigilando por si acaso, no quiero que te pase como la ultima ves -dijo con firmeza a lo que Izuku fruncio el ceño y fingió estar molesto, aunque en realidad tenia ganas de llorar.
-Vamos, deja de cuidarme como si fuera tu hermano menor, soy un adulto. -dijo mientras hacia una sonrisa que le temblaba.
Shinsou suspiro.
-Lo se -y por eso es que me preocupa -pensó
-Bueno, el descanso acabo -dijo mientras el timbre sonaba, agarro nuevamente los papeles y los guardo en una caja con cuidado para después levantarse de su asiento listo para ir a su clase -nos vemos
-¿Vamos a comer luego de la escuela? -pregunto Shinsou a lo que Izuku asintió feliz -bien, te espero afuera
-¡Okay! - luego de decir aquello salio del aula de maestros.
Izuku estaba entrando a su salón cuando de pronto su vista se posó en una niña de cabellos negros que lloraba desconsoladamente, al momento Izuku corrió preocupado por ella.
-¿Porque lloras pequeña? -dijo Izuku mientras se sentaba junto la niña, esta lo miro con mocos y lágrimas en la cara mientras hacia un puchero adorable
-M-Mi Tio viene hoy -dijo, como si fuera lo noticia mas terrible del mundo
-¿Y el no te agrada? -inquirió Izuku, la niña movió la cabeza de arriba a abajo asintiendo -¿te hace algo malo? -ella hizo una mueca y negó
-El habla muy feo y me da miedo, y grita -dijo con voz temblorosa mientras algunas lágrimas amenazaban por salir.
-Entiendo, ¿y ya hablaste con tus papis?
-S-Si, pero ellos dicen que el es así y no puede cambiar....
-¿entonces?
-Creo...que solo debo comprender como es
Izuku sonrió orgulloso.
-Exacto, entonces ¿ya entramos?
La niña asintió, se seco las lágrimas con el dorso de su mano y tomo la mano de Izuku.
()
El timbre sonó, y con él la libertad de Izuku.
Mientras observaba cómo los niños salían del aula se extrañó de que la niña de pelo negro estuviera aferrada a su asiento. Se acercó con lentitud y se agacho al tamaño del asiento.
-Shui-chan, ¿porque no sales?, ¿no han llegado tus papás? -ella hizo una mueca y negó.
-Ellos no me van a venir a buscar....mi Tio vendrá por mi
-Shui-chan, ¿acaso no funciono la plática que tuvimos?
-Lo siento, es que me da miedo -dijo mientras algunas lágrimas comenzaban a salir de sus ojitos.
Izuku suspiro resignado.
-Shinsou-kun lo siento, voy a tardar un poco -penso mientras tomaba la mano de la pequeña y la levantaba de su asiento -vamos, yo te voy a acompañar a buscarlo -dijo mientras sonreía nervioso, la niña imito su acto y juntos caminaron hacia la salida.
-A ver, ¿quien es? -dijo mientras inspeccionaba el lugar con niños llegando alegres a los brazos de sus padres y madres.
La niña hecho una ojeada y tembló al divisar un lugar exacto.
-P-Por allá -señalo un lugar e Izuku volteo hacia allá y se asombro ante lo que vio, empezó sin querer a soltar a la niña dispuesto a correr, pero ella apretó su mano asustada por la intención de su sempai - Izu-sempai, no se vaya -Izuku miro a la niña con temor, trago duro y miro otra vez hacia donde estaba el hombre
-Muy bien, vamos Shui-chan -dijo con la sonrisa mas tranquilizante que pudo dar y empezaron a caminar hacia el hombre, este al ver que llegaban miro únicamente a la niña con una sonrisa que a pesar de que trataba ser alegre daba miedo.
-Shui~, pensé que te escaparías pequeña mierda, que bueno que no, sería muy molesto ir a buscarte -dijo con una sonrisa altanera cosa que hizo temblar a la niña y abrazarse de la pierna de Izuku.
Izuku apretó los puños, molesto ante la actitud del hombre.
-Esa no es forma de hablarle a una niña señor, será mejor que module su lenguaje -dijo mientras fruncía el ceño molesto, el hombre no lo veía, pero al escuchar sus palabras miró a Izuku como si no fuera nada, hasta que distinguió las facciones de Izuku se pudo notar muy apenas su asombro, pero lo escondió con rapidez.
-Yo puedo hablar como desee a la niña Sensei, soy su Tio -dijo mientras fulminaba con la mirada a Izuku, pero él se mantuvo firme a su postura.
-Puede ser lo que sea de esta niña, pero el respeto es algo que no se le niega a nadie -dijo mientras abrazaba a la pequeña Shui-chan que empezaba a lloriquear
-Aja, no estoy para sermones Sensei -dijo mientras hacía un movimiento para agarrar a la niña, Izuku retrocedió -demela
-No -dijo firme mientras acariciaba la cabellera de la niña y esta lo miraba como su salvador
-¿Entonces no me la vas a dar... Deku? -Izuku tembló hacia el apodo que le revolvía recuerdos pero se mantuvo firme.
-Si no pides disculpas Kacchan, entonces no -dijo mientras lo fulminaba con la mirada y gritaba internamente ante el salto de fe que había hecho.
-¿Así quieres jugar Deku? -antes de que pudiera objetar Shinsou corrió hacia donde estaban ellos ya que algunas madres se habían incomodado y preocupado ante la actitud de los dos hombres
-Izu-sempai, ¿ocurre algo? -dijo mientras le daba una pequeña mirada furtiva al hombre frente a Izuku que lo miraba con cara de pocos amigos.
-Ocurre que no me quiere dar a la mocosa -expresó molesto Katsuki, ya harto de la situación.
-No hasta que haya hecho lo debido ante la situación anterior -siseo Izuku con dagas saliéndose de sus ojos
-No lo hare
-Hagalo
-Que no
-Que si
-Que no
-¡Que si!
-¡Que no!, ¡Que no!, ¡Que no!, ¡Que n-!
-¡Basta!, se están comportando como unos niños, estamos en una institución infantil, comportense como adultos -susurro Shinsou ante las miradas de la gente hacia ellos -Dale a la niña Izuku
Izuku tembló asustado, no quería que la niña se fuera con ese patán, ella lo miró de igual forma y se aferró a su sempai aun mas.
-Izu-sempai, no me deje -dijo con ojitos de cachorro, de esos de los que era difícil que te resistieras a su encanto.
Izuku bajo a la niña de sus brazos y le tomo la mano.
-Shinsou-kun, no podre ir a comer contigo, lo siento -dijo mientras miraba a la niña con una sonrisa -te acompañare a tu casa Shui-chan, ¿esta bien?
Ella asintió mientras sonreía alegre.
Shinsou suspiro resignado ante la actitud de su amigo
-Correcto Izuku, yo guardo tus cosas no te preocupes, y ten cuidado -dijo rendido para después revolver el cabello de Izuku e irse.
Katsuki no estaba de acuerdo en el plan de Izuku.
-¿Haaaaa?, ¿y cuando has pedido mi opinión Deku? - dijo mientras fruncía el ceño notablemente molesto
Izuku empezó a caminar fuera de la escuela, aun tomando a la niña de la mano.
-No le veo el problema -dijo, sin darle una mirada al rubio cenizo que los seguía detrás, lanzando, claro, una que otra explosión al ser echado de lado y casi ser ignorado.
-Si lo hay, yo soy el que tiene que traer a la niña, no un Sempai de cuarta sin quirk -Izuku se tenso ante las palabras de Bakugo y paro su andar, Shui-chan estaba sorprendida.
-Izu-sempai, ¿es un quirkcless? -dijo con total inocencia Shui-chan mientras miraba a su Sempai.
Izuku tenía ganas de llorar.
-Asi que no le haz dicho a tus alumnos, ¿se siente bien mentirles Sensei?
-Callate -dijo mientras cerraba los ojos y regulaba su respiración, poso su vista ante la pequeña -Si Shui-chan, yo no tengo quirk -dijo mientras hacia una mueca aguantando las ganas de llorar, esperando lo peor
Pero....
-Eso está bien, Izu-sempai a pesar de no tener quirk eres un gran maestro -dijo sonriendo Shui-chan para después abrazar a Izuku, Bakugo y El quedaron atónitos ante la acción de la niña.
-S-Shui-chan -algunas lágrimas traicioneras empezaron a rodar por las mejillas de Izuku, Shui-chan con sus pequeñas manitas trato de secarlas.
-Izu-sempai, ya pronto llegaremos a casa -dijo con una sonrisa a lo que Izuku la imito, aun con un rastro de lágrimas en su rostro
-Entonces vamos -Izuku cargo a la niña y caminaron hasta la casa de la pequeña.
Ella tocó la puerta y de inmediato un hombre de cabello amarillo salió con una expresión preocupada en su rostro, pero al ver a la niña en brazos de Izuku esta se relajo.
-Buenos días -dijo con una sonrisa mientras la niña extendía sus bracitos hacia el y la recibía gustosa -gracias por acompañarlos Izuku, se que no se sintió muy seguro de dejarla con Bakugo -dijo mientras sonreía cálidamente y abrazaba mas a su hija.
-¡Pikachu!, ¡¿como es eso?! -grito enfurruñado Bakugo, un poco apartado de Izuku.
-Soy Kaminari -dijo entre dientes, fulminando a Bakugo al olvidar otra vez su nombre
-Lo que sea. -Bakugo desvío la mirada desinteresado.
-Nos conocemos desde hace mucho tiempo y aun así tu pequeño cerebro no puede ni siquiera aprender el nombre de la pareja de tu mejor amigo -espeto airado Denki a lo que Bakugo chasqueo la lengua y volteo a verlo con una expresión macabra y explosiones saliendo de sus manos.
-¿Quien le dices cerebro pequeño?, que yo recuerde no me vuelvo un tremendo idiota al utilizar en exceso mi poder
-Pero al menos yo no necesito sudar para poder utilizar mi quirk
-S-Sera mejor que yo ya me vaya -dijo Izuku entendiendo la tensión del ambiente, aunque lo detuvieron antes de dar un paso.
-Deku.... ¿Podemos hablar? -susurro quedito, tratando de que Denki no los escuchara, Izuku trago en seco.
-Fiuu Shui-chan, nosotros salimos sobrando -dijo Denki y entro a su casa.
-Y-Yo le dije a mi amigo que iría a comer con el, no puedo -dijo Izuku mientras desviaba la mirada, obviamente mintiendo en lo que decía.
-Pues yo escuche claramente cuando le cancelabas -Bakugou hablaba divertido, sabiendo claramente que Izuku trataba de evitarlo
-Tengo que ir por mis cosas....
-Tu amigo dijo que se encargaría de eso
Otra vez había fallado, de verdad que era malo con las mentiras.
-Entonces simplemente no quiero hablar contigo -Dijo armado de valor Izuku, aunque sus palabras casi se volvían un susurro.
-Deberíamos, quiero saber en qué ha cambiado Deku estos años
-Pensé que el nerd inútil no era de suma importancia en tu historia -Dijo con una sonrisa triste Izuku, mirando a los ojos a Bakugo.
Trago duro.
-Tal vez sí lo era
-Eso no era lo que decías hace años.
-Por favor, hablemos -suplico Bakugo, Izuku se sorprendió.
¿Bakugo Katsuki era este hombre?
Ahora ya no estaba seguro.
Tal vez seguía teniendo esa actitud altanera y un tono de hablar que asustaba a casi cualquiera, pero las personas tenían que cambiar en algo, y Bakugo Katsuki se había vuelto maduro, tal vez no tanto, pero la curiosidad lo carcomía por dentro.
-Esta bien.
()
Llegaron a una cafetería, no muy cercana eh de aclarar, lo que hizo que el ambiente hasta allí se tornara mas incómodo.
Se sentaron frente a un ventanal y un chico rápidamente tomo la orden leyendo el ambiente.
-Bienvenidos a Ba's Coffe ¿Que les sirvo? -dijo y Bakugo rápidamente detuvo a Izuku de cualquier palabra.
-Quiero un café con leche y a el un chocolate frío, dame dos rebanadas de ese baumkuchen de la vitrina también por favor -dijo e Izuku casi se atragantaba con su propia saliva al escuchar decir por favor a Bakugo por segunda vez en el día.
El chico miro unos momentos a Izuku, esperando a que objetara algo, pero estaba mas concentrado en no ahogarse así que no dijo nada.
-Muy bien señor, esperen aquí por favor -y se fue.
Izuku luego de calmarse miró con expresión molesta a Bakugo.
-Creo que podía pedir mi comida por mi mismo, no deberías pedir por mi -dijo mientras se cruzaba de brazos, a lo que Bakugo hizo una mueca entre arrepentida y algo mas.
-Ese era tu favorito desde que eramos adolescentes, lo hice por impulso -dijo y desvío la mirada hacia otro lado.
Izuku reaccionó asombrado.
-Tu...¿aun te acuerdas? -Bakugo no se volteó pero respondió.
-Si...
-Ni siquiera ibas a la cafetería conmigo...te alejaste de mi luego del kinder...y yo luego de la primaria por tus amenazas....
-No iba junto a ti, me sentaba a unas mesas no tan lejos siempre que ibas, además de que me escondía. -Izuku se quedó en silencio un momento asimilándolo todo.
-¿Porqué?
-No lo se joder.
Y así se quedaron en silencio por un largo rato, con Bakugo mirando hacia otro lado que no fuera Izuku e Izuku mirando a Bakugo pero sin mirarlo realmente.
-Aquí tienen...- el chico de mesero llego y puso con mucha delicadeza todo lo que habían pedido con la intención de no interrumpirlos y luego de ponerlo todo se fue con rapidez.
Izuku miro su plato con baumkuchen y luego a Bakugo que no había ni siquiera dirigido la mirada a su plato.
-Lo del baumkuchen...en la cafetería que frecuentaba nunca había...¿cómo lo sabes? -Izuku hablo con cautela y Bakugo se volteó con un sonrojo en la cara.
-Tu me lo dijiste cuando eramos niños.
-Lo recuerdas...
-Recuerdo cada cosa.
-Pero en nombre de Denki no...
-¿Quien?
-Solo digo...si recuerdas esas cosas, ¿Qué ganabas maltratandome?, si hubieras sido diferente tu- Bakugo lo detuvo y le dio un gran sorbo a su bebida
-Lo se, todo hubiera sido diferente, ya lo se.
-Entonces...
-Es parte de mi De-Izuku, simplemente esa fue mi reacción, como la gente que reacciona bien y la que reacciona mal, yo reaccione mal.
-Pudiste haber cambiado, te perdonaría...
-Lo se, pero creí que si te aceptaba, si me doblegaba, mi orgullo y toda la personalidad que había creado se iba a desmoronar.
-Entonces preferiste seguir lastimandome mientras me seguías en secreto -Dijo con total molestia Izuku, Bakugo se jaló los cabellos estresado.
-Joder si, pero comprendeme, no puedo evitar ser así, así soy yo, sabia que estaba mal pero siempre cuando te veía no podía evitar seguirte.
-¿Veias?,¿No paraste cuando terminamos la secundaria?
-No..., te seguí hasta que empezaste a salir con Todoroki, desde ahí te deje en paz...- Izuku lo miró alucinando.
-¿Porqué?
-Pensé que ya no había espacio para mi en tu historia...y me sentí como lo que alguna vez aborrecí, un extra. -Luego de que Bakugo término el bajo la mirada y le dio una mordida a su trozo de baumkuchen.
-Eres un tremendo idiota.
Bakugo trago y miro a Izuku quien tenia en ceño fruncido y pequeñas lágrimas saliendo de sus ojos.
-¿Que d-
-Lo que oíste, ¿ya te escuchaste?, tu Bakugo Katsuki, ¿preferiste irte así sin mas, sin siquiera hacer una de esas escenitas exageradas que siempre haces?
-Yo n-
-¿Preferiste quedarte sentado y seguirme todo manso, en vez de actuar?
-Bueno yo-
-Y sabes que, tu no eres un extra, eres peor que eso, un cobarde -Izuku se levanto y dejando el dinero de lo consumido miro a Bakugo que lo miraba con la boca abierta al igual que sus ojos -mejor sera que me vaya.
Y así Izuku se fue de la cafetería.
Bakugo se quedo atonito, procesando las palabras que Izuku le había dicho.
Y luego corrió por el, como antes no logró hacerlo...
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